Rossi defendió en España asociaciones entre sectores público y privado

"Es necesario duplicar en el próximo quinquenio inversiones en infraestructura"

El Ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, sostuvo en España, que en América Latina es necesario seguir haciendo esfuerzos para elevar la inversión en obra pública, "pues ello está vinculado no sólo al presente económico y social, sino al desarrollo pensado a mediano y largo plazo" y apuntó que "las decisiones de nuestros gobiernos serán fundamentales para promover la colaboración y participación del sector privado".

Invitado por el Secretario General Iberoamericano, Enrique Iglesias, Rossi expuso en el marco del Seminario sobre "Alianzas Público-Privadas en Infraestructuras en Iberoamérica", organizado por esa Secretaría en la ciudad de Cáceres, coincidente con el XX aniversario del Premio Internacional Puente de Alcántara.

Un selecto y reducido grupo de representantes de los gobiernos de Iberoamérica, de las principales empresas inversoras y de las entidades financieras multinacionales permitió discutir, durante dos jornadas, nuevas opciones de financiación de proyectos de infraestructura en la coyuntura financiera actual. Participaron representantes de los gobiernos de México, Chile, Panamá, Brasil, Argentina y Uruguay.

La declaración de los principales líderes mundiales reunidos en Washington hace pocos días resaltó la necesidad de proceder a un relanzamiento de la actividad económica en el mundo desarrollado y, a la vez, aminorar en lo que sea posible los efectos de la crisis en los países emergentes.

En el entendido de que las infraestructuras son un elemento necesario para el desarrollo, y se precisa la colaboración y actuación conjunta de los sectores público y privado, SEGIB organizó este encuentro donde gobiernos, empresas e instituciones financieras privadas y multilaterales aportaron su visión de cómo encarar estas inversiones en la coyuntura actual, de forma que la necesidad de infraestructuras en la región no suponga una limitación al desarrollo de los países de Iberoamérica sino que contribuya al mismo de manera decisiva.

Pasado, presente y futuro

En su exposición y refiriéndose específicamente a nuestro país, Rossi estimó que "generar un desarrollo de la infraestructura a partir de nuestras actuales necesidades nos impone pensar en el Uruguay del 2030", de modo "que las actuales iniciativas se inserten con ese país del futuro".

"El 2030 está ahí, las obras de infraestructuras llevan su tiempo para concebirlas y proyectarlas; necesitamos no menos que duplicar en el próximo quinquenio nuestros actuales niveles de inversión, a pesar de haberse más que duplicado en los últimos cuatro años; necesitamos aprender de las experiencias exitosas y también de las otras".

El Ministro señaló que Uruguay se destacó en América Latina por "sus políticas educativas, por su desarrollo social y también por su nivel de inversión en infraestructura" hasta mediados del siglo pasado, niveles que fueron decayendo a partir de entonces y, muy especialmente, en los últimos años del siglo veinte y principios del actual, "hasta desaparecer durante la aguda crisis que casi paralizó al país en el año 2002 y extendió dificultades y pobreza en perjuicio de amplios sectores de la población".

Resaltó luego que desde entonces, "el Uruguay ha iniciado un proceso de recuperación que ha sumado importantes esfuerzos de inclusión social, en un marco de creciente nivel de actividad, promotora y demandante de un fuerte crecimiento de la inversión en infraestructura", lo cual ha sido posible por "la estabilidad institucional que el país fue capaz de preservar más allá de coyunturas adversas y el cumplimiento inclaudicable que mantuvo de sus obligaciones".

Tras afirmar que "en estos últimos cinco años Uruguay ha vuelto con firmeza a la senda del crecimiento" y reconocer que "ayudado por el momento internacional ha logrado concretar avances importantes en todas las áreas", Rossi enumeró las acciones emprendidas en lo que hace a infraestructura.

Mencionó el mantenimiento de la red vial, caminería rural, caminería departamental, más de 700 km. de vía férrea y renovación de equipos, ampliación de muelles en el Puerto de Montevideo y Fray Bentos, obras en todos los puertos del país, construcción del nuevo Aeropuerto de Carrasco y sus accesos.

