06/06/06


MEDIO AMBIENTE Y DESARROLLO ESTRATÉGICO
Uruguay de las Ideas organizó e invitó a conferencia sobre Desarrollo estratégico, investigación e implementación de tecnologías ecológicamente inteligentes, brindada por especialistas ambientales de Uruguay y Argentina.

Participaron de esta conferencia, el Presidente de la Fundación Argentina de Ecología Científica, Eduardo Ferreira; el Secretario Ejecutivo del Instituto de Investigación y Desarrollo, Eduardo de León; el periodista y analista ambiental, Luis Anastasía; y el Presidente de la Sociedad Uruguaya de ONG’s ambientalistas y Secretario de CEUTA, Gerardo Honty.

Ambiente y desarrollo en el monocultivo de eucalyptus, fue el título de la conferencia del licenciado en Oceanografía Biológica, Luis Anastasía, quien efectúo una reseña sobre aspectos legales y normativos, superficie forestada, requerimientos y efectos ambientales, suelos, nutrientes, agua, forestación y biodiversidad, forestación versus otras actividades, entre otros.

La Ley Forestal N° 15.939, de diciembre de 1987, en su artículo 1° señala que se declaran de interés nacional la defensa, y la creación de recursos forestales, así como el desarrollo de industrias en ese ramo. Asimismo, menciona que se prohíbe la corta y cualquier operación que atente contra la supervivencia del monte indígena, exceptuando las situaciones en las cuales el producto de explotación es para usos médicos y alambrado rural, o exista autorización de la Dirección Forestal.

En ese sentido, el Código Nacional de Buenas Prácticas Forestales de setiembre de 2004 que fue desarrollado por organismos públicos en su Ley de Protección Ambiental N° 16.446, en enero de 1994, da cuenta de la aplicación de la Norma ISO 14.000 sobre Gestión Ambiental, que apunta a que el cultivador desarrolle sus plantaciones dentro de las normas legales, dando lugar a las especies de prioridad forestal.

El eucalyptus tiene su origen en Australia, fue introducido en Cabo de Buena Esperanza en el año 1853 y la única limitante para su desarrollo es el frío.

Los requerimientos y efectos ambientales, los efectos en el suelo, el consumo de nutrientes, la comparación entre el cultivo de este árbol, el maíz y la soja; el consumo de agua y los efectos en el ciclo hidrológico: infiltración y escorrentía, impermeabilización de suelos y raíces; los efectos en el ciclo hidrológico, así como el consumo de 30 litros por día por árbol, además de consumo de 33.000 litros por hectárea por día, fueron algunos de los temas tratados.

La atmósfera tiene potencial de evaporación y efectúa extracción de agua hacia la misma como función de la insolación, así como el viento y la humedad ambiente, generan que en una hectárea se evaporan 50.000 litros de agua por día.

El eucalyptus requiere poca agua para desarrollarse, ya que desde sus orígenes es una especie adaptada a zonas con bajo contenido de humedad; diferentes zonas áridas están siendo plantadas con este árbol, tanto en España, Marruecos, Israel e Israel donde en zonas del desierto se cultiva luego de 20 a 30 años de forestación.

La evolución del monte nativo en el año 1990, la superficie cubierta, incluyendo palmares era de 670.000 hectáreas, un 3,8%; en el año 2003, la superficie cubierta fue de 811.000 hectáreas, un 4,6%, desde esa fecha el monte nativo ha crecido 11.000 hectáreas por año hasta la actualidad.

La forestación y otras actividades como la ganadería y/o la apicultura son perfectamente compatibles; además hay otros aprovechamientos como combustible renovable, madera, aceites esenciales y mercado de carbono.

La madera es irremplazable, existen 10.000 productos derivados de la misma, es un recurso renovable, los posibles sustitutos no son renovables y son contaminantes, además de consumir energía de 9 a 30 veces más, un kilogramo de madera de eucaliptos se produce con 350 litros de agua, dijo Anastasía.

La plantación de eucalyptus afecta a los suelos en igual o menor que otras formas cultivadas o naturales, el consumo de agua bajo, es alta la eficiencia; sin incidencia significativa en afectación al ciclo hidrológico; hay compatibilidad con otras producciones con el manejo adecuado, y promueve la expansión del monte nativo y la oportunidad de desarrollo.

Actualmente, lo que está efectivamente forestado es menos de 500.000 hectáreas en nuestro país. La forestación es el único plan a largo plazo que se ha desarrollado en el país independientemente de los partidos políticos, es una industria que mueve al interior del territorio nacional con fuentes de trabajo económicamente y socialmente variadas, manifestó Luis Anastasía.

Por su parte, el Secretario Ejecutivo del Instituto de Investigación y Desarrollo, Eduardo de León, expresó que la apuesta a la producción forestal podría ser una de las perspectivas de desarrollo de Uruguay. Es una situación que crea empleos, a pesar de que –este analista- no tenía referencias del número de empleos generados con la forestación, pensando en un desarrollo de alta calidad de la misma.

El control de los sistemas industriales en el Río de la Plata y la instalación de plantas de celulosa, sirven para aumentar la calidad ambiental en Uruguay, es válido todo el proceso si aumentan los controles, dijo de León.

El futuro del país esta puesto en la economía del conocimiento, apostando a las inversiones con políticas de Estado. "La biotecnología y las tecnologías de la información necesitan una formación técnico profesional de alto nivel, es un debe desde el punto de vista humano, faltan técnicos profesionales muy calificados, estamos con falta de personal altamente competente, esto requiere una gestión gubernamental, la carga formativa es muy baja con respecto a los países de la región, lo que es constatable porque se contratan muchos técnicos extranjeros".

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