Calidad en la Gestión Pública

Uruguay mejora calidad de formación de funcionarios públicos y narra su experiencia

Con la ambición de mejorar el servicio en la Administración Pública y generar la satisfacción de las necesidades de la ciudadanía, es que Uruguay participa del Foro Iberoamericano sobre Estrategias para la Implantación de la "Carta Iberoamericana de Calidad en la Gestión Pública". La iniciativa procura aunar las experiencias de los países involucrados para promover la concreción de las metas dispuestas en la citada Carta.

Nuestro país, como anfitrión del Foro Iberoamericano sobre Estrategias para la Implantación de la "Carta Iberoamericana de Calidad en la Gestión Pública" –que se realiza en el Sheraton Montevideo Hotel este 7 y 8 de mayo- expone sobre el proceso de mejora de la calidad de la formación de los funcionarios públicos; relata la experiencia de un gobierno municipal en materia tecnológica y la implementación de los Premios de Calidad en la Gestión Pública, entre otros temas.

El Centro Latinoamericano de Administración para el Desarrollo (CLAD), organizador del evento, eligió al Uruguay como sede del Foro, dado que consideró que el país cumple con las condiciones para acompañar un proceso considerado “reciente”.

Participaron de la actividad: la Directora de la Oficina Nacional de Servicio Civil (ONSC), Cecilia Menéndez, y la Subdirectora de la citada dependencia, Ana María Santestevan, entre otras autoridades nacionales, así como representantes del CLAD y nutridas delegaciones de diversos países de Iberoamérica.

Este Foro convocó a todos los países que integran el CLAD para intercambiar lo que se realiza, para promover los principios contenidos en la Carta Iberoamericana, explicó Ana María Santestevan. Esta Carta –que consagra las estrategias e instrumentos para promover la calidad en todas las Administraciones Públicas- se aprueba en El Salvador en 2008 y recién se comienza a conocer las experiencias de los países que se orientan hacia la promoción de la calidad en la gestión pública.

“Se trata de algo novedoso teniendo en cuenta que, si bien la calidad es un principio que inspiró tradicionalmente varios procesos -sobre todo en el sector privado-, para la generación de indicadores de cómo se viene trabajando en la Administración Pública, incorporar la visión de la calidad es absolutamente estratégico, y se considera un reclamo, además de una obligación para el Estado respecto a la ciudadanía en general”, sostuvo la Subdirectora de la ONSC.

En cuanto a lo que Uruguay realiza en el tema, Santestevan explicó que son muchas las iniciativas.

En oportunidad del Foro, el Director de la Escuela Nacional de Administración Pública “Aquiles Lanza”, Sergio Villanueva, presentó el proceso de nuestro país en cuanto a la mejora de la calidad de la formación de los funcionarios públicos. Se cambió sensiblemente el contenido de la capacitación, explicó. Uno de los temas presentados en la conferencia tuvo que ver con la creación de una Maestría en Gestión Pública, dirigida fundamentalmente a la alta gerencia pública.

Otro de los temas que se prevé compartir con las demás delegaciones participantes del Encuentro –por lo novedoso y exitoso de la iniciativa- es la experiencia de un gobierno municipal, puntualmente del departamento de Florida, denominada “Florida Digital”, que incorpora elementos de calidad pero también de tecnología.

Asimismo, se trabaja en conjunto con la Oficina de Planeamiento y Presupuesto en la creación e implementación de los primeros Premios de Calidad en la Gestión Pública. Se trata de una iniciativa reciente en la que se acompaña a varios Ministerios que presentaron propuestas de mejora de gestión.

El objetivo fundamental de estas iniciativas es traducir estos logros en la gestión de la Administración Pública y el contacto directo con la población. “Se procura lograr un mejor servicio y generar la satisfacción de las necesidades de la ciudadanía”, añadió Santestevan.

El Foro y sus participantes

El objetivo fundamental de este Foro es formular lineamientos estratégicos para la implantación progresiva en los países de Iberoamérica de estándares de calidad y excelencia en la gestión pública, de conformidad con las pautas contenidas en la citada Carta Iberoamericana.

El evento congrega a las autoridades gubernamentales encargadas de la implementación y desarrollo de criterios y parámetros de calidad en los aparatos de gestión pública en cada uno de los países iberoamericanos, a efectos de intercambiar información y debatir sobre las problemáticas a las que se enfrentan en sus respectivos países, las políticas y acciones adoptadas por los gobiernos iberoamericanos en la promoción de la gestión pública de calidad, las causas de sus éxitos y fracasos, los obstáculos y oportunidades para el avance de los umbrales cualitativos de las administraciones al servicio del ciudadano, y los desafíos y alternativas de estrategias para implantar, desarrollar y consolidar una gestión sobresaliente de conformidad con las orientaciones de la Carta Iberoamericana.

También, cuenta con la presencia de expertos internacionales que aportan sus reflexiones al plenario de participantes.

Puntos de inflexión

Los temas críticos en torno a los que se focaliza la discusión son:

a) Desarrollo de capacidades de los empleados públicos para su participación en la mejora de la calidad de la gestión.

b) Diagnóstico y evaluación. Un enfoque metodológico para la evaluación de la calidad de los servicios.

c) Los procesos en la gestión pública orientados para resultados.

d) Liderazgo y dirección estratégica.

e) La resistencia al cambio. Barreras y forma de abordarlas.

f) Autoevaluación, modelos de excelencia y los premios de prácticas promisorias.

Carta Iberoamericana de Calidad en la Gestión Pública

La "Carta Iberoamericana de Calidad en la Gestión Pública", elaborada por el CLAD, fue aprobada por la X Conferencia Iberoamericana de Ministros de Administración Pública y Reforma del Estado, celebrada en San Salvador, El Salvador, en junio de 2008, habiendo sido posteriormente adoptada por la XVIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno realizada en El Salvador en octubre del mismo año.

Esta Carta Iberoamericana se inscribe en la propuesta de adecuar el funcionamiento de las Administraciones Públicas iberoamericanas para garantizar que sean instrumentos útiles, efectivos y confiables al servicio de sus respectivas sociedades. En tal sentido, vincula la calidad en la gestión pública con dos propósitos fundamentales de un buen gobierno democrático: 1) Toda gestión pública debe estar referenciada a la satisfacción del ciudadano, ya sea como usuario o beneficiario de servicios y programas públicos, o como legítimo participante en el proceso, formulación, ejecución y control de las políticas públicas bajo el principio de corresponsabilidad social; 2)La gestión pública tiene que orientarse para resultados, por lo que debe sujetarse a diversos controles sobre sus acciones, suponiendo entre otras modalidades la responsabilidad del ejercicio de la autoridad pública por medio del control social y rendición periódica de cuentas.

La adopción de estrategias de innovación, racionalización y mejora de la gestión pública, orientadas por la calidad, permitirá a las Administraciones Públicas iberoamericanas posicionarse favorablemente frente a la incertidumbre, reforzar su influencia en un entorno dinámico y complejo, y acometer el necesario desarrollo organizativo para la gestión del cambio y la formulación de soluciones de mejora creativas, con el fin de cumplir al máximo las expectativas de la ciudadanía, proporcionando un instrumento para lograr la coherencia en la dirección estratégica a seguir.

Además, promueve el establecimiento de un enfoque común acerca de las nociones de calidad y de excelencia en la gestión pública, a partir del cual se adopte un conjunto de principios y orientaciones que sirvan de referencia a las diferentes Administraciones Públicas iberoamericanas en la formulación de sus políticas, planes, modelos y mecanismos que permitan la mejora continua de la calidad de su gestión pública.

La implementación de los principios y orientaciones deberá adaptarse a la diversidad de las condiciones de las naciones iberoamericanas, al igual que la adopción de las correspondientes acciones e instrumentos sugeridos para la mejora continua de la calidad en la gestión pública.