20/09/06


INFRAESTRUCTURA QUE SOLVENTE EMPRENDIMIENTOS PRODUCTIVOS
El Intendente de Paysandú, Julio Pintos, analizó detalladamente los emprendimientos no sólo de su departamento sino de una región que posee diversas alternativas productivas que reactivan el país, generando puestos de trabajo, y una importante demanda de infraestructura; "tenemos la necesidad de celebrar convenios y asociarnos con los Ministerios para que ese trabajo local -que es parte de la estrategia de desarrollo del Gobierno- sea contemplado en el marco de sus diversos programas", dijo.

Haciendo un repaso de estos emprendimientos, Pintos indicó que quedó instalado en Guichón, Quebracho y Paysandú capacidades locales para trabajar con los vecinos, para mejorar sus emprendimientos, sus pequeñas empresas, microempresas, sus ideas y así concretarlas con el apoyo del Ministerio de Transporte, la Organización Internacional del Trabajo, la cooperación italiana y el proyecto Redel. Ahora se suma el LATU como socio, que analiza y propondrá acciones concretas para la consolidación de estos emprendimientos.

El proyecto forestal le dará a la región un volumen físico de mercaderías necesarias para ser rentables y posibles las inversiones en infraestructura. Hay 200 mil hectáreas forestadas entre Salto, Paysandú, Río Negro y Soriano, y se prevé un impacto en los próximos cuatro años en la masa laboral; de 3.680 personas ocupadas se pasará a 6.700 dentro de tres años.

En lo que respecta al transporte se estima que para abastecer el proyecto forestal harán falta 146 mil viajes de camiones. Eso significa que en Paysandú, Río Negro y Soriano durante 20 horas circularán 20 camiones vacíos más 20 camiones cargados por hora. De esto surge que harán falta 24 millones y medio de litros de gasoil que se deberán agregar a la demanda actual, lo que indica claramente que son necesarias inversiones en infraestructura, de las cuales se beneficiará todo el sistema agroexportador especialmente el citrícola y el de granos.

También hay una nueva producción en la región: los arándanos. La producción de arándano con inversión local, nacional y regional está previendo una fuerte necesidad de mano de obra, que ayudará a la estabilidad laboral y favorecerá el asentamiento de los trabajadores rurales en el medio rural.

El país alcanzará ingresos por exportación de fruta para el año 2007 por 2.100.000 dólares, mientras que para el 2012 se estima para la región un ingreso por venta de fruta de 15 millones de dólares.

En la región de Paysandú, Salto y Artigas estas empresas tienen una estimación de inversiones totales para el 2010 de 25 millones de dólares.

Por otra parte, Pintos dijo que desde el punto de vista agroindustrial, el cultivo de caña de azúcar contará para la zafra 2007, con 6.000 hectáreas partiendo de 3.200 en 2005 y 10.000 para el 2009.

Se viene instrumentando un sistema de financiamiento al agro por parte de ALUR para complementar el fondo de reconversión azucarero. Se evidencia la confianza de Bella Unión en este proyecto.

La restauración del puerto de Paysandú es otro tema que analizó el Intendente: la Administración Nacional de Puertos tiene previsto invertir 500 mil dólares en acondicionamiento de muros y compra de grúas; por allí saldrá parte de la producción de cemento portland, y producción hortifrutícola de Salto y Paysandú con el consiguiente abaratamiento de los precios de los fletes.

ANCAP tiene previsto construir un muelle de atraque e instalaciones conexas para asegurar el abastecimiento de combustible vía fluvial en el norte del país durante todo el año y sacar el alcohol carburante que se produce en Bella Unión. "Esto serán decenas de puestos de trabajo de alto componente técnico y obrero durante las obras de construcción, y durante su operativa permanente", dijo Pintos.

Para que estas apuestas productivas se concreten necesitan obras que las hagan viables, por ello "se debe acondicionar las vías férreas entre Bella Unión y Paysandú, así como entre la cementera de ANCAP y el puerto de Paysandú. También resulta clave asegurar la navegabilidad del Río Uruguay", agregó.

PALABRAS DEL INTENDENTE DE PAYSANDÚ, JULIO PINTOS, EN LA SESIÓN DEL CONSEJO DE MINISTRO DE VILLA QUEBRACHO

INTENDENTE PINTOS: Muy buenos días a todas y a todos. Señor Presidente de la República, señoras Ministras, Ministros, Directores y Directoras, tanto de los Ministerios como de las Intendencias, representantes de las empresas del Estado, autoridades civiles y militares, señores colegas Intendentes, muchas gracias por su presencia, señores legisladores, estimados y estimadas.

