Mesa de Negocios con Uruguay
Presidente Vázquez: alcanzar las metas implica la
creación de nuevos desafíos y compromisos
El Presidente Tabaré Vázquez
expresó que los logros alcanzados implican la creación
de nuevos desafíos y compromisos, por lo que aún queda
mucho por hacer. En ese sentido, enfatizó que durante
los 17 meses que restan de Gobierno, se continuará con
las líneas estratégicas actuales, que conjugan el
desarrollo económico con la justicia social, al tiempo
que reconoció la labor del Ministro de Economía
saliente, Danilo Astori.
En la inauguración de la Mesa de
Negocios con el Gobierno de Uruguay, organizado por The
Economist Intellingence Unit, el Presidente de la
República, Tabaré Vázquez, subrayó la importancia que
significa para el país ser anfitrión por segunda vez de
una actividad de estas características, puesto que
demuestra un grado de compromiso y confianza de esta
organización para con el Gobierno uruguayo. En ese
sentido, el Analista Senior de The Economist
para América Latina, Martín Pickering, reconoció que
bajo el mandato del Presidente Vázquez, Uruguay tuvo
una fuerte recuperación económica, mediante un programa
de reformas ambiciosas en el ámbito social, económico y
democrático.
Por otra parte, el Presidente
Vázquez reconoció públicamente la labor del Ministro de
Economía saliente, Danilo Astori, y agregó que si bien
parece que los ministros de economía suelen entrar por
la puerta grande y salir por la puerta pequeña, sostuvo
que el caso del Ministro Astori es una excepción a la
regla. En ese sentido, agregó que su gestión como
Ministro de Economía se enmarcó en el Programa de
Gobierno y aseguró que la misma se mantendrá durante lo
que resta del actual período gubernamental, la cual
continuará conjugando la responsabilidad fiscal con el
desarrollo sostenido de las políticas sociales; así
como también el crecimiento económico con justicia
social.
En su alocución, Vázquez retomó el
concepto de "gobernar con las luces altas encendidas"
para prever el futuro y anticiparse a él, moldeándolo
desde el presente a partir de determinados valores y
principios, con objetivos y metas definidos.
Señaló que las luces largas
corresponden a líneas estratégicas que buscan la
equidad con inclusión social, el fortalecimiento
democrático, la transformación del Estado, el
desarrollo de infraestructura, así como también el
desarrollo económico basado en el conocimiento, la
cultura, educación y generación de conocimiento y
integración regional e inserción internacional.
En esta oportunidad, agregó que
gobernar también es una tarea sustancialmente humana e
indicó que esto se apoya en que del total de la
población mundial, 1.200 millones de personas viven en
la indigencia; 2.000 millones no tienen acceso a los
servicios básicos de agua y electricidad; 2.600
millones de seres humanos no tienen acceso a servicios
de alcantarillado y saneamiento. Asimismo, dijo que
diariamente, mueren 4.900 niños de diarrea; a cada
minuto muere una mujer en un parto; se estima que en lo
que va del siglo XXI, el cáncer causó tantas muertes
como la Segunda Guerra Mundial y que se gastan 10
billones de dólares en armamento cada cinco días.
En esta coyuntura, señaló que las
luces largas no deben encandilar a los demás, porque
gobernar también es un acto de respeto a la sociedad en
su conjunto, sin excepciones y que ninguna diferencia
justifica la deslealtad, la descalificación o el
agravio.
Vázquez subrayó que ni los proyectos
nacionales, ni sus líneas estratégicas son modas, sino
que son proyectos y compromisos de larga duración que
requieren equilibrio y admiten ajustes en su marcha,
pero cuyos valores y principios deben mantenerse en el
tiempo, ya que en la construcción de los países no hay
atajos ni sirven las estampidas.
En ese marco, recordó que desde el
inicio de este Gobierno, se renegoció el endeudamiento
externo al tiempo que se abordó una deuda interna
acumulada en materia de desamparo social de grandes
sectores de la población.
Desde 2005, la economía del país
creció 23%, asociada a niveles de inversión importantes
en sectores tales como la agroindustria, la
biotecnología, servicios portuarios, la actividad
inmobiliaria y el turismo, entre otros.
