Bonomi en el Parlamento
Pilares de MTSS: diálogo social, prevención de
accidentes y fortalecimiento de relaciones laborales
El Ministro, afirmó que los
fundamentos de su gestión son el diálogo social con
empresarios y trabajadores; la negociación colectiva
mediante la creación de ámbitos como los Consejos de
Salarios; la prevención de conflictos; y el
fortalecimiento de las relaciones laborales. En 2007,
la resolución de problemas de orden laboral alcanzó un
96,5%; la tasa de desempleo se ubicó en 7,7%; y la
recuperación salarial fue de 17,3%.
El Ministro de Trabajo y Seguridad
Social, Eduardo Bonomi, aseguró que la Ley de Fueros
Sindicales se obtuvo luego de dos meses de negociación
tripartita con trabajadores y empresarios, no obstante,
las modificaciones surgieron del diálogo y del
intercambio entre las partes.
Negociación, fortalecimiento de la
libertad sindical y diálogo social, son conceptos que
impulsa el Ministerio como un todo y no como un
aluvión, aseguró el Ministro.
Los acuerdos laborales logrados en
2005 se situaron en un 93%, dato que se situó en el año
2007, en un 96,5%.
La DINATRA, elaboró un cuadro
comparativo que refleja que los conflictos atendidos en
2005 fueron 304; en 2006, 768; en 2007 se ubicaron en
951.
La cantidad de reuniones por
conflicto realizadas en 2005 fueron 1.538; en 2006 se
efectuaron 2.092; en 2007 se desarrollaron 2.655.
Asimismo, la cantidad de acuerdos logrados fueron en
2005, 288, cifra que representó un 93%; en 2006, se
lograron 729, número que simbolizó un 95%. De esta
forma en 2007, fueron 918 la cantidad de acuerdos
logrados, lo cual representó un 96,5%.
Los conflictos atendidos en 2006
fueron 733 y en 2007, los conflictos tenidos en cuenta
fueron 907.
Por su parte, las ocupaciones del
2006 fueron 23, cifra que representó un 2,9% de los
conflictos. Mientras que en el año 2007 fueron 24,
situación que constituyó un 2,52% de los conflictos
existentes.
Las horas trabajadas en 2007 fueron
360 millones de jornadas y la pérdida de horas por
conflicto no llegó al 1 x 1000%.
La DINATRA comunica que en el año
2007 se atendieron 3 veces más conflictos que en 2005 y
25% más que en 2006 y se incrementaron, también, el
número de audiencias que los mismos insumieron.
El Secretario de Estado, manifestó
que el país para crecer necesita de empresas
competitivas y trabajadores con buenas condiciones de
empleo para cumplir con el objetivo trazado por la
Dirección Nacional de Trabajo, en cuanto a fomentar la
negociación colectiva.
El Ministro, manifestó que el
objetivo es seguir promoviendo la negociación
colectiva, colaborando con los actores sociales para
que profundicen la utilización de mecanismos autónomos
de prevención de conflictos, situación que implica
continuar con la maduración de las relaciones
laborales.
A partir de 2005 se impulsa un
modelo de relaciones laborales caracterizado por la
negociación colectiva centralizada, la promoción de
naturaleza inclusiva, con énfasis en la autotutela.
El Estado promueve la existencia de
instituciones sindicales con la finalidad de mejorar
los niveles de salarios y la redistribución de los
ingresos. Para ello adoptó un modelo promocional,
basándose en el desarrollo de Consejos de Salarios que
aborden temas vinculados al comercio, la industria, los
servicios, el ámbito rural, y los empleados públicos.
En ese marco, "no se negocia por
empresa sino que se negocia por rama de actividad",
afirmó el Ministro.
En ese contexto, se elevó al Poder
Ejecutivo un proyecto de Ley sobre la necesidad de
crear un Sistema Nacional de Negociación Colectiva.
De esta forma, se desarrolla una
política con modelo promocional que otorga cumplimiento
a lo ordenado por la Constitución de la República y a
los Convenios 98, 154 y 151. También y en ese sentido,
se sancionó la Ley de Promoción y Protección de la
Actividad Sindical.
Bonomi, expresó que las empresas
para poder competir necesitan que su personal trabaje
en buenas condiciones laborales con salarios adecuados.
Agregó que el objetivo de su Ministerio es seguir
fomentando la negociación colectiva y prevenir
conflictos.
El Ministro explicó que es
importante fortalecer la autotutela sindical e indicó
que los sindicatos recorren el conflicto para asegurar
que se cumplan las condiciones laborales y salariales.
