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03 de diciembre, 2007

Educar en clave democrática

Tabaré Vázquez instó a jóvenes militares a formar y formarse como ciudadanos
Vázquez, dijo que la pobreza es el principal factor de riesgo para la salud y para el medio ambiente ya que la pobreza contamina, enferma y mata. Agregó que es necesario erradicarla, tarea que no es sencilla, pero que se logra con educación, opción estratégica del Gobierno para generar igualdad de oportunidades, rol en el cual el Liceo Militar, no es una excepción, se trata de formar ciudadanos con derechos y responsabilidades.

El Presidente de la República, Tabaré Vázquez, dijo que la ciudadanía es el núcleo de la democracia y la democracia no es un adorno sino que es un factor fundamental e imprescindible para que las sociedades funcionen y progresen, al hacer uso de la palabra en la fiesta de fin de cursos del Liceo Militar.

Destacó que los gobernantes deben tener una relación estrecha con la población porque los habitantes del territorio son la soberanía del país.

En ese contexto, recordó que por esta Institución pasaron a lo largo de la historia 17.000 alumnos que constituyen el pasado, el presente y el futuro del país.

El Primer Mandatario, señaló que el Liceo es un ámbito de educación y la fuente básica de las competencias y las capacidades que requieren las personas para formarse como individuos, para prepararse profesionalmente y para insertarse en la sociedad asumiendo plenamente la condición de ciudadanos.

La educación es una opción estratégica para el desarrollo social y es fundamental en la sociedad del conocimiento y de la globalización, agregó, que en ese proceso la humanidad transita con riesgos que se deben superar.

En ese sentido, destacó que la educación es un derecho fundamental y universal y para ello es básico que todos los ciudadanos tengan las mismas oportunidades.

En lo personal, aseguró Vázquez, no compartir la visión que categoriza a los jóvenes en "planchas" y "chetos" y, en ese marco, rechazó la concepción de una educación para pobres y otra para ricos "porque no esta mal ser diferentes, pero lo malo es ser desiguales".

Los gobiernos deben garantizar la igualdad de oportunidades, dijo y en ese sentido destacó que se impulsó el desarrollo del Plan Ceibal: una computadora por niño y por maestro, situación que está abriendo en la actualidad perspectivas increíbles y la potencialidad de las personas.

En ese marco, el Presidente narró los trabajos realizados por algunos de los niños que son participantes del Plan Ceibal, y destacó el trabajo realizado por uno niño que grabó el parto de una vaca, grabación por la se interesó la cadena de comunicación CNN, la cual mostró el video en todas partes del mundo.

El Presidente reflexionó sobre la formación ciudadana y profesional y subrayó que la ciudadanía no es votar cada cinco años, sino que es un amplio sistema de derecho y responsabilidades que comprenden los aspectos políticos.

Asimismo, la formación ciudadana comprende tareas como la salud, la educación, la vivienda, la protección social, el medio ambiente sano, la libertad de credos y de opinión, reunión, circulación, la individualidad, la privacidad, el respeto al semejante, la convivencia democrática y pacífica.

La ciudadanía es el núcleo de la democracia y es un factor fundamental e imprescindible para que las sociedades funcionen y para lograr igualdad de oportunidades, afirmó el Presidente.

Todos tenemos derechos a la salud, protección social y un medio ambiente sano, pero para ello tenemos también la obligación de trabajar.

La pobreza es el principal factor de riesgo para la salud y para el medio ambiente y por tanto, tenemos que trabajar juntos para erradicar la pobreza, situación que no es sencilla, dijo Vázquez.

El Primer Mandatario, manifestó que la pobreza contamina, enferma y mata y en ese sentido, planteó que los estilos de vida inciden en la aparición de enfermedades como el cáncer, la tuberculosis y el SIDA.

En ese contexto, citó los datos de la Unión Internacional contra el Cáncer que expresan que en el año 2002 se detectaron 10 millones de casos, la mitad de ellos en países pobres y los otros en países desarrollados. La organización estimó que en el año 2020 se detectarán 16 millones de casos de cáncer nuevos en el mundo y 12 millones serán en países en desarrollo.

Los principales factores causales de cáncer en los países en desarrollo son la dieta, las infecciones y el tabaco, y agregó que en la educación y en la enseñanza de nuevos hábitos están las claves para defenderse de distintas enfermedades.

