08/11/06


SISTEMA PREVISIONAL MIXTO PERMITE PROMOVER MERCADO DE CAPITALES
Al cumplirse diez años de la creación de la administradora de fondos República AFAP se realizó un seminario sobre la reforma previsional en el Uruguay. El Ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, expresó que constituyen “una primera experiencia” en materia de Seguridad Social.

 “Todavía queda mucho por hacer para seguir mejorando el funcionamiento de este sistema en beneficio de los trabajadores del país”, afirmó el secretario de Estado.

El seminario contó además con la presencia del Subsecretario de Trabajo y Seguridad Social, Jorge Bruni y el Presidente de Republica AFAP, Héctor Olmos.

Astori realizó un análisis de los diez años de gestión de República AFAP y del  sistema mixto, recordando que el mismo se inauguró con la ley 16.713 en el Uruguay, “buscando encarar defectos del sistema tradicional que estuvo vigente en el Uruguay durante tanto tiempo”.

Asimismo subrayó que “se buscó complementar aspectos positivos del sistema estatal tradicional colaborando en la solidaridad y el reparto con las virtudes del potencial que podía aportar un sistema individual obligatorio administrado profesionalmente”.

También señaló que el objetivo de ir mejorando las prestaciones y jubilaciones se ha venido logrando en lo que tiene que ver con el sistema de capitalización concretamente.

Astori indicó que los aportes netos representan menos del 40% de la cuenta individual de un afiliado a la administradora de fondos de ahorro provisional. También sostuvo que el sistema de capitalización ha sido “la principal novedad” que ha tenido el país para promover un mercado de capital a mediano y largo plazo.

Este ha permitido a las administradoras de fondos previsionales, en general, recorrer un  camino de apoyo a la inversión productiva del país.

A su turno, el Subsecretario Bruni reclamó hacer una revisión de este sistema, “que es un debate que la sociedad reclama”, aunque reconoció que es innegable el desarrollo que ha tenido este sistema.

Por su parte, Héctor Olmos sostuvo que entre los objetivos de República AFAP están proteger al individuo, combatir el informalismo y agregó que en sus diez años de existencia se ha demostrado que ambos sistemas se pueden complementar mediante una permanente vigilancia del Banco Central.

El seminario continuó con la presentación de expositores chilenos, que desarrollaron conceptos sobre la experiencia de ese país en este tema.

PALABRAS DEL MINISTRO DE ECONOMIA Y FINANZAS, DANILO ASTORI

MINISTRO ASTORI: Muchas gracias. Muy buenos días a todos. Realmente es un placer para mí estar compartiendo esta jornada de celebración de República AFAP. Al mismo tiempo supone una interesante jornada de trabajo compartida con la experiencia chilena, que a lo largo del tiempo ha venido acumulando interesantísimos elementos de juicio para considerar a propósito del funcionamiento de los sistemas de seguridad social en nuestro país.

Es una jornada que seguramente nos dejará a todos –y en particular a nosotros, los uruguayos– elementos de juicio importantes, a los efectos ya no sólo de evaluar la experiencia que ha venido transcurriendo hasta ahora sino, lo que es más importante, mirar hacia el futuro e incorporar –cosa que siempre puede hacerse y tenemos que tener la voluntad de hacerlo– mejoras en el trabajo que hemos venido desarrollando hasta ahora.

Obviamente: felicitaciones a República AFAP por estos primeros diez años de trayectoria en la seguridad social uruguaya. Diez años que son también los primeros diez años del llamado sistema mixto que inauguró –como bien decía el presidente Olmos – la ley 16.713 en el Uruguay, buscando encarar defectos importantísimos del sistema tradicional, que estuvo vigente en el Uruguay durante tanto tiempo, caracterizado por perforaciones conceptuales de todo tipo, desequilibrios financieros gravísimos, con un impacto fiscal importante sobre toda la sociedad uruguaya, y al mismo tiempo una incapacidad creciente para servir prestaciones dignas, y sobre todo consistentes, con los aportes y el esfuerzo que todos los trabajadores realizaban para acceder a esa prestación digna de retiro.