De esta forma, explicó que en el
marco de las relaciones laborales se deben asegurar las
políticas de promoción inclusiva, la negociación
colectiva centralizada y en ese sentido, el Estado
seguirá promoviendo la existencia de instituciones
sindicales.
En ese marco, señaló que la
negociación colectiva por empresa estuvo, en años
anteriores, desarticulada al no existir la obligación
de negociar.
Esta situación determinó una
disminución de la fuerza sindical. En el año 2000
desaparecieron más de 30 sindicatos y la crisis de 2003
tuvo como resultado el congelamiento de los salarios de
los trabajadores del país, con una pérdida que llegó al
20%.
El Ministro dijo que en algunos
sectores, como la salud privada, la pérdida se ubicó en
el entorno del 30% y en el comercio llegó hasta un 56%.
Recordó que la desarticulación de la
figura de los Consejos de Salarios, coincidió con las
medidas de no regularización laboral que estuvieron
acompañadas del debilitamiento de los fueros sindicales
y del descenso de las posibilidades de desarrollar
huelgas.
En ese sentido, el Ministro señaló
que ese contexto -según creencia de empresarios y
algunos Legisladores- fue favorable para la inversión y
el desarrollo empresarial.
No obstante, recalcó que las
concepciones modernas que imperan en el mundo se alejan
cada vez más de esa posición. De esta forma, el Jerarca
indicó que esa situación es como las recetas
neoliberales que cuentan con pocos defensores, después
de verse los efectos desgastadores en el mundo
subdesarrollado.
Bonomi, dijo que los organismos
internacionales consideran un error esas políticas
económicas y que están descendiendo los defensores de
la desregularización laboral.
En ese sentido, señaló que se
impulsa el diálogo, la negociación como forma de
desarrollo y el fortalecimiento de las empresas. Las
pautas indicadas en el mundo para los años 1911 y 1990
sobre flexibilización y regularización laboral están
siendo dejadas de lado. No es posible confundir
flexibilización en el plano de la organización
empresarial con desregulación de las Leyes laborales,
aseguró.
La modernización pasa por fortalecer
las relaciones laborales y no por desregularlas, por el
respeto a los trabajadores para lograr que se cumplan
las actividades laborales en un clima cada vez más
hospitalario, estable y menos hostil.
Desde el Ministerio siempre se
impulsó la negociación colectiva a través de los
Consejos de Salarios -tripartito y bipartito-; los
fueros sindicales y el diálogo social.
La Organización Internacional del
Trabajo (OIT) considera que existe diálogo cuando
existe negociación, intercambio e información en forma
aislada o combinada. La negociación puede tener como
resultado el consenso, el acuerdo o el disenso, pero no
deja de existir diálogo porque exista disenso, recalcó
el Ministro.
Acerca de la necesidad de equiparar
las posibilidades de trabajadores y empresarios en una
mesa de negociación, Bonomi citó las diversas
experiencias en otros países, como Suecia, donde la
protección a los actores sindicalizados es más amplia,
a diferencia de la histórica realidad nacional.
Por eso, según el Ministro de
Trabajo, la Negociación Tripartita se plasmó en la Ley
aprobada en el año 1943, con el objetivo de articular
las partes y sostener la negociación, a favor de los
más perjudicados.
Debido a este antecedente, la Ley de
Tercerizaciones promueve la negociación colectiva como
garantía del diálogo social y la negociación inclusiva.
Gracias a este modelo, Bonomi informó que se firmaron
más de 400 convenios colectivos en las dos primeras
rondas de negociación, desde que se reimplantó este
mecanismo.
Además, permitió la formalización
del mercado laboral, con datos históricos de afiliados
cotizantes en el Sistema de Seguridad Social, la tasa
de desempleo más baja y el nivel de ocupación más alta.
Éstos son los guarismos más importantes desde que se
miden estos indicadores en nuestro país, aseveró el
Ministro.
La conflictividad laboral aumenta
debido a la regulación de la actividad. Es decir, los
incumplimientos de los acuerdos movilizan a los
trabajadores, sentenció Bonomi, e indicó que la mayor
parte de los conflictos se producen por este motivo.
El Ministro, finalizó este punto de
la intervención diciendo que los sectores que se oponen
a este mecanismo, ocultan los alcances logrados en la
mayoría de acuerdos que fueron cumplidos por la
generalidad de las empresas del país.
Parte de los conflictos comienzan
porque los trabajadores reclaman que el salario
acompañe el crecimiento del PBI nacional y a su vez,
existe una gran oposición del sector empresarial para
distribuir este crecimiento, explicó. Por ese motivo,
el MTSS no puede mediar con Decretos si desea mantener
los principios del diálogo social.