Agradecemos la presencia, el entusiasmo y el compromiso que han demostrado con los temas que este Consejo pretende abordar. es un honor, pero básicamente una gran alegría tener en nuestro departamento una sesión del Consejo de Ministros y tanta gente con expectativas de poder acercarse a ellos. Descentralización, regionalización e infraestructura: si bien estos temas los abordaré en un momento, quiero reflexionar y compartir con ustedes el marco en el que desarrolla este encuentro.

Este Consejo de Ministros tiene tres aspectos que nos interesa destacar: se produce en el marco de la “2ª. Semana del Ideario Artiguista y “12º. Encuentro con el Patriarca”, que lleva como título “Artigas y la democracia”. Con estos eventos, nuestro gobierno departamental quiere contribuir a esa visión necesariamente integradora, imprescindible para construir un modelo de nación que nos abarque; nos involucre y nos comprometa, que nos permita trabajar por el desarrollo de mediano y largo plazo y  que trascienda gobiernos y partidos. Todos, trabajadores y empresarios; comerciantes y productores rurales; cooperativistas, pequeñas y medianas empresas; educadores y educadoras; hombres y mujeres: todos lo que necesitan creer, necesitan confiar y tener esperanza y objetivo por los cuales luchar.

El proyecto artiguista fue en esencia un modelo integrador en lo cultural, lo social, lo político y lo territorial. La concreción temprana de ideas integradoras, de regionalización en la independencia por las que seguimos trabajando dura y empecinadamente para construirla a pesar de los complejos tiempos internacionales que nos ha tocado transitar. Estamos en deuda con el ideario de Artigas, sin duda, y ser consciente de ello nos obliga a redoblar. Dificultades habrá y seguirá habiendo, pero nunca dudamos de que lo mejor y más valioso que podemos dejar a nuestros pueblos será un modelo latinoamericano integrado, para enfrentar los bloques de un mundo globalizado.

Sin dudas que el valor de Artigas daba a la democracia se ve reflejada en este método de trabajo del Gobierno Nacional, de reunir el Consejo de Ministros con la gente. Así de horizontal era la actitud de nuestro Prócer en la relación con su pueblo: uno más en los fogones, dialogando, estrechando vínculos y, sobretodo, conociendo y recogiendo la opinión de la gente.

Estos Ministros que vienen recorriendo su país no serán seguramente los mismos al día siguiente de este Consejo. Esta es la manera de mantener la cercanía con la realidad, alejamiento al que siempre estamos expuestos por la dinámica del Gobierno, y sé que esto es una constante preocupación de nuestro compañero Presidente.

En segundo lugar, recordar que este año se cumplen 120 años de la llamada resolución del Quebracho, una página un tanto olvidada de nuestra historia pero que vale la pena evocar. Con estas tierras, en estos suelos que estamos pisando, en 1886 se produjo un lanzamiento contra el gobierno autoritario de Máximo Santos. Participaron, blancos, colorados católicos, jóvenes universitarios y entre ellos tres hombres que luego serían Presidentes de la República: Batlle y Ordóñez, Claudio Williman y Juan Campisteguy. Fue un levantamiento nacional y popular que terminó con una etapa militarista y abrió paso a un proceso civil y democrático. A pesar de haber sido derrotados y a pesar de la muerte de cien revolucionarios -como siempre sucede cuando las causas son justas- esa sangre no fue derramada en vano. Ocho meses después renuncia el dictador Santos. Bien vale la pena recordar estos episodios de lucha democrática cuando nuestro país se abre paso a la verdad y a partir de hay ella, a la memoria y la justicia.

El tercer aspecto -para nosotros central en este presente y pensando en el futuro- es  presentar a nuestras máximas autoridades de gobierno, una visión local en el conocimiento de la realidad de los que vivimos aquí para entusiasmar, comprender y visualizar la oportunidad que tenemos. La oportunidad que tenemos como gobierno para, en este quinquenio, construir un proyecto de desarrollo regional, para continuar avanzando en el eje programático del país productivo, con un pie en el pasado, como es el glorioso saladero Guaviyú, cuyas empecinadas ruinas se mantienen a pocos kilómetros de aquí y fue en su momento la industria de la carne más importante del mundo, y otro pie en el futuro para que podamos juntos y como región, encarar una nueva etapa del desarrollo.