El enfoque conceptual central fue muy claro. Se buscó, en el país, complementar aspectos positivos del sistema estatal tradicional, basado en la solidaridad y el reparto, solidaridad intergeneracional y el reparto. Y por otra parte, las virtudes potenciales que podía aportar un sistema de ahorro individual obligatorio administrado profesionalmente.

Ese fue el intento que realizó el país, tratando de articular aspectos positivos de uno y otro esquema. Y esta es la experiencia que hemos venido teniendo durante estos diez años en los cuales, como bien decía el presidente Olmos también, República AFAP ha ejercido un liderazgo indiscutible.

A nosotros nos parece que de acuerdo con las informaciones disponibles al respecto, el objetivo de ir mejorando las prestaciones, las jubilaciones concretamente, se ha venido logrando por parte de esta área o segmento del sistema, que es el sistema de capitalización. Se ha calculado -en términos de promedios ponderados- que los aportes netos representan menos del 40% de la cuenta individual de un afiliado a una administradora de fondos de ahorro provisional, representando más del 60% restante, la rentabilidad de esa cuenta. Este es un dato muy importante, un dato muy importante para evaluar la contribución que el área de capitalización hace al funcionamiento de todo el sistema de seguridad social. Pero permítanme ahora hacer brevísimos comentarios desde el punto de vista macroeconómico.

La creación de este sistema de capitalización ha sido en estos diez años la principal novedad que ha tenido este país para promover un mercado de capitales a mediano y a largo plazo. No ha habido otra,  lo cual es un problema, vamos a entendernos, desde el punto de vista del Uruguay. Porque el Uruguay exhibe, en este terreno, una carencia también indiscutible.

La principal novedad, el principal aporte, lo que no es poco para el sistema de capitalización hacia la promoción de ese mercado de capitales a mediano y a largo plazo que necesita desesperadamente un país que quiere elevar sus tasas de inversión, sus volúmenes de inversión productiva, volúmenes que requieren de un apoyo financiero que a su vez el período de maduración del objetivo que queremos alcanzar exige un mercado de capitales a mediano y a largo plazo, la principal novedad ha sido ésta. Y eso debe ser tenido en cuenta cuando analizamos con criterio evaluatorio estos diez años y nos proyectamos hacia el futuro. Precisamente, el hecho de haber constituido esa novedad importante, ha permitido a las administradoras de fondos de ahorro provisional, en general y a República AFAP en particular, también mostrando un liderazgo importantísimo desde este punto de vista, recorrer un camino de apoyo a la inversión productiva en el país.

Y esto debe ser destacado. Me limito a recordar algunos ejemplos, como los constituidos por la emisión de certificados representativos de inversiones en relación al fondo de financiamiento de la actividad lechera, relativos al fondo de financiamiento y recomposición de la actividad arrocera, fondos que han representado una ayuda importante para encarar situaciones difíciles y necesarias de superar en una y otra actividad importantísimas en el país, como son la actividad lechera y la actividad arrocera, la adquisición de obligaciones negociables, que también han constituido una vía de apoyo a la inversión productiva y la adquisición también de títulos representativos vinculados a los fideicomisos en 2004 y 2005.

Naturalmente, cuando uno analiza estas experiencias, percibe la potencialidad de una administración profesional de los ahorros previsionales. Gran novedad   introdujo también la experiencia que el país empezó a recorrer en abril de 1996. El hecho de tener una administración profesional de los fondos de pensión de los trabajadores, los fondos previsionales de los trabajadores, es en sí misma una novedad importante para el país.

Han sido diez años de desarrollo de experiencia de gestión -desde este punto de vista- que acumulan, también, aspectos potencialmente muy positivos para el futuro.

Seguramente es mucho lo que queda por hacer como en cualquier actividad de la vida. Diez años de experiencia en materia de seguridad social constituyen seguramente un lapso reducido, un primer antecedente. Por eso subrayo “los primeros diez años” de vida de República AFAP y del sistema mixto de seguridad social.

