El próximo 2 de julio, con motivo de las elecciones a la Asamblea Constituyente y el Referéndum sobre la autonomía regional en Bolivia, la Comisión Europea, a pedido del Ministro de Asuntos Exteriores boliviano, desplegará una Misión de Observación Electoral (MOE) de la Unión Europea (UE).

Esta convocatoria a las urnas permitirá a los bolivianos elegir a sus representantes en la Asamblea Constituyente, la que deberá redactar una nueva Constitución para el país y se pronunciarán  sobre la inclusión de la autonomía regional en la nueva Constitución.

La encargada de la MOE de la UE será Mónica Frassoni, miembro del Parlamento Europeo.

La Comisaria europea responsable de Relaciones Exteriores y Política de Vecindad, Benita Ferrero-Waldner, dijo que "seguimos con mucho interés la situación en Bolivia, en especial los esfuerzos del nuevo gobierno por promover políticas de inclusión tras el importante giro político registrado a raíz de las elecciones del pasado diciembre".

Asimismo, añadió que "las próximas elecciones constituyen una gran oportunidad para los bolivianos. Se trata de una etapa clave en la evolución democrática del país y pueden abrir la puerta a grandes cambios en el equilibrio del poder político, económico y social. Esperamos que la MOE contribuya positivamente al buen desarrollo de estas consultas y, por lo tanto, a la vitalidad de la democracia boliviana".

El equipo central de la MOE (compuesto por el jefe de misión y ocho expertos, entre los que figuran expertos legales, expertos en temas electorales y asesores en materia de seguridad) comenzó a llegar a La Paz la semana del 24 de mayo. Poco después se unió a dicho equipo un grupo de 26 observadores a largo plazo que se desplegaron por todo el territorio del país para observar la campaña electoral, los preparativos de las elecciones, el día de la consulta electoral y el periodo posterior. Un total de 60 observadores a corto plazo, a los que probablemente se sumarán diplomáticos de los Estados miembros de la UE de las embajadas de La Paz, observarán el desarrollo de los comicios, el recuento y la compilación de resultados.

La Comisión pondrá a disposición un total de 1.790.000 euros, de la Iniciativa europea para la democracia y los derechos humanos (IEDDH), para cubrir los gastos del despliegue de esta misión.

Las misiones de observación electoral de la UE son un elemento importante para consolidación de la confianza en los procesos democráticos de un país y responden al compromiso de la UE con la defensa de la democracia, los derechos humanos y el respeto del Estado de Derecho. Las MOE son independientes y profesionales y, por esta razón, sus conclusiones se consideran fiables y serias.