“Del Campo al Plato”
Uruguay supera récord histórico del mejor año por
ingreso de divisas de venta de carne
La mitad de la carne roja que se
comercializa en el mundo proviene del MERCOSUR,
oportunidad y reto para la región y para Uruguay,
aseguró el Ministro Agazzi en la apertura del 5º
Congreso de Producción, Industrialización y
Comercialización de Carne “Del Campo al Plato”,
organizado por INIA-LATU-INAC. El Jerarca alentó que se
definan estrategias nacionales y se apunte a la calidad
e inocuidad de los productos.
El 5º Congreso de Producción,
Industrialización y Comercialización de Carne – tiene
lugar en el predio de exposiciones del Laboratorio
Tecnológico del Uruguay (LATU). Está organizado por
INAC, INIA y LATU, contando con la participación del
Ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Ernesto
Agazzi, el Subsecretario de Industria, Energía y
Minería, Gerardo Gadea; el presidente de INAC, Luis
Alfredo Fratti; el director del LATU y representante de
la Cámara de Industrias, Hugo Donner, y el presidente
del INIA, Dan Piestun. Asimismo, en esta oportunidad se
han congregado los principales exponentes de la cadena
cárnica y de las instituciones que apoyan la producción
y la investigación en este sector, incluyendo 30
participantes de diversos países de América Latina, así
como de Australia, Estados Unidos, Reino Unido y
Francia.
En su discurso de inauguración, el
Ministro Ernesto Agazzi expresó su satisfacción por la
realización de un evento de esta naturaleza, que reúne
“al mundo que gira en torno a la carne”.
Esta actividad tiene un contenido
“brutalmente estratégico” como región y como país,
dijo. Casi la mitad de la carne roja que se
comercializa en el mundo sale del MERCOSUR, lo que
supone para el bloque una gran oportunidad. Esto
también es un reto para el país, aseguró Agazzi, quien
explicó que se podría optar por el camino de la
ganadería como actividad marginal, que -con poca
tecnología- utiliza las tierras que no son aprovechadas
por la agricultura o por la forestación más moderna,
sin embargo es tomado como una oportunidad de la región
y con un enfoque de país desde las políticas públicas,
definiendo qué tipo de carne se quiere producir.
Para llevarlo adelante se trabaja en:
identificación, auditorías, mejoramiento tecnológico y
generación productos de calidad e inocuidad.
El país tiene muchas potencialidades
que le permiten insertarse en el mundo con productos de
alta calidad. Un claro ejemplo de ello, es que está
prácticamente terminado el proceso de identificación
dentro de las plantas frigoríficas. “Parecía que la
identificación electrónica de los ganados en el campo
sería muy difícil de lograr. Sin embargo, quienes más
lo defienden son los propios productores ganaderos,
porque comprendieron la importancia que tiene”, aseguró
el Jerarca.
Un país pequeño tiene que defenderse
vendiendo su trabajo a muchos países y expresado en
productos de calidad, “dado que no seremos productores
significativos para los niveles que se comercializan en
el mundo”. Esto brinda una dirección estratégica a la
ganadería nacional y de ella derivarían todas las
políticas, indicó Agazzi.
En cuanto a las tendencias en el
consumo de carne, el Ministro aclaró que no las
definen las políticas públicas. “En algunos países
habría que enseñarles a comer churrasco, en lugar de
carne picada –que tiene varias complicaciones de
calidad e inocuidad- pero la cultura es la cultura. No
siempre estas medidas las definen las sociedades por
motivos racionales. En el conjunto de los intereses en
torno de la carne, nosotros tenemos que defender el
churrasco, no solo porque nos conviene a nosotros, sino
también al consumidor”, explicó.
El Secretario de Estado felicitó a
INAC, INIA y LATU –tres institutos públicos- por la
iniciativa y por el enfoque técnico-científico que va
en una dirección estratégica. Asimismo, destacó la
importancia de discutir sobre los roles de privados y
públicos. En este sentido aclaró que los sectores
privados son los que invierten capital, obtienen los
productos y hacen los negocios, pero el sector público
debe dar estas discusiones con contenido, con el
capital técnico que posee y favoreciendo la toma de
decisiones. “Es una forma de articular ambos sectores,
en pro de una participación que es necesaria”, dijo.
Hugo Donner calificó este encuentro
como una actividad central para la cadena cárnica, que
es el pilar fundamental en la producción del país y
destacó el proceso de convergencia que se está dando
desde hace mucho tiempo entre las diversas disciplinas.
