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14 de agosto, 2008

Análisis y propuesta de cambio

“Uruguay: ampliando la igualdad de oportunidades laborales para las mujeres “
El Instituto Nacional de las Mujeres, con apoyo del Banco Mundial presentó la publicación “Uruguay: Ampliando la Igualdad de Oportunidades Laborales para las Mujeres” . La investígación apunta a analizar y contribuir a la elaboración de propuestas tendientes a dar cumplimiento a los compromisos asumidos en el Primer Plan Nacional de Igualdad de Oportunidades y Derechos 2007 – 2011 en el Uruguay social, productivo y democrático..

Se presentó el libro “Uruguay: Ampliando la Igualdad de Oportunidades Laborales para las Mujeres” con participación de la Ministra de Desarrollo Social, Marina Arismendi y el Ministro de Trabajo y Seguridad Social, Eduardo Bonomi.

En Representación del Banco Mundial, Ana María Muñoz y por el Instituto Nacional de las Mujeres, la Directora, Carmen Beramendi.

Se trata de un aporte al análisis y un a contribución  a la elaboración de propuestas tendientes a dar cumplimiento a los compromisos asumidos en el Primer Plan Nacional de Igualdad de Oportunidades y Derechos 2007 – 2011 (PIODNA), en el Uruguay social, productivo y democrático.

El trabajo  presentado desde el Instituto Nacional de las Mujeres, se desarrolló con  apoyo del Banco Mundial. La edición bibliográfica  consta de cuatro capítulos enfocados a analizar distintos ángulos relativos a las oportunidades laborales de las mujeres uruguayas, y con análisis de temas específicos sobre la situación económica de las mismas ..  Se procura también, identificar las características que presentan el fenómeno de la informalidad del trabajo y su impacto en las oportunidades laborales. En este sentido, la investigación de la situación del trabajo doméstico, permitirá colocar en el debate los avances y desafíos para la inclusión y promoción de derechos de las trabajadoras domésticas. En cuanto a la presentación de la agenda legal de género, se espera que contribuya a las reformas necesarias a las leyes vigentes y nuevas disposiciones.

La Ministra de Desarrollo Social, Marina Arismendi,  afirmó que esta presentación es una etapa de medición sobre los avances que ha tenido del Plan Nacional de Igualdad de Oportunidades y Derechos. Dijo que se trató de analizar  aquellas cosas que se establecieron en el Plan, que se elaboraron conjuntamente y que surgieron de las asambleas, estableciendo qué cosas se han cumpliendo a nivel del Estado, a nivel de Consejos de Salarios,  a nivel de las distintas instancias sociales, laborales y  legales.

En otro orden,  Arismendi hizo hincapié en que los trabajadores formales  identifican formalidad con protección social, con jubilación, con asignaciones familiares. Recordó que la pobreza, la excusión y la informalidad tiene rostro de mujer,  y que por tanto, se apunta a avanzar con pasos concretos y discutir el tema para lograr avances.

Por su parte, el Ministro de Trabajo y Seguridad Social, Eduardo Bonomi, reconoció la importancia de este esfuerzo, ya que transitar hacia la igualdades de oportunidades entre hombre y mujeres, no es solamente un problemas laboral.  Apuntó que el mercado de trabajo, es un ámbito privilegiado de contratación de desigualdades,no obstante, señaló que permite intervenir desde el Estado, para modificar esas desigualdades.

Uno de los datos que se muestra la investigación, es que la participación de las mujeres en mercado de trabajo, ha venido en aumento en los últimos veinte años.

Para la representante del Banco Mundial, Ana María Muñoz, la presentación de esta obra se alinea muy fuertemente con los objetivos del programa de expansión de género del Banco Mundial. Si bien responde al objetivo de contar con igualdad de género, como un derecho, responde con más fuerza al hecho de que, la no incorporación de  más mujeres en el marcado laboral, es una estrategia que daña el crecimiento de los países.

Por su parte, la Directora del Instituto Nacional de las Mujeres,  Carmen Beramendi,  indicó que esta publicación muestra cómo la informalidad en el trabajo de las mujeres, termina excluyéndolas aún más, del mercado laboral y también señala que este factor no se corresponde con los niveles de capacitación de las mujeres uruguayas, en comparación con los hombres. En ese sentido, dijo que en general, las mujeres tienen mayor capacitación que los hombres, pero debido a algunos factores -como el reparto desigual de las responsabilidades familiares-, disminuyen sus posibilidades de inserción en el mercado formal. 

También habla de la realidad en el trabajo doméstico, y en ese punto, destacó que en la actualidad las uruguayas son ejemplo en la región, por haber logrado que sus derechos se equipararan al resto de los trabajadores. 

Dijo también Beramendi que esta investigación aporta referencias respecto  al modo como las personas entran en la informalidad,  y asimismo a la situación de  las personas desocupadas, que en su mayoría son mujeres. Presenta también, una agenda legal estratégica de género, en la cual se convocó a representantes de todos los partidos políticos a participar en ella.

Baramendi sostuvo que esta actividad se enmarca en el Plan Nacional de Igualdades y Derechos, considerado como una herramienta constructora de  igualdad.

A continuación, informó que el 67% del trabajo que realizan las mujeres, no es  remunerado y que esta relación se invierte en el caso de los hombres. Estos datos demuestran que la mayoría de las mujeres,  cargan con la responsabilidad de las tareas del hogar y el cuidado de la familia. Para contrarrestar este fenómeno, el Plan de Equidad prevé avanzar en la concepción de que el cuidado sea un bien público, que se le reconozca su valor y que no sea exclusivamente la pareja la que decida quien se hará cargo de las responsabilidades del hogar.

Estos índices se incrementan dentro de los círculos más pobres, donde el 87% de los hogares con jefaturas monoparentales están a cargo de mujeres.

En otro orden, la Directora del Instituto Nacional de las Mujeres, se refirió al proyecto de jubilación que será enviado a la brevedad al Parlamento donde se reconoce por primera vez el trabajo no remunerado de las mujeres. Entre otras cosas, plantea una reducción de 25 a 30 años, descuenta un año por cada hijo y propone licencias para los padres, a modo de incentivar los nacimientos y la responsabilidad compartida entre padres y madres.

Finalmente, agregó que la brecha salarial de género, se mantiene,  ya que la mujer gana el 71% de lo que gana el hombre. A su entender este factor, además de ser injusto, no se corresponde con la inversión que realiza el país desde hace muchos años educando a las mujeres, que en los últimos egresos universitarios, duplican en número a los hombres.

   
 
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