Resultado de labor coordinada
Docentes dictarán talleres sobre derecho laboral y
trabajo decente en liceos y UTU
Tras una exitosa experiencia piloto
realizada en distintos departamentos, se comenzarán a
instrumentar en forma progresiva en todos los centros de
Enseñanza Secundaria y Ciclo Básico de UTU, talleres
vinculados a derecho laboral y trabajo decente, dictados
por los propios docentes. Se aspira a que los jóvenes
salgan al mercado laboral con las nociones necesarias para
hacer valer sus derechos y respetar los de sus pares.
El 8 de diciembre de 2006 se suscribió
un convenio entre el MEC, el MTSS y ANEP, para la
realización de una experiencia piloto en seis centros
educativos del país, con el objetivo de impartir nociones
sobre los Derechos Fundamentales del Trabajo y los
Principios del Trabajo Decente a jóvenes del segundo ciclo
de Enseñanza Secundaria y del Ciclo Básico de UTU. La
experiencia piloto se ejecutó durante el año 2007 con
excelentes resultados.
Ahora comenzó la segunda etapa del
proyecto en la que se procura ampliar el contenido del
Manual para los Docentes, incorporando un capítulo sobre la
situación del déficit de trabajo decente en Uruguay, con
especial atención en la situación de los jóvenes, y
extender los resultados de la experiencia piloto a todos
los departamentos, mediante la capacitación de los docentes
de las materias que ya han incorporado la temática en los
programas de estudio.
En este marco, se realiza este 8 y 9 de
julio en las instalaciones del Hotel Ibis en Montevideo, un
taller para docentes donde se utilizará la modalidad
presencial y de videoconferencias para llegar a todo el
país.
Participaron de la inauguración del
taller –realizado en la sede de UPAEP- donde además se
presentó una publicación denominada "Construyendo el Futuro
con Trabajo Decente": el Ministro de Trabajo, Eduardo
Bonomi; el Subsecretario de Trabajo, Julio Baraibar; el
Subsecretario de Educación y Cultura, Felipe Michelini; el
Director Nacional de Educación Pública, Luis Yarzábal; el
Ministro del Interior, Jorge Bruni; la Directora de DDHH
del MEC, María Elena Martínez; el Consejero del CODICEN,
Héctor Florit; el Consejero de Secundaria, Martín Pasturino;
la Coordinadora de la OIT, María Jesús Silva, y los autores
del libro, Marcos Supervielle y Héctor Zapirain, además de
legisladores y diversas autoridades ministeriales y de la
Enseñanza.
El Subsecretario de Educación, Felipe
Michelini, destacó la importancia de generar espacios de
trabajo conjunto, coordinando esfuerzos y desarrollando
sinergias entre instituciones vinculadas al trabajo
decente, también considerado trabajo en dignidad o en
cumplimiento estricto a los estándares consagrados en
materia de derechos humanos.
Es importante tener en cuenta las cifras
de empleo, desempleo, nivel de actividad, pero no debe
dejarse de lado el tema del trabajo decente, porque
trabajar en condiciones indignas repercute en forma
negativa en el espíritu de la persona y en la sociedad
toda, analizó el Jerarca.
Poner las condiciones de trabajo en
concordancia con los mandatos del derecho es el primer paso
para empezar a solucionar los problemas.
La capacitación es trascendente, porque
no se puede hacer cumplir los derechos si no se conocen y
si la gente no asume que están para ejercerlos, añadió.
El Subsecretario de Trabajo, Julio
Baraibar, calificó este proyecto como un "hito histórico"
de este Gobierno, lo consideró fundamental y felicitó a
quienes integran el grupo de trabajo.
Es esencial que desde los jóvenes se
comience a conocer los problemas del relacionamiento
laboral y la importancia del buen contacto que debe
existir, para que todos en forma mancomunada hagan del
proyecto, que es la empresa, lo que debe ser, para que sea
efectivo y de buenos frutos.
El buen relacionamiento laboral es
fundamental para que a la empresa le vaya bien y logre que
su producto sea siempre el mejor. Es necesario iniciar una
cultura de la importancia que tiene el trabajo decente y el
buen relacionamiento laboral, ratificó.
Es necesario que el empleado "se
enamore" del proyecto del empleador, y eso se logra
haciéndolo partícipe, transfiriéndole información y
preguntándole su opinión, dijo Baraibar.