Según datos del 2001, en Uruguay el 32% de la población mayor de 15 años consumía tabaco, ese porcentaje descendió en los últimos años, entre los jóvenes al 24% con una marcada tendencia feminización del consumo en sectores pobres de la población.

En su discurso, el Presidente destacó que en Uruguay, todos los días mueren tres personas por cáncer de pulmón dependiente del consumo de tabaco, son 4.500 muertes por consumo directo y 500 muertes por consumo indirecto de tabaco lo que totalizan 13 muertes por día.

En ese sentido, enumeró las distintas medidas que instrumentó el gobierno con respecto a la prohibición de fumar, situación que logró que Uruguay se constituyera en el primer país de América Libre de Humo de Tabaco.

También, explicó los factores que constituyen la Reforma del Sistema Nacional de Salud.

Los países son construcciones permanentes, colectivas y democráticas y señaló que cada ciudadano tiene roles que cumplir con el objetivo de tener un país más solidario, próspero y con iguales oportunidades para todos.

 

Palabras del Presidente de la República, Tabaré Vázquez en el Liceo Militar General José Artigas

Señora Ministra de Defensa Doctora Azucena Berrutti. Señor Comandante en Jefe del Ejército. Señor Jefe de la Casa Militar. Señor Director de la Escuela Militar. Señor Director del Liceo Militar. Señores Oficiales. Oficiales Superiores. Oficiales. Personal. Docentes. Alumnos y alumnas. Señores y señoras. Amigas y amigos.

El Señor Director del Liceo Militar expresó con claridad, con meridiana claridad cual es la intención del Presidente de la República al estar aquí en la mañana de hoy.

Sin duda, constituye un altísimo honor participar en la fiesta de fin de año de todos los Institutos de Educación del país. Públicos, privados, civiles o militares. Pero preferimos en esta oportunidad como decía el Señor Director del Liceo Militar estar más junto a ustedes, podernos ver más de cerca y si ustedes lo desean, también porque no intercambiar opiniones o responder preguntas. Voy a estar a sus órdenes. Por varios motivos. En primer lugar, porque sentimos esta necesidad de estar en contacto con la población, con la gente. Creemos que los gobernantes deben tener un contacto permanente y lo más estrecho posible con la población. Porque finalmente ustedes son, los uruguayos son la soberanía del país.

Y como decía nuestro prócer los gobernantes, en este caso, el Presidente, la autoridad que tiene emana de ustedes y cesa ante vuestra presencia soberana. Por eso es que estamos aquí, esta es una de las razones por la que estamos aquí. Y otra de las razones, es porque no podemos desprendernos de nuestra condición de docente y nuestro contacto permanente a lo largo de tantos años en la Universidad de la República con estudiantes, con profesores.

Y me pareció que era una muy buena oportunidad para utilizar este tiempo con ustedes, junto a ustedes que mucho les agradezco a cada uno de ustedes que me lo hayan otorgado para plantear algunos temas que entendemos son de interés general y en particular para este Instituto.

Gracias, entonces, por brindarme esta oportunidad de encuentro y diálogo con ustedes, alumnos, familiares, ex - alumnos.

Está aquí presente mi queridísimo amigo de tantos y tantos año, Don Julio Sánchez Padilla, ex - alumno de este Liceo, -usted sabe que lo quiero mucho-. Al cuerpo docente del Liceo Militar "General José Artigas", institución fundada hace 60 años y por la cual han pasado alrededor de 17.000 alumnos, ni más, ni menos.

Aquí hay, entonces, mucho pasado. Con luces y sombras, por cierto, como todo pasado en cualquier orden de la vida. Momentos de alegría, momentos de tristeza, momentos de entusiasmo, momentos de pesimismo. Eso es la vida. Finalmente, cuando uno a llega a tener muchos años, como quién habla, se da cuenta de que la vida es hermosísima, más allá de las vicisitudes que a veces tenemos que vivir en algunos momentos.

Pero también, más allá de ese pasado, tan rico, tan importante, tan respetable, también están en ustedes, en todos ustedes pero especialmente los alumnos, que son presente y futuro ya no sólo de esta Institución, presente y futuro sino también del contexto en que ésta se inscribe. Y ésta se inscribe, ni más ni menos en ese todo que nos une, que nos hace iguales por encima de la especificidad de cada uno, que tiene un nombre de siete letras que se llama Uruguay.

