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1° de diciembre, 2008

Presentaron estado de situación

VIH-Sida en Uruguay: epidemia concentrada en sectores de mayor vulnerabilidad
Los datos del pasado no eran alentadores en materia de VIH-Sida, pero el último estudio realizado, reveló una baja prevalencia nacional, concentrada en los grupos más vulnerables. Se alcanzó una "meseta", es decir un control de la epidemia en la población general. Dos uruguayos por día eran notificados de la enfermedad, actualmente, la cifra descendió a uno, lo que demuestra que las acciones preventivas están dando sus frutos.

Datos preliminares de un estudio centinela que se realizó en población general de prevalencia del VIH-Sida, fueron revelados en el acto conmemorativo del Día Mundial de Lucha Contra el Sida. El acto contó con la participación de la Ministra de Salud Pública, María Julia Muñoz; el Subsecretario, Miguel Fernández Galeano; el Director de Salud, Jorge Basso; el representante de OPS/OMS, Roberto Salvatela; el representante del Fondo de Población de las Naciones Unidas, Pablo Mandeville; el representante de la Comisión Nacional de Sida (CONASIDA), Mario Segovia, y la directora del Programa Nacional de ITS/SIDA, María Luz Osimani.

En este ámbito, se presentó el estado de situación de la epidemia VIH/SIDA en el Uruguay y los resultados de las investigaciones llevadas a cabo en 2008. Posteriormente, se entregaron los premios a los ganadores del Concurso Nacional de Afiches que apuntan a la promoción del uso del condón y la prevención de la transmisión sexual, la promoción de la adherencia al tratamiento y la promoción de la no discriminación.

Las cifras venían en aumento en los últimos años. Los datos más recientes se ubican en 0.43 lo que revela una meseta, es decir que se alcanzó un cierto control de la epidemia en la población general. Esto tiene que ver con que otros Ministerios y organismos públicos están trabajando fuertemente en la implementación de educación para la sexualidad. En tal sentido, se reconoce la labor de ANEP/CODICEN, Ministerios del Interior, Defensa Nacional, Desarrollo Social y Turismo y Deporte, ANP, INAU, direcciones departamentales del interior, entre otros, todos reunidos en la CONASIDA, un espacio intersectorial e interministerial.

Actualmente, 10.996 personas saben que poseen la enfermedad, en su mayoría en el rango etario entre 15 y 44 años. Además, un estudio de Equipos Mori, reveló que de las personas consultadas, el 60% no utilizó condón en su último acto sexual, si bien conocen los métodos preventivos.

Las mujeres han aumentado la notificación, porque más mujeres que hombres se hacen el diagnóstico del VIH, teniendo en cuenta que se les ofrece el análisis cuando quedan embarazadas. La mujer, como en muchas patologías, se encuentra en condiciones de mayor vulnerabilidad que el hombre, aseguró María Luz Osimani.

En el caso de los niños, muchos de ellos ya son adolescentes y están conviviendo con este virus. Algunos de los spots de radio que están saliendo en la jornada, son de chicos que hablan de su temor a la discriminación a nivel escolar, informó.

El control de la mujer embarazada, ha permitido una sensible disminución de la transmisión vertical. Actualmente, un 2% de las embarazadas le traspasan a su hijo la enfermedad, cifra que obedece en su mayoría, a casos en que no se llega al control temprano durante el embarazo.

Osimani apela a la creación de una Consejería, una orientación, para que quienes hayan tenido una práctica de riesgo lo puedan conversar y así revertir la situación para en un futuro, tener prácticas más seguras. Asimismo, recordó la alternativa del 0800 SIDA, una línea telefónica que atiende en forma confidencial y anónima las consultas de las personas. La misma, se considera un buen barómetro para medir la situación.

La epidemia está concentrada en las poblaciones con mayor vulnerabilidad. Durante 2008, en la población privada de libertad se registra un 5.5% de prevalencia (Cárcel de Canelones); en trabajadores sexuales masculinos (taxiboy, travestis) un 19.5% y se está terminando el estudio sobre homosexuales (u hombres que tienen sexo con hombres).

