El Ministro de Transporte de Colombia, Andrés Uriel Gallego Henao, manifestó -en su ponencia en la 2º sesión de trabajo de ministros iberoamericanos del ramo- que llegó la hora del “desatraso físico”, es decir, de efectuar una actualización de la infraestructura que acompañe los procesos que se avecinan.

Esto requiere -agregó- inversión privada, desarrollo de las asociaciones público-privadas y la continuidad del desarrollo de obras públicas.

Gallego Henao hizo un desglose de los tipos de transporte y de su consecuente situación. En el modo carretero se procura facilitar la fluidez en el transporte, por lo que es indispensable promover sistemas viales de doble calzada.

Para ello, el gobierno colombiano viene instrumentando un programa a 10 años basado en concesiones.

Transitan por Colombia unos 4.500.000 vehículos e ingresan anualmente más de 250.000, lo que se suma a cientos de miles de motos que transitan por las calles. Ello reclama –dijo el ministro- una urgente modificación en la estructura del transporte.

En este marco se promueve una serie de nuevos proyectos, algunos ya adjudicados como el caso de la llamada  “Ruta del Sol” o la “autopista de la montaña”. El país cuenta con nueve proyectos de transporte masivo en las denominadas “ciudades amables”.

En lo que al transporte aéreo respecta, se avanza hacia la instalación de sistemas multimodales y a concesiones aeroportuarias.  Colombia cuenta con muchos aeropuertos comunitarios que no admiten, como tales, concesiones.

Se planifican proyectos que incluyen la adjudicación de concesiones en aeropuertos internacionales como El Dorado, San Andrés y Providencia.

Asimismo se prepara un paquete de seis terminales aéreas y se busca potenciar otros que emergen como vitales para el correcto funcionamiento del sistema.

Gallego Henao consideró “la venta de tiempo y de comunicación” como algo vital en las sociedades modernas, por lo que se necesitan aeropuertos, líneas aéreas y aparatos de calidad. Esto se traduce en un desarrollo equilibrado entre los modos de transporte.

En el modo portuario se procura fortalecer los puertos marítimos como herramienta esencial para la conexión comercial de Colombia con el mundo.

Se debe mejorar la competitividad, argumentó el ministro. Colombia cuenta actualmente con una capacidad de manejo de 150 millones de toneladas pero se prevé duplicar esta cifra.

Finalmente, en lo que al modo ferroviario refiere, el Secretario de Estado entiende que se debe avanzar hacia una consolidación del sector a través de concesiones. Para todo esto se necesita dinero –dijo- pero, además,  comprometer el futuro, dar confianza al sector privado y vincular al sector financiero nacional e internacional, buscando condiciones de la banca multilateral.