Entre 2005 y 2007, MIDES, invirtió U$S 10 millones en mejoramiento de hábitat tras constatar en un relevamiento efectuado en 6.000 hogares, que el 20% de la población del PANES no tenia baño. El proyecto está en el 10% de su ejecución y tiene acumuladas 5.600 canastas de materiales de construcción que están prontas para asignar.

El plan comenzó el 8 de agoto de 2005, con la firma de un convenio entre el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) y el Ministerio de Vivienda Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTM) que brindó ayuda en los trámites administrativos de las licitaciones de materiales, que en una primera etapa incluyó 80 canastas de materiales de $24.000 cada una, en unas 30 localidades del interior del país.

El relevamiento mostró que la principal necesidad insatisfecha fue la construcción de baños, según se extrajo de las 6.000 viviendas censadas por los equipos técnicos, quiénes elaboraron planes de reciclaje de acuerdo a las condiciones de cada hogar.

El Director de Evaluación de Programas del MIDES, Lauro Meléndez, es quién tiene la responsabilidad directa sobre el Programa Mejoramiento del Hábitat que entre sus cometidos, pretende elevar la calidad de vida de los Protagonistas del Plan de Emergencia.

Meléndez, expresó que "alguien puede decirte que tiene baño cuando en realidad tiene un agujero con un balde en un rincón de una construcción ruinosa o de un rancho porque de hecho hay viviendas que humanamente no podríamos llamarle casas".

En este momento, el proyecto está en el 10% de su ejecución y desde finales del 2006 hasta principios del 2007 se efectuaron 600 intervenciones; para este cuatrimestre se proyectan realizar un total de 400 intervenciones habitacionales.

El plan, se basa en la autoreparación asistida de la vivienda, con apoyo técnico con materiales y está vinculado a las coordinaciones con otros organismos como el MVOTM, SUNCA, Sociedad de Arquitectos del Uruguay y la Universidad de la República.

Los equipos técnicos están integrados por Asistentes Sociales, Arquitectos y trabajadores del SUNCA, que orientan y apoyan el trabajo de los vecinos que no siempre en sus hogares cuentan con personas con la suficiente capacidad para llevar adelante tareas de albañilería.

En 2006, a partir del afianzamiento del MIDES como Ministerio, se desarrollaron a nivel de todo el territorio nacional, licitaciones en distintas localidades con la correspondiente coordinación, para poder llevar a cabo la incorporación de equipos técnicos a las tareas.

El relevamiento se efectuó a través de los datos surgidos de la inscripción al Plan de Emergencia en el Banco de Previsión Social (BPS); y tras realizarse un posterior relevamiento, en las visitas a los hogares donde se constató en los formularios y se corroboró en los domicilios, hacinamiento y una deficiente situación sanitaria, además distintos tipos de déficit en la construcción de las viviendas.

A partir del momento en que se realiza un diagnóstico de la situación, se elabora una estrategia en conjunto entre el Protagonista y el equipo técnico para definir cual será la construcción a realizar y definir el apoyo de obreros del SUNCA a los integrantes de la vivienda en la proyección de las mejoras.

En este trabajo se presentaron dificultades para mejorar la calidad de vida de los Protagonistas, tanto sea desde el punto de vista legal, porque algunas de las viviendas a reciclar no son propiedad de los interesados o están ubicadas en asentamientos, o no están directamente involucradas con quien vive allí ya que son terrenos ocupados, o se pagan alquileres mínimos y debido a las mejoras introducidas se encarece el bien reciclado

El MIDES, firmó convenios con el SUNCA y con la Sociedad de Arquitectos del Uruguay para los departamentos de Montevideo y Canelones, donde trabajan 23 arquitectos y 23 Asistentes Sociales en calidad de coordinadores o directores de obra.

El MIDES está abocado a la tarea de hacer coincidir los tiempos institucionales con la entrega de materiales, en los plazos establecidos, junto a los recursos técnicos y con el desarrollo de un trabajo comunitario, que incluye la participación de los vecinos directamente involucrados con el propósito de mejorar su hábitat cotidiano.