Cien años de actuación
Servicio veterinario del Ejército
presta asistencia técnico-sanitaria, edilicia y
educativa
El Presidente Tabaré Vázquez
participó de los festejos del centenario del Servicio
de Veterinaria y Remonta del Ejército Nacional,
dependencia dedicada a la explotación de campos
militares, otorgando un espacio físico para maniobras y
ejercicios tácticos. Allí se realizan actividades
productivas y de investigación en busca de las mejores
líneas genéticas, así como cursos para formar
herradores y enfermeros veterinarios.
En el acto de celebración de los
cien años del Servicio Veterinario del Ejército, junto
al primer Mandatario, estuvieron presentes el Ministro
de Defensa Nacional, José Bayardi y el Subsecretario,
Jorge Menéndez, así como autoridades del Ejército,
encabezadas por el Titular del Servicio, Jaime Pacheco,
representantes policiales y diplomáticos, entre otras
autoridades.
Luego de dar lectura a la orden del
día, el Director del Servicio –en su discurso oficial-
realizó una detallada reseña histórica de la
institución y se refirió a la importancia de la remonta
equina, que existe desde el inicio mismo de la Banda
Oriental, teniendo en cuenta que la necesidad de
compra, cría y manutención de caballos para los fines
del Gobierno y del Ejército surgieron desde la creación
misma de Montevideo.
La Inspección de Remonta y Dirección
de Enseñanza y Servicios Veterinarios del Ejército se
crea en 1908 con el objetivo de servir y colaborar en
el desarrollo de la patria y en particular de las
fuerzas que tienen como misión la integridad y defensa
nacional, fin que se mantiene en la actualidad, sostuvo
Pacheco.
En este ámbito se adjudicó a esta
dependencia la explotación de los campos militares.
Actualmente se cuenta con cuatro campos en: Canelones,
Rocha, Salto y Tacuarembó. El cometido primordial de la
institución es brindar un lugar físico para el
desarrollo de maniobras militares y ejercicios
tácticos, pero a los efectos de evitar la
subutilización de esas tierras, se llevan adelante
actividades productivas y de investigación.
El devenir del tiempo llevó a
atender otros requerimientos de la Fuerza y la
sociedad, lo que derivó en la creación de la Escuela de
Herradores y la realización del primer curso de
Enfermero Veterinario que inicialmente se destinó a
funcionarios de la Fuerza, pero posteriormente a
mujeres y hombres de la sociedad civil, de rápida
inserción laboral, informó Pacheco.
Se apostó inicialmente a la
producción del ganado caballar necesario, su
manutención, la salud médico-veterinario así como la
búsqueda de las mejores líneas genéticas.
El trabajo genético se consagra
cuando en las Olimpíadas de Roma en el año 1960, tres
ejemplares producto del haras militar y montado por
jinetes civiles, alternan con los mejores del mundo. En
Sydney 2000, la historia se repitió, esta vez con dos
ejemplares.
Con el objetivo de fomentar el
desarrollo genético logrado desde 1980, se puso a
disposición de todos quienes lo deseen, la posibilidad
de obtener hijos de los reproductores existentes, con
el fin de extender esos beneficios a todo el espectro
nacional.
En esta dependencia se brindan
diversos servicios como: atención sin costo a animales
propiedad de personas poseedoras del carné de
asistencia gratis de Salud Pública; cursos de Enfermero
Veterinario y Herradores, ambos abiertos a civiles y
militares; quirófano de grandes y pequeños animales y
servicio de imagenología para grandes y pequeños
animales de libre utilización; plan de fomento equino,
poniendo a disposición de criadores interesados la
genética que se posee; apoyo veterinario en el
desarrollo de eventos nacionales e internacionales;
apoyo a planes de emergencia en caso de zoonosis;
disposición de instalaciones para jornadas académicas
y/u otras actividades.
Por otra parte, la organización
firmó una serie de convenios con diferentes
instituciones, algunos de ellos ya concretados:
Universidad de la República, Facultades de Veterinaria
y Agronomía, MGAP, MSP, Comando de Remonta y
Veterinaria Argentina y Laboratorio Santa Elena, entre
otros. Asimismo, se destaca la elaboración de un
proyecto de preservación y empleo de pasturas
autóctonas, sostuvo Pacheco.
En el marco de esta celebración, se
hizo entrega de medallas y diplomas al personal que
pasara a retiro tras 25 años de buen servicio.
El Presidente Tabaré Vázquez
descubrió una placa conmemorativa del centenario de la
organización, firmó el libro de visitas y –antes de
partir- conversó con un grupo de niños y docentes que
participaran de la actividad. En ese ámbito, el
Mandatario les aseguró que próximamente recibirán sus
computadoras pertenecientes al Plan Ceibal, proyecto
que en los próximos días entregará el equipo número
100.000.
|