11/04/05
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PALABRAS DEL MINISTRO DE ECONOMÍA DANILO ASTORI ANTE LA ASAMBLEA DE GOBERNADORES DEL BID EN OKINAWA, JAPÓN.

A continuación transcribimos el discurso del Ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, ante la Asamblea de Gobernadores del BID, que se celebra en la ciudad de Okinawa en Japón.

La intervención se producirá a las 23:30 hs. del lunes 11 de abril, hora uruguaya, 11:30 hs. de Okinawa del martes 12 de abril.

DISCURSO DEL GOBERNADOR POR URUGUAY

DANILO ASTORI

1. Es un gran honor, y a la vez un placer, poder estar junto a ustedes participando de esta nueva Asamblea Anual de Gobernadores de nuestro Banco Interamericano de Desarrollo. En esta ocasión nos encontramos en la maravillosa tierra del Japón, apasionante en sus contrastes, donde conviven milenarias tradiciones e impactantes bellezas naturales, preservadas y vigentes dentro de un país moderno, donde las más sofisticadas y avanzadas tecnologías aplicadas se incorporan con increíble naturalidad a la vida común de los ciudadanos. A las autoridades del país anfitrión y a la administración del Banco, nuestro profundo agradecimiento por esta oportunidad en nombre de toda la delegación de Uruguay.

2. Hace exactamente cuarenta y dos días asumió sus funciones el nuevo gobierno del Uruguay, iniciando – por la voluntad del pueblo uruguayo expresada democráticamente en las últimas elecciones nacionales – una etapa que significa un profundo cambio político. Después de 170 anos de gobierno por parte de los partidos históricos de nuestro país, la izquierda ha llegado por primera vez a hacerse cargo de esta gran responsabilidad, hecho que entrana una enorme expectativa y también mucha esperanza en nuestra sociedad.

3. El Uruguay está intentando recuperarse de un golpe muy duro en 2002 y tenemos hoy tendencias muy auspiciosas. El producto ha crecido 12 por ciento en 2004, sobre la base de una excelente conducta exportadora, el nivel de actividad ha mejorado sustancialmente, la recaudación tributaria registró un incremento significativo y la situación fiscal también muestra resultados alentadores. Paralelamente, el nivel de inflación está controlado y la estabilidad interna es percibida desde el exterior – y particularmente desde los mercados financieros internacionales – desde una perspectiva de recuperación de la confianza y disminución del riesgo, lo que se verifica al observar la evolución a la baja de los "spreads".

4. Pero también tenemos importantes problemas. Por un lado, el endeudamiento del sector público, que representa alrededor del 90 por ciento del producto. Simultáneamente, graves problemas cuantitativos y cualitativos de empleo, verdadera polea de trasmisión de pobreza, desigualdad y exclusión. Hay una sola manera de articular la atención de estos problemas con la continuación de un camino de cumplimiento estricto de las obligaciones contraídas: fortalecer la inversión productiva y el crecimiento, lo que exige estabilidad y – por lo tanto – una muy prudente conducta fiscal.

5. Este es el gran desafío que asume el nuevo gobierno. Este es el gran desafío que asume, en realidad, la izquierda desde su visión transformadora. Hay que demostrar que es posible alcanzar las grandes finalidades históricas por las que se luchó toda la vida, practicando políticas económicas serias, que respeten y cuiden los equilibrios macroeconómicos básicos, asegurando estabilidad y solidez a mediano y a largo plazos. Por esta razón, es preciso percibir la experiencia desde una perspectiva que nos permita despejar ansiedades que pueden conducir a la frustración de la experiencia que estamos iniciando, y nos conduzca hacia la definición de una trayectoria consciente del horizonte temporal que requiere. Si se quiere transformar un país para mejorar la calidad de vida de su gente, asegurándole un porvenir digno, hay que comenzar por inyectar confianza en lo que se está haciendo. Para un país pequeno como el Uruguay, que debe mantenerse abierto al mundo porque en ello le va la vida, es fundamental tener la humildad de reconocer que esa confianza tendrá que tener una importante base interna, pero también tendrá que ser compartida por quienes nos observan desde afuera.

