MSP presentó balance de gestión
SNIS: redistribución de ingresos y aumento
de presupuesto en salud a US$ 550 millones
La reforma de la salud implementada por
este Gobierno pasó de ser un sistema curativo hacia un
Sistema Integral de Salud, apostando a la equidad social y
a la transparencia económica. El presupuesto asignado para
la salud aumentó de US$ 200: a US$ 550 millones en los
últimos cuatro años; el salario médico se incrementó en
400% y el no médico en 35%. Además, se disminuyó en más del
40% el valor de los tiques de medicamentos.
Autoridades del Ministerio de Salud
Pública presentaron un balance de gestión de lo actuado por
esta Administración , en base a los objetivos propuestos.
Comenzó la exposición el Director
General de Salud Jorge Basso, quien se refirió a la
situación encontrada al asumir en el MSP y el estado de
situación actual.
Al respecto, dijo que la Reforma de
Salud implementada, se realizó simultáneamente con una
reforma del Ministerio, en el cual, a comienzos del 2005
existían dos subsistemas: público y privado, que
funcionaban paralelamente con importantes inequidades en
sus prestaciones. El modelo de atención era curativo, no
integral, mientras que el modelo de funcionamiento era
desigual, con crisis permanentes y fuertes inequidades.
También se observó que la participación social era nula y
los usuarios no ejercían sus derechos, según expresó el
jerarca.
La Reforma Sanitaria aplicada por este
Gobierno apuntó a dos objetivos básicos: creación de un
sistema de salud y de un seguro que, a su vez, pretendía
conformar un escenario de complementación para minimizar el
despilfarro económico, apostar a una fuerte transformación
de las instituciones y a una mejor gestión clínica con
mayor profesionalización. Asimismo, el seguro financiaría
el sistema en un escenario de competencia por las "cápitas",
apostando, junto a la creación del FONASA (ex Disse), a un
desarrollo progresivo de la equidad en el pago de la salud,
administración transparente y la consolidación del seguro
de por vida, ligado a la seguridad social.
Basso destacó como uno de los grandes
desafíos de esta Reforma, al abordaje integral del proceso
de atención, pasando de un modelo "curativo" a enfatizar en
la prevención primaria, secundaria y terciaria. De aquí
surgió el Plan Integral de Atención a la Salud (PIAS), con
un decreto que estableció cuáles eran las prestaciones
obligatorias que todas las instituciones debían cumplir con
sus usuarios, donde también se incluyó –por primera vez- un
único Formulario Terapéutico de Medicamentos (FMT) o
Vademécum.
Los ejes del cambio de modelo de
atención fueron la complementación y la competencia, y en
este sentido, se comenzó a desarrollar una serie de
convenios de complementación –que actualmente son acerca de
90- entre instituciones públicas y privadas. Estos
convenios se manejan con el objetivo de generar estímulos y
desestímulos para la integración asistencial, "objetivo
clave de la creación de un Sistema", dijo Basso.
Agregó que este sistema hizo énfasis en
algunos programas: el de atención a la mujer y género; del
niño; de atención a la adolescencia; del adulto mayor; de
nutrición, con las guías saludables; atención escolar,
junto al programa Salud Bucal y los programas crónicos,
donde se encuentran enfermedades como hipertensión,
diabetes y cáncer. En base a esta jerarquización, el
Ministerio decidió que todas las instituciones de salud
debían crear sus guías de protocolización para cada caso,
que serían supervisadas por esa Secretaría de Estado.
A continuación, Basso destacó aspectos
sustantivos del cambio de modelo, como el fortalecimiento
del primer nivel y la creación de un sistema de auditorías
de historias clínicas en las instituciones médicas –que
permitió encontrar grandes debilidades dentro de estos
registros-.
En el nuevo organigrama del Ministerio,
se encuentra la creación de 19 Direcciones Departamentales
de Salud, con potestades resolutivas dentro de su
territorio y también la creación de 3 nuevas direcciones:
fiscalización, normalización y habilitación.
Por otra parte, el jerarca comentó que
en 2005 esta Administración se encontró con que el 50% de
las instituciones privadas no contaban con la habilitación
del MSP y la mitad del 50% restante, la tenían vencida.
Algunos ejemplos sobre las actividades
desarrolladas tienen que ver con la mejora asistencial,
política de medicamentos, de tecnología –en 2005 el 80% de
las tecnologías no tenían ningún tipo de registros-; la
calidad de la atención, con respecto al seguro de niños,
mujeres y adultos mayores con bajos ingresos; se incluyeron
en las preguntas de rutina el tema de la salud sexual y
reproductiva y la violencia doméstica y se estableció un
sistema de indicadores y metas que pudieran ser evaluadas,
entre otras cosas.
Asimismo, enumeró resultados concretos
obtenidos hasta el momento: baja de la mortalidad infantil
-10,6 por mil nacidos vivos-; obligatoriedad de que los
espacios cerrados sean libres de humo del tabaco;
introducción de nuevas vacunas al esquema de vacunación;
realización de nuevos exámenes a los recién nacidos;
énfasis en la salud; estabilización de la epidemia del SIDA
–0,42 por mil- y disminución de la transmisión madre a
hijo; promoción de la alimentación saludable con dietas de
bajo costo y alto valor nutricional; incorporación del
ácido fólico y hierro en las harinas; Uruguay permanece
libre de Dengue y continúa luchando contra la pandemia de
Gripe A.
En cuanto a las metas asistenciales de
la Reforma, Basso explicó que con el FONASA se financia a
las instituciones, a través de dos componentes: por cápitas
de riesgo y por metas de desempeño.
