Luis Branda, médico uruguayo experto en docencia médica y co-fundador de la Facultad de Medicina de la Universidad de McMaster de Canadá, dictó una conferencia sobre los nuevos paradigmas en la formación médica para el cambio de modelo de atención. Branda presentó un modelo innovador de formación profesional basado en la resolución de problemas, que tienda a crear médicos con un perfil determinado para cada comunidad.

La charla fue organizada por el Ministerio de Salud Pública y el Centro Latinoamericano de Economía Humana (CLAEH). La Ministra de Salud Pública, María Julia Muñoz, señaló que la reforma del sistema de salud exige un médico con un perfil diferente y que sea capaz de gestionar el primer nivel de atención con mayor capacidad resolutiva. Señaló que este requisito fue tomado por la Facultad de Medicina para formar a sus profesionales y que se ve reflejado en la reciente aprobación de un nuevo Plan de Estudios por parte del Consejo Directivo Central.

Asimismo, señaló que en 2009, el MSP pretende premiar a las instituciones que estimulen y desarrollen la formación profesional continua. Sostuvo que para contar con un mejor modelo de atención, se requieren cambios en la formación académica, un horario del personal médico diferente al actual, con mayor cantidad de horas y tratando que se ejerza en un solo lugar de trabajo. Aclaró que ésta es una tendencia que se deberá construir a lo largo del tiempo y que requiere de la discusión entre todos los actores.

La conferencia del doctor Luis Branda tuvo como eje el rol que las instituciones académicas tienen que jugar, trabajando conjuntamente con las autoridades del sistema sanitario en el desarrollo de problemas de educación. En tal sentido, compartió su experiencia realizada tanto en Canadá como en España, donde desarrolló un modelo de aprendizaje basado en problemas (Problem Based Learning, PBL). En los últimos 25 años, Branda se dedicó exclusivamente al desarrollo de diversos aspectos de la educación de profesionales y fue consultor de varias instituciones, incluyendo la Organización Mundial de la Salud.

Señaló que esta metodología implica que todos los actores involucrados (gobierno, instituciones académicas, profesionales y la ciudadanía) participan en la toma de decisiones sobre la formación, dado que existe un flujo de comunicación continuo con información compartida, donde la comunidad es la que determina el perfil del profesional médico que se necesita.

Aclaró que no significa que los egresados del tradicional sistema educativo no tengan buena calidad técnica, sino que este nuevo modelo notó que la manera de aprender de los estudiantes cambió. Por ello, se promueve un aprendizaje auto-dirigido, basado en el análisis y resolución de casos clínicos. De esta manera, el estudiante construye una base del conocimiento basada en la realidad determinada por la comunidad en la que está inserto y por lo tanto, ejercerá la medicina.