El Ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, José Mujica, pidió este lunes “un barco, auque sea pequeño” para que nuestro país pueda controlar sus propias líneas de comercio con el Caribe y México, país al que “no podemos desconocer” porque tiene “dimensiones colosales.

Hablando con la prensa al término del acuerdo semanal con el Presidente de la República, Mujica dijo que con la muerte de Pinochet “se cerró una etapa” e hizo votos para, en el futuro, las sociedades “nunca tengan que apelar al golpe de Estado”.

DECLARACIONES DEL MINISTRO DE GANADERÍA, AGRICULTURA Y PESCA, JOSÉ MUJICA, TRAS EL ACUERDO SEMANAL CON EL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA

MINISTRO MUJICA: Nosotros simplemente queríamos informarles algunas cosas surgidas. Tenemos la aprobación de un fondo que las actividades de la lechería uruguaya se dan en alguna medida a sí mismas, estableciendo formas de financiación que va a ser prorrateada en el mercado, por alrededor de unos 40 millones de dólares.

Es un fideicomiso que va a hacer que las empresas lácteas vayan a actuar como agentes de retención. Pero de todo ello lo que más quiero destacar es que esta forma de financiamiento para los sectores que tienen que ver con la agropecuaria tal vez sean las formas que se van a ir acentuando en los años venideros, así como las ventas a futuro, así como lo guardan.

Es un conjunto de actividades de carácter financiero que no estrictamente van a pasar por el sistema bancario en su forma tradicional, sino que significan otras formas de financiación más acordes con las actividades agropecuarias un poco basadas en el respaldo de la propia producción. Esta es una conclusión a la que hemos llegado por varias vías, que es lo que más importa tener en cuenta.

El eclecticismo en materia de precio, y por razones de clima que tienen todas las actividades agropecuarias, hace peligroso la mecánica tradicional desde el punto de vista bancario. Somos tomadores de precios en el campo internacional y no podemos contraer crédito especulando o esperando precios que a veces se dan o no se dan. El segundo punto son las cosas que pasan con el clima. Este tipo de financiamiento, con cierta elasticidad, parece más racional para las actividades agropecuarias.

Nosotros durante estos meses de verano vamos a trabajar en la reglamentación y pensamos que hacia fines de febrero o marzo van a estar convocados los oferentes. Sabemos que estos 40 millones de dólares pueden salir de la bolsa, pueden salir de las AFAP, pueden salir del propio Banco de la República. Lo que se va a cotizar va a ser la tasa y hay que tener en cuenta que el riesgo es mínimo pero ambicionamos una tasa que esté muy abajo de lo que es la tasa tradicional bancaria.

Un poco en otro orden de cosas en estos días: hemos vuelto a tener algunas dificultades con el comercio de carne con México y esto se enraba con algunas gestiones que hacíamos el otro día cuando aprovechamos la venida de Chávez. No tenemos vía de comunicación, no tenemos un barco que directamente vaya de nuestro puerto con regularidad al Caribe, ya sea a Veracruz, ya sea a Caracas, y este hecho nos crea complicaciones importantes y quisiéramos que a través de ustedes, intereses marítimos, gente que puede aportar en estas cuestiones, nos ayude a enfrentar este problema.

El Uruguay necesita una cierta regularidad de algún barco que nos comunique sistemáticamente y comercialmente con puertos del Caribe, que sería una manera de multiplicar nuestra presencia. A veces tenemos que ir a Buenos Aires, recalar en Buenos Aires -donde se nos crean obstáculos- o trasbordar en Nueva Orleáns. Estos problemas, que parecen insignificantes para el que no conoce, son la diferencia entre poder hacer y una actividad económica o no hacerla, y bueno, es parte del Uruguay.

En otro orden de cosas, nosotros hemos iniciado las actividades de fuentes de agua en el norte y hemos recibido una iniciativa de Treinta y Tres, de Cerro Largo, de parte de Minas, un poco en el mismo sentido y seguramente este problema lo tenemos que discutir. Hoy planteábamos en el Consejo de  Ministros que hace muchísimos años la FAO estuvo en el Uruguay haciendo estudios referidos a la Cuenca del Tacuarí, del Olimar, de la Laguna Merín y recomendó un conjunto de obras de las cuales hemos hecho una. Hay algunas otras iniciativas, y considero en términos de opinión, que esa es una deuda pendiente que tocaría tres o cuatro departamentos y que en alguna  medida los uruguayos, las Intendencias, los organismos locales, tal  vez para una política de una década, tendríamos que comprometernos en un plan de  sistematización de esas obras que en alguna medida es igual que agrandar el país, porque -no peco de exagerado-  el cumplimiento de buena parte de esas obras significaría no menos de 150 mil hectáreas regables, lo que equivale a toda el área arrocera que hoy estamos plantando en todo el país. 