El gasto social, pasó de ser del 40%
en 2005 a un 52% en 2008. Se crearon más de 150 mil
puestos de trabajo, disminuyó la informalidad y aumentó
el salario real, al tiempo que la Tasa de Desempleo se
ubicó en el 7,6%; cifra más baja de las últimas
décadas. Vázquez señaló que se lleva adelante una
política laboral equitativa y equilibrada que mereció
el reconocimiento de la Organización Internacional del
Trabajo.
Asimismo, el Presidente Vázquez
resaltó que tanto el Plan de Emergencia Social, como el
Plan de Equidad que se está desarrollando,
posibilitaron una disminución de la pobreza que pasó de
ser 31% en 2005 a 21,7% en 2008.
Del mismo modo, dijo que durante el
primer semestre de este año, la incidencia de la
pobreza significó una reducción de 4,7 puntos
porcentuales respecto al primer semestre del año 2007.
La inversión en educación pública se
triplicó en tres años y a final del período alcanzará
el 4,5% del PBI, ubicándose por encima del promedio de
la región; comprendiendo entre sus acciones la creación
del Plan CEIBAL que se configura como una verdadera
revolución hacia la igualdad de oportunidades de acceso
a la información y al conocimiento, indispensable para
integrarse a la sociedad.
Agregó que apostando a la innovación
se creó la Agencia Nacional de Investigación e
Innovación y se está construyendo un sistema nacional
de innovación al servicio de la sociedad y del sector
productivo.
El Presidente de la República aclaró
que en muchos aspectos, falta más por hacer que antes,
dado que cada logro plantea nuevos objetivos y
desafíos, que deben tomarse como nuevos compromisos.
Dijo que no hay que resignarse a las dificultades, ni
conformarse con lo logrado, ya que siempre se puede
hacer un poco más y un poco mejor, entre todos y en
beneficios de todos los uruguayos.
En ese sentido, Vázquez sostuvo que
los 17 meses que restan de Gobierno no serán
desaprovechados, ya que trabajará con la misma
convicción y entusiasmo del primer día de asumido su
mandato.
Aseguró que el Uruguay está
transitando un camino firme y seguro, que invita a
continuar desarrollando líneas estratégicas tales como
las que se vienen planteando y que más allá de las
próximas instancias electorales y de la sucesión
democrática de períodos de gobiernos mantiene su
confianza en el futuro del Uruguay y en todos los
uruguayos.
Finalmente, el Presidente Vázquez
expresó que esta Mesa de Negocios es el ámbito propicio
para tomar decisiones y acciones concretas en materia
de inversión en un país como Uruguay, caracterizado por
su tranquilidad, seguridad y compromiso con las
instituciones democráticas.
En ese sentido, aclaró que Uruguay
no pretende privilegios ni pide caridad, sino que
reclama las oportunidades a las que tiene derecho
cualquier país y todos los seres humanos, para
construir su propia vida sobre la base de la dignidad
para desarrollarse en sociedad.
El desarrollo, visto como la
conjunción del crecimiento económico con justicia
social, es un concepto plausible, un derecho
inalienable y un desafío y tarea de todos los uruguayos
durante todos los días.
Discurso del Presidente de la
República, Tabaré Vázquez, en la apertura de la Mesa de
Negocios con el Gobierno de Uruguay, organizada en
Montevideo por The Economist Intelligence Unit, el 17
de setiembre de 2008.
PRESIDENTE VÁZQUEZ: Muy buenas
tardes para todos ustedes. Constituye para mi un
altísimo estar aquí, compartiendo este tiempo y este
espacio en el día de hoy, señor Martin Pikerin,
Analista Senior para América Latina de The Economist,
autoridades Nacionales invitados Internacionales,
Miembros del Cuerpo Diplomático, señoras y señores,
representantes de los Medios de Comunicación, amigas y
amigos Suele decirse que segundas partes no son buenas.