En materia institucional, destacó como hechos resaltables la creación del Instituto de Logística, el desarrollo de una Política Multimodal de Transporte, mejoras en el transporte de pasajeros, abaratamiento de tarifas públicas y revisión de todos los incumplimientos de Contratos y Concesiones.

No obstante estos logros, Rossi señaló que "siendo muy importantes, no son suficientes y se necesitan mayores y mejores inversiones", precisando que "no son suficientes" porque "no nos permiten recuperar el tiempo perdido".

Más adelante, el Ministro destacó que existe preocupación también por los aspectos sociales, planteándose permanente la disyuntiva sobre "¿cómo distribuimos?, ¿cómo y cuánto reducimos la pobreza?, ¿qué políticas en educación, en salud, en vivienda?, ¿cómo mejor vive nuestra gente?".

En tal sentido, reflexionó que "no hay políticas sociales sin generar mayor actividad económica" y "ésta no se genera sin infraestructura, ni ésta sin inversiones".

"Necesitamos más infraestructuras para no perder oportunidades en un mundo que no nos espera y que no puede esperarnos, necesitamos más infraestructura para poder responder a las demandas nacionales y contribuir a la integración latinoamericana, necesitamos desarrollar nuestra infraestructura para ser más competitivos, para estimular la inversión en otras áreas, para aumentar la productividad, para reducir las desigualdades e injusticias", dijo.

"En pocas palabras, para desarrollar el país".

Advirtió que "hoy no podemos no tener en cuenta los cambios globales que nos condicionan y determinan en tantos aspectos", pero aún más allá de las fuertes inestabilidades que se constatan a nivel mundial, "valoramos que no es conveniente insistir en actitudes que sumen restricciones al riesgo de la retracción y, por el contrario, creemos que para nuestro país el desafío es mantener nuestros planes especialmente en materia de infraestructura, para lo que será necesario, más que nunca, sumar al esfuerzo del sector público un aumento significativo de la participación del sector privado".

"El objetivo es procurar convertir las dificultades en oportunidades", apuntó.

El Ministro admitió que "esto es fácil decirlo" aunque "algo más complicado concretarlo", máxime en América Latina donde más allá de reiteradas expresiones optimistas de voluntad "registramos un significativo rezago en materia de inversiones en infraestructura, que no sólo no se ha revertido sino que continúa ampliándose en comparación con otras regiones o comunidades representativas".

En tal sentido, reveló que en la actualidad sólo algo más del 2% del PBI se invierte en obras de infraestructura en beneficio de la población latinoamericana.

"Sin embargo -subrayó-, América Latina puede", fundamentalmente por los avances en materia de integración.

"Esta nueva realidad positiva de América Latina se ha apoyado en el desarrollo de mecanismos de cooperación, como esta Secretaría Iberoamericana, como IIRSA, como el apoyo importante de BID, CAF y BMI".

Finalmente, Rossi señaló que en América Latina es necesario seguir haciendo esfuerzos para elevar la inversión en obra pública, "pues ello está vinculado no sólo al presente económico y social, sino al desarrollo nacional pensado a mediano y largo plazo" y apuntó que "las decisiones de nuestros gobiernos serán fundamentales para promover la colaboración y participación del sector privado".

Refiriéndose específicamente a nuestro país, concluyó el Ministro señalando que "generar un desarrollo de la infraestructura a partir de nuestras actuales necesidades nos impone pensar en el Uruguay del 2030", de modo "que las actuales iniciativas se inserten con ese país del futuro".

"El 2030 está ahí, las obras de infraestructuras llevan su tiempo, para concebirlas y proyectarlas, su tiempo para ejecutarlas y llegar para responder a la demanda. Cada vez más estos objetivos exigen un ejercicio innovador en cuanto a lo técnico, a lo material, a su diseño, a los procedimientos..."

"Necesitamos no menos que duplicar en el próximo quinquenio nuestros actuales niveles de inversión, a pesar de haberse más que duplicado en los últimos cuatro años; necesitamos aprender de las experiencias exitosas y también de las otras".