Las dimensiones de un país no son sólo su superficie. Son la capacidad de invertir incluso que podamos tener en esa superficie. En Uruguay, cuando se ha discutido de agua se ha hablado muchísimo y no podemos entender porque los uruguayos no nos damos cuenta que la mayor tarea es retener el agua que llueve y que dispara para el océano y que esa debe ser una de las inversiones más importantes que tiene el Uruguay por delante, tal vez de las que pueden tener una rentabilidad mayor, porque acá hay problemas de energía, problemas de regadío, problemas de salubridad como en la ciudad de Melo, problemas que  tienen que ver con la no inundación como en la ciudad de Treinta y Tres, de Vergara, pero parecería que a los uruguayos nos cuesta enormemente despertar a la  importancia que tienen estas obras.

Ustedes son trabajadores de la opinión pública. No se puede esperar resultados concretos, inmediatos, de lo del trabajo de ustedes. No es esa la función, pero sólo una sociedad que tenga conciencia de algunos problemas trascendentes será la que tendrá capacidad de juntar fuerza, de luchar y de hacer prioridades de cosas que son verdaderamente importantes.

Este es un conjunto de obras que hace cuarenta años se  plantearon en este país, y prácticamente es muy poco lo que hemos hecho. Quizás pudiéramos dar un empujoncito entre todos y empezar a hacer algo ahora sin la pretensión de terminarlo, pero tal vez pudiéramos hacer algo para esa zona bastante pospuesta y olvidada del país.  Muchas gracias.

PERIODISTA: Una consulta.  En lo que tiene que ver con la carne de México y el  pedido que se le hizo a Chávez de un barco, ¿se hizo efectivo ese pedido, qué posibilidades existen reales?

MINISTRO MUJICA: Sí, nosotros quedamos de mandarles los detalles. Incluso es posible que algunos intereses nacionales quisieran asociarse. Para nosotros vital es tener una comunicación con Caracas, y si es posible con el puerto de Veracruz. No se puede ignorar a México, un país de dimensiones colosales, y este problema del transporte es igual a tener una carretera, y creo que lo tenemos que…

A Chávez yo lo sorprendí. Lo agarré a la carrera, bajando del avión y le tiré: pahh. Creo que hay un aire positivo, y es posible que nosotros viajemos en estos días pura y exclusivamente por eso, concretamente pero queremos llevar un paquete de información, materia de tonelaje, cuestiones y eso. Nos planteamos un gran barco, un barquito hicimos, en las proporciones de Uruguay, porque nosotros estamos convencidos. ¿Porqué estamos convencidos? Estamos convencidos porque una parte de la verdura que trae, que descarga Canelones, se puede vender para allá. Que se puede mandar vino, que se puede mandar manzana cuando venga la cosecha, que se puede mandar un poco de uva, ahora cuando tengamos la cosecha. Que se puede mandar un poco de cemento, que se puede mandar tablas, que se puede mandar una multitud de cosas propias de un país pequeño.

La gallina come de a uno, pero al final se llena. Yo desconfío de los negocios monumentales, pero me parece que la suma de muchas cosas que son posibles y son posibles por las diferencias de precio que hay con Caracas. Pero además México es un mercado importantísimo en materia de carnes. Tenemos dificultades de transporte.

 A México le estamos vendiendo mucha leche en polvo, y muchos lácteos. Si facilitamos el transporte va ser mucho más fácil.

Una vez andando por España, me enteré que los españoles, algo más viejos que nosotros, subsidian, y vaya cómo subsidian, el ferrocarril, y lo subsidian para que sea posible muchísima otra actividad económica que si no hubiera transporte barato, sería imposible. Bueno, yo confío que en poco tiempo podamos resolver esto de tener un, barquito que haga correo de ida y de venida con cierta regularidad que nos ayudaría en pila.

PERIODISTA: Ministro: en lo que tiene que ver con el fideicomiso del que habló más temprano. ¿Hacia que sectores concretamente va a estar dirigido, y quiénes son los que van a  tener acceso a él?