Y digo continuar avanzando en el país productivo porque se ha hecho mucho desde el comienzo mismo del gobierno. El país productivo se puso en marcha con las políticas salariales, con los derechos laborales, con la formalización del empleo que se refleja en la gestión del BPS, tanto en el aumento de afiliados como en la recuperación de la pasividades más bajas, las menores tasas de desocupación de los últimos diez años, la conducción de la política económica, el manejo del endeudamiento externo, la desdolarización externa e interna de nuestra economía, la instalación del compromiso nacional por el empleo y las responsabilidades con trabajadores y empresarios.

El avance del país productivo también es la certeza y la previsibilidad de nuestras variables internas, es el tratamiento responsable del endeudamiento interno, grave problema que afecta a muchas familias y en el cual todavía  hay mucho por hacer en la proyección comercial de nuestro país a nuevos mercados, en la nueva forma de trabajo de nuestras embajadas en el exterior y en el trato digno y humano a los protagonistas del Plan de Emergencia.

Se han hecho incluso muchas cosas más y algunas a veces ni las conocemos. Pero este proyecto de país impulsado por un Gobierno de cambio, por un Gobierno que no está ni vino a hacer la plancha, todavía precisa reformas fundamentales; son imprescindibles para darles sostén y permanencia en el tiempo y romper con el crecimiento y  crisis, donde unos pocos ganan y la mayoría pierde, para que la única variable de ajuste en la economía no siga siendo el dólar que siempre termina perjudicando también a las mayorías.

Tenemos que cumplir estas reformas, la tributaria, la de la educación, la de la salud y, sin duda, la reforma del Estado. Reformas que se promueven, además, con un alto componente democrático de participación y de debate, porque es sustancial que se construyan con amplios consensos para que todas las uruguayas y uruguayos tengamos un proyecto de nación.

Pero además de las reformas que mencioné existe una menos nombrada pero tan necesaria como las otras: la reforma del territorio y para poder viabilizar esa reforma contamos con herramientas que aún tenemos que potenciar, efectivizar y poner en práctica.

La descentralización es una de ellas. La inversión dirigida a la infraestructura es otra, y para hablar de esos temas es que estamos aquí.

Un país productivo no se construye sólo a partir de sus riquezas naturales o del desarrollo de las preexistencias en infraestructura: apostar a eso sería profundizar en las inequidades que hace 170 años se vienen construyendo con la macrocefalia política, administrativa, comercial y educativa.

La construcción del territorio es una construcción política. Un gobierno progresista nacional y los gobiernos locales deben apostar a romper las inequidades, deben visualizarlas distintas regiones del país como oportunidades únicas e irrepetibles para apostar al desarrollo. Es como los hijos: como padres reconocemos en cada uno de nuestros hijos distintas habilidades, capacidades y hasta dificultades para insertarse en la vida. Por eso no dejamos al menos dotado al un lado ni ponemos todos los recursos de la familia en el más agraciado. Tratamos de administrar con equilibrio nuestras posibilidades de promoción, de contención y de afecto para que sean personas plenas según sus propias habilidades.

Así son las regiones y su territorio: como una familia y sus hijos. Nosotros estamos trabajando en la región del litoral y también por la región del norte del Río Negro y digo región porque por suerte estamos marchando hacia una nueva forma de hacer política y de gobernar. No nos conduce a nada que los intendentes nos diputemos una inversión. Lo importante es que se haga en el mejor lugar de acuerdo a las variables del proyecto. 

Las fronteras políticas de nuestros departamentos son perforadas y se desvanecen cuando miramos el territorio, la cuenca lechera, el río como eje integrador, la región termal, el basalto creador, esa gran madre natural de donde emergen nuestros terneros para el proyecto ganadero, el basalto ovino, las zonas agrícolas ganaderas, las plantaciones de cítricos y arándanos, el proyecto forestal de la industria de la madera y de la industria de la celulosa.

Todo esto representa un enorme activo de recursos naturales sobre los cuales nuestra gente, nuestras vecinas y vecinos de todos los días que han resistido porfiada y empecinadamente crisis y dificultades, siguen dispuestos a apostar a este país, a este proyecto y a esta nación. No nos conduce a nada tampoco que los ministerios, los gobiernos departamentales, las empresas públicas no armonicen sus inversiones, y por suerte estamos gestionando el Estado de otra manera. Estamos coordinando, estamos planificando y estamos usando más y mejor los recursos públicos para desatar una sinergia que más que positiva es exponencial.

