EL GOBIERNO FOMENTA UNA REAL CULTURA DE EMPLEO
El gobierno propugna que el trabajo sea un real
articulador de la sociedad. Para ello -entiende- es necesario fomentar
una cultura que lo realce y justiprecie. Ello se logra generando puestos
de empleo pero, además, formando a los futuros trabajadores para que
puedan nutrirse de este derecho humano y el trabajo pase a ser un valor
incorporado en la sociedad.
La implementación del
proyecto “Uruguay Productivo” aportó una mejora de los índices de empleo
y desempleo y generó los más auspiciosos de los últimos 21 años. Pero
cuesta consolidar una cultura de trabajo en el corto plazo “porque un
valor que se perdió en años no se recupera en días, sino también en
años”, reflexionó el Ministro de Trabajo y Seguridad Social, Eduardo
Bonomi.
En el marco de la
promoción de una sociedad de valores cimentada en el rol del trabajo, el
Ministro de Educación y Cultura, Jorge Brovetto; el Ministro de Trabajo
y Seguridad Social, Eduardo Bonomi; el Presidente de la Administración
Nacional de Educación Pública, Luis Yarzábal y por CINTERFOR-OIT,
Fernando Casanova, acordaron ejecutar el proyecto denominado
“Construyendo el Futuro con Trabajo decente”.
El objetivo es la
incorporación a la Enseñanza Primaria, Media y Técnico Profesional
nociones sobre los Derechos Fundamentales del Trabajo y de los
Principios del Trabajo Decente, conceptos promovidos por los países
miembros de la OIT.
CINTERFOR/ OIT brindará
asesoramiento al Comité Coordinador del Proyecto, que será responsable
de ejecutar el programa en tres fases. En la primera los técnicos
estudiarán cuáles son los contenidos de los programas. Seguidamente se
realizará una experiencia piloto en tres Institutos de Montevideo y tres
Institutos del Interior, para finalmente entrar en una etapa de
evaluación y consideración de cómo se generaliza la experiencia y cómo
se introduce la centralidad del trabajo.
Bonomi afirmó que desde
que asumió el gobierno se ha tratado la función del trabajo, no sólo
desde las relaciones laborales o el empleo, sino como articulador de la
sociedad. “Las sociedades se articulan en el trabajo y se desarticulan
por la ausencia del mismo”, apuntó Bonomi.
Las empresas como
generadoras de empleo permiten crear un ambiente diferente en cada
barrio, cuyas actividades circulan fomentando reglas de solidaridad en
el trabajo y relaciones entre las familias de los trabajadores. Esta
situación produce un hábito en la sociedad.
Con el fenómeno del
desempleo se deteriora el rol de las sociedades articuladoras porque se
pierde la cultura de trabajo. Los hijos de los desempleados pasan a
convivir con la idea de que el trabajo no es cosa de todos los días.
Por lo tanto, el
trabajo tiene es central en las sociedades, que se estructuran con el
trabajo o en ausencia del mismo.
El Presidente del
Codicen, Dr. Luis Yarzábal, destacó que se pretende reconstruir la
estructura del trabajo y que en ésta época nuestra sociedad no reconoce
sus valores. Al mismo tiempo enumeró los desafíos que enfrenta la
sociedad: evitar el deterioro del salario y fomentar el trabajo digno y
el multiempleo.
Brovetto recalcó que
dentro de los Derechos Humanos está incluido el derecho al trabajo y a
la vida digna que el mismo proporciona. |