6. El gobierno se propone realizar un conjunto importante de reformas estructurales, que han sido reiteradamente postergadas en nuestro país. Refieren a la creación de un ambiente adecuado de inversiones, a cambios en el sistema financiero y particularmente en la banca estatal, en el funcionamiento del sector público, en el sistema tributario y su administración, y también en algunas áreas del sistema provisional en las que operan las llamadas cajas paraestatales, como la policial, la militar y la bancaria.

7. Seguiremos practicando una política monetaria y cambiaria flexible, flotando y caminando hacia metas de inflación. Evitaremos errores tan comunes en el pasado, como por ejemplo, la combinación entre tipo de cambio fijo, desequilibrio en las cuentas públicas y endeudamiento para financiar la brecha fiscal.

8. El Uruguay ha venido tratando con seriedad y sacrificio el problema de la deuda, y su camino es hoy respetado y valorado muy positivamente, tanto por los organismos financieros multilaterales, como por los mercados financieros internacionales. Conociendo nuestras peculiaridades y nuestras limitaciones, nos propusimos articular la sustentabilidad de ese camino, con la aceptación de un mercado del que no podemos prescindir, ni ahora, ni tampoco en el futuro. Hasta ahora, hemos podido comprobar que puede existir coherencia entre ambos criterios. Y trabajamos intensamente para asegurar que la siga habiendo en el futuro. Es que pensamos que estamos ante un círculo virtuoso que debemos seguir alimentando. El Uruguay tiene hoy un capital intangible de enorme valor: el respeto con el que se observa su esfuerzo. Y ese capital hay que cuidarlo y seguir alimentándolo, porque es un formidable antecedente para asegurar sustentabilidad al camino a recorrer, mientras se sigue contando con el apoyo de los mercados.

9. Estos antecedentes han constituído una gran ayuda para que el gobierno uruguayo, a cuarenta y dos días de haber asumido, esté muy cerca de la culminación de nuevos acuerdos con los organismos financieros multilaterales, herramientas fundamentales para poder encarar nuestros planes de gobierno con éxito. Es importante destacar en particular que el criterio básico con el que han sido encarados dichos programas, apunta a lograr no solo una disminución del endeudamiento, sino también del grado muy agudo de dependencia que el país exhibe actualmente respecto a estas instituciones. Una cosa es contar con el apoyo de las mismas, que pretendemos seguir teniéndolo. Otra muy distinta es que el acceso a sus recursos constituya la principal condición para el equilibrio financiero del país. En este sentido, cabe destacar que el gobierno se propone reducir la relación deuda-producto a alrededor de 60 por ciento durante el transcurso de los próximos cinco anos. Tal como senalé antes, ello sólo sera posible si logramos incrementar sustancialmente la inversión y logramos, así, un ritmo de crecimiento sostenido muy superior al que ha venido exhibiendo el país.

10. Pasando ahora a los temas relacionados a nuestro banco, el BID, vemos con satisfacción que durante los últimos anos se han venido llevando adelante una serie de transformaciones en la dirección de consolidarlo como un banco de desarrollo moderno y como la institución más relevante para dicha tarea en la región. Las cifras disponibles hacen notorio el fortalecimiento alcanzado en su solvencia financiera y liquidez, aspecto primordial para poder prestar en las condiciones ventajosas que nuestros países requieren. Asimismo son más que significativos los logros en gobernabilidad institucional, con el establecimiento de prácticas óptimas en materia de controles internos, revisión de políticas de adquisiciones y reestructuración de los procedimientos operativos del Banco.

11. Dos áreas en las que varios de nuestros países fueron particularmente enfáticos en la última reunión de Lima, se referían a la capacidad del Banco para adaptarse con más flexibilidad y eficiencia a las demandas financieras y no financieras de nuestros países, y a la implementación de nuevas actividades para fortalecer la gestión por resultados y mejorar la efectividad en el desarrollo. Y en esto la respuesta ha sido también muy satisfactoria.