También indicó que el Ministerio
otorga énfasis en la "autocomposición" para la
resolución de los conflictos laborales porque se trata
de que todos los actores sociales fomenten el diálogo
sin la necesidad de la actividad negociadora del
Gobierno.
Sobre los conceptos de huelga,
ocupación y piquetes, Bonomi dijo que desde que se
derogó el Decreto 512/96, referente a la desocupación
de locales laborales a solicitud de los empleadores, el
debate no hizo referencia a la Cátedra de Derecho
Nacional e Internacional, que avalan la ocupación como
una extensión del Derecho de Huelga.
En materia doctrinaria, el Ministro
de Trabajo recordó que el derecho a la huelga es un
derecho humano, que tiene fundamentos jurídicos
internacionales y que también aparece en nuestra Carta
Magna. Asimismo, recordó que la doctrina nacional
acepta una noción amplia del derecho de huelga y admite
restricciones a su ejercicio, en función de la
esencialidad y algunas categorías de empleados
estatales.
Posteriormente, Bonomi citó
documentos, autores y sentencias judiciales nacionales
y extranjeras para demostrar que, para considerar un
acto gremial, que sea aprobado por la mayoría absoluta
de los componentes del gremio – sentencia 185/93 del
Tribunal de Apelaciones de 1º Turno- y que las medidas
sindicales "atípicas", también están comprendidas en la
protección al derecho de huelga.
Además, destacó que los límites de
la huelga derivan de la lesión de otros derechos o
bienes jurídicos tutelados por la normativa, según la
doctrina ampliamente aceptada. Agregó, que las
restricciones al derecho de huelga se establecen sólo
si pierde su carácter pacífico.
Sobre la modalidad de la ocupación,
el Titular de la Cartera de Trabajo continuó su
intervención en el Parlamento, citando a los autores
nacionales referentes en la materia, además de
sentencias penales sobre ocupaciones en nuestro país.
Pero también se refirió a expertos extranjeros y a
sentencias judiciales internacionales, con el objetivo
de demostrar que la ocupación de los lugares de trabajo
es una extensión del derecho de huelga.
Acerca del piquete como extensión de
la huelga, Bonomi expresó que, según la Comisión de
Libertad Sindical de la OIT, este mecanismo sirve para
asegurar el éxito de la huelga, impidiendo el ingreso
al lugar de trabajo, pero que se debe limitar si dejar
de utilizar medios pacíficos para su implementación.
El Jerarca, explicó que
efectivamente existen situaciones que se dan en el
marco de algunos conflictos que exceden la competencia
del MTSS, que contienen grados de violencia a las
personas o sobre objetos. En ese caso, el Ministerio de
Trabajo puede dar cuenta al Ministerio del Interior o
directamente a la Justicia competente y eso ocurrió en
distintas situaciones.
En ese marco, el Ministro citó el
caso del conflicto de la empresa PROSEGUR, donde el
Ministerio del Interior se manejó mediante la
negociación y el diálogo antes que con la represión
porque el objetivo fue siempre asegurar la libre
circulación sin interferir en las problemáticas
planteadas.
En otro orden, el Ministro afirmó
que las distintas políticas del Gobierno constituyen un
todo y no se contradicen unas a otras sino que se
complementan entre sí.
Bonomi explicó que la inversión
privada superó los porcentajes del PBI, con cifras
históricas y agregó que en ese marco, un país así no
condice con una Nación en la cual la política laboral
desalienta a la inversión.
Del mismo modo, agregó que cuando el
Gobierno se comprometió a bajar el desempleo a cifras
menores del 10% en cinco años, asumió un compromiso
fuerte, ya que en ese momento se contaba con un
desempleo del 14%. Las últimas cifras de la tasa de
desempleo indican que actualmente, se está en un 7,7% y
se prevé que continúe su descenso.
El Secretario de Estado, reiteró que
estas cifras no condicen con un país en el que la
política laboral dificulta la inversión y el trabajo.
Asimismo, subrayó que la actual
Administración se comprometió a lograr una recuperación
salarial del 20% en cinco años; recuperación que hasta
el momento llega al 17,3%.
El Ministro explicó que cuando se
mide el empleo y el desempleo no corresponde hacerlo
por mes o año, sino que se realiza por trimestre móvil.
En el último trimestre del 1989, el desempleo fue del
8%; en el último trimestre de 2004 se ubicó en 11,9%;
tres años después llegó al 7,7%, situaciones que
confirman que está bajando por debajo de lo
comprometido, evento que responde a las medidas
impulsadas por el Gobierno. |