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29 de noviembre, 2007
Uruguay en Foro Mundial de alto nivel sobre seguridad alimentaria en Beijing
En materia de inocuidad y calidad de los alimentos, Uruguay posee una larga experiencia, lo que se traduce en un alto nivel de protección para la población y para los compradores internacionales de sus alimentos exportados. Así lo indicó el Subsecretario de Salud Pública, Dr. Miguel Fernández Galeano, en Beijing, China, en el Foro Internacional de Alto Nivel sobre Seguridad Alimentaria.

En este sentido, Fernández Galeano dio a conocer las líneas de acción que la actual administración lleva adelante en relación a esta política de Estado. El Subsecretario explicó la implementación de la Agencia Uruguaya de Seguridad Alimentaria (AUSA) como instancia de coordinación intersectorial e interinstitucional a nivel nacional; el fortalecimiento técnico del nivel municipal en materia de epidemiología, inspección y laboratorio; el desarrollo de programas integrados de inocuidad alimentaria; el desarrollo de estrategias de comunidades productivas y saludables en busca de incentivo a las pequeñas y medianas empresas para la generación de alimentos inocuos y de calidad. También expuso los alcances de la implementación y celebración anual, cada 20 de mayo, del Día Municipal del Alimento Saludable. Allí se movilizan escolares, productores, elaboradores, distribuidores y comercializadores de alimentos en una instancia de participación comunitaria. Más adelante en su exposición, Fernández Galeano hizo referencia al trabajo conjunto con los Consejos de Educación para incluir contenidos de inocuidad en la enseñanza formal (primaria y secundaria) y al fomento de la participación de la población en su rol de consumidora activa, preocupada y responsable de garantizar alimentos de calidad. Por último, el jerarca señaló la importancia de fortalecer la coordinación internacional a nivel de países y agencias en materia de Seguridad Alimentaria. En este sentido, citó a la Red Internacional de Autoridades de Seguridad Alimentaria (INFOSAN) y en materia regional a la Oficina Técnica de Panaftosa de la OPS – OMS, como forma de consolidar la experiencia acumulada en ocasión de los recientes brotes epidémicos de Aftosa en países del MERCOSUR.

El Foro, contó con la participación de más de 60 países y organizaciones internacionales bajo el liderazgo de la Administración de Calidad, Supervisión, Inspección y Cuarentena (AQSIQ), el Ministerio de Salud de la República Popular China, la OMS y la FAO, en representación de la Comunidad Internacional y se desarrolló entre los días 26 y 27 de Noviembre del corriente.

Como resultado de las presentaciones y deliberaciones de los países integrantes de este foro, se elaboró la Declaración de Beijing sobre Seguridad Alimentaria. El documento, en sus puntos fundamentales reconoce que:

  • La atención de la seguridad alimentaria es una función esencial de salud pública que protege a los consumidores de riesgos de salud ocasionados por peligros biológicos, químicos y físicos en alimentos así como otras situaciones relacionadas a los alimentos; que los riesgos alimentarios
  • Los riesgos alimentarios, de no ser controlados, pueden ser causas de enfermedades y muerte prematura así como de pérdida de productividad y disminución de oportunidades económicas
  • La aplicación desigual de medidas para la seguridad alimentaria entre países así como dentro de los mismos, puede socavar la seguridad alimentaria global
  • Los sistemas integrados de vigilancia en seguridad alimentaria son más adecuados para tratar los peligros potenciales a lo largo de la cadena alimentaria, desde la producción al consumo
  • Las medidas de seguridad alimentaria deberían basarse en evidencia científica sólida y en los principios de análisis de riesgo y no deberían crear barreras innecesarias al comercio
  • La producción de alimentos seguros es, ante todo, la responsabilidad de la industria alimentaria
  • La educación de los consumidores es crucial para promover prácticas de alimentación segura en el hogar y la comunicación interactiva con los consumidores es importante para asegurar que los valores y expectativas sociales estén incluidas en el proceso de toma de decisiones

Y ante esto, se insta a:

  • Establecer autoridades competentes en materia de seguridad alimentaria como cuerpos de salud pública independientes y confiables dentro de un marco legal comprensivo que abarque desde la producción hasta el consumo
  • Desarrollar regulaciones transparentes basadas en análisis de riesgo para garantizar la seguridad en el suministro de alimentos desde la producción hasta el consumo, en concordancia con la orientación de la Comisión Codex Alimentarius y otros cuerpos internacionales relevantes en la fijación de estándares
  • Asegurar el fortalecimiento adecuado y efectivo en la legislación sobre seguridad alimentaria, utilizando en lo posible, inspecciones basadas en Análisis de Riesgo y el enfoque de Punto de Control Crítico
  • Establecer programas de monitoreo a los alimentos y la dieta total que se vinculen a sistemas de vigilancia de enfermedades de naturaleza humana y alimentaria – animal a los efectos de obtener información rápida y fidedigna  sobre la prevalencia y emergencia de enfermedades y amenazas de índole alimentaria en el suministro de alimentos
  • Establecer procedimientos, incluyendo sistemas de rastreo y registro en conjunto con la industria para identificar rápidamente, investigar y controlar incidentes de seguridad alimentaria y notificar a la OMS sobre aquellos casos que caen bajo las Regulaciones Internacionales de Salud a través de la Red Internacional de Autoridades en Seguridad Alimentaria y los Centros Focales Nacionales de IHR
  • Agilizar el refuerzo de las capacidades de seguridad alimentaria, particularmente de países en desarrollo a través de cooperación efectiva entre países en desarrollo y desarrollados como forma de asegurar alimentación segura para todos.