LA DICyT DIFUNDE PUBLICACIONES DE INNOVACIÓN
CIENTÍFICA
"En la época del conocimiento, si hay algo que
podría caracterizar esta etapa de la civilización es el manejo del
conocimiento como valor más importante, más importante que cualquier
otra forma de riqueza", enfatizó el Ministro Brovetto en la presentación
de las publicaciones científicas de la DICyT.
La Dirección de Innovación, Ciencia y Tecnología para
el Desarrollo (DICyT), del Ministerio de Educación y Cultura, presentó
sus nuevas publicaciones, "Investigación + Desarrollo- claro que se
puede", Volumen 5 y "La innovación en la Industria Uruguaya (2001-2003),
II Encuesta de Actividades de Innovación en la Industria".
En el acto estaban presentes el Ministro de Educación
y Cultura, Jorge Brovetto, el Director de Innovación, Ciencia y
Tecnología para el Desarrollo (DICyT), Amílcar Davyt y la Coordinadora
del Programa de Desarrollo Tecnológico (PDT), Myriam Aldabadle, la
Directora del INE, Alicia Melgar, altas autoridades nacionales y medios
de comunicación.
"La incorporación del conocimiento en la vida
cotidiana, la responsabilidad de que el conocimiento forme parte de las
acciones, de las decisiones y de las medidas que se tomen, no
exclusivamente a nivel público, sino a nivel privado; a nivel
empresarial; pero también al nivel de las decisiones de la vida
cotidiana que hacen a la cultura de la nación, debe ser un compromiso de
todos", manifestó Brovetto.
La Dirección de Innovación, Ciencia y Tecnología
lleva adelante diferentes programas para propiciar y apoyar el
desarrollo científico y tecnológico, así como la innovación en todas sus
modalidades y formas. Uno de estos programas es el denominado Programa
de Desarrollo Tecnológico financiado con fondos de nuestro país, del
Banco Interamericano de Desarrollo y de empresas uruguayas.
Los avances de estos Programas se socializan a través
de la divulgación y difusión de sus resultados, es en ese marco que este
miércoles 5 de julio, se realizó la presentación de estas nuevas
publicaciones.
Davyt manifestó que "los subsidios a empresas, el
financiamiento de proyectos de investigación, el apoyo a la inserción de
jóvenes en el sector productivo, sea en el marco del presupuesto
nacional o a través del préstamo del Programa de Desarrollo Tecnológico"
constituyen algunas de las acciones más conocidas de su Dirección y
agregó que algunas de ellas en un futuro mediato radicarán en la Agencia
Nacional de Investigación e Innovación y esa situación permitirá una
mayor coordinación con otros organismos.
Davyt recalcó el papel fundamental de la DICyT
durante la organización el desarrollo de la Semana de la Ciencia y
Tecnología, principalmente a través del Programa de Ciencia y Tecnología
Juvenil.
Desde el Ministerio "promovemos un necesario cambio
cultural en la percepción de la gente, de la ciudadanía uruguaya acerca
del papel de la ciencia, la tecnología y la innovación en el desarrollo
del país", subrayó Davyt.
"Es una línea de acción fundamental en las tareas que
lleva adelante el MEC a través de la DICyT, más allá de los cambios
institucionales futuros", señaló el Director de la DICyT.
"Poner a disposición de la sociedad uruguaya los
resultados de los programas de fomento, en este sentido el trabajo de la
DICyT continuará relacionándose estrechamente con la nueva
institucionalidad que estamos creando, evaluando y mostrando a la gente,
los avances que los distintos instrumentos vayan produciendo", dijo
Amílcar Davyt y agregó que "una tarea fundamental de esta Dirección -tal
cual fue expresado en el artículo de la Ley de su creación- es y será,
el apoyo en materia de elaboración técnica, evaluación, seguimiento y
generación de información relevante para la toma de decisiones,
realizado todo esto a través de su Observatorio de Innovación, Ciencia y
Tecnología".