Esta es la segunda oportunidad que tenemos de trabajar
con estos temas, aquí en Uruguay. Pero este dicho no es
del caso y no es del caso porque, en primer lugar, esta
ronda de negocios con el Gobierno uruguayo, Organizada
por el Grupo The Economist, no es la segunda parte de
aquella realizada en marzo del 2007, en marzo del año
pasado. En realidad, esta es la segunda vez que The
Economist realiza una actividad de estas
características aquí en Uruguay. En segundo término,
no es la segunda vez porque además, si así lo fuera,
segundas veces no son casualidades. Cuando algo se
repite, por algo será, y cuando un evento como este se
repite, algo indica, algún fundamento concreto tiene,
algún objetivo razonable se plantea. Nuestro
reconocimiento, entonces, al grupo The Economist por la
confianza y el compromiso que demuestra al realizar
esta segunda ronda de negocios con el Gobierno
uruguayo. Y nuestro agradecimiento a todos ustedes, por
participar en la misma e invitarme otra vez a
participar en su inauguración. Señoras y señores amigas
y amigos, para alivio de todos ustedes les adelanto que
no repetiré la integración del año pasado, la cual,
como probablemente muchos de ustedes recuerdan, estuvo
referida a las prioridades líneas y planes del
Gobierno, hasta el fin de su mandato, es decir en marzo
del 2010. Tampoco abordaré temáticas que en el
transcurso de esta ronda serán desarrolladas por otros
integrantes del equipo de Gobierno, entre ellos,
quienes por estas horas, están protagonizando, por
decirlo de alguna manera, un relevo en la titularidad
del Ministerio de Economía y Finanzas. Al respecto -y
agradezco me permitan un breve paréntesis en esta
intervención- estimo del caso hacer aquí tres
consideraciones sobre lo que acabo de decir: La
primera, aunque no disponemos de estadísticas
Nacionales o Internacionales al respecto, parecería que
los Ministros de Economía en todo tiempo y lugar entran
por la puerta grande y se van por la puerta chica y que
el transito entre una puerta y otra es muy breve pero
hay escisiones y el Contador Danilo Astori es una de
ellas. En segundo lugar, no me corresponde reseñar aquí
el desarrollo y los resultados de su gestión de tres
años y medio al frente del Ministerio de Economía y
Finanzas. Pero sí, debo decir que la misma se enmarcó,
no en una línea personal ni de su grupo de trabajo,
sino que se enmarcó en un programa de gobierno que
-valga la redundancia- el desafió y compromiso del
Gobierno en su conjunto, de todo el Gobierno Nacional y
del proyecto político que identifica a este Gobierno.
Debo decir, además, que esta política económica se
mantendrá durante lo que resta del actual periodo de
gobierno, con los ajustes que correspondan. Porque como
ustedes saben muy bien, la economía no es una ciencia
exacta, pero la política económica se mantendrá en
estos diecisiete meses que restan de este Gobierno
Nacional. Seguiremos conjugando responsabilidad fiscal
con desarrollo sostenido de las políticas sociales.
Seguiremos entonces conjugando, crecimiento económico
con justicia social. Y en tercer lugar, la tercera
consideración, como lo hemos hecho en ocasión de otros
relevos en el equipo de Gobierno, en esta oportunidad,
expreso públicamente el reconocimiento del Gobierno
Nacional y de la Presidencia de la República a la labor
cumplida por el contador Danilo Astori, como Ministro
de Economía y Finanzas. Y por supuesto, al contador
Álvaro García que lo sucede en esta responsabilidad,
que reitero públicamente nuestro apoyo y nuestra
confianza. Cierro el paréntesis, y retomo el hilo
conductor de esta exposición que según el programa
establecido, debería centrarse en una visión para el
futuro. Señoras y señores, amigas y amigos, semanas
atrás, al participar en la presentación de la Agenda
Digital Uruguay 2008-2010 para la sociedad de la
información y el conocimiento, temática que por
cierto, no es ajena a la de esta roda de negocios, dije
algo que creo vale la pena repetir aquí. Así como en
materia de tránsito vehicular, a veces hay que
circular con las luces largas encendidas, en materia de
gobierno, no a veces, siempre, hay que circular con
las luces largas encendidas. Porque, gobernar desde
nuestro muy modesto punto de vista, no es solamente
administrar lo que se tiene o gestionar el presente.