MINISTRO MUJICA: Son tamberos y van a tener acceso los de todas las categorías, pero naturalmente quienes remiten más leche van a tener mayor margen. Pero prácticamente todos los pequeños remitentes también lo tienen asegurado, y creo que los más importante es que es una especie de crédito que tiene varios años para irlo pagando con un descuento de la leche que remiten.

Descuento que nunca podrá ser muy importante -de ahí el tiempo- y que va a estar pautado por el precio. Quiere decir que si tengo un precio bueno, voy a pagar un poquito más, si tengo un precio menor voy a pagar un poquito menos y creo que esto es una forma muy accesible de crédito. En el caso de que alguien salga de circuito de repente porque la vida se lo llevó o por lo que fuere, el conjunto de los productores hace frente a esa cuenta y la pagan entre todos. Quiere decir que para quien otorga el crédito esto tiene enormes ventajas en materia de riesgo, porque hay agente de retención y hay un compromiso colectivo. Por lo tanto pensamos que se premie en la tasa. Es sabido que en materia de crédito a mayor riesgo mayor tasa. En este caso el riesgo es prácticamente mínimo y esperemos que esté en una tasa casi internacional.

PERIODISTA: Ministro, el congreso norteamericano quiere hacer algunas modificaciones arancelarias, y podrían verse perjudicados algunos productos uruguayos en materia de exportación, como serían los cueros, y las carnes. ¿Es así? ¿Qué información tiene, ministro?

MINISTRO MUJICA : Bueno nosotros tenemos algunos rumores por algunas informaciones periodísticas que han aparecido, pero realmente no tenemos confirmación. No podemos ni echar las campanas a volar ni dejarnos de preocupar por el tema. Si no tengo respuestas más claras es porque necesitamos un margen de información que hoy no lo tenemos.

PERIODISTA: Ministro, en el día de ayer se produjo un hecho bastante paradojal: con la celebración del Día Internacional de los Derechos Humanos moría el dictador Augusto Pinochet. Interiormente, no como Ministro, ¿qué sensación le produjo enterarse de la noticia?

MINISTRO MUJICA: Bueno, la muerte es nuestro fin inexorable. También le llegó a él y espero que el pueblo chileno y todos nosotros, cada cual, tendrá sus conclusiones y quisiera que no multiplique las tensiones dentro del pueblo chileno. Y es el fin probablemente de una etapa de la historia en estas latitudes. Hago votos porque los gobiernos que vengan serán un poco mejores, serán un poco peores, cuestión opinable, pero que nuestras sociedades no tengan que recurrir a los golpes de Estado, y que las generaciones que vengan tengan más inteligencia que al nuestra, que aprendan del parto de nuestros propios dolores.

Siempre va a existir una posición conservadora que por momentos es reaccionaria. Siempre va a haber una posición de cambio que por momentos es infantil, la historia de la humanidad ha girado en esos parámetros y multitud de posiciones intermedias. Pienso que debemos tener la racionalidad de decir las cosas y es probable que la humanidad necesite otro tipo de instituciones que hoy no tenemos ni conocemos.

El Uruguay se apresta a distribuir una pequeña computadora para cada niño en edad escolar en el Uruguay. Van a ser probablemente 50 millones de dólares invertidos en los próximos años para que todos los niños de este país aprendan a comunicarse en una forma que los más veteranos tenemos dificultades, porque el mundo va para ahí.

Yo pienso que las consecuencias sociológicas de la aparición de determinados medios a la larga va a tener incidencia institucional en transformación de las formas de gobierno que nosotros conocemos, pienso.

Porque no se trata de tecnologías distintas. Se trata de la aparición de nuevos seres que no existían que van a cambiar las relaciones humanas.

Es probable que nuestra forma de democracia representativa dentro de cuarenta o cincuenta años parezca una vetustez, porque el mundo que venga logre formas infinitamente más democráticas, más participativas y de distribución del poder que para nosotros no la podemos ni soñar. Hago votos para que así sea, es decir mis dudas son hacia delante, no hacia atrás. Hacia atrás queda el golpe de Estado, la bota militar, el prepo. Hacia delante quedan los desafíos participativos que están dotando la humanidad de nuevos métodos que eran impensables.

Bueno, Pinochet creo que fue su tiempo. Usted me preguntó en lo personal. Yo no eludo las más difíciles. Lamenté cuando falló el (comando revolucionario)  Manuel Rodríguez en las calles de Santiago. Bueno, gracias.