FORO IBEROAMERICANO “LA PLANIFICACIÓN PORTUARIA:
IMPULSADORA DEL DESARROLLO”
Desde el pasado miércoles 14 del corriente hasta hoy
viernes 16, se viene realizando el Foro Iberoamericano “La Planificación
Portuaria: Impulsadora del Desarrollo”
A
continuación se detalla lo mejor de las ponencias del presidente de
Puertos de Estado de España, Mariano Navas; y Fernando Puntigliano,
titular de la Administración Nacional de Puertos de Uruguay.
El seminario se viene llevando a cabo con gran
participación por parte de los asistentes en los debates que se producen
en cada una de las mesas.
Los interesados por más información pueden
comunicarse vía correo electrónico:
seminario@anp.com.uy o por fax: 916.21.24
Conferencia: Fernando Puntigliano - “Uruguay
productivo inserto en la región productiva”
El Uruguay Productivo es el tema que percibimos
inmerso en el ámbito de la región productiva. La explosión productiva de
la región es más grande de la que estamos viviendo en Uruguay. Cuando
hablamos de prestar servicios y tratar de facilitar el vínculo entre la
producción y el consumo como miembro de la cadena logística, uno de los
temas trascendentes en ese ámbito es el de la integración regional. No
hay un grado de madurez político que nos permita avanzar. Ejemplo de
ello es lo que les esta pasando a Bolivia y Paraguay que parte de los
costos adicionales que tienen en sus productos cuando los tiene que
colocar en determinado mercado, se debe en realidad a una cantidad de
costos de cargas artificiales. Poder superar este tipo de cosas pasa por
una maduración política colectiva.
Otra de las preguntas a responder es ¿Cuál es la
demanda de infraestructura? Y ¿cómo debemos canalizarla? La demanda de
infraestructura se debe medir a partir de una mirada integral de la
cadena logística.
Estamos viviendo un momento importante de expansión
del comercio. Eso lo encaramos a través de la inversión pública-privada,
estamos maximizando nuestra capacidad de inversión. Sin embargo somos
conscientes de que el dinero disponible es insuficiente para dar las
respuestas necesarias. Lo que nosotros vemos como necesario en
infraestructura debe estar acompañado en inversión pública. He ahí la
necesidad de la comunicación continua, del diálogo y trabajo en conjunto
como “Comunidad Portuaria”.
Es imposible pensar que lograremos dar una respuesta
a la demanda que surge de la explosión productiva sino tenemos una
integración eficiente público-privada.
Cuando hablamos de Uruguay Productivo, hablamos de la
actualidad, de los siete puertos de la Administración Nacional de
Puertos, y mirando a La Paloma como potencial puerto a desarrollar
(ubicada en un lugar donde el dragado sería muy barato). Los puertos
están integrados en un proyecto nacional de cómo encararemos la
inversión en infraestructura, el crecimiento del producto, y esto no se
piensa en el corto plazo.
ENCE, BOTNIA, STORA-ENSO, y todo lo que viene junto a
ello y que vendrán en un futuro cercano, tiene un impacto enorme en la
cadena de transporte. Se concentrarán problemas de transporte en
distintos puntos respecto a la carga nacional, pero además debemos
pensar que el 50% de la carga que pasa por el Uruguay no es nacional,
sino de la región. Ese es el campo logístico en que debemos trabajar
Otro de los conceptos que conlleva el Uruguay
Productivo es el tema energético, las telecomunicaciones, etc... Por
ello debemos diseñar y fijarnos en el mapa logístico del 2030. En esta
visión comienzan a tratarse otro tipo de temas que implica una gran
cadena logística, donde los transportes se analizan de una manera
integral.
¿Cómo vamos a operar con nuestros ríos? Es un gran
desafío plantearnos una cantidad de temas también en forma integral.
Nuestros ríos en el futuro se convertirán en lugares de trasbordo, de
entrada y salida de carga de la región. Eso incluye la conexión
ferroviaria que tenemos en Salto con Paraguay, o la que podríamos tener
con el Brasil. Es decir, el enfoque es el análisis del Uruguay, no
independiente de la región, sino inserto en la “región productiva”. El
Uruguay productivo solo sería el capítulo 1 de un gran libro.
Hemos comenzado a analizar los nuevos polos
productivos junto a distintos actores. Uno de ellos es la “Red de
Empresas Públicas”, que en su agenda mira integralmente la conexión de
infraestructura, energía, telecomunicaciones, etc... Luego nosotros
conversamos y discutimos esa agenda con otros agentes como nuestros
operadores.
La región es competitiva y tenemos grandes mercados.
Por el sur de Brasil tenemos carga de gráneles, en Bolivia la Soja es
muy fuerte. El Paraguay canaliza 12 millones de toneladas. En Brasil
tenemos grandes producciones de minerales. Muchos de estos productos
están pagando grandes flotas, cuando podrían hacerlo mucho más barato.
Por ejemplo las 12 millones de toneladas a las que se
hacía referencia, hoy pueden salir por la Hidrovía, y tan solo debemos
imaginar lo que eso significaría. Requerimos nuevas terminales
especializadas, armado naviero, etc. Pero a eso debemos sumar voluntad
de armar esta cadena logística, innovación tecnológica, etc.
Debemos tener una terminal portuaria capaz de
procesar este crecimiento. Soja que está saliendo por Paranagua está
pagando 60 dólares la tonelada. Si viniera por Nueva Palmira pagaría 30
dólares la tonelada, entonces nos preguntamos ¿Por qué sucede eso? Hay
que cambiar la cabeza política es la respuesta.
Estamos inmersos en un proceso de cooperación con
Paraguay invitados por la UNCTAD donde diseñaremos el mapa logístico de
nuestra región y quedará demostrado la conveniencia de que las cargas
salgan por el Uruguay. Lo mismo sucede en Bolivia, ellos pagan una carga
mucho mayor al salir por el Pacífico, cuando desde la Hidrovía hacia el
Atlántico sería mucho más conveniente.
La integración regional
La costa este de Sudamérica está dividida en seis
puertos que se disputan las mayores cargas. Santos con un crecimiento en
2005 de un 21%, a Buenos Aires con un crecimiento de un 9%, Río Grande
con un crecimiento del 8%, Itajtaí con un crecimiento del 14% y
Montevideo con un crecimiento del 14% y Paranagua atrás. Esto está
respondiendo a un Hinterland regional, desde estos puertos es de donde
sale la carga.
Para servir a la explosión productiva de la región
tenemos obstáculos como por ejemplo las asimetrías, problema de dragado
(Martín García), dragado Río Uruguay, Canal Tamengo, trabas aduaneras y
comerciales.
Tenemos que elevar los niveles y generar una gran
puerta de entrada de la carga. Pero eso no basta, es necesario mirar
integralmente la cadena logística.
En la región Santos tuvo un estancamiento, que luego
se disparó. Buenos Aires tuvo épocas de bonanza y luego vino la crisis.
Río Grande nos pasó de largo y logró posicionarse más arriba. En
comparación Montevideo se estabilizó y posteriormente volvió a crecer de
una manera distinta.
Distinta porque ya no se aumentará la inversión
porque haya solo más carga, sino que estamos velando por trabajar en
cada uno de los focos de la cadena logística, para asegurar su éxito.
Por ejemplo en estos momentos por ciertos problemas
de esa cadena, Montevideo no está moviendo mayores cargas, entonces
hacia ellos hay que ir para establecer diálogos con los responsables
directos. No solo miramos el puerto, pues si bien está viniendo mucha
carga, podría venir mucha más.
Puntigliano destacó en su ponencia que “el 54% de la
carga de Montevideo son trasbordos”.
Integración Público-Privada
Hay cuatro actores esenciales que median esta
relación: El cliente, el socio, la autoridad-portuaria y el país en su
conjunto. El cliente es el actor más importante de la cadena logística:
el armador. El socio es el operador portuario. Tengo al cliente y a la
autoridad portuaria, cada uno de ellos con sus propios intereses. Pero
comparten en la actividad intereses comunes entre ellos. Por ejemplo
entre los socios y la autoridad portuaria hemos hecho actividades en
conjunto como nuestros viajes de negocios a Hamburgo, Shangai y este año
a Valencia. Sirve como referencia la captación de negocios en conjunto.
Por último, el país, que muchas veces tiene intereses
distintos, pues la actividad portuaria puede ser una fuente de recursos
para pagar otros servicios. Como vemos existen diversos intereses, por
ello privilegiamos las relaciones bi-direccionales pues el socio ha de
estar orientado al cliente, entre el país y el cliente se está
fomentando el comercio exterior, entre el país y la autoridad portuaria
se debe definir una estrategia de país. Nosotros ya estamos trabajando
en nuestra estrategia como autoridad portuaria, para luego trabajar en
la estrategia portuaria con el conjunto de actores involucrados.
Por ello para la autoridad portuaria también es
importante tener una relación constante con el cliente, y de esa manera
hemos apoyado al socio. Por ejemplo estableciendo una política especial
de dragado, que ha generado una mejora en el negocio.
Puertos
Somos los impulsores del desarrollo. Pero también
podríamos ser un obstáculo en la cadena logística, de hecho el techo de
Santos que tuvo en una época fue el reflejo de eso.
Necesidad de comunicación continúa con todos los
actores. Lo hemos implantado en nuestra organización y ha sido una
enriquecedora experiencia para todos, se trata de un aprendizaje mutuo.
El dimensionamiento del crecimiento del movimiento de
los puertos Uruguayos está en un 13, 5% más indicó Puntigliano. Esto
responde a la intención de captar los “picos de carga”. Se trata de
fidelizar los clientes e impulsar el crecimiento de todo el Sistema
regional de Puertos. Porque en definitiva lo trascendente en el Uruguay
Productivo es la mejora en la calidad de los servicios, el incremento de
la tecnología, ese es el gran desafío al que estamos enfrentados, y en
eso estamos trabajando.