Se trabaja con una fuerte visión descentralizadora, que no es desconcentrar sino generar institucionalidad propia, capacidades locales que nos permitan afianzar nuestro propio desarrollo. Se trata crear verdaderas instituciones descentralizadas y no meras sucursales de empresas con sede en Montevideo.

¿Y cuáles son esas cosas que están sucediendo y las que van a suceder en el 2007 y en el 2008 en nuestra región? Sin duda muchas del punto de vista de una región que tiene ya importantes agroindustrias, que producen 200 millones de dólares de exportación y casi 10 mil puestos de trabajo. Que se verán fortalecidas con más inversiones debido al crecimiento de nuestros mercados internacionales en citrus, en granos, cueros, lácteos, carnes y textiles.

Pero para que se consoliden estas inversiones en el sector primario, secundario y terciario se necesita imperiosamente mejorar también su competitividad.

La competitividad regional es para nosotros una de las claves y para ello hemos puesto el foco en un problema que es de rápido impacto sobre los resultados y que si mejoramos su eficiencia generará una importante masa de recursos económicos que podrán volcarse a nuevas inversiones, a incorporar más tecnología, a mejoras de los salarios, etcétera, tanto en lo nacional como en la interna de cada empresa.

Sabemos que la competitividad tiene que ver también con otros factores, por ejemplo la investigación y la incorporación de tecnología, pero estas cuestiones llevan su tiempo. Sin embargo lo que podamos hacer en infraestructura y las vinculadas al tema de transporte son inmediatas en su beneficios.

Por ejemplo, los beneficios se verán en los 60 millones de dólares que gasta el Estado en el mantenimiento de las rutas actuales. También se verán, por otro lado, en la reducción de costos de ANCAP para el traslado de combustible a su centro de distribución en Paysandú, así como un menor consumo de gasoil que permita solucionar a ANCAP el desequilibrio entre la producción de nafta y gasoil.

Para las empresas, el flete ha pasado a ser un costo que define inversiones y actividades y necesitamos bajarlo para apoyar este sector.

Nuestra región ha quedado prisionera de políticas cuyo único eje para la salida de la producción es la ruta 3. Se han despreciado sus puertos, sus ríos y sus trenes. Por eso estamos proponiendo planes de infraestructura y coordinando acciones con el Ministerio de Transporte, Relaciones Exteriores, CARU, Administración Nacional de Puertos, AFE y ANCAP.

Un uso inteligente de los diferentes modos de transporte mejorará la competitividad y ahorrará recursos. También las condiciones de circulación en las rutas nacionales con menores riesgos de vida humanas. Hablábamos anoche con el Presidente de la importante circulación de camiones que hay en Ruta 3 y los riesgos que eso significa para nuestra población y esto va a crecer mucho más.

A las ya tradicionales actividades de esta zona se suma, sin duda, el proyecto forestal y dentro de él, las inversiones tanto en celulosa, como el desarrollo de la industria vinculada al sector de la madera, aserraderos, fábricas de muebles o partes de muebles, viviendas de madera, exportación de madera. Estos emprendimientos, que nuestros empresarios están impulsando, son sin duda los que hay que ayudar con tecnología, con capacitación y con orientación comercial para lograr su consolidación.

Veíamos en el foro de planificación reciente y oportunamente realizado por OPP que a este crecimiento de lo macroeconómico era necesario transformarlo en desarrollo y para ello es necesario dotarlo de un contenido microeconómico, territorial y local. Pero eso no se hace solo. No es un derrame: Necesariamente en el ámbito de nuestro gobierno tienen que existir políticas activas, focalizadas y direccionadas para que nuestro pueblo aproveche esas oportunidades. Si no, pasarán de largo. Un ejemplo de esto es lo que estamos desarrollando a nivel departamental con el Ministerio de Transporte, la Organización Internacional del Trabajo, la cooperación italiana y el proyecto Redel, que por decisión de este gobierno departamental ha dejado instalado en Guichón, Quebracho y Paysandú capacidades locales para trabajar con los vecinos, para mejorar sus emprendimientos, sus pequeñas empresas, sus microempresas, sus ideas, lograr concretarlas en realidad. Hemos sumado como socio al  LATU, que analiza y propondrá acciones concretas para la consolidación de estos emprendimientos y  esas acciones que podrán ser de asistencia técnica, de gestión, de una pequeña  inversión, de capacitación, tenemos necesidad de celebrar convenios y de asociarnos con los Ministerios para que ese trabajo local que es parte de la estrategia de desarrollo del Gobierno sea contemplado en el marco de sus diversos programas, PAPYME’s, DINAPYMES, Programas de Conglomerados, Microfinanzas, Proyecto ganadero, Producción responsable, Uruguay Rural, Fondos BID, entre otros.

