Sistema de trenes y carreteras
Experto Ferroviario aseguró que Uruguay podría ser
un país modelo en el mundo
Samuel Rachdi dijo que con un
millón de dólares es posible la recuperación de la
Estación Central y elogió la red ferroviaria uruguaya.
Destacó beneficios económicos de trenes históricos con
fines turísticos y sugirió que aquí podrían
implementarse para paseos de fin de semana, con tarifa
más elevada y mejor confort que los trenes comunes.
Consideró que constituiría una opción atractiva para
turistas que arriban en cruceros.
El consultor de la Cooperativa
Internacional para el Desarrollo de los Ferrocarriles
Latinoamericanos (AIFFLA) e integrante de la Asociación
de Amigos de los Ferrocarriles Latinoamericanos, Samuel
Rachdi, recorrió, en una gira por los países de la
región y que incluyó Uruguay, la Estación Central
“General Artigas”. Lo hizo acompañado de integrantes
del Grupo de Pasajeros en Defensa de la Estación
Central. El especialista suizo, quien sostuvo que “el
futuro del transporte público es, sin dudas, el
ferrocarril”, se mostró preocupado por el estado de
abandono en que se encuentra la emblemática terminal
ferroviaria inaugurada en 1897. No obstante, Rachdi
adelantó que si se decidiera recuperar hoy ese
monumento histórico la tarea demandaría una cifra que,
en su opinión, no superaría el millón de dólares. En su
visión, las importantes dimensiones de la antigua
terminal permitirían su convivencia con otros
emprendimientos de carácter comercial que contribuirían
a su propio mantenimiento.
La Estación Central fue adquirida
por el Banco Hipotecario del Uruguay en 1999 para la
realización del proyecto inmobiliario Plan Fénix que,
según los integrantes del Grupo de Pasajeros, no tuvo
en cuenta los argumentos técnicos contrarios a la
clausura de la terminal ferroviaria y terminó en un
“rotundo fracaso”.
El especialista, que en su estadía
en Uruguay no tiene previsto entrevistarse con
autoridades del riel ni del transporte, elogió la red
ferroviaria uruguaya existente debido a que llega a
todas partes del país. Si bien reconoció el
significativo aporte del transporte de carga para la
economía nacional, aseguró que recuperar esa red puede
ser de inestimable utilidad también para el transporte
de pasajeros. “Con esta red ferroviaria sería posible
instrumentar, a su vez, una red complementaria de
carreteras para constituir un sistema integrado de
trenes y del sistema carretero para la carga y los
pasajeros. De esta forma, Uruguay podría ser un modelo
no sólo para América Latina sino para el mundo entero”,
aseveró.
Las dos asociaciones que integra
Rachdi tienen su sede en Suiza, y promueven el
desarrollo ferroviario en América Latina. Además de ese
país, sus socios provienen mayoritariamente de Austria
y Alemania. En la región, cuentan con proyectos
ferroviarios implementados en el estado brasileño de
Santa Catarina y en el ramal Tacna-Constitución, en
Chile. En lo relativo a nuestro país, el visitante
adelantó que en Europa viene llevando adelante
gestiones para financiar la compra de coches motor. En
ese sentido, reconoció que la tarea “es muy difícil”
porque “Uruguay no es considerado un país del tercer
mundo”.
Rachdi, que fue guardabarreras en el
país helvético, destacó, en su reciente visita a
Brasil, la organización y buen funcionamiento de los
trenes históricos-turísticos. Confió que “quedamos muy
impresionados de cómo funcionan (los trenes) en ese
lugar”. En el caso del existente en Campinhas, Rachdi
advirtió que los vio “mejor organizados” y “más
limpios” que en Suiza.
Volviendo a nuestro país, el
especialista sugirió pensar en la incorporación de
trenes históricos-turísticos como complemento a otros
tipos de tren. “Son un buen negocio”, afirmó. “Así como
hay muchos brasileños que pueden pagar un precio más
elevado por un medio de transporte de estas
características, seguramente también haya gente aquí
que pueda hacerlo como una alternativa de paseos de fin
de semana”, razonó. Un tren turístico tiene horarios
que están ideados para que la gente viaje en su tiempo
libre. Está conformado por vagones restaurados y
locomotoras en algunos casos, a vapor, están equipados
con materiales históricos, pueden contar con ventanas
más amplias para contemplar mejor el paisaje y un
servicio de guías que realizan una reseña histórica de
los lugares transitados. En este caso, es importante
ofrecer al pasajero más comodidades que en un tren
común porque la tarifa es más alta, indicó Rachdi. El
entrevistado sostuvo que este servicio, incluso, es muy
apropiado y tendría buena demanda de parte de los
turistas extranjeros que arriban a nuestro país durante
las temporadas de cruceros. |