NADIE ESTÁ POR ENCIMA DE LA VOLUNTAD DE LA GENTE
El Presidente de la República, Tabaré Vázquez,
reafirmó este miércoles la transparencia que debe guardar la actividad
deportiva al señalar que "nadie, por más importante que sea su cargo,
está por encima de la voluntad de la gente", al hablar en el acto de
celebración del 95º. aniversario de la creación de la Comisión Nacional
de Educación Física.
"La educación física y el deporte no son privilegio
de nadie, sino derecho de todos. Porque el Uruguay y su gente -el
Uruguay y su gente, todos los ciudadanos y ciudadanas de este país,
repitió- son infinitamente más importantes que cualquier individualidad
o cualquier cargo, por importante que sea".
Por eso, en el contexto de este aniversario de la
creación de la Comisión Nacional de Educación Física, Vázquez afirmó que
"es de justicia recordar aquel hecho y por cierto también homenajear a
sus precursores; pero también es pertinente, al mismo tiempo, mirar al
futuro y asumir los compromisos que correspondan para gobernar ese
futuro en beneficio de todos".
Al respecto, dijo que "para ello es necesario asumir
que el deporte y la educación física son parte inexcusable del
desarrollo y de la cultura de un país, no hay desarrollo humano y
cultura entendida en su justo término que no contemple al deporte y a la
educación física".
"Es necesario asumir, mirando ese futuro, que la
práctica del deporte es un excelente medio para promover no sólo el
desarrollo físico, la salud y la educación, sino también como para
fomentar valores sociales tales como el espíritu de equipo, la
competencia leal, la tolerancia y la solidaridad", dijo.
"Asumir, entonces, que en tanto el bienestar físico
es una dimensión importante de la calidad de vida, el deporte y la
actividad física no son ni un privilegio, ni una perdida de tiempo, son
para todos los ciudadanos de este país un derecho y una responsabilidad
del gobierno de turno amparar ese derecho".
El Primer Mandatario señaló que, además, hay "un hilo
conductor de todas ellas y que en cierta manera está explicitado en la
que mencionamos en segundo lugar; ese hilo conductor es la igualdad y la
calidad. Igualdad, sí señores, igualdad de oportunidades en el acceso a
la actividad física y a la práctica deportiva sin distinción de sexo,
edad, capacidad física -muy importante- condición socioeconómica y lugar
de residencia".
En este sentido, Vázquez señaló que "todos los
uruguayos deben tener las mismas oportunidades de practicar deportes, de
llevar adelante actividad física. Y es responsabilidad del Estado y de
las Instituciones privadas trabajar conjunta y coherentemente para
lograr el éxito que necesariamente el país necesita, quiere y se lo
debemos dar. Pero además de igualdad, calidad; calidad en la formación
de entrenadores y docentes deportivos, calidad en la infraestructura
edilicia y equipamiento urbano para la actividad física y la práctica
deportiva, mejorar nuestros Estadios, gimnasios, parques, etcétera".
Asimismo, el Primer Mandatario anunció el próximo
envío al Parlamento del proyecto que consagra la obligatoriedad de la
educación física en los programas de Primaria y anunció una próxima
reactivación de las plazas de deportes.
También expresó su solidaridad al Director
ministerial de Deportes, Prof. Fernando Cáceres, al ponerse de pie y
abrazarlo cuando el ministro Héctor Lescano lo mencionó en su discurso.
PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, TABARÉ
VÁZQUEZ
PRESIDENTE VAZQUEZ: Buenos días a todos ustedes;
señoras y señores, todas las autoridades minuciosamente mencionadas por
el señor Ministro de Turismo y Deporte del Uruguay. Así que, ahorro el
tiempo de mencionarlos a todos. Muchas gracias, por estar presentes aquí
en la mañana de hoy.
Y mirando este tan importante video, nosotros no lo
conocíamos, es la primera vez que lo vemos y que nos trajo tantos
recuerdos. Quiero decir, también, que todo esto que hemos visto es la
base por la cual el Uruguay puede aspirar justamente con orgullo, sano
orgullo, pero con seguridad y optimismo las más amplias realizaciones en
todos los ámbitos: científico, cultural, político, social, económico, ¡y
por qué no también deportivo!
Y me acordé que hace pocos días sostuvimos una
reunión para ayudar a organizar a una Institución señera del Uruguay en
deporte como es el Yacht club, que cumple 100 años; 100 años de esta
Institución, y que en la última semana de diciembre de este año y primer
semana de enero del año próximo durante quince días va a realizar acá
con apoyo internacional, el Campeonato Mundial de Yacht en la clase
Optimis, donde van a venir más de 5.000 jóvenes de todas partes del
mundo a competir aquí, en el Uruguay, evento que va a ser trasmitido por
televisión para todo el mundo, y que va a mostrar como los uruguayos
somos capaces de llevar adelante todo este tipo de actividades. Y somos
capaces porque tenemos una historia que nos respalda, es esa que ustedes
vieron en el video en la mañana de hoy.
