Uruguay elabora un Sistema Nacional de Areas Protegidas para fortalecer el cuidado de su biodiversidad y de su patrimonio natural, señaló el director de la OPP, Enrique Rubio, en oportunidad de firmar el Proyecto de "Fortalecimiento del Proceso de Implementación del Sistema Nacional de Areas Protegidas".

Mediante este Sistema nuestro país podrá construir una ingeniería respaldada por insumos técnicos para conservar su biodiversidad, a través de la inversión intelectual, de comunicación y sobre todo, educativa. En el marco de un proceso de cambios relevantes en el país, agregó Rubio, es imprescindible el aggiornamiento de tecnologías y dotar de contenidos sustantivos en valores de preservación del patrimonio natural y cultural.

La firma de este Proyecto marca un hito en el proceso de gestión del territorio y su patrimonio natural, señaló el representante del PNUD, Pablo Mandeville. Con este Sistema se amplia el 1.7% de áreas protegidas del Uruguay. La superficie terrestre protegida pasará de 300.000 a 500.000 hectáreas. Además, se incorporarán por primera vez 500.000 hectáreas de áreas protegidas marinas, agregó Mandeville

Destacó el modelo innovador de gestión público-privada que se experimentará en Quebradas del Norte, y permitirá una expansión en el Uruguay del SNAP y su aplicación en otros países o regiones.

Esta iniciativa es una prueba del interés y compromiso del Gobierno uruguayo de proteger el medio ambiente, acción que redunda en la mejora de la calidad de vida de la población.

El Embajador de España, Fernando Valderrama, sostuvo que este Proyecto no lo financia solamente la Agencia Española de Cooperación, sino también el organismo autónomo de Parques Nacionales de España.

Este Proyecto se enmarca en el programa Eurocaria XXI, que contiene los objetivos de la política española de cooperación en el ámbito iberoamericano, enfocados en la conservación de la biodiversidad y el desarrollo sostenible.

Asimismo, el embajador español anunció el lanzamiento de una publicación sobre los valores naturales y culturales del Uruguay, así como la donación de dos vehículos para DINAMA.

El Ministro Mariano Arana, al agradecer la presencia y trabajo de diversas personas y organizaciones, dijo que este Sistema, está en línea con la apuesta a un Uruguay productivo, con equidad social en la medida que sea territorialmente equilibrado y ambientalmente sustentable.

Recordó que está en el Parlamento la Ley de Ordenamiento y Desarrollo Territorial Sostenible, que va en línea con este Sistema que atiende la biodiversidad y la defensa del equilibrio ecológico, así como la calidad de vida de las poblaciones vinculadas a ese entorno ambiental.

El Sistema atiende zonas especificas como la Quebrada de los Cuervos, en Treinta y Tres, el Valle del Lunarejo en Rivera, Esteros de Farrapos y las Islas del Río Uruguay, en Río Negro, el Cerro Verde y la Laguna de Rocha, Cabo Polonio, la localidad de Chamangá en Flores, además de otras, como los Humedales del Río Santa Lucía.

El coordinador general del proyecto de áreas protegidas, Guillermo Scarlatto, destacó la necesidad de grandes acuerdos a nivel de la sociedad, el país y autoridades para utilizar y cuidar los recursos naturales y el territorio, especialmente en las zonas protegidas.

Si bien Uruguay contaba con áreas protegidas, no contaba con un Sistema, no existía protección para las praderas ni los recursos marinos.

Se avanzó en la articulación de los esfuerzos, involucrando a los ministerios, gobiernos departamentales, además de otras instituciones.

Ya funciona la Comisión Nacional Asesora, integrada por actores públicos, privados y de la sociedad civil.

Se avanzó en planificación de áreas y serán incorporadas siete áreas al Sistema, en tanto otras están en proceso de incorporación.

Además, este Proyecto que hoy se firma permitirá contar con recursos técnicos y materiales financieros para potencializar este proceso, agregó Scarlatto.

Es de destacar que el Proyecto constituye un esfuerzo para seguir avanzando en la consolidación del Sistema Nacional de Areas Protegidas (SNAP), de acuerdo a lo establecido en la Ley 17.234, de febrero de 2000 y su Decreto Reglamentario 52/005. Estas normas declaran "de interés general" la creación de un SNAP como herramienta fundamental para la conservación de la biodiversidad del país.

El objetivo del Proyecto es fortalecer el proceso de implementación de un SNAP que conserve una muestra representativa de la biodiversidad de Uruguay, articulando componentes de diseño y planificación, que implican definiciones a aplicar y ejecutar durante su horizonte temporal (cinco años) y más allá del mismo.

El Proyecto es financiado con una donación del fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF) ejecutada a través del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), recursos del Presupuesto Nacional y de diversos actores públicos, privados y de la sociedad civil uruguaya, fondos de la Cooperación Francesa y la Cooperación Española.