En nuestro país, entre 15.000 y 20.000 familias viven de la clasificación de residuos. En Montevideo la Unión de Clasificadores de Residuos Urbanos Sólidos se beneficia con la implementación por parte del MIDES de programas socio-educativos que apoyan sus cooperativas y en Canelones, "Tu envase nos sirve" promueve el trabajo en condiciones dignas.

La Dirección Nacional de Evaluación y Monitoreo del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), estima que entre 15.000 y 20.000 familias en todo el país viven de la recolección de residuos, según perfil socio demográfico que se elaboró en torno a los hogares que se dedican a la clasificación.

El Programa Uruguay Clasifica, acompaña y respalda a las cooperativas en formación que existen en Montevideo brindando capacitación en alfabetización, apoyo escolar, asesoramiento en fabricación de productos con materiales reciclados, además de posibilitar actividades recreativas para los clasificadores y sus familias.

En ese marco, la Unión de Clasificadores de Residuos Urbanos Sólidos (UCRUS), fue de los primeros sindicatos que participó del pre-piloto del Plan de alfabetización "En el país, de Varela, Yo si puedo", donde se trabajó con los integrantes de la cooperativa de clasificadores "Juan Cacharpa".

Uno de los temas pendientes a resolver es la atención veterinaria, tanto para caballos, cerdos y animales de compañía. Para ello se organizan talleres de capacitación sobre alimentación y cuidados generales de los animales, con la participación de veterinarios que integran equipos multidisciplinarios a nivel barrial.

Uruguay Clasifica desestimula la participación de niños, niñas y adolescentes en cualquiera de las etapas de clasificación artesanal de residuos sólidos urbanos. En ese ámbito, se propuso para los hogares con jefes o jefas adolescentes la creación de becas de estudio de oficios y de talleres barriales de formación.

En ese contexto, está presente "Tu envase nos sirve", proyecto piloto que se instrumentó en el departamento de Canelones, en el marco de la Ley 17.849 de Uso de Envases no Retornables y que se aprobó por parte del Parlamento Nacional en el año 2004, cuya reglamentación está en vías de resolverse a través del Ministerio de Economía y Finanzas.

A partir de la reglamentación, el proyecto, se ampliaría a todo el país y a partir de ese momento, las empresas que utilizan envases no retornables financiarán circuitos de recuperación de residuos limpios, no mezclados, los cuales generarán puestos de trabajos formales para clasificadores.

El Programa que se desarrolla desde el 15 de enero y hasta el 15 de julio incluye a personas que están viviendo situaciones de gran exclusión social y promueve el trabajo en condiciones dignas durante seis horas diarias, con un salario de $3.000 líquidos, más el 50% de la venta del material, ya que los participantes son socios en su recuperación.

Los envases vacíos recuperados, tanto de plástico como de cartón, son llevados a dos centros de acopio en la costa canaria que están ubicados en Atlántida Norte y en San José de Carrasco.

El Programa demuestra que en clasificación de residuos se puede trabajar en condiciones dignas, con indumentaria adecuada a la tarea, -desde zapatos hasta uniforme-, además de bicicletas y carros nuevos, con el objetivo de mejorar las condiciones del circuito laboral y la vida de los trabajadores.

En ese marco, durante tres meses, en la costa canaria, desde el arroyo Carrasco hasta el Solís Grande, se desarrolló el proyecto piloto del cual en una primera etapa participaron 40 clasificadores seleccionados por sorteo.

Semanalmente se recogieron envases casa por casa, en supermercados y grandes complejos habitacionales. Con esa materia prima se fabricaron bolsas, caños para riegos y baldes.

El MIDES busca que los niños integrantes de las familias de clasificadores puedan salir de ese circuito laboral e integrarse al sistema educativo formal, siendo este uno de los temas que más preocupa a las autoridades del Programa INFAMILIA.

El Programa tiene como propósito que personas y familias que disponen como único sustento de la clasificación artesanal de residuos urbanos, logren un cambio en la forma de trabajar y fundamentalmente se integren a la sociedad.

Esta iniciativa promueve el cuidado medioambiental y la reducción de los riesgos sanitarios para quienes realizan la tarea y simultáneamente brinda apoyo para mejorar los recursos extraíbles para su reutilización.

Con este emprendimiento, el MIDES, crea nuevas oportunidades de trabajo y ayuda a comprender que la clasificación de residuos es una tarea necesaria para que la sociedad contemporánea no siga enterrando millones de dólares en materia prima.

El proyecto es posible tras la firma de un convenio de cooperación entre la Comuna Canaria, el Ministerio de Desarrollo Social, (MIDES) el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, (MVOTMA) y la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU).