Ministro Colacce
Uruguay trabaja para mitigar fenómenos climáticos
extremos de la crisis ambiental global
Para contrarrestar la variabilidad
climática, Uruguay está trabajando en forma coordinada
con el objetivo de modificar la matriz energética y
tener menos dependencia del petróleo. También se
realizan acciones para una mejor eficiencia energética
y el desarrollo de mecanismos limpios que mitiguen las
consecuencias negativas del cambio climático, efectos
que son provocados mayormente por los países del Primer
Mundo.
El
Ministro de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio
Ambiente, Carlos Colacce, subrayó la importancia del
cambio climático en nuestro país y el mundo. Explicó
que la tierra recibe radiaciones solares, que luego
emite a la atmósfera, no obstante una parte permanece
en el planeta.
En
ese marco, con el efecto invernadero, el anhídrido
carbónico, el óxido nitroso y el metano son
protagonistas de un equilibrio roto por la actividad
humana. De esta forma, se emiten a la atmósfera grandes
cantidades de anhídrido carbónico, que producen el 80%
de la descompensación constatada. Los principales
motivos son el uso de combustibles fósiles y la tala
indiscriminada, en especial en la zona selvática de la
tierra.
Colacce afirmó que esta situación produjo que en 35
años se duplicará la emisión de anhídrido carbónico. Al
emitir más gases, la atmósfera libera menos radiación,
lo que calentó a la Tierra un grado más. Con distintos
modelos, se puede estimar que en el 2100 la temperatura
del planeta se elevará unos cinco grados, ocasionando
cambios inestimables hasta el momento.
La
dilatación de las grandes masas de agua son efectos
surgidos por este problema. De continuar así, puede
llevarnos a situaciones catastróficas. En la actualidad
se observan grandes variabilidades climáticas, las
sequías e inundaciones son más extremas y más comunes.
En
ese contexto, otros efectos tocan aspectos de la vida
humana, tanto en salud, producción, servicios, recursos
hídricos, ecosistemas rotos, industria y eficiencias
energéticas, eventos que para ser cambiados deben ser
trabajados en forma coordinada.
Entre las medidas de mitigación y de adaptación
necesarias está el bajar las emisiones de anhídrido
carbónico, con el objetivo de estabilizar los aspectos
de temperatura de la atmósfera, situación que llevará
varias décadas.
El
Ministro dijo que por esas razonas es necesario
trabajar para las generaciones futuras. En este
aspecto, dijo que Uruguay aportó su grano de arena,
consumiendo más anhídrido carbónico del que produce.
A
nivel internacional, luego de diez años de Protocolo de
Kyoto se evaluarán las medidas y se generarán otras
para los próximos 12 años.
Colacce afirmó que las medidas aplicadas de adaptación
son las necesarias y obligan a que en la actualidad se
analicen las vulnerabilidades, con el objetivo de saber
qué acciones se deben adoptar.
El
jerarca afirmó que como firmantes del protocolo de
Kyoto Uruguay está inventariado de emisión de gases. De
esta forma, se está trabajando para una menor
dependencia del petróleo y en un más eficiente uso
energético.
Este mecanismo de desarrollo limpio, permite contar con
fondos y un mercado de carbono, el cual Uruguay está
impulsando.
A
partir del próximo año, se realizará un mecanismo de
adaptación, que otorgará créditos blandos a las
empresas que adopten medidas de reducción de emisiones
de gases a la atmósfera.
Según los modelos analizados, el agua de la costa
aumentará a fin de siglo, aproximadamente unos 40
centímetros, situación que obliga a nueva acciones de
adaptación.
Colacce manifestó que el informe internacional Stern,
expresa que es necesario invertir el 1% del PBI mundial
para revertir y mitigar esta situación, que a medida
que se dilaten exigirán una inversión de entre 5 a 20%
del PBI, que generará distorsiones realmente
inimaginables.
Palabras del Ministro de Vivienda,
Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Carlos
Colacce, realizado en el departamento de Soriano, en el
Congreso de Intendentes el 17 de marzo 2009.