Y Uruguay no es solo un pedazo de tierra con gente encima, ni siquiera, es sus símbolos que tan importantes son, sino que el Uruguay son todos y cada uno de los ciudadanos que vivimos y constituimos aquí o fuera del Uruguay lo que mi querido amigo, Don Julio Sánchez Padilla, da en llamar este bendito país. Coincido con usted.

Como Presidente de la República Oriental del Uruguay, entonces, es para mí muy grato estar aquí con ustedes.

Y no solamente porque soy Presidente de la República -un cargo importante pero pasajero-, sino además porque yo también fui estudiante, he sido docente, y aunque ya no tengo hijos en edad liceal, pronto tendré nietos cursando el ciclo secundario.

Este es un Liceo Militar. Por tanto, tiene características formales y curriculares propias, tiene requisitos y orientación también específicos; pero por encima de esas particularidades, es un Liceo, es un instituto de Enseñanza Secundaria.

La palabra "liceo", seguramente como ustedes lo conocen, deriva de la voz griega "lykeion", que denominaba en aquella época una escuela fundada por Pericles donde Aristóteles, -nada más y nada menos- impartía sus enseñanzas.

Esto sucedió en Atenas hace unos 23 siglos, pero desde entonces el Liceo es un ámbito de educación.

Digo educación porque el Liceo es mucho más que un asunto de "enseñanza", de "aprendizaje", de "programas", de "materias" o de "escolaridad". Es mucho más que todo eso junto.

La educación es la fuente básica de las competencias y de las capacidades que requieren las personas, que requerimos todos. ¿Para qué?. Para formarnos como individuos, para prepararnos profesionalmente, pero también para insertarnos en la sociedad asumiendo plenamente la condición suprema que tenemos como uruguayos, la condición de ciudadanos.

Por eso la educación es una opción estratégica en el desarrollo de la sociedad. Siempre lo ha sido, pero lo es muy marcadamente en estos tiempos de sociedad del conocimiento en una globalización que experimenta la humanidad muy auspiciosa pero aún contradictoria y con riesgos que debemos superar.

Y en estrecha relación con lo anterior, la educación es un derecho fundamental y universal que los poderes públicos, los gobiernos, los gobernantes, debemos garantizar para todos los ciudadanos, darle a todos iguales oportunidades.

Su extensión, por tanto, a todos los ciudadanos en condiciones de calidad es el fundamento más sólido para el desarrollo económico futuro del país, pero también para el desarrollo futuro social del Uruguay y el funcionamiento democrático de la sociedad.

Por lo tanto, la educación en el siglo XXI, aparte de ser para todos, también ha de ser igualmente buena para todos.

En lo personal, así como no comparto la visión que categoriza a los jóvenes en "planchas" y "chetos", rechazo la concepción de una educación "para pobres" y otra "para ricos". Porque no está mal ser diferentes, de hecho todos lo somos, nadie es igual al otro, lo que si esta mal, lo malo es ser desiguales. Diferentes somos por naturaleza, pero tenemos que trabajar para que todos tengamos iguales oportunidades en esta vida.

Por eso, porque creo que los gobiernos deben garantizar tanto la igualdad de oportunidades para acceder a la educación y el mayor grado de calidad de la misma, este Gobierno impulsa con tanta decisión y entusiasmo el Plan Ceibal, que como ustedes sabrán va a dotar una computadora por niño de Escuela Pública y por docente de Escuela Pública en todo el país.

Esto no es un logro del Gobierno, esto va a ser un logro de todos los uruguayos. Y ya están se están abriendo perspectivas increíbles de la potencialidad de la inteligencia de nuestra gente. Y aquí, quisiera detenerme algún minuto. Comenzamos con este proyecto con un plan experimental, si ustedes quieren, un plan modelo en una Escuela del interior del país. En el pueblo Cardal en el departamento de Florida. Llevamos a los niños de la Escuela 159, computadoras de las que serán distribuidas a lo largo y ancho de todo el país. Y éstos niños recibieron esas computadoras, las llevaron para su casa, viven en una zona rural en la Cuenca Lechera. Y uno de éstos niños dejando volar su imaginación -hasta quizás inconscientemente-, sacándole todo el fruto que podía en ese momento a la computadora grabó en su casa el parto de una vaca. Que para él era lo más natural del mundo. Lo había visto decenas de veces. Lo grabó, lo dejó en su computadora, fue a la Escuela, mostraron los trabajos que habían hecho y el niño mostró este trabajo que no asombró al resto de los niños porque estaban en iguales condiciones, salvo algunos que comentaron que nunca habían visto este acontecimiento natural.

