01/06/07


MATRIZ ENERGÉTICA PRIORIDAD PARA ESTADO, INVERSORES Y GREMIO
El gas natural provee sólo el 3% del consumo de energía en Uruguay a pesar de las fuertes inversiones realizadas y la existencia de tres gasoductos construidos. La capacidad de suministro está concentrada en el sur del país y Paysandú. El Ministro Lepra, dijo que es necesario ampliar su uso domestico y expandirlo a nivel industrial y productivo.

La reducida incorporación de consumidores ante los altos precios relativos y la inestabilidad de abastecimiento fue la característica de la etapa inicial del gas natural en Uruguay. Ante tal situación el Gobierno, estableció la necesidad de reconocer que el gas natural posee cualidades aptas para uso de confort, productivo y generación de energía eléctrica.

En nuestra región se destacan los recursos energéticos de Bolivia, Perú y Venezuela, nuestro país propone participar activamente en alternativas de acceso en el abastecimiento de gas natural.

Las opciones abarcan la participación de Uruguay en el gasoducto sudamericano y el anillo energético. En el seminario realizado en nuestro país sobre el uso del gas natural en el Uruguay, se avanzó en acuerdos como el alcanzado con Bolivia en 2005 que incluye la previsión de un gasoducto hasta Uruguay previo paso por Paraguay.

Además, también Uruguay debe integrar posibles opciones estratégicas, como la participación en proyectos de regasificación de gas natural licuado.

En ese sentido Lepra anunció que el 30 de mayo pasado nuestro país firmó un tratado binacional con Argentina para construir una planta de regasificación en Montevideo para abastecer a todo el Uruguay. La planta tendría una superficie de entre 6 y 8 millones de metros cúbicos.

Por su parte, Alejandro Acosta, del Sindicato del Gas, historió la trayectoria de los trabajadores del gas, desde que en diciembre de 1970 se fue del país la compañía inglesa y los trabajadores se mantuvieron al frente de la planta. En 1982 una Ley impidió que conformaran una cooperativa. En 1992 se dejó de invertir en la planta, de lo cual los trabajadores alertaron y lograron revertir esta situación, añadió Acosta. Asimismo, se constituyó una comisión interventora, hasta que en 1995 asumió Gaz de France, que estuvo 11 años. Posteriormente los trabajadores denunciaron irregularidades, no cumplimiento de puntos establecidos en el contrato y falta de controles del Estado. Hace un año es Petrobras quien está al frente de Gaseba.

Las propuestas del sindicato van desde la renovación y desarrollo de la red, capacitación del personal, pasando por una política de captación de usuarios y gestión de la planta.

Clovis Correa, gerente general de PETROBRAS Uruguay, manifestó su concordancia en un 90% con lo expresado por el representante del sindicato, explicó que la empresa no solo explora y produce petróleo, sino que también lo transporta. Esta compañía estatal tiene además estaciones de servicio, elabora petroquímicos, gas natural, fertilizantes, electricidad y hasta energías renovables en los cinco continentes.

Correa recordó que la integración del continente sudamericano a través de un gasoducto es objetivo clave en la estrategia de la región.

Al analizar la situación de Uruguay, recordó que actualmente ANCAP, Conecta y Gaseba cuentan con una red de 1000 Km. de cañerías, 300 de los cuales necesitan ser sustituidos, tarea que ya comenzó.

También señalo que Uruguay importa, por día, desde Argentina, entre 300 a 500 mil metros cúbicos de gas, pero esta llegada se produce en forma intermitente.

Se calcula que en 2012 le faltarían a la región 71 millones de metros cúbicos por día, por ello, existen proyectos para producir gas natural. Aun así, si todos esos proyectos se concretaran, faltarían 11 millones de metros cúbicos por día en la región. Para Uruguay, que es un país pequeño, es factible solucionar su demanda con la instalación de una planta de regasificación.

Correa recordó que en la región del Cono Sur existen importantes reservas de gas y carbón, y se mostró partidario de que todos los sectores se comprometan en el proyecto de producción energética, así como con la necesidad de una política nacional energética.

Finalmente, indicó que la planta de regasificación implica para Uruguay diversificar las fuentes de suministro de gas natural, transformar a Uruguay en exportador de ese recurso, al tiempo que aumentara la inversión y el empleo en el país, además de impulsar el desarrollo tecnológico.

Alejandro Lebas, de la Coordinadora del Sindicato de la Energía, puntualizó que para este sindicato la energía es un bien publico que debe llegar a toda la población, que defienden las fuentes energéticas renovables y limpias. Así como un uso eficiente y racional de las mismas.

Asimismo, subrayó que los trabajadores de ese sector están a favor de la diversificación de las fuentes de energía y de un plan nacional de energía y que defienden la promoción de acuerdos regionales.

El director de UTE Pedro Aurrecoechea, recordó que la principal fuente energética de nuestro país, la energía hidráulica es un fuente limpia y renovable, y auguró la importante demanda de gas natural, por ejemplo la central de Punta del Tigre que está previsto que en el segundo semestre de 2007 ponga en funcionamiento 6 maquinas para lo cual necesitará de gas natural.

Para 2012 y 2013 UTE prevé la incorporación de otras dos fuentes de generación energética además de la energía hidráulica, que son mayor generación de gas y la generación a carbón.

Analizo la oferta de gas en la región, donde Argentina tiene una demanda interna creciente, Bolivia no conoce con precisión la cantidad de reservas y Venezuela sabe que tiene reservas pero la distancia con Uruguay es considerable.

En cuanto a las perspectivas a corto y mediano plazo, Arruecoechea dijo que en este momento nuestro país renegocia el contrato firmado con Argentina sobre suministro de gas firmado alrededor del año 2000. Esa es la expectativa a corto plazo en cuanto al suministro de gas natural.

A mediano plazo, recordó que Petrobras y Britishgas, junto a ANCAP y al Ministerio de Industria, energía y Minería, evalúan la instalación de la planta regasificadora. Esa inversión ronda los 400 a 500 millones de dólares, cifra que requiere de un socio.

Finalmente, destacó que la política energética es una sola en el país, y que la asociación publico-privada es la única forma de lograr esa inversión.

Finalmente, el asesor de ANCAP Mario Botto, coincidió con el papel del gas natural en la matriz energética de nuestro país, así como el menor costo que implica, analizó el proceso de construcción del gasoducto desde Bolivia a Argentina, así como el gasoducto desde Venezuela, que es un proyecto a largo plazo y que se hará por tramos. Finalmente, destacó que a nivel mundial aumentó en un 60% la comercialización del gas natural líquido en los últimos años.

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