Los cultivos de invierno superaron las 350 mil hectáreas sembradas y la zafra alcanzó volúmenes excepcionales, debido al aumento en áreas de trigo y cebada respecto al año anterior, el excelente rendimiento obtenido por los productores y las buenas condiciones climáticas permitieron obtener rendimientos históricos en varios productos.

El informe de Estadísticas Agropecuarias sobre la Encuesta Agrícola "Primavera 2006", indica que la superficie sembrada de trigo tuvo un incremento del 26% respecto a la zafra anterior, ubicándose en niveles que no se registraban desde 1999.

A su vez, la producción de cebada aumentó en un 63,3% respecto a la de 2005 y la superficie de avena sembrada, tuvo un incremento significativo, pasando de 17,8 mil hectáreas en 2005 a casi 28 mil hectáreas en 2006.

Asimismo, la intención de siembra de cultivos de verano fue estimada en 513 mil hectáreas, lo cual superaría la zafra anterior en más de 30 mil hectáreas.

Sin embargo, luego del primer trimestre del año, el sector granjero vive una situación complicada debido al exceso de agua y viento acaecidos a principios del mes de marzo, que afectaron las zonas más importantes de la producción horti-fructícola.

El Director General de la Granja, Ricardo Aldabe, sostuvo que la producción de manzana, experimentó un gran deterioro ocasionado por factores climáticos, lo cual puede producir una disminución de la oferta que se estimaba iba a superar a la de 2006. No obstante, la exportación de frutas no registró dificultades, permitiendo la comercialización de 4.500 toneladas de manzanas y 3.500 toneladas de pera.

Desde el punto de vista hortícola, en términos generales, se vieron afectadas las hortalizas de hoja. Como consecuencia, el precio de la lechuga aumentó y las acelgas y espinacas son de mala calidad. Igualmente, Aldabe aclaró que este rubro tiene un ciclo rápido y por lo tanto, una rápida recuperación.

Por otra parte, se pronostica que la producción de cebolla alcanzará un record de 31.000 toneladas; cifra que no se alcanzó en los últimos cinco años. Sin embargo, la cebolla tiene un período corto de conservación, lo que generará un mayor ingreso de este producto al mercado hasta finales de abril, para luego decaer con un inferior ingreso de volúmenes de buena calidad.

Ricardo Aldabe, expresó que uno de los productos agrícolas que más se exporta es la manzana, pero que existe un auge en la producción y exportación de miel que alcanzará un record de 15.000 toneladas. Anunció que esta producción dejará un ingreso importante para el país y superará ampliamente a la exportación de vinos y manzana.

Actualmente, el principal destino de exportación, tanto para la manzana como para la miel y cebolla, es la Unión Europea. Igualmente la Dirección General de la Granja, impulsa la producción agrícola uruguaya, aprovechando la presencia en otros países de INAC e INAVI. Asimismo, la Dirección posee una Unidad de Asuntos Internacionales en el MGAP y trabaja en coordinación con la Dirección de Comercio Exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores en la búsqueda constante de nuevos mercados.

Otras de las prioridades de esta Dirección, es el trabajo a través del Observatorio Granjero, el cual integra junto a Estadísticas Agropecuarias, la Comisión Administradora del Mercado Modelo y la Dirección General de Servicios Agropecuarios.

El Observatorio, realiza reuniones informativas a los productores, industriales e instituciones vinculadas a la producción hortí-fructícola, para intercambiar ideas y definir actividades futuras.

En tal sentido, el pasado jueves, se efectuó la reunión para discutir la producción y comercialización de la cebolla, puesto que es que ésta es la época en la que el productor clasifica su producción y elige qué tipo de cebollas pondrá en conservación en frío.

La conservación, representa una inversión importante para el productor y es necesario decidir si la calidad del producto permite exportar o cuáles serán los precios estimativos para el resto del año.

Aldabe, señaló que este tipo de reuniones tiene una buena participación de los actores del sector, sin embargo, quienes tienen mayores dificultades para acceder a ellas, son los pequeños productores familiares. Igualmente, el Observatorio Granjero, trabaja especialmente con este tipo de productores para demostrarles cuan importante es la información en la toma de decisiones.

Por otra parte, la Dirección General de la Granja, apoya a los pequeños productores, a través del Fondo de Construcción y Fomento de la Granja que se financia con el impuesto a las frutas y a las verduras importadas.

Este Fondo, vuelca sus recursos en proyectos que integran una cadena productiva, priorizando aquellas iniciativas de productores familiares, otorgando subsidios a productores con un máximo de tres hectáreas, asociados a una industria. Una vez aceptado el proyecto, el Fondo financia el 30% del precio final que recibe el productor de la industria.

Un ejemplo de este apoyo, es el subsidio con fondos no retornables que se le otorgó a un productor de tomates en 2002, a través de una industria que los procesa y los concentra. Este proyecto, actualmente produce cerca del 30% del tomate concentrado que se consume en el país.

A su vez, esta Dirección apoya a las mujeres rurales, en su trabajo artesanal de conservas, así como también a los queseros artesanales del noreste de Canelones.