Tenemos una importante masa de recursos en  los programas ministeriales que necesita una rápida ejecución. Debemos detectar las dificultades, ayudar a las regiones que no tienen capacidad de presentar proyectos pero sí ideas que pueden ser formalizadas, vencer los temores propios de quienes son responsables de los fondos públicos Nuestra gente nos podrá entender si cometer algunos errores pero no  nos perdonará  que nos inmovilicemos y no ejecutemos estos fondos que tenemos disponibles para el desarrollo.

El proyecto forestal le va a dar a la región un volumen físico de mercaderías necesarias para ser rentables y posibles las inversiones en infraestructura. Doscientas mil hectáreas forestadas hay entre Salto, Paysandú, Río Negro y Soriano. Se está previendo un impacto en los próximos cuatro años en la masa laboral. De 3.680 personas ocupadas pasaremos a 6.700 personas ocupadas dentro de tres años. ¿Pero qué pasará con el transporte? Como las  mayores cargas son las forestales y las cítricas, tenemos los  datos del diseño de alrededor del 90% de  los emprendimientos.

De las cifras que se disponen surge que por lo menos 214 kilómetros de caminos vecinales de Paysandú irán hacia la carretera 60 mil viajes de camiones o sea  seis camiones yendo o viniendo por hora en el pico de máxima cosecha. Sin embargo las cifras más impactantes es que para abastecer el proyecto forestal harán  falta 146 mil viajes de camiones. Eso significa que Paysandú, Río Negro y Soriano durante  20 horas circularán 20 camiones vacíos más 20 camiones cargados, por hora. Surge del estudio que para el desarrollo del programa forestal  o sea la cosecha, el transporte, el movimiento  de chips dentro de las plantas, la replantación de 20 mil hectáreas de bosques que se industrializarán por año, harán falta 24  millones y medio de litros de gas oil que se deberán agregar a la demanda actual, o sea,  siete viajes extras del Ancap IX. Esto indica claramente que son necesarias estas inversiones en infraestructura, de las cuales se beneficiará todo el sistema agroexportador especialmente  el citrícola y el de granos.

También hay una nueva producción en la región: los arándanos. La producción de arándano con inversión local, nacional y regional está previendo una fuerte necesidad de mano de obra, a contraestación de la naranja, que ayudará a la estabilidad laboral y favorecerá el asentamiento de los trabajadores rurales en el medio rural.  En Paysandú hoy hay 102 hectáreas plantadas y la proyección para el año que viene 173  y para el 2010 , 270. La mano de obra permanente ocupada, 110 personas y la zafral 1000. La mano de obra proyectada son 200 personas  para el año que viene y 3.000 para la cosecha el año que viene. Habrá ingresos para el país por exportación de fruta para el año 2007, de 2 millones 100 mil  dólares y para el 2012 se estima para la región un ingreso por venta de fruta de 15 millones de dólares. En la región de Paysandú, Salto y Artigas estas empresas están invirtiendo y su estimación de inversiones totales para el 2010 será de 25 millones de dólares y como decía hoy, 30 millones de dólares de exportación prevista para nuestro país. La mano de obra zafral proyectada para el 2012, 6.500 personas en octubre, noviembre y hasta el 15 de diciembre. El trabajador zafral en lugar de seis meses de zafra, tendrá  asegurado ocho meses y medio aumentando un 30 % sus ingresos anuales, pero al llegar a más de 150 jornales trabajados por año también tendrá derecho al seguro de desempleo rural.

Un caso concreto es hoy Chapicuy, aquí cerquita, al norte. donde no hay desocupación, estamos planteando la construcción de nuevas viviendas de MEVIR para asentar los trabajadores, realización de un Jardín de Infantes con la Intendencia y los empresarios, para que las mujeres puedan trabajar sin desatender a sus hijos.