Estas publicaciones, según Davyt, buscan proporcionar
criterios y elementos de juicio para la toma de decisiones en materia de
políticas públicas de fomento a la innovación, porque es importante
conocer los esfuerzos de las empresas como sus resultados y las
dificultades enfrentadas.
Por su parte, Myriam Aldabadle señaló que el objetivo
del Programa de Desarrollo es "contribuir a mejorar la competitividad de
las pequeñas y medianas empresas uruguayas y mejorar la capacidad
científico técnico del país".
Aldabalde mencionó que se ha apoyado a 168 proyectos
de empresas privadas con un costo total de 14 millones de dólares y un
subsidio-como reembolso de gastos- de 6.8 millones de dólares.
"Es clave que las empresas puedan implementar las
innovaciones y también competir mejor tanto en el mercado nacional como
en el mercado global", señaló la Directora.
Mencionó que de los 168 proyectos, el 78% de las
empresas están ubicadas en Montevideo y solamente el 22% en el interior
del país.
Se tiene que incrementar el esfuerzo de salir al
Interior, señaló Aldabadle y agregó que los departamentos del interior
que se destacan son Canelones, Colonia, Paysandú y Soriano que llevan el
22% de los apoyos.
"Falta relacionamiento entre la empresa privada y los
organismos de investigación, 13 de los proyectos presentados han
desarrollado su innovación en relacionamiento con convenios con
organismos como la UDELAR, la UCUDAL, ORT, Universidad de Montevideo y
Universitario Autónomo del Sur" enfatizó la Directora del Programa.
Se ha apoyado a la industria agroalimentaria, la
tecnología química y farmacéutica, las industrias manufactureras, la
salud, entre otros.
PALABRAS DEL MINISTRO DE EDUCACIÓN Y CULTURA, JORGE
BROVETTO
MINISTRO BROVETTO: Estimados amigas y amigos, en
primer término, muchas gracias por estar presentes.
Creo que esta instancia no debe ser considerada como
una instancia más en la presentación de publicaciones que hacen
diferentes instituciones, en este caso el Ministerio de Educación y
Cultura. Sino que podríamos considerarla como una instancia de
reafirmación de un cambio cultural en el país.
Y quiero aclarar que cuando hablo de un cambio
cultural, no me estoy refiriendo a un cambio cultural impulsado
específicamente por un Gobierno, sino un cambio cultural que se
transforme casi en un cambio cultural de Estado, en el cual todos los
actores que forman parte de la nación y de la democracia, participan
porque se convencen, porque están absolutamente compenetrados de que es
un cambio cultural necesario.
La incorporación del conocimiento en la vida
cotidiana, la responsabilidad de que el conocimiento forme parte de las
acciones, de las decisiones y de las medidas que se tomen, no
exclusivamente a nivel público, sino a nivel privado; a nivel
empresarial; pero también al nivel de las decisiones de la vida
cotidiana que hacen a la cultura de la nación, debe ser un compromiso de
todos.
A que me refiero, si tuviera que referirme a estas
dos publicaciones, diría que son una fotografía, casi una fotografía que
dialogan entre sí, las dos publicaciones dialogan. Dialogan, se
contraponen, de alguna manera una dice: que poco hemos caminado a pesar
de los esfuerzos, Myriam, señalaba un esfuerzo que viene de años, de los
cuales hay responsabilidades en el sentido positivo.
Es decir, responsabilidades como logros de actores
muy dispares, pertenecientes a diferentes sectores políticos, pero que
han asumido la responsabilidad de incorporar al país al siglo en que
vivimos.
Y yo diría que dialogan, porque si tomamos por un
lado el de la innovación en la industria uruguaya en el período
2001-2003, ya, Amílcar, señalaba los importantes rezagos que
representan.
En la época del conocimiento, si hay algo que podría
caracterizar esta etapa de la civilización es el manejo del conocimiento
como valor más importante, más importante que cualquier otra forma de
riqueza.
En eso nosotros hemos demostrado que hay un
importante rezago. Nuestras empresas han hecho un esfuerzo por innovar,
pero ese esfuerzo no ha pasado, fundamentalmente, por la incorporación
de ciencia y tecnología.
