PLAN DE EMERGENCIA CONSTRUYE CIUDADANÍA
A un año del Plan de Emergencia, el MIDES da cuenta
de sus principales intervenciones, acciones desplegadas y
transformaciones realizadas en todo el territorio nacional, mostrando
proyectos instrumentados entre la complejidad de lo realizado y lo mucho
por hacer, que han conformado y construido un proceso social en sectores
de la población que sufren exclusión desde hace muchas décadas.
De acuerdo al Plan se han
implementado diversos programas que van generando posibilidades ciertas
de inclusión social, como el ingreso ciudadano; las rutas de salida; el
plan de emergencia sanitaria; el plan alimentario nacional; el programa
trabajo por Uruguay; el programa de atención a los sin techo; el
programa de apoyo socio-educativo, el programa de apoyo socio-educativo
en zonas de contexto crítico; y el programa de mejoramiento del habitat.
A un año del Plan de Emergencia,
el Ministerio de Desarrollo Social sostiene que es importante informar a
la ciudadanía cuales han sido sus principales intervenciones, las
acciones desplegadas en todo el territorio nacional y las
transformaciones y cambios generados por este Plan, así como responder
por los bienes que el Estado ha puesto a disposición para volcarlos a un
programa inédito y prioritario en la agenda nacional.
La Directora del PANES, Berta
Sanseverino subraya que “desde nuestro inicio hemos tenido que resolver
la tensión entre tiempo y cambio: el tiempo de los que no pueden seguir
esperando, el tiempo de un Plan que se iniciaba al otro día del 1° de
marzo y duraría 2 años, y que debía contribuir a mejorar la calidad de
vida de miles de hogares”.
Sanseverino menciona que el
accionar del plan es la construcción de un proceso social ya que el Plan
de Emergencia está impregnado de compromiso ciudadano, no de control
ciudadano.
En ese sentido educarse, cuidar la
salud, capacitarse, trabajar, formar parte del mejoramiento del barrio,
organizar y participar en movidas culturales, atender los problemas de
violencia doméstica y violencia en general, que cada protagonista del
Plan confíe en sus potencialidades porque hay alguien que lo va a
reconocer y lo va apoyar, es el inicio de otro momento.
Ésta es la dimensión que marca lo
distintivo del Plan: un movimiento ascendente de generación de
responsabilidades, de entusiasmo, que exige de construcciones sociales
cada vez más potentes. Este proceso no es mágico, tiene sus grandes
complejidades, tanto como la profundidad de situaciones de exclusión
social que vienen sufriendo desde hace décadas muchas generaciones,
expresó Berta Sanseverino.
El nivel de cumplimiento de los
programas del PANES desde su implementación se ha realizado con un
esfuerzo extraordinario, ya que se han visitado más de 150.000 hogares
en todo el territorio nacional e incorporado 77.000 hogares al PANES, lo
cual da cuenta de la existencia de 320.000 personas en situación de
pobreza extrema.
De acuerdo al Plan se han
implementado diversos programas que van generando posibilidades ciertas
de inclusión social, como el ingreso ciudadano; las rutas de salida; el
plan de emergencia sanitaria; el plan alimentario nacional; el programa
trabajo por Uruguay; el programa de atención a los sin techo; el
programa de apoyo socio-educativo, el programa de apoyo socio-educativo
en zonas de contexto crítico; y el programa de mejoramiento del habitat.
El programa Ingreso Ciudadano
consiste en una transferencia monetaria dirigida a jefes y jefas de
hogar donde el protagonista asume compromisos vinculados con el
ejercicio de sus propios derechos: realizar los controles médicos del
núcleo familiar, asegurar la permanencia de niños, niñas y adolescentes
en el sistema educativo y la realización de actividades comunitarias, en
la construcción de las rutas de salida.
Se han transferido a los
protagonistas del PANES el Ingreso Ciudadano ($1.415 por mes y por
hogar) lo que significa un complemento monetario a hogares con entradas
insuficientes, lo cual significa una respuesta legítima a necesidades
insatisfechas.
Rutas de Salida, es un programa
dirigido a los protagonistas cuya propuesta educativa se instrumenta a
través de grupos de no más de 25 integrantes y que incluye tareas
comunitarias; ya están incluidos en el mismo 8.000 hogares.
El Plan de Emergencia Sanitaria
tiene como objetivo garantizar la cobertura de atención a la salud a sus
protagonistas. Establece como prioridad a las personas y hogares de
integrantes con mayores vulnerabilidades sociales y dificultades de
accesibilidad económica, geográfica y cultural.
Entre las acciones desarrolladas
con respecto al PES tenemos la entrega a 50.000 familias de un carné de
compromiso sanitario, a través del mismo deben controlarse los niños y
niñas menores de 14 años y las mujeres embarazadas.