Quiero referirme ahora a las acciones que tiene prevista ANCAP y que estamos coordinando en todo el Gobierno. Por supuesto, está  Bella Unión con su polo de desarrollo de biocombustibles, ese proyecto forma parte de la visión estratégica del Gobierno nacional, respaldada y potenciada por ANCAP, desarrollo productivo, trabajo nacional, seguridad de abastecimiento y diversificación de la matriz energética.

El Poder Ejecutivo ha presentado un proyecto de Ley al Parlamento sobre agro-combustibles, que dará el marco a estos propósitos.

La mejora de los rendimientos agrícolas e industriales, la inclusión de pequeños productores y la ocupación de mano de obra en puestos de trabajo en condiciones dignas.

Del punto de vista agro-industrial, el cultivo de caña contará para la zafra 2007, con 6.000 hectáreas partiendo de 3.200 en 2005 y 10.000 para el 2009. Se contrató con cooperativas de mujeres, que se organizaron en la zona para la preparación de nuevos uniformes de los 400 trabajadores del ingenio y se las contrató para los lavados de los big bags del azúcar. Así  genera trabajo en la zona con tareas que antes se realizaban en Montevideo, se instrumenta un sistema de financiamiento al agro por parte de ALUR para complementar el fondo de reconversión azucarero, se arriendan 500 hectáreas de tierra por diez años dentro del sistema de riego, coordinando con el Instituto de Colonización la instalación de 50 pequeños productores con 20  hectáreas cada uno, se arriendan 2.000 hectáreas que ALUR gerenciará directamente para mejorar la seguridad del abastecimiento y medición de costos y productividad. De 120 productores de caña que se mantenían vivos actualmente hay más de 300, lo que demuestra la confianza de Bella Unión en este proyecto. En las próximas semanas se licitará además la construcción de la destilería y sus instalaciones conexas para la elaboración de alcohol junto al ingenio azucarero. La inversión estimada es de 7 millones de dólares suma que coincide con el prepago de alcohol realizado por PEDEVESA. Se están realizando investigaciones junto con ANCAP, Universidad de la República, y el INIA, para investigar el desarrollo de distintos cultivos en varias partes del país. En Salto, ALUR  ha arrendado tierras para instalar un semillero de caña, ALUR negocia además con la Corporación para el Desarrollo el abastecimiento de leña para el ingenio de deforestaciones de la Corporación. En Paysandú, la restauración del puerto: la Administración Nacional de Puertos tiene previsto invertir 500 mil dólares en acondicionamiento de muros y compra de grúas, por allí saldrá parte de la producción de cemento portland, y producción hortifrutícola de Salto y Paysandú con el consiguiente abaratamiento de los precios de los fletes.

ANCAP  tiene previsto construir un muelle de atraque e instalaciones conexas para asegurar el abastecimiento de combustible vía fluvial en el norte del país durante todo el año y sacar el alcohol carburante que se produce en Bella Unión. Esto serán decenas de puestos de trabajo de alto componente técnico y obrero durante las obras de construcción, y durante su operativa permanente. Se está coordinando con la Administración Nacional de Puertos, CARU, ANCAP y la Intendencia de Paysandú para encontrar la mejor solución que contemple los objetivos involucrados. En cemento portland, en la fábrica de Paysandú se llamó  a licitación para ampliar la capacidad de producción cementera, que pasará de 290 a 350 mil toneladas al año con el consumo energético, ganando en eficiencia en el costo de producción por tonelada. La inversión será del entorno de entre 3 y 5 millones de dólares. Cava S. A acaba de anunciar en Paysandú  el 13 de septiembre,  junto a la intendencia, y a Colonización y el asesoramiento además de la Facultad de Agronomía, y se ha convocado a los pequeños productores cercanos a Paysandú, Quebracho, Porvenir y San Javier, para producir sorgo, con destino a la fabricación de alcoholes en unas 1.200 hectáreas. El objetivo es  sustituir el alcohol importado por materia prima nacional, plena ocupación de la capacidad  industrial instalada.

En una primera etapa, esto supone inversiones de 300 mil dólares para las actividades agrícolas y 200 mil dólares para la planta industrial destinados al cuidado del medio ambiente, incendios y recepción de los granos.