Conferencia Mariano Navas - Presidente Puertos de
Estado de España
¿Cómo se conjuga complementariedad y competencia en
Sistemas Portuarios? El caso español es ese. España tiene muchos puertos
(46) y cada uno de ellos es un nodo de condensación comercial,
industrial. Todos los puertos quieren ser los que canalizan el tráfico
de España entera. Ahí es donde se produce el problema de sobrecapacidad.
El problema es ¿Cómo hemos de hacer de forma ordenada
para que ante un mismo tráfico no se reproduzcan infraestructuras en
diversos puertos y para no tener sobrecapacidad? La respuesta es muy
teórica.
Existen cuatro puntos de reflexión. La primera
pregunta es la sgte.: ¿Por qué no confiar en las fuerzas del mercado?
Dejemos que los puertos españoles compitan entre sí, igual que dejemos
que compitan con otros puertos de la Unión. La respuesta a eso es sí
existe un sistema portuario español o no lo hay. Si existe como todo
sistema, induce una serie de conclusiones, entre ellos la existencia de
un órgano coordinador que intente coadyuvar la racionalización de la
competencia Inter.-portuaria.
¿En qué compiten los puertos españoles entre si? Una
vez establecido ello, los comportamientos deben ir apegados a una
normativa. Por ello lo importante es ver qué tipo de normativa regula la
competencia. Por último los instrumentos de gestión han de estar
insertos en el Sistema Nacional para alimentar la toma de decisión.
¿Es el Sistema Español, un sistema?
Si efectivamente el valor añadido de sistema es
superior a la suma de valores añadidos de cada elemento, entonces
estamos frente a la necesidad de imperiosa de constituirnos en un
sistema. La teoría general de Sistemas nos induce la definición del
Sistema Portuario. Hay tres elementos fundamentales: El estado es el
encargado de planificar la economía del país, de propiciar la riqueza y
su distribución, de equilibrar territorial y sectorialmente el país.
Los puertos de interés general son competencial del
Estado. El 85% de nuestras importaciones entran por mar y el 50% de
nuestras exportaciones también salen por mar, estamos evidentemente ante
un sector estratégico para la economía del país. Por ello es necesario
consagrar una visión del conjunto de los puertos.
Los puertos no son un negocio en si mismo, sino que
son elementos de política económica. El movimiento de personas y
mercancías está para ayudar a la estrategia de desarrollo económico.
La visión de los puertos españoles ha de ser
compatible con cada uno de los elementos del sistema. Lo que no puede
ocurrir es que la visión del sistema anule permanente las visiones
específicas de cada uno de sus elementos. Es necesario buscar el
equilibrio entre ambas visiones, pues la única forma de conformar
sistema es integrando las peculiaridades de cada uno de los puertos.
Cada puerto tiene una zona de influencia, y la suma
de esas influencias constituyen el área de influencia del conjunto, de
forma que siempre que el valor añadido del sistema sea mayor que las de
las sumas marginales de cada uno de los elementos.
La visión del Sistema significa crear un ámbito
ordenador, pero ello no significa uniformizar, pues las prioridades son
distintas. Hay una serie de decisiones que tienen que estar alejadas del
nivel central, como también las hay que deben estar en el nivel central
porque sino se encarecen.
El conjunto de los dos tipos de decisiones deben
conformar lo que llamamos la autonomía enraizada de los puertos. Puertos
del Estado como organismo coordinador del sistema, creando un marco de
libre competencia, estableciendo las normas del juego, los límites de la
competencia interportuaria entre portuarios españoles. Pero todos como
conjunto estudiamos cuales son las formas de ganar competitividad frente
a áreas portuarias no españolas.
Puertos del Estado tiene por ende –respondiendo a las
preguntas iniciales planteadas- la visión del conjunto para racionalizar
las inversiones en infraestructura que se realicen.
¿En qué compiten los puertos privados? Pues en ganar
los espacios del sector privado, es decir, captar sus inversiones,
recursos para infraestructura. Los servicios portuarios son realizados
por empresas privadas.
El puerto, no es un mercado perfecto, hay posiciones
privilegiadas de determinados empresarios que ocupan grandes espacios,
existe un oligopolio en la oferta de operadores. Por ello la autoridad
portuaria debe establecer la calidad y el precio de la prestación del
servicio, para que ello no se convierta en abuso. Esa es la regulación.
Hay muchos intereses involucrados en el negocio
portuario. Por ejemplo en un puerto público, está la Aduana, el Servicio
de Inspección Sanitaria, pero además el puerto quiere que la calidad y
eficiencia de las cargas sean más elevadas. Pero la palabra “público”
nos presentaría a estos dos últimos intereses estén presentes en su
accionar, pero parecen ser monopolios de la racionalidad privada. Por
ello la gestión portuaria no hay que asociarla a cómo se realiza, sino a
que intereses se refiere: el interés general. La gestión puede buscarla
eficiencia, la calidad, pero se defienden intereses públicos: la
facilitación del comercio, el desarrollo económico.
La autoridad portuaria ha de armonizar los diferentes
intereses contrapuestos. Nuestros puertos están concentrando sus
esfuerzos en generar infraestructura y en ello compiten, pero hemos de
tener cuidado en que no se dejen de generar incentivos para la mejora
competitiva en servicios, calidad, etc. |