MINISTRO COLACCE: Gracias, señor Presidente. Primero
que nada a todos y a todas, un gusto, un honor, un
saludo de poder estar aquí con ustedes compartiendo
esta jornada y por un tema, que como bien dice el
Presidente, es de suma importancia y actualidad para lo
que es el mundo y el planeta en el día de hoy.
Brevemente, muchos de ustedes ya lo sabrán, lo que es
el fenómeno del cambio climático y a qué se debe. El
planeta Tierra recibe la radiación solar, buena parte
de ella es absorbida por el propio planeta, produciendo
su calentamiento y lo que provoca que el propio planeta
emita radiaciones infrarrojas.
Esa radiación, provoca un calentamiento de nuestra
atmósfera compuesta por una combinación de varios gases
y el calentamiento de esa atmósfera por ese fenómeno,
obviamente emite parte de esa temperatura al espacio y
parte de esa temperatura, vuelve al planeta, generando
de esta forma lo que es el macro-equilibrio que
tenemos, térmico, de la corteza terrestre, que de no
existir este fenómeno de efecto invernadero, este
segundo efecto, de acumulación de temperatura del
calentamiento de la atmósfera por la radiación
infrarroja, tendríamos una temperatura promedio de 32º
por debajo de la que hoy tenemos, por lo cual, no sería
posible la vida tal cual la concebimos hoy, tal cual se
ha desarrollado.
Estos gases, efecto invernadero, bueno, hay una serie
de gases y en particular el anhídrido carbónico, el
óxido nitroso y el metano, son los fundamentales que
provocan este efecto. Pero estos gases tienen que estar
en una composición adecuada para que se mantenga este
equilibrio, fundamentalmente por aspectos de la
actividad humana, antropogénicos, se ha constatado que
estamos emitiendo a la atmósfera cantidades como nunca
antes se habían emitido, especialmente de anhídrido
carbónico, porque el anhídrido carbónico es el que
produce el 70 o el 80% de este factor, de esta
descompensación que se está constatando.
Los motivos fundamentales son los consumos de los
combustibles de orígenes fósiles, el petróleo, y
también distintos usos del suelo, entre los cuales
podemos especialmente recordar lo que son las talas
indiscriminadas y especialmente de las zonas
selváticas. Las plantas consumen anhídrido carbónico y
especialmente los árboles. Si nosotros no los tenemos,
justamente cortamos ese sumidero y volvemos a
incrementar la rotura de un equilibrio de ciclo de
carbono en la atmósfera.
Esta situación que claramente tiene años, pero que se
ha incrementado en las últimas décadas, solamente en
los últimos 35 años, hemos casi duplicado la emisión de
anhídrido carbónico a la atmósfera, lo cual tiene como
efecto de que al haber más gases del efecto
invernadero, entonces hay un aumento de la temperatura
a nivel de la corteza del planeta. Ya en los últimos
años se ha constatado prácticamente en este siglo, en
el siglo XX, un incremento en el orden de 1 grado y que
las proyecciones, obviamente con distintos escenarios,
distintas evaluaciones, distintos modelos, pero
presentan algunas situaciones que para el 2100
podríamos llegar a tener un calentamiento en el orden
de 4 a 5 grados. Esas son las peores estimaciones que
están, partiendo de una base donde no se haga ninguna
labor de mitigación que invierta estos efectos. Y en
esas circunstancias, estaríamos en el 2100 en un
escenario, que hoy por hoy escapa de cualquier
estimación con respecto a las situaciones y a los
cambios que pueden ocasionar.
También se produce, asociado a este efecto, un
incremento del nivel de agua de los océanos, tanto por
lo que es el deshielo que está habiendo de los
casquetes polares, de los glaciares en general, debido
a este aumento de temperatura, como también la propia
dilatación de las grandes masas de agua, por el
incremento de temperatura. Sin embargo, nosotros aparte
de hacer especialmente mención a estos efectos
conocidos de cambios climáticos, como ven de larga
data, es decir, por lo que viene atrás, hoy por hoy,
tenemos los registros que hay de anhídrido carbónico de
la atmósfera que son los más altos que se pueden
obtener a partir del análisis de distintas capas de
hielo, de los 650.000 años de aquí para atrás.
