Del desastre a la oportunidad
Uruguay se encamina hacia una
política de Estado en gestión de riesgos
Los días 13 y 14 de mayo, el
Sistema Nacional de Emergencias, llevará a cabo el
Taller Nacional: del desastre a la oportunidad. Allí,
esta repartición trabajará sobre diferentes tópicos que
hacen a la coordinación de una labor interinstitucional
con el objetivo de crear un marco legal que contribuya
a educar y concientizar a la ciudadanía ante
emergencias de cualquier entidad.
En el mundo entero, el tema de los
riesgos y los desastres vinculados con fenómenos
naturales y tecnológicos creció de forma alarmante en
las últimas décadas. América ha sido afectada por
diversos fenómenos naturales, se podría decir que todos
los países de América Latina y el Caribe han
experimentado algún siniestro natural.
El Ing. Camilo Cárdenas, de origen
colombiano y que se encuentra en Uruguay para
participar de Taller Nacional: del desastre a la
oportunidad, explicó que el objetivo es avanzar hacia
un Sistema Nacional de Emergencias que oficie de órgano
coordinador del trabajo interinstitucional y
multidisciplinario y llegar a construir y concretar una
política de Estado sobre esta temática.
Cárdenas señaló que los riesgos
fundamentales de nuestro país son de origen
hidrometeorológico y que ya se están viviendo los
impactos del cambio climático, que entre otras cosas,
produce una afectación sobre los riesgos. Agregó que el
cambio climático incrementará muchos riesgos, en
diferentes países y en Uruguay en particular.
El técnico destacó que en el
concierto de los países latinoamericanos, el nivel de
conciencia, ante los desastres naturales que crecen de
forma exponencial, aumenta año a año y celebró que el
actual gobierno uruguayo, se haya propuesto liderar un
compromiso en la creación de una política de Estado con
respecto a este tema.
Cárdenas explicó que ser testigo o
protagonista de un desastre natural, nos hace ver que
deja de ser un problema de otros para transformarse en
uno propio. Añadió que, humanamente rechazamos que nos
pueda suceder a nosotros por lo que se debe trabajar
sobre la cultura ciudadana e institucional. Afirmó que,
generalmente los países, manejan un siniestro de forma
puntual y que pocos trabajan durante períodos más
extensos para mitigar o amortiguar los impactos
producidos por una catástrofe natural.
Hizo referencia a la importancia del
concepto de prevención, pero sin perder de vista la
capacidad de fortalecimiento ante una emergencia.
Asimismo remarcó que existen desastres provocados por
conductas antropológicas no intencionales. A modo de
ilustración, explicó que en las últimas 4 décadas, las
catástrofes naturales se multiplicaron por 9 y sus
consecuencias económicas por 15.
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