Esta acción llevó al aumento de
usuarios de Salud Pública a partir del ingreso de nuevos hogares
captados por el Plan de Emergencia, a un ritmo sostenido durante el año
2005.
En cuanto a salud ocular mediante
el Programa “Nos tenemos que ver”, en el marco de “Operación Milagro”,
han viajado a Cuba más de 400 ciudadanos para atenderse fundamentalmente
de cataratas.
También, se firmó un convenio
MIDES-Sociedad Uruguaya de Oftalmología-MSP por el cual se operarán
pacientes portadores de cataratas provenientes de los hogares del PANES.
Además, se firmó un convenio IMM-MSP-CEP-MIDES-Visión
Echagüe en el marco de Verano Solidario, para atender a escolares. Por
tal motivo, se realizaron pruebas médicas visuales a 2.000 alumnos,
detectándose así un 22% de alteraciones visuales, poniéndose en marcha
su solución, entre ellas: requerimiento de lentes, para lo cual el MIDES
cuenta con una donación española de varios miles de armazones efectuada
por jóvenes de la organización del Programa Ruteros.
En el tema salud bucal se están
facilitando soluciones a las personas incorporadas en el Programa
Trabajo por Uruguay con arreglos dentales y colocación de prótesis.
Para atención de niños se realizó
una transferencia al Ministerio de Salud Pública para la implementación
de programas preventivos-curativos.
El Plan Alimentario Nacional tiene
como objetivo apoyar y mejorar el acceso de alimentos de los hogares
incluidos en el PANES, para cumplir con estos fines ya se han realizado
las licitaciones correspondientes para asegurar las dos modalidades de
acción: por un lado; el fortalecimiento de las transferencias de
alimentos en coordinación con organismos e instituciones (ANEP-INAU); y
por otra parte la creación de mecanismos de transferencias económicas
para la adquisición de alimentos, a través de una tarjeta magnética,
cuyo emisor es el BROU y una empresa adjudicataria de pliego licitatorio
que está brindando tecnología a los puntos de venta adheridos, llamados
“Comercios Solidarios”, este proyecto estará en funcionamiento en el mes
de abril.
El programa Trabajo por Uruguay
busca contribuir al fortalecimiento ciudadano y a la mejora de la
calidad de vida de los protagonistas del PANES mediante una experiencia
sociolaboral que amplíe oportunidades educativas y promueva el
desarrollo de estrategias personales y sociales para la construcción de
rutas de salida, priorizando al trabajo como herramienta de inclusión
social.
Los Convenios del primer llamado
tuvieron una duración de 4 meses, finalizando los mismos el 31 de
diciembre de 2005, siendo considerados de mucho éxito por parte de los
Organismos Públicos, Organizaciones de la Sociedad Civil, participantes
y comunidades en general, se trabajó en 8 departamentos y el número de
cupos fue para 1.436 personas.
El segundo llamado finaliza el 31
de marzo de 2006, se está trabajando en 18 departamentos, (excepto
Treinta y Tres) y los cupos abiertos son para 1.438 personas.
El tercer llamado del 2006 es para
el departamento de Montevideo con 1.505 cupos y comenzará en el mes de
abril de este año.
En cuanto al programa Trabajo por
Uruguay, entre los datos positivos a resaltar están el nivel de
presentismo en el cumplimiento de las tareas por parte de las/los
trabajadoras/es, el cual alcanzó el 90%; trabajadores del SUNCA han
apoyado las tareas aportando la mano de obra especializada y promoviendo
la trasmisión de destrezas y habilidades en el oficio, en ese marco se
efectuaron 26.400 jornales de trabajadores de la construcción.
El Programa de Atención a los Sin
Techo, se esta cumpliendo a nivel nacional y tiene como objetivo
contribuir a la reinserción socio-cultural y laboral de las personas en
situación de calle.
El PAST trabaja en forma
coordinada desde la Comisión Interinstitucional conformada por: IMM,
MVOTMA, MSP, BPS, Ministerio de Defensa, Ministerio del Interior, INDA,
INAU y MIDES.
A este nivel se desarrollan
variadas estrategias: refugios nocturnos, centros diurnos y equipos de
calle.
Los refugios nocturnos están
abiertos los 365 días del año, de 19.00 a 08.00 horas, recibiendo cena
y desayuno, cama, ropa, posibilidad de ducharse, contando cada refugio
con un equipo técnico que trabaja en pos de encontrar rutas de salida
para los protagonistas.
Por los refugios han pasado 1.650
personas desde el 15 de mayo del 2005, de los cuales 160 son niños, que
ingresan con su madre y/o padre.
Los Centros Diurnos están abiertos
de 9:00 a 18:00 horas, concurren a los mismos alrededor de 25 personas,
éstas sedes apoyan el desarrollo y fortalecimiento de habilidades para
mujeres y mujeres con niños.