Gobernar es también prever el futuro, anticiparse al
mismo, moldearlo desde el presente a partir desde
terminados valores y principios con objetivos y metas
también definidos y mirando de frente las necesidades,
los derechos y la esperanza, que también es un derecho
de toda la gente. Gobernar, es una tarea
sustancialmente humana, tal vez alguien pueda
considerar que estoy diciendo algo rarísimo, pero,
gobernar es una tarea sustancialmente humana y si
alguien piensa que este concepto es pueril lo invito a
repasar los titulares de las noticias nacionales e
Internacionales de las últimas horas, para constatar
si es tan pueril lo que estoy diciendo. Y si desea ir
más allá de las noticias, vamos también, pegamos un
vistazo a lo que sucede en el mundo. A) Del total de la
población mundial, 1.200 millones de seres humanos
viven en la indigencia, B) 2.000 millones de personas
no tienen acceso a servicios básicos de agua y
electricidad, C) 2.600 millones de personas no tienen
accesos a los servicios de alcantarillado y a
saneamiento. D) Diariamente, todos los días, mueren
4.900 niños de algo tan evitable o curable como la
diarrea. E) Cada minuto, muere una mujer por parto, no
parece que estamos en el siglo XXI, en cada minuto,
una mujer muere en un parto. F) Se estima que en lo que
va del siglo XXI, en estos ocho años, casi ocho años,
el cáncer ha causado tantas muertes como las que causó
la segunda guerra mundial. Y en este punto, hay que
decir que hay factores de cáncer, por el momento
inmodificables, no los conocemos, no los podemos
modificar, o aún conociéndolos la ciencia todavía no
los puede modificar. Pero también, existen factores
modificables, factores de incidencia en la morbilidad
del cáncer, modificables que están directamente
vinculados a la calidad de vida a las condiciones de
vida, a la pobreza y a la desigualdad. Y eso no se
resuelve con tecnologías médicas sofisticadas, se
resuelve con decisiones políticas y además con
políticas concretas. G) Y en lo que va de este siglo,
en lo que va de este siglo, se gastan billones de
dólares cada cinco días en armamentos. No está en mi
ánimo agravar este panorama diciendo precisamente, en
este ámbito, que al mundo le sobra economía y le falta
filosofía. Pero acaso, este panorama, no se parece
demasiado a un manicomio gestionado por sus propios
pacientes. Si uno se detiene en estos datos, hay tal
racionalidad detrás, que como dicen los muchachos,
meten miedo. Entonces, vaya que gobernar es una tarea
humana, vaya si es necesario reiterarlo para tenerlo
siempre presente. Señoras y señores, amigas y amigos:
hay que gobernar con las luces largas encendidas,
porque ellas posibilitan una mejor visión del futuro,
obviamente, que sin usarlas para encandilar a los
demás, o encarar otras maniobras temerarias, pues
gobernar es también un acto de respeto a la sociedad en
su conjunto, sin exenciones- En democracia no hay
dramatizar las diferencias, pero ninguna diferencia,
por las dudas. que sea, justifica la deslealtad la
descalificación o el agravio. Usando las luces largas
en cambio, como trazo de determinadas líneas
estratégicas, que en nuestro caso son enumeradas en
titulares, pero sin que ello implique un orden
taxativo, una equidad con inclusiones sociales. 2)
Fortalecimiento Democrático, 3) Transformación del
Estado, 4) Desarrollo de infraestructura.5) Desarrollo
económico, basado en el conocimiento, 6) Cultura,
educación y generación de conocimiento, 7) Integración
regional, pero también inserción Internacional. Sin
novedad en el frente. Frente, con minúscula, como
estamos en una etapa preelectoral, no estoy hablando
del Frente con mayúscula sin obviar, en el Frente
podría decir es verdad es verdad. Menos proyectos
nacionales, como el nuestro, que contiene estos
principios que acabo de anunciar. Ni los proyectos
nacionales, ni sus líneas estratégicas, ni los
programas del Gobierno son simplemente modas. No son
proyectos y compromisos de larga duración, que como
tales requieren equilibrio, y admiten ajustes en su
marcha, pero cuyo valores y principios así como su
dirección, y sentido ha de mantenerse en el tiempo. En
la historia no hay marcha atrás ni repetición, y en la
construcción de los países no hay atajos, ni sirven las
estampidas. También podrá decirse que a este Gobierno
le queda mucho por hacer, pero le falta tiempo.