Esta circunstancia, evidentemente, de continuar así,
puede llevarnos a situaciones realmente catastróficas.
El planeta está trabajando en ese sentido. Pero lo que
ya se observa hoy y como decía el señor Presidente son
las grandes variabilidades climáticas que están
implícitas a este fenómeno. Hoy tenemos más frecuencia
en las sequías, más frecuencia en las inundaciones, en
estos casos extremos. Pero además las sequías son cada
vez más secas y las inundaciones cada vez con cotas más
altas. Esto lo estamos padeciendo ya hoy por hoy.
Los efectos del cambio climático, obviamente, tocan
transversalmente muchos aspectos de nuestra sociedad,
aspectos como la salud, aspectos como la agricultura,
que especialmente van a ser siendo tratados aquí,
aspectos como el turismo, el hecho solamente de que se
incremente el nivel de las aguas y la afectación de la
zona costera lo trae bien aparejado.
Los recursos hídricos, estos efectos extremos de picos,
traen asociados crisis hídricas. Ecosistemas,
industria, que además la industria obviamente como
factor influyente en la emisión de gases, incluso los
aspectos de eficiencias energéticas y recambio de
matrices energéticas para revertir esta situación.
Sobre todos estos aspectos hay que estar trabajando en
forma coordinada. Labor que si bien se está
desarrollando tiene más relevancia día a día.
Básicamente debemos adoptar medidas de mitigación y
medidas de adaptación. Todos los que estamos aquí vamos
a dejar de estar en este planeta y el efecto de cambio
climático va a seguir estando. Los efectos de
mitigación, es decir revertir la cantidad de emisión de
gases efecto invernadero llevándolas a términos
históricos, normales, y de esa forma poder estabilizar
los efectos de temperatura de la atmósfera van a llevar
decenas de años. Eso no nos hace más que poner en el
compromiso, lo decimos como seres humanos, de que
tenemos que trabajar para las generaciones futuras,
para nuestros hijos, nuestros nietos, nuestros
bisnietos. Hay muchísimas acciones que en este sentido
se están emprendiendo. Nosotros en lo que tiene que ver
con mitigación que se traduce más sencillamente como
reducir la emisión de gases realmente aportamos, pero
aportamos nuestro grano de arena. Uruguay en su
contexto es un país que consume más anhídrido carbónico
del que emite, dado sus características, su vegetación
y que tiene baja industrialización. Los países
desarrollados son obviamente los que tienen la
iniciativa más importante en esta tarea. Protocolos
internacionales, acuerdos como el de Kyoto han dejado
un camino sentado y este año en Copenhague se van a
evaluar los resultados luego de diez años del Protocolo
de Kyoto, de los compromisos ahí asumidos, y asumir un
nuevo protocolo y compromiso para los próximos doce
años. Las medidas de adaptación son aquellas que
tenemos y que nos van a influir en el diario vivir a
partir de hoy, en realidad ya se están emprendiendo. Y
son en buena parte también objeto de lo que hoy vamos a
estar planteando. Son aquellas que debemos realizar
para adaptarnos a las circunstancias que
inexorablemente vivimos hoy por hoy. Los extremos, la
variabilidad climática, esos extremos de sucesos
obligan a que hoy por hoy veamos todas las
vulnerabilidades y cuáles son los sectores vulnerables
y qué medidas adoptar.