Esto trascendió, llegó a otras Escuelas porque los docentes conversaron, pidieron una copia de la filmación que había hecho el niño. Se interesaron de Institutos privados de enseñanza de Montevideo por este video y finalmente trascendió a nivel de Internet. CNN se enteró y a hecho circular internacionalmente el video de un niño de nuestro campo que cuando tuvo en sus manos esta formidable herramienta con su mente fresca, con su cerebro nuevo hizo algo que realmente llamó la atención y el aplauso de muchos ciudadanos, no sólo del Uruguay sino del mundo.

Por tanto, esa riqueza intelectual que existe en nuestros niños y en nuestros jóvenes tiene que ser apoyada por un Gobierno. Y este es el compromiso que intentamos llevar adelante. Hay Instituciones privadas de nuestro país que hoy quieren participar en el Plan Ceibal. No para que el Estado les dé las computadoras, que por cierto las pueden comprar esos Institutos, o los niños que van a esos Institutos porque viven en hogares socio económicos de un alto nivel adquisitivo. Le pueden comprar ésta o mejores computadoras. Pero quieren participar de este proyecto porque les va a permitir a niños de Montevideo desarrollarse íntegramente conociendo realidades de nuestro país que si no es de esa manera, quizás nunca la vayan a conocer. O niños del interior de nuestro país que constatándose a través de una red con niños que van a institutos privados de Montevideo de alto poder adquisitivo van a conocer a otros compañeritos que de otra forma no los hubieran podido conocer.

Como se decía en la época que éramos nosotros niños de la Escuela Pública, laica, gratuita y obligatoria que el hijo del obrero se pueda sentar al lado del hijo del doctor y estudiar juntos en un país que de esa forma llegó a ser destaque a nivel internacional y, sin duda, con el aporte de todos ustedes, todos los uruguayos volverán a ocupar lugares de distinción. Ya lo está haciendo en el mundo. No por mérito de este Gobierno, por mérito de todos los uruguayos, reitero.

Hace un momento mencioné, entonces, la palabra "ciudadano". No fue una distracción ni una casualidad.

Los sistemas educativos tienen que educar. Educar es mucho más que "preparar buenos profesionales"; educar es también "formar buenos ciudadanos", ciudadanos conscientes de sus derechos, pero también conscientes de sus responsabilidades.

Miren, queridos amigos, es mucho más fácil formar un profesional que formar un ciudadano.

Ejemplos sobran en la historia de personajes nefastos pero diplomados.

Bin Laden es un caso: se graduó como Ingeniero en una de las mejores universidades inglesas, es un profesional, pero no es un ciudadano, es un terrorista a pesar de ser un profesional.

¿Y qué decir de los científicos nazis que "experimentaban" con los prisioneros en los campos de concentración?

"La ciencia sin conciencia es la ruina del alma", sostenía hace cinco siglos François Rabelais. ¡Cuánta razón tuvo y tiene, a pesar de que pasaron cinco años. Hay que formar y formarse como ciudadanos, además de cómo profesionales y buenos profesionales.

Y al hacerlo, hay que tener en cuenta que la ciudadanía no es solamente "votar cada cinco años".

La ciudadanía es un amplio sistema de derechos y responsabilidades, que por cierto comprende los aspectos políticos, pero también abarca derechos y responsabilidades en otras tareas más allá de las políticas. Tales como la salud, la educación, la vivienda, la protección social, el medioambiente sano, la libertad de credos, la libertad de opinión, de reunión, de circulación, la individualidad: cada uno es cada uno y somos todos diferentes, la privacidad, el respeto al semejante, la convivencia democrática y pacífica porque la democracia es un régimen de gobierno pero también, y sobre todas las cosas, es un estado de la sociedad.

En materia de formación de ciudadanos, las instituciones educativas militares y más específicamente este Liceo, no son una excepción.

