LIBERTAD DE PRENSA, MEDIOS Y GOBERNABILIDAD DEMOCRÁTICA.

Con este título se realizó en el Salón de Fiestas del Palacio Legislativo un Seminario Internacional co-organizado por UNESCO Montevideo, UNESCO Quito, AMARC (Asociación Mundial de Radios Comunitarias) en Uruguay y Programa de Legislaciones y Derecho a la Comunicación AMARC-ALC.

En el mismo se realizaron diferentes mesas redondas con destacados panelistas extranjeros y de nuestro país. Los temas tratados fueron: "Gobernabilidad democrática, transparencia y acceso a la información pública"; "Desafíos para el ejercicio pleno de la Libertad de Prensa en Uruguay" y "Radios comunitarias como ejercicio de la libertad de expresión y de prensa".

En el acto de apertura el vicepresidente de la República Rodolfo Nin Novoa, hizo uso de la palabra destacando la importancia que el gobierno daba a los temas tratados.

VICEPRESIDENTE NIN NOVOA: Muy buenos días para todos. Efectivamente a las 11:00 tengo otro seminario sobre "Certeza jurídica para las inversiones y cosas afines" y después a las 11:30 o 11:45 tengo otra actividad vinculado a una fundación, a la Peluffo Giggens que inaugura un local para chicos del interior que tengan que tratarse de afecciones cancerígenas o cancerosas.

De manera que voy a tratar de ser lo más explícito posible y dejar algunos puntos de vista desde la órbita del gobierno, entendiendo al gobierno como la conjunción del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo, porque creo que en esto estamos todos en la misma sintonía.

Este seminario se realiza para conmemorar el Día Mundial de la Libertad de Prensa y busca motivar la reflexión acerca de los problemas y obstáculos que enfrenta el ejercicio de la libertad de expresión en el Uruguay, así como las alternativas para el reconocimiento y pleno goce de ese derecho por parte de todos los habitantes de la República.

Otro de los objetivos es el análisis de los elementos fundamentales que caracterizan la relación medios de comunicación y gobernabilidad democrática en América Latina.

En Uruguay se discuten estos temas en forma episódica y en respuesta a situaciones muy coyunturales, la apertura de espacios para analizar, reflexionar y debatir sobre estos temas, deben ser alentados.

El Parlamento por su tradición democrática y asiento de una pluralidad de voces, es un excelente escenario para este debate y agradecemos que se haya elegido nuestra casa para realizar esta actividad.

Desde el 3 de mayo de cada año, la UNESCO en cooperación con las más importantes organizaciones y asociaciones de periodistas, directivos y propietarios de medios, sindicatos, colegios, gobiernos, parlamentos, autoridades locales, universidades y otras agencias del sistema de las Naciones Unidas, desarrolla diversos actos y da a conocer documentos mediante los cuales subraya la importancia de la liberad de prensa como base de la democracia enfatizando la necesidad de una plena vigencia de la liberad de expresión como derecho humano fundamental.

La libertad de expresión y prensa es la piedra angular de toda democracia, y base para el goce de otros derechos humanos. Debemos asumir la defensa irrestricta de estos derechos y su carácter universal, para poder expresarse a través de todos los medios posibles.

Una actitud de transparencia en la gestión pública con relación a la defensa irrestricta del derecho de expresión para nuestra Administración significa un compromiso.

El Estado debe proveer de herramientas legales que reconozcan estos derechos, así como revisar la legislación que impone trabas ilegítimas a la libertad de expresión y prensa.

El Estado no solamente debe reconocer esto, sino también garantizar estas cosas. Nuestra propuesta en la campaña electoral y nuestro análisis sobre el rol de los medios de comunicación y su ensamble con la sociedad, establecía algunos criterios como estos: debemos buscar –decíamos- entre todos los mecanismos que garanticen la independencia del ejercicio periodístico, en su contexto democrático, ciudadano y responsable, asegurando legislativamente el cumplimiento de los derechos de los trabajadores a desarrollar su función de informar sin que su libertad sea coartada por motivos ideológicos, económicos u hostigamientos laborales.