A su vez M'BORAYU (“nadie vale más
que nadie”), es un centro diurno para personas mayores de 18 años, que
padecen trastornos emocionales severos, quienes se encuentran
estabilizados y bajo tratamiento médico psiquiátrico. Concurren a este
Centro 31 personas que son atendidas por un Equipo Técnico
Multidisciplinario, bajo la modalidad de taller grupal. Este Centro es
producto de un convenio entre distintos Ministerios, el
MVOTMA-MSP-MIDES.
Además dos equipos de calle
recorren las zonas céntricas de la ciudad realizando relevamientos, se
detectan las causas y tiempo de permanencia en la calle, se les
proporcionan datos a las personas para la obtención de documentación y
en los casos en que es posible se derivan a refugios de baja exigencia,
en las zonas mencionadas se han encontrado aproximadamente 450 personas
que viven en situación de calle.
El objetivo del Programa de Apoyo
Socio-Educativo en zonas de contexto crítico es respaldar y generar
intervenciones socio-educativas en un contexto integral, en pos de la
construcción de rutas de salida de los protagonistas del Plan de
Emergencia.
Dentro de las acciones más
significativas de este programa se encuentran la firma de un convenio
con el CODICEN para el seguimiento de la permanencia en el sistema de
enseñanza de los beneficiarios del PANES; se firmó un convenio marco con
el ISEF, en la órbita con el Ministerio de Turismo y Deporte; en cuanto
al Programa Verano Solidario, fue financiado por el Ministerio de
Desarrollo Social y llevado a cabo por el Consejo de Educación Primaria,
se atendió a 46.000 niños en todo el país, distribuidos en 300 locales
escolares.
En ese contexto de apoyo a las
tareas educativas, se efectúo la donación de materiales de apoyo a niños
de escuelas de contexto crítico, la misma consistió en la entrega de
40.000 túnicas; 31.000 pares de calzado deportivo; 50.000 conjuntos
deportivos.
También se realizaron movidas
culturales, como la primera muestra de inclusión social, realizada en la
Rural del Prado; las Llamadas Otoñales organizadas por organizaciones
sociales del CCZ 7 y las primeras Llamadas de Primavera, con la
participación de 20 comparsas, en el barrio Simón Bolívar.
La finalidad del Programa de
“Mejoramiento del Habitat”es optimizar la calidad de vida de los
protagonistas del Plan de Atención Nacional a la Emergencia Social,
brindando una ayuda en materiales y en asistencia técnica, dirigida
especialmente a aquellos hogares que se encuentren en situación de
emergencia crítica habitacional rural-urbana con base territorial.
Para ello, se realizó un convenio
con el Ministerio de Vivienda Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente
(MVOTMA), que establece la compra de materiales a través de licitaciones
en barracas locales y nacionales. El MVOTMA a su vez, firmó un convenio
con el Sindicato Único Nacional de la Construcción y Afines (SUNCA) a
través del cual el sindicato se compromete a brindar apoyo de obreros
calificados. Ya se hicieron las licitaciones de las “canastas de
materiales” para 30 localidades (80 canastas para cada una de ellas) con
un valor promedio de cada una de U$S 1.000, totalizando así 3.400
canastas, llegando a unas 15.300 personas la población beneficiada del
programa.
Clasifica Uruguay es un Programa
de Desarrollo Integral para Clasificadoras y Clasificadores. El
Ministerio de Desarrollo Social toma, a fines del año 2005, la decisión
de implementar un programa específicamente destinado al trabajo con
familias y personas individuales que tienen a la clasificación artesanal
de residuos sólidos urbanos como una de sus principales fuentes de
ingresos económicos.
El mismo se enmarca en el Plan de
Atención Nacional a la Emergencia Social, en busca de una mayor
articulación de las acciones que desde sus diferentes componentes se han
venido realizando sobre esta población objetivo. Al mismo tiempo y de
esta forma, se canalizan diversos proyectos e iniciativas en las que el
MIDES se encontraba participando (Ley de Envases y apoyo a cooperativas
sociales de clasificadores, etcétera).
En tal sentido, Clasifica Uruguay
está llevando adelante un importe número de reuniones con clasificadores
y clasificadoras de las distintas zonas de Montevideo y del interior del
país, con los organismos estatales que tienen alguna vinculación con la
temática y con ámbitos académicos (Universidad de la República),
Organizaciones de la Sociedad Civil, grupos de apoyo y técnicos
individuales con experiencia en el tema, a los efectos de contar con una
visión amplia y complementaria para acercarnos en forma participativa a
un tema complejo y multidimensional.
Se pondrá especial énfasis en
lograr las condiciones necesarias para que niñas, niños y adolescentes
de familias clasificadoras permanezcan o se reintegren al sistema
educativo formal, desestimulando su participación en cualquiera de las
etapas del clasificado artesanal de residuos sólidos urbanos, mediante
la articulación de las acciones del programa con otras ya existentes a
nivel del MIDES o de otras instituciones públicas y privadas. |