No son, ni pueden auto percibirse, ni pueden, ni deben ser percibidos como una excepción. La ciudadanía no es una cuestión de edad, ni de "pelo corto o pelo largo", ni de "uniforme o bermudas", ni de "civiles o militares": es un asunto de todos los uruguayos. Y así lo debemos interpretar.

La ciudadanía es el núcleo de la democracia. Y la democracia no es un adorno: es un factor fundamental e imprescindible para que las sociedades funciones y progresen. Es la mejor forma hasta el momento demostrada de convivencia pacífica entre los ciudadanos pertenecientes a una Nación.

Es cierto, es bien cierto que la democracia no es perfecta y nunca lo va a ser. Pero es el mejor ordenamiento y mecanismo que la humanidad ha podido construir y puede y debe seguir construyendo pues la democracia, reitero, no es perfecta ni lo será, pero siempre es perfectible, y es tarea de todos nosotros perfeccionarla cada día para lograr esa igualdad de oportunidades para todos y cada uno de los ciudadanos de este país.

Dije, también, hace un momento que la salud, la protección social y el medioambiente sano están comprendidos en ese sistema de derechos y responsabilidades llamado ciudadanía.

Todos tenemos derecho a la salud, todos tenemos derecho a la protección social y al medioambiente sano. Pero también tenemos la obligación de trabajar para tener salud, para tener protección social y para tener un medioambiente sano.

Salud, protección social y medioambiente sano están estrechamente vinculados por una razón tan sencilla como que la pobreza es el principal factor de riesgo para la salud y para el medioambiente. Así, como ustedes lo han sentido. Por tanto, tenemos que trabajar juntos para erradicar la pobreza, cosa que no es fácil, que no es sencilla, pero que hay que hacer, hay que trabajar para lograr erradicar la pobreza.

La pobreza contamina, enferma y mata. Y lo vamos a demostrar en esta charla que estamos dando. Y se puede demostrar de muchas maneras, entre ellas una que me interesa especialmente plantear aquí: la incidencia del estilo de vida en el cáncer y, más específicamente, también lo podríamos hacer en otras enfermedades. La tuberculosis fue una enfermedad fundamentalmente más de los pobres que de los ricos. El SIDA, hoy se expande mucho más en los países pobres que en los países ricos. Las enfermedades infecciosas cobran más vidas jóvenes en los países pobres que en los países ricos.

En primer lugar, según datos de la Unión Internacional contra el Cáncer (UICC), en el año 2002 -hace cinco años-, se detectaron 10 millones de casos de cáncer. La mitad de ellos en países en desarrollo, por no decir países pobres. Y la otra mitad en países del mundo desarrollado.

En segundo lugar, la misma organización estima que en el año 2020 - 18 años después-, se detectarán 16 millones de casos de cáncer nuevos, de los cuales, 12 millones serán en países pobres, en países del mundo en desarrollo. Esto tiene una fundamentación científica que la vamos a ver.

En tercer lugar, los principales factores causales de cáncer en los países en desarrollo son la dieta, las infecciones y el tabaco. Y de dos de estos puntos quiero hablar en este Liceo Militar. Esta enfermedad que se transformó en el Mefistófeles de los tiempos modernos, que es una enfermedad compleja, difícil de entender desde el punto de vista biológico y desde el punto de vista científico tiene enormes debilidades. Y la podemos vencer pero para eso tenemos que trabajar todas y todos juntos.

Lo hemos dicho hasta el cansancio y lo vamos a seguir repitiendo. Para luchar contra el cáncer tan importante como puede ser un acelerador lineal o una bomba de cobalto, cualquier producto médico, una sala de operaciones, un bisturí, bien utilizados. También bien utilizados un programa radial, un espacio en una pantalla televisiva, en un medio escrito tiene tanto valor y puede ayudar a luchar contra esta enfermedad como aquellas herramientas terapéuticas.

