MINISTRO ASTORI: Gracias Presidente. Muy buenos días a todos, muchas gracias por acompañarnos en esta sesión del Consejo de Ministros. Los asuntos que tiene a la firma el señor Presidente de parte del Ministerio de Economía y Finanzas son, como en el caso de otros Ministerios, en la semana de hoy meros asuntos de trámites. Así que, si ustedes me permiten, yo voy aprovechar esta oportunidad que tengo de comunicarme con todos, para hacer algunas breves reflexiones sobre la economía uruguaya, a muy pocos días de cumplirse el primer año de gobierno.

Y me parece que la primera observación, el primer comentario, precisamente por estar cumpliendo ese primer año de gobierno, es tomar debida nota de los resultados principales que -¡por suerte!- se han venido obteniendo, ya que esos resultados son en términos generales muy positivos.

Y, por supuesto, esto se debe a la contribución, a la colaboración, a la convicción de toda la sociedad uruguaya en torno al camino que Uruguay debe seguir para cumplir sus objetivos de asegurar trabajo, empleo de buena calidad a todos los uruguayos que lo están necesitando y naturalmente mejores condiciones de vida, que es el objetivo que todos los orientales compartimos.

La producción nacional ha crecido más del 6% en el año 2005, lo cual para los registros históricos de nuestro país es un registro alto.

Por otra parte, las cifras del Comercio Exterior son extraordinariamente auspiciosas, y lo que es más importante mantienen su ritmo ascendente. Las exportaciones uruguayas en el año pasado, en el año 2005, han crecido en promedio un 15% respecto al año anterior, y para tener una idea del mantenimiento de este ritmo las cifras de enero son todavía de un crecimiento superior respecto a enero de 2005, me refiero a las cifras de enero de 2006; lo cual significa simplemente que tenemos un ritmo que mantiene ese crecimiento absolutamente importante para nuestro país, dada la importancia de la variable exportación en la estrategia de crecimiento nacional.

La inversión, que es una de las grandes necesidades nacionales porque es el único camino genuino y auténtico para generar empleo, ha crecido 25% en 2005 respecto a 2004; y esta es una cifra también muy importante para el Uruguay y desusada en la evolución histórica del país.

Por eso, gracias a que la inversión ha crecido en una cifra tan importante, las estadísticas del Instituto Nacional de Estadística que se acaban de publicar la semana pasada, revelan que en 2005 se crearon alrededor de 20.000 nuevos puestos de trabajo.

Todavía no hemos podido tener un descenso significativo en la tasa de desempleo, que es un objetivo fundamental para el país, precisamente porque al tiempo que crece la creación de empleo también crece la cantidad de uruguayos que buscan trabajo.

Pero es muy estimulante y muy auspicioso saber que en 2005 Uruguay creó 20.000 nuevos puestos de trabajo.

Y con esa expansión del empleo también llegaron las expansiones de los salarios reales, promedio, computando tanto el salario público como el privado, y los ingresos de las familias.

En 2005 hubo crecimientos reales -esto es, despojados del efecto inflacionario- tanto en los salarios públicos y privados, como en los ingresos de las familias.

Y quiero destacar que todo esto se logró además con una gran disciplina fiscal. El Uruguay acaba de registrar en 2005 una de las menores cifras de déficit fiscal en las últimas 5 décadas, porque el déficit fiscal consolidado de 2005 acaba de representar 1,3 de la producción nacional; y este es el camino que tenemos que seguir para continuar reduciendo la importancia del endeudamiento y al mismo tiempo para tener una economía que ofrezca certezas a aquellos que la hacen crecer, a aquellos que invierten y junto con la inversión crean los puestos de trabajo que yo mencionaba recién.

No debo dejar de mencionar en estos comentarios los trabajos que estamos haciendo en el Ministerio de Economía, en algunos casos ya culminando y en otros casos en desarrollo, para presentar próximamente a veces al Parlamento en términos de Proyectos de Ley, a veces en términos de decisiones que se toman a nivel del Poder Ejecutivo.

En pocas semanas más estaremos presentando al Parlamento el Proyecto de Reforma Tributaria, cuyos lineamientos ya presentamos públicamente, ya colocamos en consulta pública y ahora estamos elaborando el Proyecto de Ley que recoge -al menos en algunas características- las observaciones, las conclusiones que hemos podido sacar de esa consulta pública y el Parlamento en marzo estará recibiendo este Proyecto de Ley.

En segundo lugar, estamos avanzando en la reforma de la administración tributaria; una parte ya está en funcionamiento que es la de la Dirección General Impositiva, y la otra en la que estamos progresando para tener una propuesta hacia mediados de años es la reforma de la Aduana; una reforma absolutamente imprescindible para que la administración tributaria funcione coordinadamente, como debe funcionar.

En tercer lugar, quiero señalarles que estamos trabajando intensamente también en la reforma del sistema financiero del Uruguay.

El proyecto de la nueva Carta Orgánica del Banco Central ya está en el Parlamento, lo enviamos en las últimas semanas del año pasado.

Hoy nos encontramos junto al Ministerio de Vivienda y al Directorio del Banco Hipotecario del Uruguay echando las bases, definiendo las bases de una profunda transformación del Banco Hipotecario que es una institución muy importante para el país, pero que requiere transformaciones sustanciales para comenzar a prestar como debe su importante apoyo a la vivienda de interés social.

En cuarto lugar, estamos preparando también nueva legislación para atender situaciones de empresas en dificultades de modo que su único destino no sea la quiebra, sino que puedan en caso en que así se fundamente recorrer alternativas que le permitan impedir un final de liquidación o de disolución.

En quinto lugar, ya hemos instalado en el Ministerio de Economía y Finanzas una Oficina de Administración de la Deuda Pública. que lamentablemente es muy alta en el Uruguay y por ser muy alta y por ser muy importante requiere una administración y un manejo profesionales, de modo de tomar decisiones siempre a la luz del interés nacional.

Esta es la tarea en la que está concentrado ahora el Ministerio de Economía y Finanzas, de modo de seguir avanzando en las transformaciones que el país requiere para apuntalar -reitero- sobre bases genuinas auténticas sólidas el crecimiento que afortunadamente el país está materializando y que nosotros queremos mantener; porque, repito, es el único camino para que los uruguayos tengan el empleo que merecen, los ingresos que merecen y las condiciones de vida también a las que aspiran.

En términos generales, estos criterios ya están contenidos en el Presupuesto Quinquenal que hemos presentado al Parlamento el año pasado y el Parlamento aprobó en el mes de diciembre.