115º Aniversario

Clemente Estable vive en cada una de las investigaciones científicas que el IIBCE desarrolla

Finalizando la IV Semana de la Ciencia y la Tecnología, el IIBCE celebró el 115º aniversario del científico Clemente Estable. El instituto que lleva su nombre realiza investigaciones que apuestan a desarrollar el país en materia biológica, industrial, agropecuaria y social; pilares del pensamiento del maestro Estable. En su honor, en 2004 se declaró el 23 de mayo como el "Día del Investigador, de la Ciencia y Tecnología".

El Presidente del Consejo Directivo del Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable, Federico Dajas, expresó que el profesor Estable aún vive en cada una de las investigaciones que se llevan a cabo, ya que existe una clara presencia de sus ideales sobre la ciencia y el desarrollo de la tecnología.

Recordó que en 2008 se conmemoró esta fecha con la inauguración de equipos tecnológicos, de manera de mostrar la importancia que este científico le daba a la innovación para el desarrollo de instrumentos que hicieran posibles las investigaciones. En esta oportunidad, señaló que en breve el IIBCE recibirá un microscopio de fuerza atómica (Bioscope Catalyst) que permitirá acceder a una nueva dimensión en materia de investigación, ya que posibilitará el acceso a la observación de moléculas e incluso de átomos.

En el desarrollo de la biología, este microscopio posibilitará la imagenología de células y la identificación de biomoléculas para estudiar procesos degenerativos del cerebro como el alzheimer o parkinson. Además, permitirá investigar acerca de sistemas de liberación de fármacos en lugares específicos del cuerpo.

Para la industria, a través del microscopio de fuerza atómica se podrán analizar materiales y superficies, así como también realizar el control nanotecnológico sobre la calidad de los productos.

En materia de investigaciones de ciencia fundamental, Dajas señaló que se está avanzando en la generación de nuevas neuronas y el desarrollo de células madre, mientras que en relación a los aspectos sociales, se llevan adelante investigaciones sobre la pasta base que analizan los efectos químicos y neurotóxicos, es decir, la capacidad de matar células que produce la adicción a esta droga.

También se desarrolla el diagnóstico molecular para evaluar el riesgo de exposición a radiaciones, patologías genéticas en diabetes y en materia de agricultura, se realizan importantes investigaciones para la mejora de las pasturas, la generación de biocombustibles y en la detección de contaminantes ambientales, entre otros proyectos.

El IIBCE tiene un promedio actual de 80 publicaciones por año y cerca de 80 proyectos financiados. Anualmente se acercan al IIBCE más de 1.200 escolares de 30 escuelas. En la Semana de la Ciencia y la Tecnología, los niños que visitaron el IIBCE realizaron simples experimentos de laboratorio, de manera de tener un acercamiento a esta actividad.

En materia de presupuesto, Dajas señaló que en 2008 se crearon 21 cargos Gº3 de dedicación total, 20 cargos Gº2 con 40 horas y 20 cargos Gº1 con 30 horas, posibilitando el ingreso de muchos jóvenes al Instituto y mejorando la situación de los investigadores ya existentes, lo cual era impensable hacía cinco años atrás, enfatizó Dajas.

Sustuvo que el IIBCE da vida a las ideas más importantes del profesor Clemente Estable quien tenía como objetivo desarrollar la ciencia en un país chico como el Uruguay.

Por su parte, el Subsecretario de Educación y Cultura, Felipe Michellini, expresó que un país sin desarrollo de la ciencia no es un país, sino un territorio analfabeto. Por ello, resaltó la importancia de la promoción de la actividad científica y destacó el tesón del IIBCE que aún en momentos de falta de financiación, mantuvo firme su voluntad y labor por desarrollar investigaciones que tengan un anclaje en la realidad del país y que mejoren la calidad de vida de los uruguayos.

Agregó que este Gobierno le brindó un gran apoyo al IIBCE porque sus cometidos están en línea con el proyecto país y que su crecimiento se encuentra en un nivel de desarrollo sin retorno, lo cual no sería posible sin el grupo humano conformado por investigadores y estudiantes que apuestan, día a día, al desarrollo de la ciencia.