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27 de noviembre, 2008

Se detuvo tendencia decreciente

Informe Estadístico detalla que Uruguay cuenta con más productores de leche que en 2005
Según señala el Informe de DIEA (Dirección de Estudios Agropecuarios – MGAP), la producción láctea viene presentando desde 1990 un aumento casi permanente. El Presidente del INALE, Manuel Marrero, señaló que la mejora en la productividad responde a una mejor utilización de los recursos existentes. El Gobierno evalúa junto a gremiales la adopción de medidas para enfrentar impactos en caída de precios y sequía.

Manuel Marrero, Presidente del Instituto Nacional de la Leche (INALE), órgano conformado por organismos de Gobierno y representantes de toda la cadena láctea,  informó, en nota realizada a la Secretaría de Comunicación Institucional, sobre la situación de la lechería nacional.

Refiriéndose a la situación del comercio mundial de lácteos,  puntualizó que es muy complejo: se exportan básicamente commodities por el 5% de la producción mundial;  esto hace que pequeñas variaciones en los volúmenes que se dirigen a la exportación ocasionen fuertes impactos. Añadió que Uruguay es el segundo país exportador en relación a lo que produce, situado por debajo de Nueva Zelanda, que exporta volúmenes superiores al 95% de su producción y que, además, es fijador de precios. 

“En el mundo los productos de alto valor agregado son para el mercado interno y los bloques”. Explicó que en la Unión Europea todo aumento de producción de leche está destinado a la producción de productos de alto valor agregado.

Producción lechera

Según señala el Informe del Sector Lácteo 2007, publicado en el pasado mes de octubre por DIEA (Dirección de Estudios Agropecuarios – MGAP), la producción láctea viene presentando desde 1990 un aumento casi permanente y sólo en tres momentos (2000, 2003, 2007) se constataron caídas respecto a los volúmenes previos, sin generarse caídas durante dos años consecutivos. El informe muestra que la producción anual de leche alcanzó en 2007 los 1.650 millones de litros y que existen en el país 3.500 productores lecheros (1.100 poseen menos de 50 hectáreas de tierra, 2.200 entre 50 y 500 hectáreas y 200 productores tienen más de 500 hectáreas). Se detalla que hubo un cambio en la tendencia decreciente del número de productores remitentes, existiendo 100 productores más que en 2005.

Alfredo Hernández, Director de DIEA, subrayó que, sin contar los precios excepcionales generados con anterioridad a la crisis y la distorsión generada en las características de los negocios agropecuarios, la lechería ha sido un buen negocio.

Por su parte el Presidente de INALE explicó que los cambios originados en el modelo de producción, en los 70, iniciaron una mejora constante de la productividad de los tambos, produciendo cada vez más leche por unidad de insumo (por vaca). “La mejora en la producción por vaca en ordeñe es lo que permite mejorar la ecuación económica”, dijo.

Marrero señaló que otros de los aspectos que explicaron el crecimiento en la productividad consiste en el mejoramiento genético del rodeo y en una optimización de los recursos: “pasar de pastar en parcelas grandes a pastorear en franjas pequeñas, mediante el uso de alambrado eléctrico, permitió un mejor aprovechamiento de las pasturas sembradas”.

Por su parte, el Director de DIEA, Alfredo Hernández señaló que los cambios implicaron que, manteniendo las tierras y la cantidad de animales, se aumentó la eficiencia por hectárea y por animal. Si uno ve lo que ha pasado en el tiempo con los predios que son más productivos y recurre a trabajos como los de FUCREA y los del Procesamiento de Carpetas de Conaprole, los datos resultan sistemáticamente consistentes. “Cuánto más se produce por hectárea y por animal mejor resultado económico se saca” y disminuyen los costos por litro de leche. “Tiene que ver una necesidad  y un auto estímulo de los productores para obtener una mayor rentabilidad”.

En cuanto a la mejora en la productividad originada en los últimos años, Marrero señaló que la misma responde a una optimización de los recursos existentes, no a cambios técnicos o incorporación tecnológica. Mientras en 2001 se producían 13,9 litros diarios, por vaca en ordeñe, en 2007 se produjeron  15,4 litros (DIEA, 2008).

