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21 de noviembre, 2008

Ministro Martínez y Director Kreimerman

Por primera vez en su historia Uruguay cuenta con una estrategia industrial definida
Kreimerman explicó que la estrategia industrial del país cuenta con tres niveles: de industria específica, de cadenas productivas y de inversión. Refiriéndose a las cadenas productivas, consideró que Uruguay posee completas e incompletas; estas últimas requieren "seleccionar aquellos eslabones que son más interesantes para el país". Martínez precisó que se les puede agregar valor con tecnología o añadiendo eslabones.

El documento "Directivas de la Estrategia Industrial" (mayo 2008) establece que el Gobierno jugará un rol clave en la promoción de industrias y servicios, con políticas de corte sectorial. Agrega que la estructura industrial debe resultar del desarrollo y adquisición de base tecnológica. También destaca la importancia de las inversiones (extranjeras y nacionales), así como la mejora en la integración en redes regionales y la inserción extra regional en nuevos mercados.

El Ministro de Industria, Energía y Minería, Daniel Martínez, añadió a los imperativos estratégicos expresados, el generar una interacción entre el sistema de innovación y el sector productivo y el desarrollar relaciones laborales modernas que aspiren a generar compromisos y objetivos compartidos.

Asimismo, el Ministro destacó que Uruguay cuenta por primera vez en su historia con una estrategia industrial, la cual es reconocida por trabajadores, empresarios y organismos internacionales.

Por su parte, el Director Nacional de Industria, Roberto Kreimerman, destacó la importancia de fomentar el desarrollo del tejido industrial y establecer proveedores nacionales. Agregó que se busca desarrollar eslabones en las cadenas productivas que permitan establecer industrias de soporte básicas: plástica, química, metal-mecánica, seleccionadas acordes a la escala que posee el país. Además, indicó que se busca generar herramientas para que la industria nacional pueda competir en igualdad de condiciones: derechos compensatorios, reglamentación de la admisión temporaria, etiquetado de calzado, etiquetado de textiles, entre otras.

Kreimerman puntualizó que dentro de los lineamientos estratégicos se establecen tres niveles: nivel de la industria específica; nivel de la cadena productiva; y nivel de inversión -extranjera y nacional-.

El Jerarca, refiriéndose al nivel de cadenas productivas, consideró que Uruguay tiene cadenas que son completas y poseen todos los eslabones. No obstante, precisó que tenemos algunas que no son completas y que no requieren ser completadas. En estos casos "tenemos que seleccionar aquellos eslabones que son más interesantes para el país y promover allí la inversión necesaria".

"El esquema de cadena es válido para cualquier cadena productiva, sea completa e incompleta".

Por su parte, el Ministro Martínez señaló que a una misma cadena se le puede agregar valor, agregando eslabones y generando más transformación e integrando tecnología para producir más.

Cadena cárnica

Martínez señaló que en el caso de la cadena cárnica los estancieros se peleaban con los frigoríficos por el precio de la carne. En la actualidad, se viene trabajando para "hacer crecer la torta" (no para "pelear el reparto de una torta chica"), en políticas de integración entre la industria y el sector pecuario.

Kreimerman precisó que en la industria tradicional se promueven procesos tecnológicamente líderes. "La carne es un buen ejemplo de competitividad", aclaró. Sostuvo que se suma la competitividad de las empresas a la competitividad de la cadena a la cual pertenecen. "No basta con que una empresa a nivel individual sea competitiva; se requiere que la cadena, desde la materia prima hasta el consumidor final, sea competitiva ella misma".

Cadena láctea

Mediante la ley 18.242 se creó (diciembre 2007) el Instituto Nacional de la Leche (INALE), órgano conformado por un representante del Poder Ejecutivo, un representante del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), un representante del Ministerio de Industria y Energía (MIEM), un representante del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), un representante del Ministerio de Relaciones Exteriores y representantes de la industria, las gremiales de productores y la gremial de queseros artesanales.

Martínez destacó que con la creación del INALE se promueve la cooperación entre las partes para hacer crecer la producción e incrementar los ingresos. Kreimerman agregó que en todas las cadenas productivas hay que buscar la coordinación y el desarrollo tecnológico. No obstante, precisó que en toda cadena hay una dosis de negociación y una dosis de cooperación, y se busca mediante políticas públicas que las sinergias de la cooperación se potencien. "La clave es la información y cooperación", sostuvo.

Cadena automotriz

El Director Kreimerman consideró que esta es una cadena de valor paradigmática –fundamentalmente con el modelo de Toyota- e inserta en la región. Explicó que está organizada en función del consumo final, las ensambladoras, las autopartistas y las industrias de base. "Cada uno de esos eslabones tiene distintos motivos para localizarse en los países: logísticos, volúmenes de demanda, costos".

El Jerarca precisó que Uruguay está buscando aprovechar la demanda existente, tratando de aprovechar la demanda hacia atrás de la cadena de valor, ya que se estima que Sudamérica y Asia son los dos continentes que más van a crecer en demanda automotriz hacia el 2020.

Explicó que se viene trabajando para coordinar la cadena, procurando beneficios comerciales de compensación. "Nadie aspira a tener cadenas automotrices completa porque eso implica volúmenes, pero sí podemos tener volúmenes y eslabones y garantizar la puerta de entrada para muchos fabricantes".

Asimismo, el Director de Industria añadió que se están concretando inversiones para Uruguay, el cual es caracterizado como un país serio, que tiene acuerdos, que promueve inversiones y es amigable con el inversor.

Cadena textil

Kreimerman indicó que se está estudiando la cadena en sí, porque existe la visión que la cadena textil, aparte de ser generadora de mano de obra, posee capacidades a preservar. "Los países que pierden capacidades humanas y tecnológicas, llevan décadas en recuperarlas", añadió.

Asimismo, explicó que la industria textil, con la aparición de China e India, generó un desplazamiento hacia estos destinos, constituidos en los grandes talleres del mundo.

No obstante, el Jerarca informó que han aparecido oportunidades de pequeños negocios a escala mundial, aunque grandes para nosotros. "Pensamos que en la industria textil el estudio de la cadena de valor es fundamental, porque no resulta posible la competitividad si la cadena del productor de lana no se desarrolla adecuadamente".

Precisó que dado los cambios operados en el mercado textil y los acuerdos multifibra, están empezando a aparecer oportunidades de largo plazo que resulta posible aprovechar.

En cuanto a los problemas coyunturales que enfrenta la industria textil, Kreimerman precisó que se están estudiando varias ideas, en donde se deben evaluar costos e impactos. "Tanto la caída del crédito como la caída de la demanda serían los problemas principales a evaluar", dijo.