Infraestructura: sin duda alguna que para estas apuestas productivas, para que estas apuestas productivas tengan posibilidades de éxito, necesitan obras que las hagan viables. Resulta claro que se debe acondicionar las vías férreas entre Bella Unión y Paysandú, así como entre la cementera de ANCAP y el puerto de Paysandú. También resulta clave asegurar la navegabilidad del Río Uruguay, en este sentido, Cancillería ha reunido un grupo de trabajo, donde participan Relaciones Exteriores; Transporte y Obras Públicas; Hidrografía, CARU; Administración Nacional de Puertos y ANCAP, para abrir el Paso Casablanca, en aguas jurisdiccionales uruguayas, lo que aseguraría la navegabilidad de buques de hasta quince pies de calado en el Puerto de Paysandú. La región se transformará en un nuevo centro logístico, pensando no solamente en nosotros sino en ampliar cada vez más al norte la frontera productiva. Por ejemplo, el Salto agrícola, en Salto se ha dejado de producir sorgo por los problemas de fletes, tenemos que llegar al corazón del MERCOSUR, a través del eje ferroviario que pasa por Salto Grande.

La apertura del Canal Casablanca es una obra necesaria. No es un dragado sino abrir un canal con alto poder autodragante en jurisdicción uruguaya. Todas las gestiones ya están aprobadas en CARU, y hemos formado una comisión técnica, para que informe sobre sus costos. Contamos además en Paysandú, con un preproyecto de inversión para un nuevo puerto en Casablanca.

Hay varios proyectos regionales, de los  que voy a mencionar solamente los titulares: desarrollo de la cuenca lechera, estamos trabajando la cuenca norte, Salto, Río Negro y Paysandú, en coordinación con DIPRODE, para fortalecer al sector productivo; la infraestructura en caminos; la quesería artesanal y el apoyo a las inversiones previstas en el sector industrial.

El proyecto del basalto, se promueve un área fundamental donde se producen los terneros para nuestro país. Tenemos que articular con Ganadería y los gobiernos departamentales.           

Es un sector que necesita apoyos tecnológicos simples, manejo de pasturas aguadas, prever sequías con planes de tajamares y pozos y aplicar el Decreto del Ministerio de Ganadería para forestar con nuevas especies y dotar de sombra al ganado. También hay que fortalecer el sector ovino y necesitamos contar un frigorífico para  recomponer, tanto la cadena comercial exportadora como proveer de carne barata al consumo interno. En energía renovable hay varios proyectos presentados con biomasa forestal, MASTERLIC, un aserradero de ENCE, en Algorta un proyecto de quince millones de dólares que se está asentando donde es la Caja Notarial, Azucarlito y varios aserraderos, pequeños y medianos que se están juntando para trabajar también la generación de energía con biomasa forestal. La descentralización universitaria, antes decía que la competitividad tiene que ver con otros factores como por ejemplo la investigación, en esto también estamos trabajando, este proyecto necesita un soporte como conocimiento generándolos y promoviéndolos, necesita una Universidad de la República y la enseñanza técnica y terciaria, asentadas en el propio territorio de la región apostando juntos a los proyectos descentralizados. La Universidad en el interior además de las tres funciones clásicas de enseñanza, investigación y extensión que dicta su Ley Orgánica, tiene dos funciones más ineludibles en el marco de un país productivo como el que estamos construyendo, ser promotora del desarrollo local y la de promover una construcción diferente del territorio, más equitativa y más integradora. Una herramienta de desarrollo local porque su existencia está atada en la resolución de los problemas complejos y como tal articula con los distintos actores de la sociedad  en un plano de proximidad que no puede darse en Montevideo. ¿Cómo se involucra con problemas concretos de la sociedad local? la devolución de esos conocimientos es mucho más rápida que cuando se hace desde la metrópolis,, incluso el enfoque interdisciplinario tiene otras ventajas comparativas, es más integral más periódica y aplicada, la educación terciaria radicada en el interior mejora la capacitación permanente y es dinamizadora del producto bruto interno departamental, Salto  y  Paysandú                                                                            

requieren transformarse en un importante nodo universitario que debe ser fortalecido con una mirada de equidad en el territorio. La mayor parte de los egresados de bachillerato son de las escuelas secundarias del interior. Del sector más pudiente un 36% accede a la Universidad y de los más pobres de Montevideo un 43%, quiere decir que la inequidad geográfica a veces es más importante que la económica.