¿Por qué decimos esto? Porque si es cierto que en la génesis de los tumores, la dieta, las infecciones y el tabaco juegan un rol fundamental y van a transformar la ecuación volcando la mayor incidencia de casos nuevos de cáncer hacia el mundo pobre, es que la herramienta para luchar contra esta enfermedad esta en la educación, en la enseñanza que le demos a nuestra gente para que se pueda defender de estos elementos que van a ocasionar un incremento de la enfermedad. Las infecciones -acá hay muchas niñas, muchas jóvenes adolescentes-, y está demostrado que gran parte del cáncer de cuello de útero que se desarrolla en las mujeres sobre todo jóvenes y que tiene una altísima incidencia en estos días en el mundo es ocasionado y tiene como punto de partida -para ser más preciso- a una enfermedad genital, viral, el herpes virus genital que afecta al hombre y a la mujer que se contaminan en la relación sexual. Y que la aparición del herpes virus recidivante en el cuello de útero de la mujer joven termina desencadenando la aparición de un cáncer de cuello. ¿Cómo podemos evitar que termine de esta manera algo que empieza de una manera inocente?: vacunando contra el virus que produce el herpes genital.

Es cierto, que esto tiene otras connotaciones porque los virus mutan, etcétera, pero tenemos una herramienta para trabajar en esa dirección y el Gobierno está trabajando. Ya está autorizado en el país el ingreso de esta vacuna y estamos estudiando con el Ministerio de Salud Pública incorporarla al esquema de vacunación de las jóvenes, de las niñas para que tengan una herramienta de defensa más importante.

Pero, también, la educación pasa por enseñar a los jóvenes para no tener este tipo de enfermedad, sino para no desarrollar otro tipos de enfermedades del aparato reproductivo que afectan a la globalidad de la persona y que pueden terminar con muerte de gente joven por no tener los elementos educativos necesarios.

Y vaya, entonces, si junto con las vacunas que esto se informe a la población por los medios de información no tiene la misma importancia que tiene el vacunar. La educación es una herramienta maravillosa y fundamental para mejorar la calidad de vida de nuestra gente.

Y lo mismo pasa con el tabaco. Uruguay es, históricamente, uno de los países latinoamericanos con mayor prevalencia del consumo de tabaco, según datos de 2001, alrededor del 32% de la población mayor de 15 años consumía tabaco, fundamentalmente fumando. Hay otras formas de consumirlo, como ustedes saben, me estoy refiriendo al consumo de cigarrillos.

En quinto lugar, y aunque ese porcentaje ha descendido en los últimos años, entre los jóvenes aún se ubica en un preocupante 24%, con una marcada tendencia a la feminización del mismo y a su localización en los sectores socioeconómicos más bajos.

Nuevamente, el factor de información y educación aquí juega un rol importantísimo. En el Uruguay todos los días, hoy, pasó ayer y antes de ayer y pasado mañana, todos los días mueren tres uruguayos por cáncer de pulmón dependiente del consumo de tabaco. Tres. Todos los días. Nosotros nos hemos preguntado en alguna oportunidad, si todos los días por cruzar 18 de Julio a la altura de Ejido murieran tres personas, todos los días del año. Bueno, a los 15 días que mueran tres personas en 18 de Julio en accidentes de tránsito por cruzar la Avenida, a los 15 días aunque 18 de Julio es la Avenida más importante que tiene el país, la tenemos que cortar porque no podemos soportar que suceda esto.

Sin embargo, todos los días solo de cáncer pulmonar, no estoy hablando de infartos, de accidentes vasculares encefálicos, de cánceres otorrinolaringólicos, del cáncer de vejiga, del cáncer del útero, donde también el tabaco juega un rol importante en su desarrollo, solo estoy hablando de cáncer de pulmón, todos los días mueren tres personas en el Uruguay de cáncer de pulmón por consumir tabaco. Esto es atroz.

Si tomamos todos los datos en un país como el nuestro de poco más de tres millones de habitantes anualmente fallecen 4.500 personas por enfermedades tabaco dependientes y otras 500 por tabaquismo pasivo. Porque el que está en un medio cerrado donde se fuma, aunque él no fume lo están obligando a fumar y aspirar humo de tabaco que produce esta patología. Claro, no lo recibe en la concentración del que fuma, pero esta recibiendo, y si se producen 4.500 muertes por consumo directo se producen 500 muertes por consumo indirecto de tabaco. Trece personas por día en un país de tres millones de habitantes. ¿No habría que tomar medidas si en el cruce de 18 y Ejido hubieran 13 muertes diarias por accidentes de tránsito? Entonces: ¿por qué no tomar medidas contra el consumo de tabaco que mata a 13 uruguayos por día? Estamos adoptando medidas. Ustedes las conocen: a) la prohibición de fumar en espacios públicos cerrados, está prohibido. Esto ha llevado a que muchos fumadores me agradecieran personalmente haber tomado esta distinción porque dicen que ahora van a un restaurante o un bar y por lo menos ahí no fuman. Esto me ha pasado. Es paradójico, pero la verdad es que me ha pasado. Pero la prohibición de fumar en espacios públicos cerrados convirtió a Uruguay en el primer país de América y séptimo mundial libre de humo de tabaco.