Amigas y amigos, 95 años bien valen entonces un
recuerdo. Y ese precisamente es el motivo de este acto, recordar el 95
aniversario de la promulgación de la Ley por la cual se creó la Comisión
Nacional de Educación Física.
Nueve décadas y media es una larga trayectoria,
incluso para una institución. Y cuando tan extenso período no ha sido
solamente tiempo transcurrido, sino que ha sido un tiempo cargado de
vida y de acontecimientos, entonces, esa trayectoria es aparte de
extensa, rica y fundamentalmente humana.
Es entonces una historia, pero con hache mayúscula.
Tal es la Historia de esta institución que nació como Comisión Nacional
de Educación Física y que hoy es la Dirección Nacional de Deportes.
Pero la historia no es sólo cosa del pasado, también
es asunto, es tema del futuro. Por eso, en el contexto de este
aniversario de la creación de la Comisión Nacional de Educación Física,
es de justicia recordar aquel hecho y por cierto también homenajear a
sus precursores, pero también es pertinente, al mismo tiempo, mirar al
futuro y asumir los compromisos que correspondan para gobernar ese
futuro en beneficio de todos.
Para ello es necesario asumir que el deporte y la
educación física son parte inexcusable del desarrollo y de la cultura de
un país, no hay desarrollo humano y cultura entendida en su justo
término que no contemple al deporte y a la educación física.
Es necesario asumir, mirando ese futuro, que la
práctica del deporte es un excelente medio para promover no sólo el
desarrollo físico, la salud y la educación, sino también como para
fomentar valores sociales tales como el espíritu de equipo, la
competencia leal, la tolerancia y la solidaridad.
Asumir, entonces, que en tanto el bienestar físico es
una dimensión importante de la calidad de vida, el deporte y la
actividad física no son ni un privilegio ni una pérdida de tiempo, son
para todos los ciudadanos de este país un derecho y una responsabilidad
del gobierno de turno amparar ese derecho.
De la misma forma, de la misma manera que la salud es
un derecho humano que como tal debiera estar consagrado en la
Constitución de la República, el deporte debe ser considerado al mismo
nivel.
Pero que además este deporte, esta actividad física
de ser una responsabilidad del gobierno, es una responsabilidad de cada
persona que debe cuidar su propia salud. Y creo importante remarcar esto
aunque pueda parecer un tanto obvio, tal vez lo sea. Pero lo cierto es
que según datos, según datos de una encuesta nacional sobre hábitos
deportivos realizada entre mayo y julio de 2005 -es decir, del año
pasado- por el Instituto Nacional de Estadística, se establece que:
A) Solamente, solamente el 40% de la población
uruguaya realiza actividad física y/o prácticas del deporte, solamente
el 40%.
B) En términos globales, el 55% lo hace con
frecuencia moderada, llamando a esto una actividad física, una o dos
veces a las semana.
C) La práctica de deportes alcanza su porcentaje
máximo, porcentaje máximo de práctica de deportes, 79% entre los
adolescentes; lo cual está ligado probablemente a la obligatoriedad de
la educación física en el ciclo básico de Enseñanza Secundaria.
D) Pero este alto rating, si ustedes quieren, decae
sensiblemente a partir de los 18 años: 28% de actividad física entre
jóvenes y adultos jóvenes de 18 a 49 años; y 25% solamente entre los
mayores de 50 años.
E) De la población que tiene hábitos deportivos la
mayoría son hombres, 52.3%; sí bien entonces el 47.7% son mujeres,
porcentaje que corresponde abrumadoramente adolescentes y jóvenes, vemos
que aquí también se marca una diferencia con respecto al género.
F) Del total de la población sedentaria del país, del
total de la población sedentaria del país, el 57% son mujeres adultas y
mayores.
Este detalle, señoras y señores, desde nuestro muy
modesto punto de vista no es menor en términos de salud y bienestar de
género.
Y viene al caso, pues, como forma de dar seguimiento
al Año Internacional de la Educación Física y el Deporte celebrado en el
2005, la ONU ha asignado para el 2006 especial atención a la
accesibilidad de la mujer al deporte.
Pero además de estos datos, veamos otros datos
socioeconómicos de la mencionada encuesta, que creemos también son
relevantes y deben ser tenidos muy en cuenta.
