El Director del Instituto de Audiovisual, Martín Papich, manifestó que es necesario impulsar esta actividad para que vaya de la mano con la integración regional. El conglomerado del audiovisual, que involucra a 4.000 personas, es en este momento está delineando estrategias para ensanchar el mercado.

Para el impulso del sector audiovisual se destinaron U$S 500 mil para el desarrollo, en dos años, del programa de cluster audiovisual, dentro del programa PACC, Programa de Competitividad de Conglomerados y Cadenas Productivas, dentro de la órbita de la DIPRODE- Dirección Proyectos de Desarrollo perteneciente a la Oficina de Planeamiento y Presupuesto -.

El Director del Instituto de Audiovisual, Martín Papich, destacó la participación del especialista Jonathan Olsberg –quien brindó conferencia sobre elaboración de estrategias audiovisuales en Chile- para que compartiera su visión sobre el sector en Uruguay.

Señaló, además, que es necesario realizar una integración regional para unificar una misma visión, respecto a cómo hacer para exportar nuestro cine y los productos audiovisuales hacia otras partes del mundo.

Actualmente el conglomerado está realizando un análisis sobre sus fortalezas y debilidades, para abordar la definición y elaboración de una estrategia, mediante la sinergia de todos los agentes.

El Presidente del Conglomerado de Audiovisual, Roque Papa, agregó que los factores que deben ser considerados para exportar productos audiovisuales son: identificar los requerimientos del mercado, encontrar una buena relación entre calidad y precio y saber cuáles son las reglas del mercado.

Jonathan Olsberg, director de la consultora especializada en el mundo audiovisual denominada O-SPI, posee una gran experiencia en la materia y ha trabajado en este mercado desde hace 25 años en diferentes países.

Olsberg manifestó que es necesario segmentar el mercado por cine o televisión, pues los clientes para uno y otro son diferentes.

Señaló las diferencias que existen entre el receptor que está en su casa y viendo un determinado producto audiovisual y / o cinematográfico y, por el contrario, cuando la presencia del destinatario se define desde la sala de un cine.

El especialista, realizó un abordaje de los diferentes grados de pasividad y emoción que puede desarrollarse en la actitud del espectador y analizó la interacción existente entre el escucha ó receptor y el formato de la programación.

Olsberg dijo que viajar por diferentes partes del mundo le ha permitido visualizar las diferencias existentes, y que la realidad de hoy se caracteriza por tener una gran unidad en cuanto a programas, ya que la globalización –hoy en día- es una realidad plasmada en la televisión.

Frente a la tensión que suele establecerse entre los contenidos y el mercado Olsberg afirmó que él siempre es partidario de focalizar y dar importancia central a los contenidos.