Entonces, reitero, es mucho lo que queda por hacer seguramente, mucho camino para seguir mejorando el funcionamiento del sistema en beneficio de los que necesitan que esto funcione bien, que son los trabajadores del país.  Desde este punto de vista permítanme que diga algo que siento personalmente de una manera muy clara, muy profunda: el sistema mixto no es cabalmente comprendido en el país aún y hay que avanzar en el terreno de la difusión y la explicación de lo que significa este sistema.

Muchas veces se perciben análisis públicos que demuestran no entender los aportes, las contribuciones que un sistema de este tipo puede tener. Muchas veces se confunde seguridad social con administración profesional de los fondos que genera un sistema de capitalización. Una administradora de fondos de ahorro previsional, no es una institución  de seguridad social. Es una institución de administración profesional de los fondos generados por la Seguridad Social; cuya principal obligación es generar condiciones adecuadas de riesgo y rentabilidad para los titulares de los ahorros que se generan con mucho esfuerzo por parte de los trabajadores.

Este es uno de los aspectos que debemos entender en el país y que a mi juicio es preciso no cejar en el trabajo por difundirlo y hacerlo interpretar y comprender a cada momento, porque eso nos llevará a todos, como la sociedad, no sólo a captar, a percibir el aporte que puede realizar en un sistema mixto esta área del sistema mixto, sino también a tener en cuenta la potencialidad que tiene para el futuro.

Yo recién mencioné aspectos que están relacionados con la vida misma del trabajador, pero también mencioné la contribución que esto hace al funcionamiento de la economía en su conjunto, lo cual es, también, a mi juicio innegable. En segundo lugar yo creo que la contribución a la incorporación de trabajadores jóvenes, percibiendo el doble objetivo de reducir la informalidad en el país, esfuerzos que también está realizando el Banco de Previsión Social  con buenos resultados, porque ha llegado a un auténtico récord de afiliación que hacía mucho tiempo en términos relativos no alcanzaba en relación a la población económicamente activa del país, significa además otra cosa: incorporar trabajadores jóvenes, sacándolos de la informalidad y articulándolos al funcionamiento al sistema en su conjunto, supone mejorar las condiciones de sostenibilidad del sistema hacia delante, en un país que tiene la grave dificultad de tener una estructura demográfica absolutamente difícil para el funcionamiento de un sistema de seguridad social, como también lo es para el funcionamiento de un sistema de salud.

De esta manera la incorporación de trabajadores jóvenes, al tiempo de combatir la informalidad que todavía existe en el país en proporciones muy importantes, genera para el futuro condiciones de sustentación, de sostenibilidad del funcionamiento del sistema, lo cual para la seguridad social en el Uruguay es fundamental. Esto nos lleva a un tercer desafío: encontrar atractivos para los afiliados, cosa en la que sé que República AFAP está empeñada: estudiar atractivos que pueden ser la incorporación de premios retiro, esto es para el afiliado que está comenzando a vivir su vida de retiro, percibir un suma que lo estimule a comenzar esa etapa fundamental de su existencia;  la posibilidad de jubilaciones anticipadas, sin causal, pero a favor de una buena cuenta individual en el caso que ellos sea posible, la posibilidad de retiros programados, lo que significa, en muchos casos, postergar el momento del retiro percibiendo, durante el lapso de la postergación, intereses generados por su cuenta individual son algunos ejemplos de estímulos, de incentivos que se pueden establecer para atraer precisamente la incorporación de nuevos afiliados y ojalá afiliados jóvenes.

Esto significa también la flexibilización en el funcionamiento de las firmas que hoy tiene el país y en particular de Republica AFAP. Creo que un cuarto desafío es continuar en la línea de articulación con la inversión y la producción del país, persistiendo, insistiendo en esa trayectoria de ayudar a mejorar las condiciones de inversión, y yo diría no sólo de inversión sino las condiciones de funcionamiento de actividades fundamentales de la producción en el país. Yo mencioné los fondos lechero y arrocero, en los que no sólo se jugó un papel que ayudó a mejorar las condiciones de capitalización de esos sectores, sino que también ayudo a resolver problemas fundamentales como el endeudamiento, que obviamente no es ajeno a las posibilidades de trabajo de esas actividades.

Entonces, persistir en esa línea es absolutamente fundamental para que el impacto macroeconómico de esta área del sistema de seguridad social sea, continúe siendo, realmente positivo y quizás cada vez más positivo. Y dejo para el final para una quinta reflexión hacia el futuro algo que ha venido siendo manejado insistentemente en los últimos tiempos, y acerca de lo cual me parece que se ha venido ganando consenso en el país, pero puede ser uno de los temas a discutir, por ejemplo, en la jornada de hoy que son los criterios de inversión y regulación contenidos en la ley 16.713, si no me acuerdo mal el articulo 123 y 124 de la ley, que ha llegado la hora de revisar porque están un tanto obsoletos -en mi modesta opinión- respecto a las condiciones económicas actuales del Uruguay, bastantes diferentes a las predominantes en 1995 cuando se discutió y se sancionó esa ley.

Culmino reiterando mis felicitaciones a AFAP República, a sus autoridades y a sus funcionarios porque no sólo han ejercido con solvencia y condiciones de liderazgo en esta área importantísima de la actividad nacional, sino porque lo han hecho en condiciones muy positivas de gestión, de administración profesional, como lo decíamos hoy, de recursos tan importantes como son los que generan los trabajadores, aspectos que han merecido reconocimientos nacionales e internacionales durante estos diez años, de los cuales todos los uruguayos nos tenemos que sentir orgullosos.

Así que auguro un buen futuro para República AFAP y ojalá pueda seguir aportando a los trabajadores y al país las contribuciones tan positivas que ha generado hasta ahora. Muchas gracias.   

PALABRAS DEL SUBSECRETARIO DE TRABAJO Y SEGURIDAD SOCIAL, JORGE BRUNI

SUBSECRETARIO BRUNI: Bueno, muy buenos días para todos.

Cuando el Presidente de República AFAP, el doctor Olmos, habló conmigo a efectos de que el Ministerio estuviera presente, tenía otros compromisos personalmente pero los suspendí porque quería estar en este evento de los 10 años de República AFAP. Y quería estar porque para mí personalmente no es una tarea fácil. Los que me conocen saben que he sido crítico, sigo siéndolo del sistema creado allá por 1996. Lo he manifestado en otras actividades similares. Yo fui el delegado en aquel entonces de la fuerza política opositora en las negociaciones del Victoria Plaza, cuando se acordó con el voto contrario del aquel entonces Frente Amplio la reforma que luego se concretó en la Ley 16.703. Por lo tanto, este y otros aspectos que ustedes podrán imaginar constituyen un desafió para una persona que tiene esa visión sobre este sistema.

Tanto en su parte de reforma paramétrica como fue algunas de las modificaciones que se hicieron como en la parte sustancial al introducir un sistema de capacitación individual.

Por lo tanto, repito, el beneplácito que contradictoriamente me produce estar presente para poder manifestarme en estos aspectos, hoy como hombre de Gobierno sigo, de alguna manera, pensando en algunos aspectos parecido a los que sostenía años atrás y en otros evidentemente el desarrollo de estos 10 años que como muy bien decía el Ministro de Economía en materia de seguridad social es muy poco; y también es muy poco como para analizar resultados, por lo menos en materia de lo que se consigue como objetivo fundamental de un sistema de seguridad social, es decir cobertura, protección, etcétera. Por lo tanto, hubiera sido muy fácil para mí venir a decir: "felicitaciones por los 10 años"; lo digo porque como bien culminaba el Ministro de Economía, el ejemplo de administración de AFAP República es un ejemplo a rescatar, reconocido nacional e internacionalmente y por lo tanto me sumo a los conceptos del Ministro de Economía en ese sentido.