Uno, casi el 100 %, casi el 100% de los escolares del
sector privado de la enseñanza recibe educación física y practica
deportes. Esto es muy bueno, es muy bueno que así sea, y hay que seguir
apoyando para que así sea. Lo malo, lo malo en este país es que apenas
el 50% de los niños y niñas que concurren a las escuelas públicas tiene
esa oportunidad. Acá hay una diferencia socioeconómica muy importante
que debe ser tenida en cuenta.
Dos, solamente el 32% de la población económicamente
activa practica deportes; y este 32% incluye Fuerzas Armadas y Policía,
que incluye el ejercicio físico como parte de su instrucción; solamente
el 32% de la población activa.
Tres, de ese porcentaje el 65 % -la mayoría- son
trabajadores calificados, profesionales y personas que desempeñan cargos
de dirección en las distintas empresas.
Y cuatro, solamente el 29% de los sectores de más
bajos ingresos de la población realiza actividades físicas; solamente el
29 % de los sectores socioeconómicos menos fuertes.
Preocupante realidad, ¿no les parece? Y sobre ese
diagnóstico es que tenemos que actuar. Porque, amigas y amigos, con la
realidad por preocupante que la misma sea no hay que pelearse, hay que
transformarla, hay que cambiarla, hay que mejorarla.
En este caso, la transformación implica que desde el
propio Estado, pero también sin duda desde el espacio privado, cada uno
desde sus respectivas responsabilidades y competencias, redoblemos
esfuerzos y coordinación en los siguientes puntos:
I) Difundir a toda la población los beneficios de la
práctica deportiva y la actividad física en todas las edades.
II) Ampliar la cobertura y profundizar la calidad de
la actividad deportiva.
III) Diseñar políticas públicas y apoyar programas
permanentes de educación física y práctica de deportes.
IV) Mejorar el nivel y la competitividad del deporte
uruguayo, tanto dentro del país como en el ámbito internacional.
Son tareas importantes y estrechamente vinculadas
entre sí. Hay, además, un hilo conductor de todas ellas y que en cierta
manera está explicitado en la que mencionamos en segundo lugar; ese hilo
conductor es la igualdad y la calidad.
Igualdad, sí señores, igualdad de oportunidades en el
acceso a la actividad física y a la práctica deportiva sin distinción de
sexo, edad, capacidad física -muy importante- condición socioeconómica y
lugar de residencia.
Todos los uruguayos deben tener las mismas
oportunidades de practicar deportes, de llevar adelante actividad
física. Y es responsabilidad del Estado y de las Instituciones privadas
trabajar conjunta y coherentemente para lograr el éxito que
necesariamente el país necesita, quiere y se lo debemos dar.
Pero además de igualdad, calidad. Calidad en la
formación de entrenadores y docentes deportivos, calidad en la
infraestructura edilicia y equipamiento urbano para la actividad física
y la práctica deportiva; mejorar nuestros Estadios, gimnasios, parques
ciclovías, etcétera.
Calidad en formación de los deportistas como
deportistas, pero también y principalmente como ciudadanos; con valores
y con principios.
Calidad en los espectáculos y las competencias
deportivas, empezando por la erradicación de la violencia y la lucha
contra el doping.
Calidad en la gestión de las entidades deportivas,
así como en la autoridad moral y capacitación gerencial de sus
directivos.
Calidad en la actividad económica, bien importante
por cierto, que se genera en torno al deporte.
Calidad y transparencia, calidad y transparencia,
porque es mentira que los buenos negocios tienen necesariamente que ser
turbios.
Calidad en los empleos generados por el deporte en
tanto actividad económica. ¿Cuántos empleos, señoras y señores, genera
directa o indirectamente la actividad deportiva en el Uruguay? ¿Cuántos?
Seguramente muchísimos y en diversas áreas deportivas, por cierto, pero
también en el área de la salud, del transporte, de la seguridad
personal-humana, textil, en la gastronomía, en la construcción. ¡Cuánta
actividad se genera alrededor de la actividad deportiva!
Y cuando hablamos de calidad en el empleo hablamos de
estabilidad, de capacitación, de salario digno, de Previsión Social, de
seguridad en general. Calidad también en la formación de los periodistas
deportivos y en el desempeño de esa actividad; también en el ámbito
deportivo la primera obligación del comunicador es la verdad y su primer
compromiso profesional es para con la gente.
Amigas y amigos, el simple hecho de estar aquí
reunidos, recordando que hace casi un siglo se creó la Comisión Nacional
de Educación Física, demuestra que no partimos de cero, como muy bien lo
dijera el señor Ministro de Turismo y Deporte.
