Subsecretario Bernal
Ministerio del Interior apoya la consigna: "Menos
oficinas y más calles"
Las nuevas medidas de seguridad que está implementando
el Ministerio del Interior, abarcan el plano estratégico, táctico y
operativo y han fortalecido la acción, la tarea preventiva y disuasiva de
la Policía. Así lo expresó Ricardo Bernal, quien dijo que todavía es muy
pronto para hablar de resultados, pero aseguró que se debe continuar
trabajando seriamente, con responsabilidad, compromiso pero también sin
miedo.
La sociedad uruguaya enfrenta desde hace bastante
tiempo diversos fenómenos relacionados con el delito y la violencia, a los
que este gobierno nunca dio la espalda, sino que los enfrentó, sostuvo el
Subsecretario del Interior, Ricardo Bernal. Mediante una batería de
medidas apuntando a diversos planos, anunciadas recientemente, el
Ministerio del Interior trabaja para atender la seguridad ciudadana. En
este sentido, el Subsecretario sostuvo que aún es muy reciente como para
visualizar los resultados pero que desde el Ministerio se confía en que
los mismos serán favorables.
Se ha fortalecido la acción, la tarea preventiva y
disuasiva de la Policía, mediante la asignación de mayores recursos y
medios a las unidades respectivas. Entre otras cosas, se ha buscado un
cambio de actitud, de la forma, del compromiso, de las ganas con que los
policías realizan estas tareas de patrullaje. También se le pide a los
mandos medios, y a los oficiales, que apoyen y controlen a los efectivos
que están en la calle. La consigna actual que se apoya hoy día es: "Menos
oficinas y más calles", dijo Bernal, quien destacó que no hay que
olvidarse de cuidar a los efectivos que nos cuidan.
Finalmente, el Jerarca comentó que hay que trabajar
seriamente, con responsabilidad, compromiso, eficiencia y seriedad, pero
también sin miedo.
Palabras del Subsecretario del Ministerio del Interior,
Ricardo Bernal en la Sesión Pública del Consejo de Ministros realizada en
Trinidad el miércoles 5 de noviembre de 2008.
SUBSECRETARIO BERNAL: Buenos días. Nuestra materia es
la seguridad relacionada con el delito y la violencia, es decir con lo
malo y lo feo de la sociedad. Sin duda que estos fenómenos son desde hace
bastante tiempo un problema que enfrenta a la sociedad uruguaya y este
gobierno no lo ha soslayado, no ha mirado para el costado. Por el
contrario, desde el principio de esta Administración se ha reconocido y
asumido expresamente este problema, por cierto que la seguridad ciudadana
ha sido considerada como una prioridad de este gobierno y esto se refleja
claramente en el presupuesto quinquenal y las Rendiciones de Cuentas, y
particularmente, en la gestión concreta del Ministerio del Interior y de
la Policía Nacional.
Sin dudas que, en estos problemas como la delincuencia,
la criminalidad, la violencia, es incuestionable un problema multicausal,
es un fenómeno multifactorial, no se pueden dar soluciones mágicas,
recetas milagrosas o respuestas simples y de resultados instantáneos.
Sin duda que la seguridad ciudadana es un derecho
fundamental de todas las personas y de las comunidades. De hecho, la
seguridad o la carencia de la misma repercute directamente en la calidad
de vida de los ciudadanos y de la sociedad. Por estas razones se han
implementado desde hace tiempo estrategias integrales de seguridad
ciudadana.
En este momento no vamos a detallar las distintas
medidas que se han tomado en otras áreas del sector público y en los
ámbitos de la coordinación y la cooperación interinstitucional e
interdisciplinaria; estamos hablando de infraestructura, de reingeniería
institucional, estamos hablando de las cárceles, de los procesados y
penados, estamos hablando de la droga, estamos hablando de las víctimas de
la violencia y del delito y también de los policías, porque hay que cuidar
a quienes nos cuidan.
El Ministerio del Interior recientemente ha tomado un
conjunto de medidas que someramente y rápidamente vamos a mencionar, en
los planos estratégicos, tácticos y operativos.
En primer lugar tenemos que decir que estas son medidas
que se han tomado a nivel nacional, aunque el énfasis se ha puesto en
Montevideo y en el Área Metropolitana, pero es para todo el país. Se ha
fortalecido la acción, la tarea preventiva y disuasiva de la Policía,
mediante la asignación de mayores recursos y medios a las unidades que
tienen esa tarea, a las Comisarías Seccionales, a los cuerpos de
radiopatrulla, a las unidades, a los grupos especiales que tienen
operaciones de patrullaje focalizado.
Por otro lado, se ha mejorado la organización y el
funcionamiento de las unidades que tienen el cometido de reprimir el
delito siendo con la investigación. A esos efectos se ha realizado una
eficaz tarea de especialización en el cometido que tienen esas unidades.
Por otra parte, y en el mismo sentido se ha mejorado el relacionamiento y
la coordinación con la justicia para que ese trabajo de investigación de
los hechos delictivos sea más eficiente y más eficaz.
También por primera vez, el Ministerio del Interior ha
establecido un mecanismo para atender a las víctimas de la violencia y del
delito; se ha creado una oficina central y hay grupos de tareas que tienen
personal especializado para atender.
Para tener mayor cantidad de efectivos disponibles, se
han suprimido algunas dependencias que realizan tareas no esenciales y en
otras se le ha reducido la plantilla en tareas burocráticas, en tareas
administrativas, para dedicarlos a la tarea del patrullaje. Pero no
solamente importa la cantidad de efectivos desplegados, sino que también
es fundamental la actitud del personal que realiza la tarea, porque,
realmente no sólo vale la cantidad sino también la calidad del servicio
que prestan los policías. Por eso es que se ha buscado un cambio de
actitud de la forma, del compromiso, de las ganas con que los policías
realizan estas tareas de patrullaje. Y también para los mandos medios,
para los oficiales, que tienen que apoyar y controlar a esos efectivos que
están en la calle. Es decir, que hoy la consigna es: menos oficinas y más
calles. Por otro lado, se ha buscado incrementar la formación de policías
de orientación comunitaria, que es un servicio que ha dado buenos
resultados y que busca el mejor acercamiento de los policías hacia la
sociedad, con una actividad eminentemente proactiva. En el mismo sentido,
se han incrementado las mesas de convivencia y seguridad ciudadana, que es
un mecanismo de participación de la ciudadanía en los temas locales de
seguridad, con un espíritu, con una visión democrática y republicana de la
seguridad ciudadana. Sin duda que hay mucho por hacer y la gente, los
vecinos, quieren resultados, quieren respuestas, pero ha transcurrido poco
tiempo de la implementación de estas medidas y tenemos que ser
responsables. Pero no queremos mentirle a la gente, que está
justificadamente preocupada por esta situación. Pero tampoco vamos a
agregarle miedo, porque sabemos que se puede, se puede lograr niveles de
seguridad razonables y estables, pero hay que trabajar seriamente, con
responsabilidad, con compromiso, con eficiencia y con seriedad, pero
también sin miedo. |