12. Hoy disponemos de una gama de nuevos instrumentos flexibles, entre los que se destaca el Programa de Enfoque Sectorial (SWAP). Además, a través de la modificación de políticas que armonizan el accionar del BID con otras multilaterales, se levantaron restricciones a la elegibilidad de gastos en los préstamos de inversión, priorizando la medición de resultados y se ha eliminado el límite existente para la participación del Banco en el financiamiento de proyectos (Matriz de financiamiento).

13. Finalmente, en relación a la capacidad operativa del Banco, quiero resaltar muy especialmente la concreción del Nuevo Marco de Financiamiento para el período 2005- 2008, que se concreta fundamentado en los aspectos de solvencia y mejora en la gobernabilidad antes mencionados y que tiene la virtud de potenciar enormemente la capacidad de prestar del BID cuando se lo analiza en conjunto con los instrumentos y políticas operativas aprobadas en los últimos dos años. A su vez, su diseño contempla mucho más adecuadamente las necesidades financieras para impulsar el desarrollo de nuestros países, que el marco que teníamos hasta ahora.

14. En otro ámbito, no menos importante al hablar de desarrollo, están las Iniciativas especiales de cooperación del Banco. Aquí tenemos gran expectativa ante la pronta implementación de los primeros proyectos de la iniciativa de Bienes Públicos Regionales, pionera entre las multilaterales. Al mismo tiempo, alentamos a la rápida puesta en marcha de otras dos iniciativas de enorme interés para nuestro país, como lo son la de Mejoramiento del Entorno Empresarial ,y la del Plan de Mediano Plazo de Efectividad en el Desarrollo, para fortalecer nuestra capacidad para instrumentar mecanismos de gestión por resultados, en las cuales nuestro país ya ha manifestado su interés específico en participar.

15. También nos interesa destacar que en cumplimiento a lo acordado en Lima, hoy ya está en funciones el Coordinador del Sector Privado, quién cuenta con todo nuestro apoyo para liderar con un criterio unificado a todas las ventanillas del Grupo BID que trabajan con el Sector Privado. Si bien entendemos que se debe avanzar hacia un modelo institucional que sea único y que tenga una escala mayor que la actual, mientras logramos los consensos para ello, exhortamos a que se profundice la participación del Banco en emprendimientos de inversión privada ampliando su mandato más allá de las operaciones en infraestructura y garantías y que además prontamente se tomen acciones para consolidar un funcionamiento coordinado, eficiente y transparente entre y dentro de los actuales actores del sector privado del BID.

16. Asimismo, nos congratulamos de haber concretado los compromisos para recapitalizar el FOMIN y haber aumentado el número de países que lo integran. Auguramos para el FOMIN, en esta nueva etapa, continuar con su rol protagónico en el desarrollo del sector privado y en particular de las Pequeñas y Micro Empresas, así como mantener su permanente carácter innovador y su capacidad de ser modelo para la expansión de proyectos exitosos.

17. Por último, queremos agradecer al Banco, todo el apoyo brindado en la reciente transición de gobierno en Uruguay, donde a lo largo de 2004 se preparó un sustancioso Documento de Diálogo con análisis y propuestas para todos los sectores de la economía del país, que tuvimos oportunidad de discutir en un intenso seminario durante el mes de enero y en subsiguientes talleres temáticos específicos. Sin duda este será un insumo muy importante para la elaboración de la Estrategia Operativa de País con el BID. Es una muestra más, que la adicionalidad de nuestro Banco en el desarrollo de nuestro países va más allá de lo estrictamente financiero.

Antes de terminar, quiero hacer una mención especial al ingreso de Corea a nuestra institución. Por muchos años, el puente natural en las relaciones entre nuestro BID y el continente asiático, lo tendió generosamente el Japón, con quién hemos tenido excepcionales experiencias de trabajo y cooperación en conjunto. Esas relaciones con Asia esperamos se vean ahora fortalecidas con el ingreso de Corea, a quién saludamos y le damos una cálida bienvenida a nuestra familia latinoamericana y caribeña.

 
 
   
 

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