Nuestras estructuras de enseñanza, educación y
fundamentalmente de investigación y ciencia han hecho también un
esfuerzo y eso vaya que me consta, me consta porque fuimos actores
directos del tema del esfuerzo que se ha hecho por vincular conocimiento
con su transformación concreta.
Sin embargo, por ejemplo, si hacemos un estudio de
cuál es la productividad científica de nuestros científicos en Uruguay,
está a la altura de la de los países más desarrollados del mundo.
Pero como decía muy bien, Myriam, si lo vamos a ver
en cómo eso se refleja, por ejemplo, en patentes, en regalías, en todo
aquello que señala su coordinación, su complementación con la
producción, así estamos como 100 veces por detrás de esas otras partes
del planeta en las cuales la productividad científica es similar.
Esto es un cambio cultural. Muchas veces se discute
qué es cultura en un país. Y creo que nosotros tenemos el orgullo de
haber impulsado en el país, en la sociedad uruguaya a lo largo de toda
su existencia un muy buen nivel cultural–artístico, pero creo que nos
hemos quedado muy rezagados en incorporar el conocimiento a la ciencia,
como parte de nuestra cultura. Al extremo de que si estudiamos nomás la
matrícula universitaria, vemos que el número de ingenieros, de
estudiantes del área de la ciencia, es relativamente bajo con respecto
al de otras naciones.
Y eso también es un diálogo con la sociedad. Porque
son pocos porque la sociedad no lo ha requerido y la sociedad no lo ha
requerido quizás porque son pocos o porque culturalmente no entendió que
los necesitaba.
Ese cambio, vuelvo a decirlo, está siendo asumido por
este Gobierno. Pero quiero que quede bien claro, lo esta asumiendo como
responsabilidad que tiene raíces sólidas, que tiene raíces que fueron
señaladas y que están reflejadas en estas dos publicaciones. Porque es
claro que se puede, hay demostración de cómo, modesta, seguramente muy
modesta muchas de ellas, pero hay demostración que claro que se puede
incorporar conocimiento, riesgo en innovar, y que eso tiene buen
resultado.
Entonces les decía, esta nueva administración ha
lanzado el Uruguay Productivo. El Uruguay Productivo no pasa
exclusivamente por ver cómo hacemos mejor, cómo sacamos mejor provecho
de nuestras materias primas, sino fundamentalmente como sacamos mayor
provecho de nuestra capacidad intelectual, de la capacidad de
conocimiento, de la inteligencia de nuestra gente, y vaya si se puede.
De eso les puedo decir que tengo absoluta certeza,
porque también tengo los elementos de juicio para demostrarlo, nuestra
gente; nuestra juventud; nuestros profesionales; nuestros
investigadores, están a la altura de los mejores. Simplemente les puedo
decir que durante nuestra actividad en el Rectorado de la Universidad de
la República, cada vez que salía un becario al extranjero –y no eran
pocos, sino que son muchos- siempre estaban señalados, tanto por las
organizaciones de becas de países desarrollados de América o de Europa,
entre el porcentaje más alto de capacitación y de producción.
Entonces quiero decir, estos también son dos aportes
muy modestos.
Uno señala algunas cosas que se han hecho -y como
decía Myriam- es el quinto, quiere decir que ya vienen otras
administraciones trabajando en este sentido. Nos comprometemos a
seguirlo impulsando y ojalá en el futuro, de esas raíces y de nuestros
esfuerzos esto se pueda multiplicar por mucho.
Pero además, -y gracias nuevamente a Alicia y al
trabajo del Instituto Nacional de Estadística- podemos tener una
fotografía del Estado, yo diría casi de postración en que nos
encontramos en relación con el resto del mundo, en el tema de la
innovación y la incorporación del conocimiento a nuestra productividad.
El compromiso de todos y fundamentalmente nuestro es
el de crear las condiciones - porque esto no lo hace un Gobierno- esto
lo hace una sociedad, crear las condiciones para que esta realidad sea
otra diferente, y sea en definitiva un logro de toda la sociedad
uruguaya, a eso nos comprometemos. Muchas gracias. |