Del mismo modo, la trayectoria del deporte uruguayo
directamente vinculada al devenir de esa Comisión y del país mismo,
demuestra que más allá de triunfos y derrotas -podrán haber excepciones-
pero nunca hay milagros; rara vez hay casualidades y siempre hay detrás
de todo triunfo, trabajo y mucho trabajo.
Trabajo colectivo y de largo aliento, que agrupa a
mucha gente, cada quien desde su propia identidad durante generaciones.
Por eso, es compromiso de este Gobierno -y está
trabajando fuerte en este tema- y entre otras iniciativas ya concretadas
o en curso, expresamos:
A) Estamos instrumentando programas concretos,
concretos, de promoción del deporte pero que, a su vez, atraviesan
otras áreas de la acción del Gobierno. El deporte como herramienta
para desarrollar otro tipo de actividad.
Los programas "Knock Out a las drogas" y el básquet
en las plazas, en el área del boxeo y del básquetbol, y "Sueño de
pibes", con los niños jugando en la cancha de la Residencia Presidencial
de Suárez los sábados de tarde, sobre todo los más humildes, los que
quizás ni tenían la oportunidad de ver desde afuera la casa Presidencial
porque no podían venir a Montevideo, son un ejemplo de ello.
Y a veces se nos critica y se nos dice cómo promover
el boxeo entre niños y niñas, porque hay niñas también que están
haciendo boxeo. Pero estamos hablando del boxeo como el arte de la
defensa, el boxeo como la actividad deportiva.
Pero el boxeo también que inculca a principios y
valores: saber defenderse pero saber respetar, saber tolerar, saber
creer y saber querer.
Los boxing club;, los viejos boxing club de los
barrios de Montevideo, en la década del cuarenta, en la década del
cincuenta, significaron verdaderas escuelas de ciudadanía responsable
que llegaron a cientos y cientos de niños de los hogares más pobres que
aprendieron ahí, en el gimnasio del boxeo con sus profesores a respectar
a sus conciudadanos.
B) Estamos dando un nuevo encare e impulso a la
Organización Nacional de Fútbol Infantil, porque los niños tienen
derecho a jugar, a jugar, sin excepciones ni presiones de ningún tipo,
simplemente jugar. Y esto es lo que pretende actualmente llevar adelante
la organización del fútbol infantil. Jugar como se jugaba antes, veinte
contra veinte, treinta contra treinta, con una pelota de trapo con una
pelota de goma. Jugar, divertirse, hacer una moña, una jopeada, pasarla
por el caño; correr, saltar, pararse, cambiar de ritmo, lo aprendían en
la en la calle todos los días, como no iban después jugar bien cuando
iban a una cancha de fútbol. Por algo fuimos dos veces campeones
Olímpicos y dos veces campeones del mundo en fútbol.
C) Incorporamos el Instituto Superior de Educación
Física a la Universidad de la República, dando cumplimiento a una
aspiración largamente revindicada por estudiantes, docentes y
profesionales de esa disciplina.
D) Promovimos -como se vio en el video- el Primer
Congreso Nacional del Deporte, experiencia participativa y democrática
inédita, que aportó insumos importantes para la elaboración de un plan
estratégico de desarrollo deportivo nacional y para el imprescindible y
ya iniciado -señor Ministro de Educación y Cultura- Debate Nacional
sobre la Educación, donde no puede estar ausente el deporte como uno de
los elementos fundamentales de la educación y la cultura. E) Promovimos
la instalación del Instituto del Derecho Deportivo en la orbita del
Colegio de Abogados, con el cometido principal de elaborar las bases
para una Ley Nacional del Deporte.
F) Instalamos en la órbita del Ministerio del
Interior la Comisión Honoraria Asesora para la Seguridad en el Deporte.
G) Impulsamos la Ley de Prevención de la Violencia en
los Espectáculos Deportivos, Ley Nº 17951, promulgada el 8 de enero de
este año.
H) Propondremos al Congreso Nacional de Intendentes a
acordar mecanismos de cooperación para recuperar, recuperar, mantener y
gestionar, esa fantástica red de plazas de deportes tejidas precisamente
por la Comisión Nacional de Educación Física a mediados del siglo
pasado. Y, en breve, en breve, remitiremos al Poder Legislativo los
proyectos de ley que reglamentan la profesión de entrenador deportivo y
profesor de Educación Física.
J) Y agradezco presten especial atención a este
punto, también a la brevedad remitiremos al Poder Legislativo un
brevísimo, muy breve proyecto de ley, tan breve que apenas tiene 18
palabras, que leo a continuación: "Declárase obligatoria la enseñanza de
la educación física en las escuelas de Enseñanza Primaria de todo el
país".