Comparto parcialmente tal asimilación, por cierto que
aún tenemos mucho por hacer. En algunos aspectos, un
poco menos que cuando iniciamos nuestra gestión el 1 de
marzo del 2005. Pero créanme, que fue mucho lo que se
ha echo en estos tres años y medio. En efecto, desde
entonces desde el 1 de marzo de 2005 se renegoció, un
agobiante endeudamiento externo que estamos saldando,
al tiempo que abordamos esa suerte de deuda interna,
que se había acumulado en materia de desamparo social
de vastos sectores de la población. La economía del
país creció 23%, 23% y ha estado asociada a niveles de
inversión muy importante, muy importante, en sectores
tales como agroindustria, la biotecnología, los
servicios portuarios, la actividad inmobiliaria, el
turismo, etcétera. Se está transformando la realidad
fiscal, tanto en los ingresos necesarios para financiar
el gasto público, como en el gasto público en sí cuya
estructura también está registrando un cambio
sustantivo.
El gasto social, por ejemplo, ha
pasado de 40% al inicio del 2005 a un 52% en este
momento. Se crearon más de 150.000 puestos de trabajo y
la tasa de desempleo se ubica en el 7.6% la más baja
registrada en las últimas décadas. Pero no solo se han
creado puestos de trabajo, ha disminuido la
informalidad y ha aumentado el salario real.
Se lleva adelante lo que entendemos.
una política laboral equitativa y equilibrada, que ha
merecido internacionalmente el reconocimiento de la
Organización Internacional del Trabajo .Se ejecutó un
plan de Emergencia Social y se está cumpliendo un plan
de Equidad, que ha posibilitado que la pobreza haya
descendido del 31% al inicio del 2005, al 21.7% en
este último momento. Casi 10 puntos, en 3 años y
medio, un 30% de inclusión real de la pobreza. Durante
el primer semestre de 2008, la incidencia de la pobreza
significado una reducción de 4.7 % porcentuales
respecto al primer semestre del año pasado.
Al fin del cabo, ¿es que sólo la
oposición puede hacer oír su voz -y así esta muy bien
que sea- sobre la gestión de gobierno? ¿Acaso el
gobierno no tiene la obligación de informar y el
derecho a fundamentar su propia gestión? La democracia,
al igual que los programas de gobierno, no es una moda
o una calle de una sola mano.
Pero aún arriesgo de ser mal
interpretado y se arme un escándalo de respetables
dimensiones y alta sonoridad en los próximos días,
quiero decirle que en muchos otros aspectos, como dije
que falta menos, también debo decirles a todos ustedes
que, en muchos aspectos o en otros aspectos, falta más
que antes.
Si, porque cada logro, por modesto
que sea, plantea nuevos objetivos y nuevos desafíos y
entonces plantea nuevos compromisos. A medida que
avanzamos vamos descubriendo nuevos horizontes y
también vamos demostrando y demostrándonos que es
posible alcanzarlos. Vamos demostrando y demostrándonos
que no hay que resignarse a las dificultades. Que no
hay que conformarse con lo logrado. Que siempre se pude
hacer un poco más y un poco mejor entre todos y en
benefició de todos. En fin, que los uruguayos,
merecemos y podemos hacer del Uruguay un gran país,
porque las naciones son mucho más que su dimensión
territorial y su número de pobladores.
¿Acaso no es posible que nuestra
economía siga creciendo? ¿Acaso no podemos mejorar más
aún el clima favorable a la inversión productiva?
¿Acaso no debemos mejorar nuestra infraestructura
energética, física, de conectividad y comunicaciones?
¿Acaso no es un imperativo ético, condición de
desarrollo económico y social y factor de convivencia
democrática, abatir la pobreza y generar igualdades de
oportunidades? ¿Acaso no podemos desarrollar aún más la
mejor política social que un gobierno puede llevar
adelante que es generar más y mejores puestos de
trabajo para nuestra gente?
Pretender una economía rica con
gente pobre es tan absurdo, como pretender enjaular el
viento. Pero además de absurdo es peligroso. Respecto
al tiempo al cual dispone el actual Gobierno, decíamos
que queda mucho por hace y poco tiempo para lograrlo.
