DÍA MUNDIAL DE LA SALUD
La Organización Panamericana de la Salud, celebrará
un nuevo aniversario del Día Mundial de la Salud, con el lema
“Invertir en Salud para Forjar un Futuro Más Seguro”.
Es una de las preocupaciones más vitales de nuestro
tiempo: cómo vivir seguros en un mundo globalizado donde las
enfermedades pueden pasar de un continente a otro en cuestión de horas.
Enfermedades nuevas y existentes amenazan nuestra
salud y seguridad, e ignoran fronteras nacionales. La amenaza de una
pandemia global de influenza continúa siendo real, y el recuerdo del
SARS permanece fresco en la memoria. La epidemia del VIH/SIDA es otro
fenómeno global que impacta adversamente no sólo la salud, sino la
economía y estabilidad de muchos países. Aunque la carga pueda ser mayor
para el mundo en desarrollo, las enfermedades con potencial epidémico
son una creciente amenaza para todas las naciones.
Mientras enfermedades nuevas y re-emergentes son un
peligro, también hay otras preocupaciones. Desastres naturales,
accidentes químicos y nucleares, el cambio climático y sus
consecuencias, y el bio-terrorismo tienen el potencial de afectar la
seguridad de la salud pública internacional. No obstante, las mismas
fuerzas de la globalización que favorecen el movimiento libre de
patógenos alrededor del mundo pueden también utilizarse para construir
asociaciones multinacionales que nos ayuden a expandir el acceso a
medicinas y vacunas, mejorar la infraestructura de la salud pública en
países en desarrollo y lanzar en todo el mundo mejores programas de
educación para los trabajadores de la salud pública.
Las recientemente revisadas y expandidas Regulaciones
Internacionales de la Salud, que entrarán con toda su fuerza el próximo
mes de junio, proporcionarán una creciente cooperación internacional que
conduzca a una notificación más robusta y transparente de los brotes de
enfermedades y otras amenazas a la salud y de los esfuerzos de control.
Este acuerdo internacional urge a los Estados
miembros de la Organización Mundial de la Salud a enfocar sus esfuerzos
en prevenir y contener las emergencias de la salud pública allí donde
éstas se originan. Para tal fin, se requiere que estas naciones
mantengan capacidades de vigilancia y de respuesta para detectar,
evaluar y notificar incidentes de la salud pública, y para intervenir.
También se estimula a manejar la información con transparencia y a
colaborar de manera solidaria entre los países.
La Organización Panamericana de la Salud está bien
posicionada para confrontar estos serios desafíos. Hemos abordado y
conquistado un gran número de amenazas para la salud durante más de 100
años. La experiencia de la Organización en el trabajo con los países
miembros para fortalecer los sistemas locales de salud y la vigilancia
epidemiológica nos servirá bien en esta nueva era, así como la excelente
tradición de solidaridad y espíritu panamericano. Estamos comprometidos
con la incorporación de nuevos métodos y herramientas disponibles de
respuesta en asociación con agencias de salud pública, entes
reguladores, legisladores, investigadores académicos y con la industria
privada.
En el Día Mundial de la Salud 2007, en las Américas
nos comprometemos a redoblar nuestros esfuerzos para hacer que la salud
figure de manera prominente en la agenda política y para abordar las
inequidades que exacerban la vulnerabilidad de nuestras poblaciones.
Esta es la mejor manera de garantizar no solo nuestra propia seguridad
sino la seguridad en todo el mundo. |