Sobre libertad de prensa, medios y gobernabilidad democrática, compartimos también con UNESCO, que cuando conmemoró el Día Mundial de Prensa en una conferencia en Dakar sobre medios informativos y buen gobierno, finalizó con una Declaración en la que se hace un llamamiento a respetar la libertad de prensa y el acceso a la información, así como a revocar la legislación penal sobre la difamación. Me parece importante hacer mención a esta Declaración, donde se subraya que los medios informativos independientes y pluralistas, son esenciales para garantizar la transparencia, la rendición de cuentas y la participación como elementos fundamentales de buen gobierno y del desarrollo basado en el respeto de los derechos que es esencial -también entre otras cosas- para poder mitigar la pobreza.

La relación entre el Estado y los medios de comunicación ha tenido zonas poco transparentes; por un lado, en lo que se refiere a la información desde los diferentes organismos estatales, acceso a la información, presiones hacia los medios y hacia los periodistas, etcétera. Por otro, en lo referido a la publicidad oficial, que ha sido utilizada muchas veces como un subsidio encubierto a algunos medios, postergando al mismo tiempo a otros sin una justificación técnica clara. Y ni que hablar de esa discriminación que ha habido entre los medios del interior y los medios de Montevideo, al momento de asignar esos avisos oficiales.

Ayer mismo, había aquí en el Parlamento que se ha convertido sin ningún lugar a dudas en un ámbito de debate nacional muy interesante, una reunión, un seminario con los agentes de radios del interior, con RAMI, y también hablábamos de estas cosas.

En cuanto a la publicidad oficial, debemos buscar los criterios más transparentes y razonables para distribuir los dineros públicos, los dineros de todos en definitiva, como forma de mejorar la gestión pero también como forma de proteger la independencia de los propios medios frente al gobierno. Así como es necesario que existan medios plurales e independientes, debemos asegurar también una diversidad de voces.

Es necesario, por tanto, garantizar el acceso a los medios en igualdad de oportunidades, de forma que ningún sector sea discriminado. Esto es en particular importante en el sector de la radiodifusión, donde además se está utilizando un recurso natural que es patrimonio de la humanidad, pero también es limitado, y por lo tanto hay más responsabilidad de nuestra parte a hacer un uso racional y justo del mismo.

Ya lo dijeron los relatores de libertad de expresión y opinión de América, de Europa y de las Naciones Unidas en una reunión allá por el año 2001: la promoción de la diversidad, debe ser el objetivo primordial de la reglamentación de la radiodifusión. La diversidad implica igualdad de género en la radiodifusión e igualdad de oportunidades para el acceso de todos los segmentos de la sociedad a las ondas de radiodifusión. Trabajaremos para lograr que esto así sea.

Tenemos que alentar la mayor diversidad posible; alentar la libre competencia de voces y propuestas, y en ese marco -como ya lo hemos dicho- impulsaremos el reconocimiento a los medios comunitarios, habilitando reservas de espectro para que estas experiencias sean amparadas y promovidas como en tantas partes del mundo.

La forma como se accede a las frecuencias de radio y televisión es una asignatura pendiente en el Uruguay, y que este gobierno ha planteado asumir, revisando la forma discrecional con que se han otorgado hasta ahora.

Ahora que tenemos el gobierno y tenemos mayorías, podríamos utilizar esa discrecionalidad permitida por la legalidad para hacer lo mismo, pero con criterio contrario. Ahora podríamos decir "van a entrar los nuestros, nuestros amigos, nuestros compañeros, nuestro sector político". No lo haremos, no lo vamos a hacer. No vinimos a hacer más de lo mismo. Nuestro compromiso es asegurar reglas previsibles, justas y claras para que todos, sean del sector social que sean y sean del sector político que sean, tengan las mismas oportunidades.