Osimani hizo referencia a la prevención, destacando que se trabajó con la población en condiciones de mayor vulnerabilidad y en la territorialización de las acciones en la frontera; se extendió el test rápido de VIH y sífilis en el primer nivel de atención y el plan de eliminación de sífilis congénita, y se coordinaron las acciones con otras instituciones gubernamentales.

En cuanto a la normativa, se cuenta con: el programa nacional de prestaciones ITS/SIDA; las directrices de atención integral de las trabajadoras sexuales; el protocolo de tratamiento antirretroviral; la coordinación permanente con los programas de tuberculosis y VIH; el test de genotipificación y el apoyo al programa de salud bucal para sus criterios de bioseguridad.

Se plantean como desafíos del futuro, lograr implementar el registro único de usuarios de VHI; tener una campaña sostenida en los medios masivos de comunicación; intervenciones contínuas en poblaciones en condiciones de mayor vulnerabilidad y promover acciones que faciliten el acceso al diagnóstico de VIH.

Finalmente, Osimani destacó la importancia de contar con el Laboratorio Central de Salud Pública de última generación que se construyó con los aportes de la Facultad de Medicina y el Ministerio de Salud Pública y que funcionará en el Instituto de Higiene, tras un año y medio de obra. Allí se realizan los test de resistencia para personas con VHI, que son adherentes al tratamiento. Cuando comienzan con su primera falla, existe la posibilidad de diagnosticar cuál es el problema que se tiene y así cambiar el tratamiento. El equipamiento de vanguardia que allí se utiliza, fue donado por los gobiernos de Alemania y Brasil, representados por sus embajadores en nuestro país.

El Director general de Salud, Jorge Basso, destacó el estudio realizado este año que sufrió modificaciones respecto al de años anteriores, y que se tornó más confiable. La estadística revela que se alcanzó una baja prevalencia nacional, pero concentrada en los grupos más vulnerables.

Basso entiende que la herramienta más eficiente es la prevención en salud, promoviendo el uso del condón. En este sentido, anunció que el MSP incrementó los niveles de compra de preservativos que ya eran históricos. Los mismos, se distribuyen en los diferentes Ministerios y ONG como forma de facilitar el acceso al mismo.

Mario Segovia representante de CONASIDA, hizo hincapié en el concepto de "prevención". Prevenir es llegar a la población antes de la enfermedad, dijo. Lo que se invierte en prevención, se ahorra en tratamientos posteriores cuando la enfermedad está instalada. "Debemos ser responsables y saber que todos somos parte del problema", dijo Segovia quien ratificó que persiste la discriminación y la estigmatización de estas personas. "Conocer para prevenir es el camino", es informarse y tomar recaudos, sostuvo.

Por otra parte, Segovia destacó el apoyo del Ministerio de Salud Pública que garantiza el acceso a los medicamentos, lo cual es esencial y reconoció que desde que funciona el SNIS, mejoró la asistencia.

Roberto Salvatela, de OPS/OMS, calificó este 1º de diciembre como una fecha de reflexión y renovación de compromisos en pos de garantizar la igualdad, la no discriminación. Asimismo, dijo que mucho se hace en el Uruguay por revertir esta epidemia, pero queda mucho más por hacer.

El representante de ONU, Pablo Mandeville, se congratuló por instancias como ésta, donde compartir las cifras actualizadas de un tema tan preocupante. Felicitó la labor que se realiza en nuestro país, reafirmando además su apoyo y el de la organización que representa, para que Uruguay logre controlar la enfermedad.

Los conceptos de solidaridad, responsabilidad, compromiso, integración y no discriminación, fueron reiterados por todos los participantes al evento como forma de procurar estrategias que nos conviertan en una sociedad más integrada.

   
 
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  María Luz Osimani