Estamos apostando a formaciones de distinta naturaleza y ampliando la oferta. Hemos tenido una rápida y formidable respuesta de UTU y de la Universidad de la República a una demanda local concreta, ocho carreras completas podrán cursarse desde el año que viene en Paysandú: Bibliotecología, Archivología, Tecnólogo Mecánico, Tecnólogo Químico, Diseño Industrial, Tecnicatura en Bellas Artes, Técnico Histológico y Técnico en Radioterapia.

Y esto porque ahora es tiempo de plantear laboratorios y de plantear polos tecnológicos con esa potencialidad única que da la proximidad y la demanda concreta.

En el turismo estamos trabajando en la región, las Intendencias en tres ejes fundamentales. El corredor o región termal con acciones de promoción e inversión, el turismo de sol y playa teniendo como eje el Río Uruguay y el turismo de congresos aprovechando la  importante capacidad hotelera de Salto y la tradición de Paysandú en esta materia.

En infraestructura municipal, en Paysandú estamos dotando de saneamiento, agua potable, caminería al Parque Industrial. Estamos balizando el aeropuerto en conjunto con el Ministerio de Defensa. Estamos haciendo una fuerte inversión para dotar las termas de Guaviyú de saneamiento, se han realizado 1.400 kilómetros de caminería rural.

En Artigas al proyecto alcoholero se suma el importante proyecto minero de explotación de amatistas y ágatas con apoyo del programa de conglomerados, en todas sus etapas, en la extracción, en el transporte, en las artesanías y en la comercialización.

Se están electrificando las canteras con aportes también del Gobierno Municipal, para mejorar la rentabilidad de las mismas.

Hoy hay 1.000 puestos de trabajo directos e indirectos que se pueden aumentar rápidamente en un proceso de inversión.

También el sector arrocero ha cobrado un fuerte estímulo en Artigas, tanto en áreas plantadas como en producción y esas dos actividades necesitarán -sin duda- modos de transporte usados inteligentemente para que bajen sus costos.

Salto necesita continuar consolidando las producciones agropecuarias, está realizando un fuerte impulso en la caminería rural con 1.000 kilómetros y más de 800 alcantarillas para la mejora en los caminos, se comienza la licitación de un nuevo pozo termal y la construcción de otra piscina cerrada en las Termas de Arapey, se está licitando un frigorífico municipal con la expectativa de tender un Frigorífico Vino para la región.

Río Negro cuenta también con su parque industrial, con inversiones en aserraderos tanto para la madera como para la producción de energía y también este proyecto de la  forestal hacia la industria de la madera está desarrollando fuertes inversiones en Tacuarembó y en Rivera.

Para finalizar estos proyectos implican sin duda una gran afluencia de gente a la zona de Fray Bentos hasta Bella Unión, tenemos que lograr que se queden, que no vuelvan a vivir con sus padres o con sus suegros, que no vuelvan al asentamiento al sur del país o que retornen a la búsqueda permanente de un empleo, este proyecto significará también desde el punto de vista poblacional, un proyecto descentralizador y para que esto sea posible tenemos por desafío impulsar las pequeñas y las medianas empresas para que se sumen a todos los servicios que demandará este programa, servicios al transporte en sus diferentes modos, a la cadena forestal, al desarrollo de la industria metal mecánica, a los talleres, a las gomerías , al comercio y al turismo, que deberá ser complementado con servicios públicos de salud, de educación y de vivienda y con más y mejores servicios municipales, esta es la realidad de nuestra región, estos son sus activos y sus fortalezas y de esta realidad surgen las responsabilidades que tenemos como Estado nacional de seguir dándole un fuerte impulso a estas ideas para que se puedan seguir concretando.

La obra pública es muy necesarias para crear condiciones de inversión y para el fortalecimiento y ampliación de las existentes, requiere un esfuerzo articulado de los Ministerios, la OPP y los gobiernos departamentales con los actores privados, estamos a tres meses del 20 de diciembre, día en que llegaremos a los dos años de Gobierno si consideramos que después hasta el 1º de marzo nos espera la obligada siesta del verano uruguayo. Serán  fundamentales las decisiones que tomemos en estos tres meses para comenzar a ejecutar el año que viene donde empezaremos a transitar el tercer año de Gobierno, tenemos un hermoso desafío, y un hermoso compromiso por delante, como dijo el Ministro Arana ayer en la Escuela Agraria, en la escuela de alternancia de Guaviyú, compartámoslo.

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