Yo no voy a
enumerar lo que son las medidas específicas que hace
años se vienen trabajando, pero simplemente, como
firmantes del Protocolo de Kyoto, Uruguay, está
cumpliendo puntualmente con sus compromisos, ha
presentado el primer y el segundo informe nacional,
comunicación nacional, está preparando el tercero donde
incluso presenta todo el inventariado de las emisiones
de gases que produce el país, pero además presenta
todos sus planes de acción tanto a nivel de
investigación como del Ministerio de Industria. Viene
trabajando con ahínco en la modificación de la matriz
energética para tener menos dependencia de petróleo y
tener obviamente una también mejor eficiencia
energética, aspectos totalmente vinculados con estos
temas de mitigación; el mecanismo de desarrollo limpio
que incluso brinda oportunidades porque permite a
países como los nuestro tener fondos por emisión de
anhídrido carbónico de países que los produce en sus
países desarrollados y por lo tanto se genera un
mercado de carbono, ya hay varias emprendimientos.
Incluso hoy por hoy que ya están incorporados mercados
del carbono en Uruguay eso de todas formas si brinda
una oportunidad ha sido una resultados del Protocolo de
Kyoto. Estamos trabajando en este año dejar pronto que
a partir del año que viene haya un mecanismo de
producción limpia con un financiamiento del Banco
Mundial con lo cual permite que haya créditos blandos
para pequeñas y medianas empresas que puedan readaptar
su producción a desarrollos limpios y una serie de
actividades entonces a lo que refiere a mitigación, es
decir reducción de emisión de gases invernaderos. Pero
simplemente nos interesa hablar de lo que son las
medidas de adaptación donde se viene identificando,
trabajando sin duda el Ministro de Ganadería nos va a
poder detallar mucho mejor lo que son las
identificaciones de las vulnerabilidades de distintos
tipos de producción y cuáles son las medidas que en
ese sentido hay que aplicar. También se está trabajando
en un sistema. Ya se han corrido un modelo, escenarios
propios de nuestra situación para los impactos de
nuestra zona costeras, ya tenemos identificado de
acuerdo a esos modelos que vamos a tener un incremento
a nivel de las aguas de nuestras costas del orden de
40 centímetros a fin de este siglo, lo cual implica
incluso intrusiones salinas en el Rió de la Plata,
afectación de los humedales con lo que también implica
eso de la biodiversidad, situaciones que también nos
obligan a medidas de adaptación. Estamos como bien
decía el Presidente ante una situación si bien hoy por
hoy todos estamos mirando lo que es la crisis
internacional económica financiera, sin duda esa crisis
vino y se va a ir, pero estamos aquí hablando de una
crisis ambiental global en donde estamos todos
involucrados. Es muy injusta, porque se ha generado
fundamentalmente por la emisiones que generan los
países del primer mundo y somos como tantas otras
cosas, nosotros los que las vamos a sufrir. Ellos están
asumiendo los compromisos de los fondos en ese sentido
que hay que invertir. Hay un informe especialmente que
relaciona a la parte ambiental con la económica en lo
que es cambio climático, y ha presentado de que el
informe Stern, conocido y encargado por el gobierno
Británico, hoy por hoy está siendo asumido por el
gobierno por la primera colonia mundial, por Estados
Unidos, que si nosotros no abdicamos los fondos que hoy
por hoy están estimados en orden de un 1% del PBI
mundial para revertir, mitigar esta situación, bueno a
medida que nosotros dilatemos esas decisiones
rápidamente se van los fondos necesarios para revertir
la situación, van hacer de 5% al 20% del PBI generando
distorsiones realmente inimaginables. Estamos entonces
ante una situación que el mundo está, alerta está
trabajando, somos optimistas que incluso países
emergentes como China, India van a estar incorporándose
a todos los nuevos protocolos pero en particular
nosotros acá en Uruguay tenemos mucho que hacer. Si
bien todo Latinoamérica emite menos del 10% de la
cantidad de gases invernadero, imaginen lo que es
Uruguay, pero sin embargo nosotros aportamos nuestro
grano de arena y nuestro compromiso internacional en
ese aspecto, pero aquí dentro de nuestro país tenemos
que trabajar mucho y muy bien en todas las medidas
correspondientes de adaptación. Muchas gracias |