Exportar inteligencia
Gobierno procura modernizar al país trabajando
desde la excelencia pero preservando valores
La inteligencia es uno de los
principales valores del Uruguay, que le permite crecer
como país, de ahí la importancia de brindarle a los más
jóvenes, herramientas para que "se animen a conquistar
el mundo", sostuvo el Ministro Daniel Martínez al
inaugurar un taller sobre perspectivas de negocios en
electrónica. El objetivo, es brindar oportunidades para
desarrollar investigaciones desde el país y hacia
fuera.
El taller denominado "Emprender en
Electrónica: perspectivas de negocios de la industria
electrónica en el Uruguay de hoy y en la región", se
enmarca en el Proyecto de Internacionalización de la
Especialización Productiva (PIEP).
Este Proyecto supone trabajar junto
a empresas e investigadores uruguayos y de la región,
en apoyo a emprendimientos asociativos, principalmente
para exportar a terceros países. Asimismo, tiene como
fin facilitar a sectores con potencial dinámico, como
son la biotecnología, software y electrónica, la
realización de proyectos innovadores, a través de la co-inversión
con fondos no reembolsables, con una implementación
ágil y eficaz y en un plazo adecuado a la realidad de
los negocios. El PIEP considera fundamentales aspectos
tales como la internacionalización y comercialización
de los productos de los sectores que apoya.
El Proyecto está financiado por el
Fondo para la Convergencia Estructural del MERCOSUR (FOCEM)
como principal inversor y es ejecutado por el MIEM a
través de su área de Política Económica. Los fondos
totales del proyecto alcanzan U$S 1.500.000, de los
cuales U$S 1.275.000 son aportados por FOCEM y los
restantes U$S 225.000 provienen de fondos locales del
Ministerio.
El Proyecto está inscripto dentro de
los lineamientos pautados por el Uruguay Productivo,
cumpliendo con los objetivos de especialización
productiva y exportación. Procura la promoción de una
mayor integración y complementación nacional y
regional, y un mayor intercambio comercial, que
conduzca a los tres sectores al encuentro de nichos de
mercado y apertura de nuevos espacios, además de la
concreción de vínculos estrechos entre academia y
empresas.
Los beneficiarios son empresas
pertenecientes a los tres sectores radicadas en el país
y la región, así como la población uruguaya en general
y el sector industrial en particular, por la dinámica
propia de los sectores objetivo del proyecto.
Junto a Martínez, participaron del
evento que tuvo lugar en el Complejo Torre de las
Telecomunicaciones, el Director de la Secretaría del
MERCOSUR, José Manuel Quijano; el Representante
Permanente de URUALADI, Gonzalo Rodríguez Gigena; el
Presidente de la CUTI, Álvaro Lamé; el Presidente de
IEEE, Marcel Keschner, y la Directora del PIEP, Mónica
Barriola.
"Es un proyecto que apunta al
corazón de lo que procura el gobierno: competitividad
en sectores que son de alto valor agregado,
incorporación tecnológica y por sobre todo, sectores
que aporten a la formación de uruguayos con capacidades
diferentes de innovación", dijo Martínez.
Si bien el taller refiere a
electrónica, el Programa que lo coordina implica
también dos áreas importantes para el país como lo son
software y biotecnología.
Se procura transversalizar, es decir
unir empresas, Estado y academia y a la vez, generar
asociatividad en el propio país, sumar empresas de la
región, buscando alcanzar competitividad y generar
mercados en lo posible en terceros países. Se trata de
fomentar la capacidad y la iniciativa de los uruguayos,
preservando valores como el respeto y la solidaridad
que nos caracterizan como nación.
"Estamos en una etapa de jerarquizar
inversiones", dijo Martínez. Si bien se procura
promoverlas, el objetivo principal es brindarle
facilidades a los emprendimientos que ocupan y
capacitan mano de obra, que generan inclusión
tecnológica y conocimiento y agregan valor a lo que
hacemos los uruguayos, explicó.
Barriola, por su parte, destacó la
importancia de la interacción academia-empresas, con el
objetivo de promover la asociatividad, investigación,
innovación, emprendedurismo e integración regional.
En este ámbito, informó de un
llamado a emprendimientos de electrónica y
biotecnología, donde los proyectos que se presenten
deben ser exportadores, explicó.
Quijano argumentó cuál es el rol de
FOCEM, que posee 23 proyectos en ejecución en Paraguay
y Uruguay, así como otros provenientes de la Secretaría
del MERCOSUR y un proyecto para eliminar la fiebre
aftosa en el MERCOSUR y Bolivia.
En el caso puntual del PIEP, Quijano
explicó que el Fondo ya desembolsó U$S 700.000 en dos
partidas. Asimismo, recordó la importancia de aunar el
esfuerzo público y privado, junto con el de la academia
como forma de garantizar un buen resultado en estos
sectores que son considerados de vanguardia.
Quijano entiende que FOCEM es un
instrumento importante dentro del MERCOSUR, para
revertir las asimetrías existentes. Es por ello que si
bien al Fondo aportan los cuatro países del bloque, los
beneficiarios que se llevan el porcentaje más alto de
la ayuda son los miembros más pequeños, Uruguay y
Paraguay.
Rodríguez Gigena explicó que se
vierten anualmente al Fondo U$S 100 millones, de los
cuales Uruguay aporta U$S 2 millones y recibe U$S 32
millones.
El Proyecto de Internacionalización
de la Especialización Productiva, fue una de las
prioridades del Uruguay al momento de definir cuál
emprendimiento financiaría el Fondo, explicó Rodríguez
Gigena, quien considera que esto tiene una importancia
estratégica en el desarrollo del Uruguay Productivo.
En este sentido, aseguró que nuestro
país viene creciendo muy bien y cambiando su matriz
productiva en forma permanente. Asimismo, destacó la
importancia de promover iniciativas que tiendan a la
permanencia de los jóvenes especializados en el país, y
esto se logra dándoles oportunidades.
Lamé en tanto, recordó que Uruguay
es el principal país exportador de software de
Latinoamérica (188 millones de dólares) y que en las
áreas de electrónica y biotecnología aún resta mucho
por hacer.
Es importante aprovechar estos
fondos para el desarrollo de los proyectos existentes,
dijo y destacó a la inteligencia como uno de los
valores principales del país.
Keschner, por su parte, puso a
disposición del Uruguay y del proyecto la información
técnica y profesional del IEEE (Instituto de Ingenieros
Eléctricos y Electrónicos) que representa, así como su
colaboración en la interacción entre profesionales e
industria.
La IEEE es una organización
profesional sin fines de lucro, presente en 160 países
que agrupa a 375 mil miembros entre científicos,
académicos, profesionales y estudiantes en las áreas de
electrotecnología y ciencias de la información.
A través de su membresía global, el
IEEE es una autoridad líder en áreas que van desde
sistemas aeroespaciales, computadoras y
telecomunicaciones a ingeniería biomédica, energía
eléctrica y electrónica de consumo, entre otras.
En nuestro país, la institución está
presente desde hace unos 20 años y cuenta con 300
voluntarios que realizan múltiples actividades de
actualización ideológica, educación continua e
interacción entre profesionales e industria. |