Pero respecto a ese tiempo, es obvio que cada instante
que pasa es un instante menos. Pero no desesperemos,
los diecisiete meses que restan para la finalización
del presente periodo, no es un lapso despreciable y no
lo vamos a desaprovechar. En lo personal, trabajaré
hasta el último día de mi mandato con la misma
convicción y el mismo entusiasmo del primer día.
En el planteo de esta charla, se me
preguntaba qué pasará en el próximo período de
gobierno, que sucederá a partir del 1º de Marzo del
2010. No tengo, como ustedes tampoco lo tienen pienso,
poderes adivinatorios. Pero sospecho que lo que más de
uno en este momento se esta preguntado: ¿y después,
qué? ¿Qué color tendrá el próximo Gobierno?
¿Continuarán las líneas estratégicas de la actual? Y
por su puesto la pregunta del millón: ¿quién será el
próximo Presidente de la República?
Voy a intentar ensayar una
respuesta. Porque no son preguntas impertinentes en una
ronda de negocios como esta, en cuyo programa de
trabajo esta previsto una sección que considerará el
impacto en las elecciones del 2009, en los negocios y
la economía y en la cual participaran destacados
politólogos, analistas y expertos en opinión pública,
locales e internacionales.
Pero creo que el Uruguay esta
transitando un camino firme, un camino seguro, un
camino que invita a continuar desarrollando líneas
estratégicas, tales como las que hemos planteado. No ya
como Gobierno, sino como ciudadano, como ciudadanos
todos, para llevarla adelante entre todos.
Y esa pregunta, seguramente, se las
esta planteando el estimado amigo Pikerin que es
Analista Senior para América Latina de la The Economist
Intelligence Unit. Y reitero, no son preguntas fuera de
lugar. Pero, la verdad que a modo de respuesta yo no
puedo responderlas. No soy adivino, no me siento apto
para hacer pronósticos, no me gustan las apuestas.
Pero además, no corresponden que las
responda. Lo cual no significa que sea indiferente o
neutral, respecto a la temática a la cual las mismas
refieren. Nadie es indiferente respecto a su país, o
neutral ante su destino.
Como Presiente de la República, hoy,
sólo puedo decirles que más allá de las instancias
electorales y de la sucesión democrática, felizmente,
de periodos de gobierno, que son ingerentes por cierto
a la democracia, tengo confianza en el futuro del
Uruguay y confianza en todos los uruguayos.
Quiero compartir esa confianza con
ustedes, e invitarlos a que la expresen o continúen
expresándolas en decisiones y acciones concretas. Y
esta ronda de negocios es una ocasión propicia para
esas. Quienes quieran invertir en el Uruguay
encontraran, como ustedes saben, un país tranquilo,
seguro profundamente enamorado de la democracia, de las
instituciones democráticas, del valor de sus
instituciones, de respecto por la tolerancia, el
respecto al que piensa distinto, de la seguridad,
Y además, puedo decir en nombre de
todos los uruguayos, sin temor a equivocarme, que el
Uruguay no pretende privilegios ni humildemente pide
caridad. El Uruguay reclama las oportunidades a las que
tiene derecho cualquier país. Las oportunidades a las
que tienen derecho todos los seres humanos, para
construir su propia vida sobre bases de dignidad y
desarrollarse en sociedad.
El desarrollo, en tanto conjunción
de crecimiento económico y justicia social, es un
concepto plausible, un derecho inalienable. Pero
además, es un desafío hermoso. Pero no olvidemos que
también es una tarea de todos y de todos los días.
Amigas y amigos, Visión para el
Futuro fue el titulo que me sugirieron los
organizadores de este encuentro, al invitarme a
participar de la apertura del mismo. No sé si habré
colmado sus expectativas. En todo caso y para
finalizar, vuelvo al inicio de mi intervención y
reitero que por nuestra parte seguiremos gobernando con
las luces largas encendidas, para mejorar esa visión
del futuro.
Pero no basta con ver el futuro, hay
que recorrerlo, hay que construirlo. Y eso se hace
desde ahora, desde el presente. En esa tarea estamos y
en la misma, ustedes pueden contar con nosotros, como
nosotros contamos con todos ustedes. Muchas gracias. |