En cuanto a la posibilidad de generar nuevos cambios en el modelo de producción, Marrero destacó que la presencia de los productores neozelandeses plantea la posibilidad de un cambio técnico muy profundo. Ellos –básicamente- trasladan la tecnología de Nueva Zelanda, realizando ajustes a nuestro clima: “ya saben lo que es el barro y las sequías”. Si este modelo tiene éxito en Uruguay generará una revolución, ya que aumentará la productividad de forma significativa. 

Exportaciones de leche y productos lácteos

El Presidente del INALE, Manuel Marrero, señaló que las exportaciones han venido en crecimiento y representan el 65% del total producido. Indicó que, a grandes rasgos, la mitad de la producción es destinada a mercado interno y la otra mitad destinada para la exportación. “El año pasado las exportaciones fueron US$ 362.000.000 y las ventas en el mercado interno aproximadamente US$ 300.000.000”.

El Jerarca destacó que –básicamente- las exportaciones del país son de commodities: leche (cruda y en polvo) y quesos. Marrero explicó que debido a la situación que enfrentó el sector en 1999, con la devaluación del real, en donde el país se quedó sin mercados, la industria láctea trabajó para diversificar la colocación de sus productos. No obstante, precisó que si bien la producción se coloca en 70 países, casi el 70% se concentra en 3 países: Méjico, Venezuela y Cuba.  

Lechería ante crisis internacional

El Presidente de INALE sostuvo que Uruguay, dada la escala de su mercado y sus volúmenes de exportación, es tomador absoluto de precios, por lo cual presenta vulnerabilidades ante adversidades en el mercado internacional. “Si bien el ser exportador de lácteos es un mérito, con un importante aporte para el PIB del país, las fluctuaciones de los mercados internacionales repercuten fuertemente en la cadena láctea”, explicó.

Por su parte el Director de DIEA, Alfredo Hernández, puntualizó que existen algunas variables económicas que se mueven a destiempo. Explicó que cuando los productos lácteos mejoran su precio de exportación, el efecto sobre el precio al productor no es inmediato. Una vez que empieza ese nuevo precio, se originan otros fenómenos, por lo cual para un precio de producto más alto, empiezan a sucederse precios de insumos más altos. “Esa respuesta es bastante inmediata”, precisó.

Por el contrario, cuando baja los precios de los productos, los precios de los insumos bajan de forma tardía. En ese proceso se pone en juego no sólo un tema económico, sino un tema de estructura de producción.

El Jerarca consideró que cuando cambian los precios a la baja, la única manera que el productor tiene para ajustar sus costos es vía precio de insumos. Por ejemplo, “se baja el nivel de suministro de ración, o no se planta tanta pradera”. Agregó que si bien se generan efectos en los volúmenes de producción, los mismos no son inmediatos.

En cuanto a la variación en los precios de los insumos, puntualizó que si se mantiene esta situación podrían comenzar a bajar los insumos; situación que ya se está apreciando.

En cuanto a la rentabilidad de los productores, Hernández manifestó que hay un problema económico y un problema financiero. De continuar esta situación la rentabilidad se hace más baja e incluso puede suceder que los costos sean más altos que los precios. “Eso no es instantáneo, es un proceso”. Asimismo, explicó que se genera un problema financiero, en tanto los productores no pueden –coyunturalmente- enfrentar los costos disponibles. “Se requiere bajar costos o mejorar los ingresos para hacer rentable el emprendimiento”. 

Impactos de la sequía

Finalizados la cesión de Acuerdos Ministeriales del pasado lunes, el Ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Ernesto Agazzi, informó que en el sur hay un déficit de lluvias, situado para esta época del año, entre el 40% y 60%. Precisó que esta situación disminuye la disponibilidad de pasturas y se suma a los inconvenientes generados por la crisis internacional. Informó que para contrarrestar estos efectos  viene discutiéndose con las gremiales en el ámbito del INALE distintas propuestas de Gobierno, que una vez que estén implementadas serán dadas a conocer.