Pero hay otras medidas, tales como: b) prohibir la publicidad de productos y/o marcas de cigarrillos, tabacos y afines en los horarios televisivos de protección al menor; c) prohibir la publicidad, promoción o patrocinio de productos derivados del tabaco en escenarios y espectáculos deportivos. Yo sé que mi querido amigo, Julio estará de acuerdo con esto. Estoy absolutamente seguro. Yo fui dirigente de una Institución deportiva que tenía un escenario que costaba mucho mantenerlo. Muchas veces recibimos ofertas para hacer publicidad de cigarrillos. Mientras yo estuve en la Presidencia de la Institución, tengo testigos, nunca se hizo publicidad de tabaco. Porque es realmente un veneno imponente para la humanidad. Y esto hay que hablarlo y decírselo a los jóvenes porque los jóvenes son grandes reproductores en su ámbito familiar de todo esto que estamos hablando. Y aquí, también, los medios de comunicación utilizados de manera correcta, como son utilizados, pero agregando espacios para educar y para enseñar pueden jugar un rol importantísimo, tan importante como cualquier otro producto terapéutico.

Y la medida es la colación en la caja de cigarrillos de advertencias al consumidor de lo que se consumirá, etcétera.

Todo ello es importante y ya está insinuando un descenso en la prevalencia del tabaquismo como factor de cáncer.

Descenso, a su vez, en el marco de una estrategia de acción en cáncer basada en: promoción de salud, promover la vida sana. Enseñarles a los jóvenes sobre todo, cuales son los riesgos que corren, que los conozcan, claro que después tienen la libertad de tomar el camino que su libre albedrío se lo marque. Pero hay que educar en estas cosas, hay que enseñar en estas cosas con la experiencia que tenemos los más viejos con un poco más de conocimiento que tenemos, hay que promocionar la salud que es fundamental para la calidad de vida.

Y la vida, créanme es hermosa, ya después de haber vivido muchos años y conocer muchas claves de la muerte por mi especialidad es que cada día amo más a la vida, no a mí persona, a la vida en su conjunto.

Hay que promocionar la salud, hay que trabajar en esa dirección.

Hay que llevar una prevención primaria, luchar contra el tabaco, contra la mala dieta, el engordar por comer mal, también afecta la salud. El sol, la exposición a los rayos solares en horas inadecuadas como cuando hay una gran radiación ultravioleta, como en este momento, hay que tomar sol pero con prevención y cuidado, porque los desarrollos de tumores de piel malignos y muy malignos se han visto incrementados en el último tiempo ante el ataque que la capa de ozono ha tenido, que es la que filtra los rayos ultravioletas que al desaparecer o disminuir deja pasar más radiación que produce tumores de piel muy malignos, bueno, hay que también educar a la población y enseñar sobre estos riesgos.

Y el de las infecciones, ya hablamos de una de ellas.

La prevención secundaria que son los controles periódicos, hay que realizarse controles periódicos en la esfera médica, no es que esté haciendo publicidad porque yo ya prácticamente ya estoy fuera de la profesión. Pero después de los 40 o 45 años, las mujeres tienen que hacerse por lo menos un control mamográfico por año y una ecografía si es necesario y aprender a hacerse el autoexamen de mamas para detectar precozmente la existencia de algún nódulo que obligue a una consulta médica precoz.

Los hombres mayores de 45 años tienen que concurrir periódicamente, por lo menos, al urólogo para que estudie como esta su situación en el aparato genital porque el cáncer de próstata es muy frecuente. Estos tumores detectados en etapas tempranas se curan, pero si se llega en etapas tardías ya es muy difícil curarlos.

Por tanto, la prevención secundaria junto con la primaria y la promoción de salud es de fundamental importancia, los controles periódicos.

