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07 de enero, 2008

Aula verde

Logros-ANEP: 35.000 niños de 377 Escuelas Públicas despliegan tareas en huertas orgánicas
El desarrollo de actividades de agricultura orgánica, armado de invernáculos, canteros, aboneras o almácigos otorgó a niños de todo el país la posibilidad de consumir productos naturales, repasar asignaturas, trabajar en equipo y brindar a sus familias nuevos conocimientos. Las exitosas cosechas de zanahorias, acelgas, tomates o perejil permitieron realizar envasados, comprar insumos o financiar el viaje escolar de fin de año.

La Directora de la Fundación Logros, Graciela Gancman destacó que la misión, los objetivos y los valores sobre los que trabajan tienen como objetivo principal el desarrollo sustentable de la comunidad a partir de la educación de los individuos.

En ese contexto, precisó que el trabajo en huertas orgánicas, el cuidado del medio ambiente, así como la motivación y la planificación del manejo del tiempo son factores principales para el desarrollo personal.

Gancman, indicó que Logros trabaja en convenio con Educación Primaria desde hace muchos años en todas las Escuelas Públicas del país.

En ese marco, su compromiso consiste en ayudar directamente a los maestros a organizar huertas orgánicas para que luego puedan trabajar con los niños en el contexto de una clase utilizando la pedagogía y la didáctica correspondientes.

La huerta orgánica es una herramienta de educación no formal en la educación formal que transforma a la comunidad escolar que adopta un proyecto que se desarrolla en forma anual.

Logros trabajó en 2007, en 377 instituciones escolares urbanas, suburbanas y rurales; y a partir de 2008 realizarán una experiencia piloto con el Liceo Nº 2 de Paso de los Toros de Tacuarembó donde se trabajará el desarrollo de actitudes y aptitudes entre los alumnos alrededor de la huerta.

La experiencia de trabajo con adolescentes será evaluada y valorada por un equipo multidisciplinario y marcará el inicio de actividades con Enseñanza Secundaria.

Los maestros de las Escuelas que se ocupan de huertas orgánicas utilizan el proyecto como una tarea práctica donde analizan valores como el trabajo en equipo y la cooperación, además de desarrollar las tareas habituales en las asignaturas historia, matemáticas, aritmética o biología.

En ese sentido, cada año, cada una de las Escuelas decide trabajar dentro de la huerta con temáticas distintas.

En cuanto a los lineamientos de cómo plantar, la Fundación Logros enseña a los maestros todos los implementos que se necesitan para el desarrollo de agricultura orgánica, el cuidado del medioambiente, el armado de un invernáculo, un cantero, una abonera, almácigos, y la instrumentación de cosechas exitosas.

De esta forma y cómo se trabaja básicamente durante la época escolar, las actividades de la huerta se realizan en invernáculos para que los chicos tengan la posibilidad de visualizar a corto plazo el resultado.

Asimismo, la huerta es la extensión de la Escuela, es un aula verde que en algunas instituciones educativas resulta el lugar con más altas temperaturas acumuladas por el efecto invernadero.

También, en algunas Escuelas la experiencia de plantar huertas se desarrolla a campo abierto y allí se estudia que sucede con los cultivos en esas condiciones en comparación con el invernadero.

En ese sentido, la responsable de Logros, expresó que se exhorta y motiva a los alumnos a investigar sobre los cultivos, se brindan las pautas de trabajo, actividad que los docentes creen que es una de las grandes fortalezas del proyecto. De esta forma, se logra despertar en los chicos la alegría por descubrir que es lo que sucederá y no anticiparse a los resultados.

Los productos obtenidos de las propias huertas forman parte de la alimentación diaria de los chicos, en algunas escuelas y en los casos en que existe excedente de producción los padres venden lo generado con el objetivo de realizar beneficios para la Escuela.

Gancman, aseguró que básicamente los productos que se producen en la Escuela van directamente al comedor escolar, "los chicos que plantan, comen: esto es una máxima que ya hemos verificado en todas las escuelas que tienen huertas y además, los niños, aprenden a comer verduras".

Y en ese sentido, agregó, parece una utopía pero los chicos del interior del país no están acostumbrados a comer verduras, pero los que plantan comen con satisfacción lo que cosechan.

En cuanto al excedente de verduras, la Directora explicó que la situación depende de cada Escuela, el tamaño del invernáculo, la cantidad de niños, la calidad de la cosecha, la resolución de la Comisión de padres.

En ocasiones, mediante cooperativas formalizadas en las Escuelas los productos se venden y con lo generado se realizan arreglos en los locales, se compran insumos necesarios, se efectúa el viaje de fin de año, se preparan envasados o mermeladas.

En las Escuelas, básicamente se plantan zanahorias, acelgas, tomates, perejil, todo tipo de plantas aromáticas, repollos y todas las verduras de hojas verdes; la cantidad cosechada depende del tamaño de la huerta que se creó en la institución.

Gancman, manifestó que las cosechas deben ser exitosas "porque no queremos agregar frustración a las frustraciones" y es vital que el proyecto sea una posibilidad para el futuro con el objetivo de que los niños puedan implantarlo en sus casas.

Asimismo, afirmó que los niños deben tener satisfacción en lo que ejecutan y es importante que su tarea pueda ser replicada por sus padres y por ellos mismos en forma exitosa.

Para desarrollar sus actividades, la Fundación cuenta con el apoyo, mediante acuerdos, de las distintas Intendencias del país, de otras entidades privadas y de organismos públicos con los cuáles mantiene alianzas que permiten con mucha certeza y energía la realización de trabajo en conjunto.

La Directora, explicó que desde el punto de vista de las empresas privadas se busca que puedan canalizar el tema de la responsabilidad social empresarial a partir de este proyecto brindando apoyos a partir de insumos, servicios o de dinero en efectivo.

La Fundación mantiene un convenio modelo con la Intendencia Municipal de San José, con la Inspección Departamental de Primaria, el Instituto de Colonización Uruguay Rural y la Asociación de Productores de Leche de San José.

En ese ámbito, Educación Primaria tiene un papel muy importante porque es el centralizador de todas las demás organizaciones, Logros actúa allí como un agente que contribuye al cambio.

El rol de la Fundación consiste en trabajar con las Escuelas en la formación de formadores, accionar procesos que se dinamizaron con capacitación, motivar y organizar actividades de extensión que se desarrollan en la comunidad y que estimulan el perfeccionamiento de un modelo de trabajo de descentralización.

En ese marco, en 2007, en San José se trabajo en principio en 20 Escuelas, número que aumentó a 40, situación que marcó una sinergia de trabajo sistemática y de cooperación.

En el departamento de Río Negro hace 3 años que firmaron un convenio con la Sociedad Criolla, quién facilita insumos, técnicos y apoyo en el trabajo en las Escuelas.

En 2007, además del trabajo en las huertas orgánicas se incorporó la experiencia de plantar árboles frutales en seis lugares diferentes, proyecto que contribuye aún más a una alimentación balanceada, complementa el paisaje de la Escuela y devuelve al país árboles de especies rústicas y autóctonas.

Las experiencias de la Fundación Logros están grabadas en el video "Semillitas" producido por estudiantes de la ORT. Asimismo, se publicó la segunda edición de un libro con contenidos técnicos, además de dos obras de cuentos para niños, uno con la historia del proyecto y otro de recetas saludables.

En 2008, se producirá un nuevo libro que centrará las recetas realizadas por escolares, quiénes se presentaron a un concurso a nivel nacional y ganaron, además de la publicación, la posibilidad de conocer la ciudad de Buenos Aires, en Argentina.

   
 
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