El presidente del LATU, puso énfasis en
la integración que se avizora en esta actividad. “Se
marca un camino en un país pequeño de escasos recursos,
donde es frecuente ver esfuerzos aislados, duplicados y
en algunas oportunidades contrapuestos, por falta de
coordinación e información”, indicó.
Gerardo Gadea explicó la participación
del Ministerio que representa en esta actividad en la
transversalidad. Uruguay la necesita en todos los
niveles, aseguró. “La transversalidad es fundamental
para coordinar estrategias, para compartir una visión
de país de corto, mediano y largo alcance”.
El Subsecretario recordó que a nivel
del Poder Ejecutivo se creó extraoficialmente el
Gabinete de la Producción, compuesto por el MGAP, OPP,
MTSS, MIEM y MEF, con el objetivo de transversalizar
las políticas, como forma que cada integrante conozca
las medidas que toma el otro. “La visión debe ser
compartida por todo el Ejecutivo”, indicó Gadea quien
considera que la práctica está dando excelentes
resultados.
Este Gabinete definió trabajar en ocho
cadenas industriales y una de ellas involucra al sector
cárnico, por ser uno de los sectores estratégicos que
se debe potenciar.
“Es importante salir de la vieja
discusión de si Uruguay es industrial, agroindustrial o
un país de servicios. Uruguay es un país productivo en
el sentido amplio de la expresión, productivo de manera
integrada, donde los servicios son parte del Uruguay a
desarrollar. Se debe salir de la falsa dicotomía que no
le hizo bien a la sociedad, apuntando a otro modelo,
donde estemos claramente internalizados de qué cosas el
país debe desarrollar”, dijo.
En este sentido, se definieron tres
estrategias para potenciar esos sectores: una que
apunta a los sectores exitosos, aquellos que crecen de
manera vertiginosa, todos los sectores donde el Uruguay
tiene potencialidades naturales (frigoríficos,
forestales, lácteos). A esos sectores se les debe
aportar tecnología y valor agregado, así como
desarrollarlos de manera eficiente e integrada.
La segunda estrategia dirigida a los
sectores de mano de obra calificada o de alta
especialización (automotriz, software, electrónica),
implica incentivar a las industrias, atraer
inversiones, generar las condiciones y el clima de
negocios para que se instale en el país, para no ser
solamente un país agroindustrial y depender solo de los
commodities, sino que se puedan tener industrias que se
potencien en el corto, mediano y largo plazo.
La tercera estrategia apunta a las
industrias incipientes, que se ven con gran
potencialidad (energías renovables) y que requieren
mayor tecnología y desarrollo.
“Uruguay debe apuntar a una visión
estratégica, procurando mayor tecnología y
diferenciación para ser mejores en lo que hacemos, y
así acceder a los mercados más exigentes”, argumentó
Gadea.
Dan Piestun destacó la importancia de
la cadena cárnica desde el punto de vista económico y
social para el país y el avance logrado en la
articulación entre los diversos actores para la
adopción de tecnologías que permitan posicionarse en un
mundo competitivo y de demanda creciente de productos
de calidad, con trazabilidad e inocuidad.
El desafío de futuro es seguir
incorporando mayor conocimiento y transparencia a los
productos y a la cadena cárnica, clave para el
desarrollo y sustento social del país.
El representante del INIA resaltó el
involucramiento del sector productivo y el rol de la
academia y los institutos tecnológicos en la generación
del conocimiento para valorizar y fortalecer la cadena
cárnica. En una articulación fluida y consistente de
todos los actores se podrá seguir posicionado en un
mundo competitivo y en los mejores lugares, dijo.
Finalmente, Luis Alfredo Fratti instó a
juntar las potencialidades existentes en un país
pequeño como el nuestro, tal cual se realiza en este
evento, que además perdura en el tiempo.
Pese al año difícil que se atraviesa a
nivel mundial, el país ya está superando el récord
histórico del mejor año por ingreso de divisas de venta
de carne. Se estima que al cierre del año se superará
en un 30% el valor de ingreso por venta de carne
bovina, respecto al 2006.
La carne está dejando de ser en el
mundo entero un simple alimento proteico para ser un
producto que brinda seguridad y placer, explicó Fratti,
quien se congratuló por el grado de avance tecnológico
y las estrategias de marketing existentes, que
demuestran que “somos un país que depende del rubro
carne, pero que no se queda quieto y está haciendo
punta en otros temas”.
Durante muchos años se pensó que la
trazabilidad estaba muy lejos, sostuvo, sin embargo, en
2010, se podrá tener una trazabilidad de campo o una
trazabilidad industrial hasta el corte individual, lo
que se considera “un logro colectivo del país”. |