El Director de la ANEP, Luis Yarzábal,
la consideró una iniciativa brillante, producto de un
trabajo mancomunado.
Este Gobierno siempre encaró la
educación desde una perspectiva de DDHH, se propuso generar
comunidades de aprendizaje y de convivencia saludable en el
marco de un respeto integral de esos derechos.
El derecho a la educación debe habilitar
a las personas para ejercer todos los otros derechos en
condiciones de dignidad, igualdad y no discriminación.
Yarzábal definió el trabajo decente como "el derecho a
trabajar con una remuneración justa, con un trabajador y su
familia socialmente protegidos, defendiendo su derecho a la
asociación y a la sindicalización, la libertad de
expresión, el derecho a la participación y el desarrollo
pleno de su personalidad a través del trabajo".
Si no se conoce la existencia de un
derecho, no hay capacidad para demandar su respeto. "Una
educación en DDHH inexorablemente debe incluir educación
para el trabajo decente, porque refiere a contenidos
educativos imprescindibles que los educandos deben lograr
para adquirir capacidades relevantes y necesarias para
afrontar los desafíos de la sociedad actual", sostuvo.
En esta nueva etapa se crea la
oportunidad para que más docentes de todo el país puedan
incorporar a sus prácticas educativas estos conceptos, las
estrategias didácticas correspondientes y puedan
convertirse en referentes y replicadores en sus centros
educativos, multiplicadores de conocimientos y prácticas
que contribuyan a la construcción de una sociedad mejor,
más democrática, donde exista trabajo decente y se respeten
los derechos humanos de todos, indicó el Jerarca.
La representante de la OIT, María Jesús
Silva, valoró el esfuerzo de este proyecto, desde la
coordinación horizontal, y el compromiso personal e
institucional en la propuesta.
Es importante que desde la infancia y la
adolescencia se inculquen estos valores, que todos conozcan
sus derechos fundamentales, y sepan que su labor en esta
etapa de la vida es educarse para en un futuro aspirar a un
trabajo decente.
Silva felicitó a los docentes que
encaran esta tarea y se congratuló por los logros de la
primera etapa piloto.
El Consejero de Secundaria, Martín
Pasturino, explicó que la idea es que los alumnos accedan a
talleres que los formen para el trabajo.
La iniciativa se irá implementando
lentamente, e incorporándose a la currícula desde la
perspectiva de los derechos.
Se aspira que los 250 mil alumnos de
Enseñanza Media tengan la posibilidad de formarse para su
inserción en el mercado laboral.
El trabajo decente es clave para el
desarrollo del país desde la perspectiva de los derechos
humanos, subrayó.
La mayoría de los jóvenes que ingresan
al mercado laboral carecen de experiencia, analizó
Pasturino, quien pretende que se derribe el mito de que los
jóvenes de Educación Media sólo se forman para ser
universitarios. "La mayoría de los trabajadores uruguayos
tienen como nivel educativo la Enseñanza Secundaria",
concluyó.
Los autores de la flamante publicación
considerada material de consulta y apoyo al trabajo de
docentes y estudiantes, hicieron una breve presentación del
libro y agradecieron a todos quienes colaboraron en su
elaboración.
Supervielle considera fundamental que se
instruya a los adolescentes y jóvenes sobre el tema en esta
etapa de sus vidas porque es el momento que comienzan a
pensar en su futuro y a incorporarse al mundo del trabajo.
En períodos de expansión económica es
más sencillo cumplir con estos derechos, y en los momentos
de contracción surgen problemas serios (trabajo infantil,
discriminación). Saber que existen derechos es fundamental
para el desarrollo de las personas, añadió.
El sociólogo considera que el proyecto
es exitoso por el esfuerzo de todos quienes participan,
pero además porque se corresponde con un momento crucial de
los jóvenes.
Zapiraín, por su parte, la considera una
obra colectiva, porque fue elaborada por varios
especialistas, pero además porque durante el proceso de
creación se fue plasmando en el papel lo que se analizó en
los grupos de trabajo.
Los derechos sustanciales no son modas
ni ideologías, son esencia de la vida democrática. Esos
derechos consagrados en la Constitución y diversos acuerdos
y tratados son un primer paso, "el verdadero paso es la
lucha por la efectividad de esos derechos, y este proyecto
contribuye a ello", aseguró. |