Apenas dieciocho palabras, pero cuanto dicen esas
palabras. Recuerdan lo que afirmamos anteriormente, apenas la mitad de
los alumnos que concurren a las Escuelas Públicas de todo el país,
tienen hoy la oportunidad de recibir educación física y practicar
deportes. Para que esa oportunidad se universalice, para que la igualdad
también se exprese en el derecho de nuestros niños y niñas al bienestar
físico y al deporte, habrá que destinar recursos financieros y
materiales y habrá que capacitar recursos humanos, entre ellos: maestros
rurales, pues nuestros escolares del campo también tienen derecho a la
educación física y al deporte.
Y el gobierno destinará los recursos económicos
necesarios para llevar adelante esta propuesta. Y lo haremos con
convicción pero también con alegría porque lejos de significar un gasto
para la sociedad, será una excelente inversión para todos los uruguayos,
que tanto reclamamos con justicia y con justeza seguridad personal, pero
que esta no solo se arregla con medidas de protección, de cuidado, de
represión, sino también que la seguridad personal comienza con la
instrucción de principios; de valores y de educación en los niños, en
todos los niveles y fundamentalmente en el deporte. Esa maravillosa
arma, esa maravillosa herramienta que tenemos para llegar con alegría,
con la alegría del juego, pero de la disciplina a todos nuestros niños y
niñas del país.
Amigas y amigos, como Presidente de la República,
como médico, como persona vinculada al deporte y como ser humano, tengo
recuerdos como todos ustedes y tengo sueños, como todos ustedes.
Entonces, los recuerdos de mi niñez y juventud, están
los viejos campeonatos de fútbol organizados por el oratorio festivo del
Colegio la Divina Providencia de los Padres Salesianos allá en La Teja.
Está el boxeo que practicáramos con el profesor
Liberto Corney en la Asociación Cristina de Jóvenes de La Teja, y la
participación en algunos campeonatos escolares, y liceales de ese
deporte en Montevideo.
Recuerdo con emoción cuando pasaba la vuelta ciclista
o cuando la escuchábamos; recuerdo, quien no va a recordar a Atilio
Francois; a Virgilio Pereyra; a Walter Moyano;, a Vid Cencic, y entre
ellos, y en ellos a tantos otos. Recuerdo los festejos de Maracaná. La
medalla de bronce en básquetbol, en las olimpiadas de Helsinski. La
gallardía y guapeza de Dogomar Martínez ante Archie Moore. Los relatos
radiales de Carlos Solé. Los enérgicos arbitrajes del "turco" marino en
fútbol y de don Julio Sánchez Padilla en básquetbol.
También recuerdo la docencia del profesor Alberto
Langlade en el campo de la salud deportiva, y las enseñanzas que
recibiéramos de dirigentes deportivos en fútbol, no puedo resistir la
tentación de nombrar a algunos de ellos, quizás me olvide de otros, pero
en ellos en los que voy a nombrar están todos incluidos. Cuando
trabajáramos juntos con Washington Cataldi; con Dante Iocco; con el Ing.
Héctor del Campo; con don Donato Grieco; con Di Giovanni; con don Bauzá;
con Eduardo Arzuaga entre otros, con quienes reitero tuve el privilegio
de trabajar. Ese es el recuerdo.
Y entre los sueños está en que las nuevas y futuras
generaciones de uruguayos y uruguayas tengan la oportunidad de jugar; de
aprender; de compartir; de reír, de llorar, ¡en fin! vivir lo que yo y
seguramente mucho de ustedes vivimos con el deporte.
Sé que ese sueño puede convertirse en realidad si
todos sin excepciones, cada uno desde su propia identidad trabajamos
coordinadamente con ese objetivo, haciendo cada uno lo que le compete y
corresponde, pero haciéndolo bien o por lo menos intentando hacer lo
mejor posible, sin egoísmos, ni intereses menores, con eficiencia y
transparencia, porque la educación física y el deporte no son privilegio
de nadie, sino derecho de todos y porque el Uruguay y su gente, el
Uruguay y su gente, todos los ciudadanos y ciudadanas de este país, son
infinitamente más importante que cualquier individualidad o cualquier
cargo por importante que sea.
Y si esta reunión, ayuda a que todos, empezando por
el Presidente de la República, actuemos en consecuencia, el hecho que
hoy recordamos será más allá de sus 95 años, de estos 95 años trabajando
por la educación física y el deporte nacional de nuestra querida y vieja
Comisión Nacional de Educación Física, además de festejar un
aniversario, este estará cargado de futuro. Muchas gracias. |