En el marco de la conmemoración del Día Mundial de la Salud 2008 "Protegiendo la salud frente al cambio climático" y del 60º aniversario de la OMS, nuestro país presentó un informe sobre la incidencia de este cambio en la salud de los uruguayos. El estudio revela que este problema se refleja en la variabilidad de las estaciones, que determinan el aumento de enfermedades y morbilidad de la población.

Un ejemplo de esto fue el invierno de 2007, el más crudo desde 1951, fecha en que comienza el registro de temperaturas, generando afecciones respiratorias agudas. Tal es el caso de las inundaciones y sequías, que generan por ejemplo diarreas, vómitos y otras patologías.

Otro caso es actualmente la contingencia del mosquito Aedes Aegypti, la tropicalización de las enfermedades endémicas en otras partes del planeta.

El Director General de la Salud del Ministerio, Jorge Basso, -quien presentó estos datos- explicó que el cambio climático es un tema planetario, pero que repercute a nivel local en las poblaciones.

Por las características demográficas de los uruguayos, se cuenta con un importante porcentaje de personas que tienen enfermedades crónicas, por lo que, tanto los calores como fríos extremos, generan descompensaciones o cuadros crónicos, generan mortalidad y morbilidad, lo cual exige establecer un conjunto de planes y contingencias frente a fenómenos imprevistos, como las inundaciones, tornados o accidentes.

En este sentido, el Ministerio –en coordinación con otras Secretarías- actualizó el certificado de esquema de vacunación, en una inversión próxima a los siete millones de dólares, incorporando nuevas vacunas, algunas para la hepatitis A (teniendo en cuenta las inundaciones).

El año pasado se registraron en tres departamentos –Soriano, Durazno y Treinta y Tres- inundaciones con el saldo de 12.000 personas evacuadas, lo que generó un incremento de leptopirosis –para la cual no hay vacuna- y de cuadros respiratorios por las condiciones de humedad y frío, no así de hepatitis A, dada la campaña de vacunación realizada.

El cambio climático en nuestro país, como país pobre, tiene una fuerte repercusión en estos aspectos adversos. En los últimos años, la variabilidad fue muy notoria y debe llamar la atención de la población, que no puede estar ajena a un problema que vive todo el planeta y que repercute fuertemente en la salud humana.

Junto a Basso, participaron del evento: la Ministra de Salud Pública, María Julia Muñoz; el Ministro de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Carlos Colacce; la presidenta del Correo Uruguayo, Cristina González; el Representante Permanente en Uruguay de la OPS/OMS, Fernando Dora; el Subsecretario del MSP, Miguel Fernández Galeano, el Embajador de EE.UU. en Uruguay, Frank Baxter y demás autoridades de ambos Ministerios, representantes diplomáticos, legisladores y científicos entre otros.

Fernando Dora, aseguró que esta iniciativa demuestra la preocupación, la responsabilidad y el enorme compromiso de las autoridades uruguayas ante el cambio climático, un complejo tema que une el ambiente y la salud.

En este sentido, destacó el esfuerzo por mitigar los daños que esos cambios climáticos ocasionan en la salud de los pueblos y las medidas que pueden ayudar a la adaptación a esos cambios. Se procura preparar a la población para afrontar los riesgos directos e indirectos, principalmente para las poblaciones más vulnerables (niños, ancianos y pobres).

Asimismo, agradeció los reconocimientos otorgados por el gobierno uruguayo con motivo del 60º aniversario de la organización que representa.

En el marco de esta celebración, el Correo Uruguayo –a través de su Presidenta- lanzó un matasellos conmemorativo. María Cristina González felicitó a las presentes por la iniciativa y expuso el material que se publicará en el sitio web del Correo alusivo al Cambio Climático.

El Ministro de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, por su parte, instó a actuar con urgencia ante este fenómeno, principalmente los países que tienen mayor responsabilidad en el tema. Deberán asumir el cumplimiento de sus compromisos establecidos hace 10 años en la firma del Protocolo de Kioto en Japón y a tres años de su entrada en vigor, lo que demuestra que los procesos de negociación internacional no acompasan la urgente necesidad de enfrentar este problema.

Revertir esta situación llevará muchos años, porque estos cambios tienen una escala de tiempo muy diferente a la de nuestras vidas, aseguró.

Uruguay ha demostrado desde muy temprana fecha, su preocupación por atender este problema: ratificó la Convención de Kioto y el Protocolo en el año 1994 y 2000, respectivamente. Como expresión de la voluntad nacional de cumplir con esos compromisos emergentes, en el año 1997, Uruguay presentó su comunicación nacional inicial y en mayo de 2004, presentó su segunda comunicación nacional. En ambos casos fue uno de los primeros países en desarrollo en cumplir con este compromiso internacional.

Actualmente, se encuentra en proceso de elaboración de la tercera comunicación.

Para cumplir con esto, nuestro país cuenta con una estructura institucional en el MVOTMA, creándose así la Unidad de Cambio Climático dentro de la DINAMA.

Si bien Uruguay no contribuye mayoritariamente al calentamiento global, está en riesgo de sufrir los graves efectos del cambio climático global, pudiendo enfrentar serios problemas para alcanzar un desarrollo social y económico sustentable en relación con el medio ambiente, dada la estrecha relación entre los recursos naturales del país y su desempeño económico, dijo.

De todas maneras, un informe británico aseguró que es viable revertir la situación, pero que todo atraso resultaría peligroso y mucho más costoso. Asimismo, revela que quienes se verán afectados en forma más inmediata y con mayor incidencia, son los países más pobres que son los que menos han contribuido a las causas del cambio climático, lo cual revela una gran injusticia, aseguró el Ministro.

Ante tan adverso escenario, IPCC Uruguay ya se preparó identificando un Programa Nacional de Medidas de Mitigación y Adaptación al Cambio Climático, elaborado con la activa participación de grupos de trabajo -cuya implementación fue declarada de interés ministerial- que se reunieron por casi dos años, conformado por representantes de instituciones gubernamentales, con la participación del MSP, el sector privado, de ONG y sector académico.

Finalmente, la Ministra María Julia Muñoz, ratificó la relevancia de atender el tema en pro de la salud de la gente, más allá de los uruguayos, pensando en la población mundial.

Preservar la salud ante el cambio climático, es tomar acciones del presente con una implicancia muy grande en el futuro, pero es también mitigar los efectos futuros que son los que por desconocimiento o imprudencia ha generado dificultades y riesgos en el presente.

Este es un desafío constante, interinstitucional e interdisciplinario, manifestó Muñoz. "El ambiente es algo que tomamos prestado y que tenemos que devolver al menos sin dañarlo. Realmente hasta el día de hoy no tomamos conciencia que es un tema relevante para la salud de los pueblos. Los países aislados no logran nada y es responsabilidad de las organizaciones que velan por la salud y el desarrollo, trabajar todos juntos para mitigar estos efectos en la medida que tengamos el conocimiento y la responsabilidad de hacerlo", finalizó la Ministra.