Por cierto, tratamientos y cuidados paliativos adecuados, acceso a la tecnología de última generación, la capacitación de los recursos humanos - porque no todo lo resuelve la tecnología- de nada vale que tengamos los mejores elementos tecnológicos en nuestra profesión, sino no hay recursos humanos adecuados para su mejor utilización. La integración de modalidades terapéuticas en el terreno del cáncer, etcétera.

También, debo decir como buena noticia que se están insinuando muchas mejoras en la detección precoz y la cura del cáncer acá en el Uruguay.

Y todo lo anterior, en el contexto de una profunda Reforma del Sistema de Salud, acá está la explicación de porque queremos reformar el Sistema de Salud uruguayo que en interacción con otras reformas van fundando las bases del Uruguay que queremos, merecemos y podemos construir los uruguayos.

Los países son construcciones permanentes, no hubo, ni hay, ni habrá ningún Gobierno que solucione todas y definitivamente todos los problemas que tiene este país y cualquier país del mundo. Siempre, habrá cosas para realizar y mejorar. Por eso son construcciones permanentes y no de los gobiernos, solo, sino de la sociedad en su conjunto, de involucrarnos todos en mejorar un poquito lo nuestro y de mejorar un poquito el entorno que nos rodea. Y esto lo podemos y si esto se suma da un resultado muy importante, muy positivo.

Los países son construcciones permanentes, colectivas y democráticas, con la más amplia participación.

Como en toda construcción, ustedes estudiantes y quiénes ya lo fuimos, tenemos que saber que deben existir proyectos, cimientos, estructuras, cronograma, cierto margen para resolver imprevistos, etcétera, es decir, no podemos improvisar. Tenemos que organizarnos en nuestra vida. Y en la vida comunitaria y en la vida profesional.

Y en esa tarea nadie es imprescindible porque cualquiera de nosotros que falte el Uruguay felizmente seguirá marchando y el mundo, nadie es imprescindible, ni aquí, ni en ninguna parte del mundo, pero todos somos importantes, todos. Tenemos que recuperar esa autoestima se sentirnos importantes en la construcción de una sociedad y de un país.

Cada uno haciendo lo que le corresponde pero todos con el mismo objetivo.

Y con ese ánimo de trabajar juntos, de trabajar unidos por un país más solidario, un país más feliz, un país más próspero, un país con trabajo para todos los uruguayos.

Un país con iguales oportunidades para todos, con ese ánimo he venido a compartir este rato con ustedes, a alentarlos como estudiantes, a sugerirles que disfruten plenamente de las vacaciones -aunque haya que preparar algún examen pendiente-, y a invitarlos a integrarse a esa construcción que viene de lejos, que queremos que llegue más lejos aún.

Y, también, -con todo respecto y afecto al Señor Director, a los señores docentes, profesionales que trabajan en este Liceo- a todas las autoridades a que trabajemos juntos en la búsqueda de ese Uruguay mejor, ese Uruguay que nos merecemos todos los uruguayos estemos de uniforme o de particular, seamos de Peñarol o seamos de Nacional, seamos de la capital o seamos del interior. Un Uruguay que nos pertenece a todos que es hermosísimo pero que puede ser mucho mejor y que depende, no solo del Gobierno de turno, que por suerte los Gobiernos vienen y se van y vendrán otros en el normal y libre juego de la democracia. Pero el Uruguay es mucho más que ese cambio periódico de gobernantes. El Uruguay somos todos, todos y cada uno de nosotros. Todos y cada uno de nosotros somos importantes. Y todos y cada uno de nosotros desde nuestra responsabilidad y asumiendo nuestros derechos podemos trabajar fuerte para mejorar nuestra calidad de vida pero sobre todo para mejorar la calidad y la dignidad de vida de todos los uruguayos.

Yo les agradezco enormemente la atención y el tiempo que me han dispensado. A constituido un honor para mí estar aquí pero también una satisfacción, un placer muy grande y si realmente en algo, aunque en un poquito sirvieron mis palabras, esta noche cuando me acueste le podré decir a mi almohada que he cumplido un poquito más con la tarea que el pueblo uruguayo me ha destinado y que yo intento cumplir de la mejor manera posible.

Muchas gracias a todos.

   
 
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