Se ha pedido a los expositores -y como yo me tengo que ir, no quiero dejar de hacer alguna mención- que opinen en general sobre el tema del seminario, pero también sobre los tres temas que se ponen sobre la mesa: acceso a la Información pública, medios comunitarios y libertad de prensa.

Brevemente. Acceso a la información pública: es un tema pendiente en el Senado en especial, porque ya se trató durante un par de períodos y nunca se llegó a aprobar o a rechazar. La izquierda ha insistido en la transparencia de la gestión pública y este es un tema que no se puede soslayar. Crece a nivel mundial la cantidad de países que aprueban Leyes en ese sentido. Suecia -para dar un ejemplo- tiene una Ley desde hace 200 años. Incluso en América Latina ahora el Presidente Kirchner de la Argentina ha aprobado un Decreto donde se obliga a si mismo y a su gobierno a permitir un amplio acceso a la información en su poder.

El Senado como institución, está en falta en este tema. En el período pasado un Proyecto de Ley impulsado entre otros por nuestro amigo y compañero, Daniel Díaz Maynard, fue aprobado en Diputados pero nunca aprobado en el Senado, nunca tuvo una definición en la Cámara de Senadores.

Siendo un tema de tanta trascendencia para nuestra democracia, quiero comprometer nuestra voluntad de tomar las medidas necesarias para que un Proyecto de Ley sobre acceso a la información pública, pueda ser considerado a la brevedad y en lo posible aprobado este mismo año.

Ojalá los aportes y los debates que se darán en este seminario, puedan darnos luz para encarar una Ley que se ajuste a los criterios internacionales en la materia y nos ponga a la altura de las legislaciones más avanzadas en este tema.

Revisión de la Ley de Prensa, Código Penal y otros: nos consta que existen críticas desde diversos sectores sobre algunas disposiciones legales que inhibirían o coartarían la libertad de expresión y prensa; entre ellas figura el delito de difamación e injurias y el llamado delito de desacato.

Es un tema complejo, sin ningún lugar a dudas y deberá ser analizado en profundidad. No tenemos una posición definitiva sobre esto, pero entendemos que es imprescindible, dado los valores y los derechos que están en juego; que el gobierno, Parlamento, impulsen el debate más amplio y abierto a este respecto, escuchando a todas las opiniones, estudiando la experiencia internacional en la materia y otras medidas para analizar el tema y llegar a conclusiones que signifiquen una profundización de las condiciones que permiten el ejercicio pleno de la libertad de expresión y de prensa.

Radios comunitarias: somos de la idea de que los medios comunitarios deben ser reconocidos, en el país como en tantos otros. Organizaciones tan importantes como la FAO, el PNUD y hasta el Banco Mundial destacan la importancia de estos medios en el desarrollo, en la construcción de paz, como espacio para el ejercicio de la libertad de expresión y como medio para una mayor participación ciudadana y por esta vía un mayor control de la gestión pública.

La propia UNESCO trabaja hace años con radios comunitarias en todo el mundo, promoviendo su instalación y apoyando económicamente en equipamiento y capacitación.

El relator de la libertad de expresión, Eduardo Bertoni, aquí presente, ha expresado en su informe anual del 2002, que las radios comunitarias "se erigen como medios que canalizan la expresión donde los integrantes del sector pobre, pueden tener mayores oportunidades de acceso y participación, en relación a las posibilidades que pudieran tener en los medios tradicionales".

En ese documento ha expresado claramente que "resulta inadmisible el establecimiento de marcos legales discriminatorios que obstaculicen la adjudicación de frecuencias a radios comunitarias". Y nos ha pedido, nos ha recomendado a los gobiernos que formemos parte de la Organización de Estados Americanos, que adecuemos nuestra legislación a las nuevas realidades, de forma tal que reconozcamos a estos medios y que en nuestra función de administradores de las ondas del espectro radioeléctrico, las asignemos de acuerdo a criterios democráticos que garanticen una igualdad de oportunidades a todos los individuos en el acceso a los mismos.

Les agradezco enormemente la atención y les deseo una muy buena jornada de reflexión. Muchas gracias.