Pero no obstante, como hombre de Gobierno sigo insistiendo, sigo creyendo en algunas debilidades, en algunos casos relativas, en otros casos profundas, me sigo preguntando si eran tan insostenibles los sistemas solidarios de la década de los 90’ como para haber llegado a una modificación tan sustancial como a la que se llegó con aquellos argumentos que se utilizaron en aquellos años, que trabajaban la inversión, trababan el desarrollo, que eran altos los costos laborales y los costos de seguridad social, etcétera que creo no vale la pena reiterarlos, porque además quiero destacar que yo soy de los que creo que cada país se forja su sistema de seguridad social, y no soy de los que creo en un solo un tipo de modelo de seguridad social. Creo que pueden persistir perfectamente modelos solidarios, modelos complementarios y modelos de seguridad social de ahorro individual. Podremos discrepar en la forma de su reglamentación o de su implementación pero no soy de los que creo a rajatabla que tenemos que volver a aquellos viejos sistemas que de alguna manera demostraron su incapacidad y su no adaptación a las nuevas épocas.

Por lo tanto, insisto, yo creo que el Gobierno ha fijado sus prioridades. No está dentro de sus prioridades obviamente, y en esto suscribo totalmente lo que decía el Ministro de Economía, no está dentro de sus prioridades, al menos en este período de Gobierno el análisis o la revisión de este sistema, para su modificación o eliminación, no son esas las prioridades que se ha fijado el Gobierno en materia de seguridad social.

Sí creo -y en estos jóvenes 10 años- que en el futuro el país va a debatir este tema, lo quiera o no lo quiera el Gobierno, porque de alguna manera es un tema, es un debate que se está instalando en la sociedad y que la sociedad no gubernamental ya lo está comenzando a plantear, y por lo tanto nos guste o no nos guste creo que el debate sobre el sistema se va a dar en algún momento. Y bueno, será el momento de analizar, habrán transcurrido otros años además de estos 10 para seguir recogiendo experiencias, para seguir corrigiendo, para seguir analizando cuáles han sido los resultados en materia de ese objetivo fundamental que –insisto- debe tener cualquier sistema de seguridad social en cuanto a la protección de la gente. Es innegable el desarrollo que ha tenido el sistema AFAP y fundamentalmente AFAP República en cuanto a capital y en cuanto al número de afiliados.

Hoy es un hecho innegable, y por lo tanto es un punto de partida que –repito- puede merecer análisis de mayor profundidad para encausarlo debidamente cuando políticamente las circunstancias se den.

Como ustedes verán yo no voy a entrar en detalles del sistema, no me corresponde, pero simplemente, no quería eludir la responsabilidad de alguien que no comparte totalmente los puntos de vista sobre el sistema AFAP, pero que hoy como hombre de Gobierno tiene que venir a decir lo que piensa, pero además en un sentido absolutamente constructivo.

Creo que esa frase que yo he dicho que soy de los que creo que cada país forja su sistema y que no hay un solo tipo sistema, creo que de alguna manera sintetiza lo que es mi pensamiento respecto al futuro de un debate que –insisto- tengo la convicción de que más temprano que tarde se va a dar porque ya han surgido planteos en el pasado que cada vez se hacen más sistemáticos y que cada vez se hacen más generalizados.

Por lo tanto, en la persona de mi querido amigo Olmos, Presidente de Republica AFAP, yo felicito por estos 10 años, felicito como bien decía el Ministro de Economía, la muy buena administración, ejemplo que es AFAP República, y estaremos a la orden como el Ministerio competente en la materia para tratar de, cuando se dé ese debate, que yo creo que se va a llegar, se dé de la mejor forma, constructivamente, recogiendo la experiencia de estos jóvenes 10 años, sobre todo en una AFAP como AFAP República que ha demostrado –repito- su seriedad en el manejo –más allá de las discrepancias que se puedan tener- de los asuntos públicos.

Así que felicitaciones, muchas gracias y perdonen por si he dicho o he expresado algunos conceptos que puedan no gustar. Pero creo que la seriedad de la actuación pública está –me parece a mi- en plantear las discrepancias en los ámbitos que correspondan y cuando uno entienda necesario.

Muchas gracias y les deseo mucho éxito en la jornada de hoy.

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