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30 de setiembre, 2008

Avances del Proyecto SNAP

Áreas Protegidas se determinan por paisajes, ambientes, especies y valores genéticos
El Coordinador del Proyecto SNAP, Guillermo Scarlato, subrayó la relevancia del ingreso de la Quebrada de los Cuervos al Sistema Nacional de Áreas Protegidas. Precisó que cuenta con valores paisajísticos muy destacados; se trata de una hondonada en el territorio, producida por cursos de agua que la excavaron profundamente. Asimismo, destacó que allí se genera un microclima favorable para el desarrollo de especies valiosas.

Según un Informe realizado por la División Biodiversidad y Áreas Protegidas de la DINAMA, "Uruguay está implementando su Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP), una herramienta que permite armonizar el cuidado del ambiente, en particular de la diversidad biológica, con el desarrollo económico y social del país". "Uruguay es uno de los pocos del subcontinente que no cuenta con un SNAP propiamente dicho"y "cuenta con 26 áreas bajo distintas formas de protección legal".

El Coordinador General del Proyecto SNAP, Guillermo Scarlato, subrayó la relevancia del ingreso de la Quebrada de los Cuervos al Sistema Nacional de Áreas Protegidas. La particularidad del hecho radica en que este es el primer ingreso de una zona protegida al Sistema.

Destacó que además de la mencionada área, hay un conjunto de áreas que están en proceso de ingreso, lo cual implica que deben cumplir una serie de requerimientos técnicos y científicos, que especifiquen los valores a proteger. Scarlato señaló que esos procesos son importantes, ya que se realiza un proceso de consulta de los distintos actores sociales, tanto a escala nacional, como local.

En otro orden, explicó que se está trabajando para definir una estrategia de desarrollo del Sistema a mediano y largo plazo.

Además, señaló que se están desarrollando actividades vinculadas a la formación de recursos humanos; en particular, destacó que está por iniciarse una instancia de formación de guarda parques.

Scarlato puntualizó que se realizan una serie de acciones que tienen que ver la difusión, sensibilización y educación en estos temas.

El Coordinador de la SNAP apuntó que el Proyecto pretende recoger la mayor variedad de formas posibles de la biodiversidad (variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente) a escala del país, tomando en cuenta distintas escalas o niveles. Importan los paisajes, los ambientes, las especies y en último término –tomando en cuenta el nivel de detalle- importan los valores genéticos. Esos niveles son los que se están analizando a escala del país para definir dónde deben ir las diversas áreas protegidas, de manera de dejar incluido dentro del Sistema una muestra representativa de esa diversidad. A su vez, eso incluye al territorio continental y al territorio acuático (marino y estuarino).

En Uruguay se destacan los ambientes de pradera, pastizales, que si bien parecen muy homogéneos, en la medida que son estudiados, se aprecia que incluyen una diversidad enorme de distintas formas de pradera. Según el Informe citado anteriormente, "sus praderas comprenden más del 70% del territorio nacional e integran una de las áreas de mayor riqueza de especies germíneas o pastos del mundo".

Scarlato puntualizó que también están los ambientes de tipo arbustivo, distintos tipos de bosque o monte: monte de quebrada, monte ribereño, monte parque -que es un monte particular porque los árboles están separados en el espacio- y los palmares. Luego existen ambientes ocupados por humedales o bañados. Asimismo, no se pueden desconocer los ambientes vinculados a las arenas.

En cuanto a los ambientes acuáticos, tenemos los ambientes interiores –ríos, lagunas- y las aguas del estuario y del océano Atlántico, donde también hay una tarea de identificar sitios relevantes para incluir en el SNAP, señaló Scarlato.

En cuanto a las fortalezas y amenazas que tiene el Uruguay para desarrollar un SNAP, Scarlato apuntó que el país cuenta con una serie de características atípicas que lo distinguen de otras zonas del planeta. En tal sentido, explicó que a diferencia de otros lugares, en dónde hay zonas importantes del territorio que, por sus características naturales, no se encuentran sometidas a la explotación humana -zonas montañosas, zonas de desierto, zonas selváticas-, por el contrario, en el caso uruguayo todas las zonas en consideración están incorporadas a actividades productivas, tales como al ganadería y agricultura. No obstante lo cual, el país tiene sectores que conservan un grado de naturalidad importante, fundamentalmente la ganadería pastoril, que, si bien modifica los paisajes, resulta compatible con cierto grado de naturalidad.

Asimismo, señaló que el SNAP uruguayo, lejos de estar aislado del desarrollo de actividades productivas, va a constituirse en estrecha relación con la producción. En tal sentido, se establecerán reglas de juego y programas de manejo mucho más cuidadosos para la conservación de los valores naturales.

Esto va implicar ordenar en el territorio y limitar una serie de actividades que impliquen una modificación del ambiente, tales como la forestación y determinadas modalidades de producción agrícola, agregó.

En referencia al la Quebrada de los Cuervos, área que ingresó al Sistema el pasado lunes, Scarlato expresó que de las 4.400 hectáreas comprendidas, una buena parte es propiedad de privados. Indicó que éstos vienen trabajando desde hace años con una gran preocupación por el cuidado de esos valores naturales y son socios de este proceso. No obstante, indicó que en otros casos se deberá discutir con los privados acerca del proceso de incorporación de las respectivas Áreas, para gradualmente ir encontrando formas de manejo más amigable con el ambiente y la conservación.

Asimismo, en relación a las características que posibilitaron el ingreso de la Quebrada de los Cuervos al SNAP, precisó que cuenta con valores paisajísticos muy destacados. Se trata de una hondonada en el territorio, producida por cursos de agua que la excavaron profundamente. Se genera allí un microclima favorable para el desarrollo de la flora y de la fauna, que permiten el desarrollo de especies valiosas. A su vez, Scarlato destacó que en el entorno de la Quebrada hay sectores de matorrales y de praderas que también son de interés desde el punto de vista de la conservación.

Explicó que se viene trabajando con el INIA, para que pueda constituirse en los alrededores un sitio de interés para la conservación de pasturas naturales. En tal sentido, sostuvo que las Áreas Protegidas son espacios de gran interés para el desarrollo del conocimiento en materia científica y tecnológica.

El 24 de agosto de 2007 se firmó, mediante acuerdo multilateral, el Proyecto Fortalecimiento del Proceso de Implementación del Sistema Nacional de Áreas Protegidas.

En cuanto a las características del Proyecto SNAP, Scarlato señaló que es un instrumento para reforzar las capacidades del país en el diseño y cumplimiento de las primeras etapas del Sistema Nacional de Áreas Protegidas. Con este objetivo, se trabajó durante dos años y medio con un conjunto diverso de actores, en el diseño de una propuesta de trabajo. Se accedió a recursos técnicos y financieros del Gobierno nacional, de Intendencias departamentales, del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, del Fondo para el Medio Ambiente Mundial, del Fondo Francés para el Medio Ambiente Mundial, de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo y del Organismo Autónomo de Parques Nacionales de España.

   
 
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