Las cápitas de riesgo depende de la edad
y sexo del paciente y las metas de desempeño se pagan
trimestralmente, posteriormente a la realización de una
auditoría y un exhaustivo análisis de las historias
clínicas realizadas por los médicos. También existen metas
en cuanto a brindar capacitación a los funcionarios de las
instituciones y a lograr que todos los pacientes cuenten
con un médico de referencia. Al respecto, Basso informó que
en último control realizado se comprobó que el 75% de las
instituciones lograron cumplir sus metas.
Por su parte, el Director General de
Secretaría, Daniel Olesker, realizó una síntesis
comparativa del Sistema Nacional Integrado de Salud y la
evolución de ASSE. En primer lugar se refirió a la
situación del MSP y explicó que el Ministerio logró
implementar la reforma, gracias a la mejora de la economía
en general y el crecimiento del PBI en Uruguay. Recordó que
los Ministerios que vieron incrementados sus presupuestos
fueron Salud, Educación e Interior, y específicamente
salud, lo duplicó.
En cuanto a las acciones realizadas en
el MSP, Olesker destacó la regularización de los
funcionarios pertenecientes al inciso 12, que en total
sumaron 277 y la de los funcionarios tercerizados, que
continúan trabajando para el Estado pero en modalidad de
cooperativas. Otro cambio que se introdujo, pero a nivel
general en el Estado, fueron los cargos de Alta Conducción.
Con esta nueva norma, cada Ministerio debe contar con hasta
6 de estos cargos y el MSP es, hasta el momento, el único
que llenó esos cupos.
Entre otros problemas que se
identificaron dentro de esta Cartera, se detectó que
algunos ex trabajadores de mutualistas cerradas habían
quedado sin su fuente laboral. Por ello, se creó una
comisión para tratar el tema en el año 2005, con la cual se
logró contemplar a todos estos trabajadores, que serán
tenidos en cuenta en futuros llamados de personal
realizados por MSP y ASSE.
Olesker también se refirió a las dos
intervenciones en Instituciones Médicas privadas que
realizó el MSP durante este período - IMPASA y Casa de
Galicia-, cuyo objetivo no fue cerrarlas sino afrontar la
situación por la que atravesaban y asegurarles continuidad
laboral.
Otros aspectos que fueron destacados por
el Director, fueron la Creación de la Escuela de
Capacitación en el Casco Central y la Habilitación del
Local de Salud Pública, ubicado en las calles Arenal Grande
y Paysandú.
A continuación, Olesker describió las
características de la Reforma de la Salud implementado por
el Gobierno actual. Inicialmente se procedió a la
aprobación de cuatro leyes: creación del FONASA;
descentralización de ASSE; Creación del SNIS y Derechos de
los usuarios. Detalló diez diferencias entre el sistema de
salud anterior y el actual. Antes existían dos subsistemas
fragmentados sin conexión entre ellos, el actual sistema de
salud es único –públicos y privados-. En el sistema
anterior sólo los trabajadores privados estaban en Disse,
ahora se creó un Seguro Nacional de Salud que integra a
toda la población; mientras antes el trabajador era el
único que tenía cobertura en salud, actualmente el seguro
de salud se extiende a la familia del trabajador. Disse
sólo permitía elegir instituciones privadas, hoy se incluye
a todos los prestadores de salud. El viejo Disse pagaba
cuota única y no incluía estímulos al cambio de modelo y
orientación del gasto, actualmente el pago es por riesgo
(edad y sexo) y se estimulan las estrategias y el pago de
un plus por cumplimiento de metas. Antiguamente se perdía
la cobertura al dejar de ser activo y pasivo, ahora existe
un seguro de por vida. El contralor era sólo en los papeles
contrariamente al nuevo sistema, que le da al mismo, una
verdadera política de rectoría y contralor. El anterior
sistema no tenía un marco taxativo de cuáles eran los
programas y las prestaciones obligatorias y el actual,
regula la cantidad y calidad de las prestaciones a través
de la definición del Plan Integral de Atención en Salud (PIAS).
Antes tampoco había participación social mientras ahora se
incorporó la participación social como eje clave de la
conducción de la reforma en el nivel macro y micro.
A continuación, el Jerarca se refirió a
los resultados obtenidos con la Reforma de la Salud y a la
situación de ASSE. Con respecto al primer tema, destacó que
se logró el acceso universal y una expansión de la atención
integral, alcanzando al 100% de la población. Agregó que se
implementaron rebajas en las órdenes y en los tiques de
medicamentos, que en el segundo caso superaron el 40%. La
población cubierta por la seguridad social se duplicó con
el ingreso de bancarios, menores, trabajadores públicos y
aumento de los privados. A diciembre de 2008 se
contabilizaron 1.377.743 personas afiliadas al FONASA.
En cuanto a la financiación del FONASA,
Olesker dijo que su funcionamiento proviene de tres
aportes, obrero, patronal y fiscal, destacando que el 48%
es de aportes patronales, 42% de aportes personales, 3% de
aportes pasivos y el 7% lo aporta Rentas Generales.
El otro tema que refiere a la situación
de ASSE, señala que su presupuesto en este periodo fue
duplicado; los médicos de medicina general pasaron de
recaudar $4.500 en 2005 a $ 25.000, previsto para enero del
2010 y estas cifras marcan un incremento del 400%. El
salario no médico creció 35% y se destacó que las
enfermeras de ASSE, cobran por encima del laudo. El
crecimiento de los cargos en DISSE, fue de 2.880
funcionarios, en todo el país y en todos los centros.
Asimismo se subrayó la participación
social en la salud, con la creación de un Consejo
Consultivo en 2005, reconstitución de los consejos de
salarios y la creación de una comisión de seguimiento del
FONASA con la participación de trabajadores y empresarios.
La Ley que crea ASSE, como servicio
descentralizado, incorpora en su directorio a un
representante de los trabajadores y uno de los usuarios.
También se crea la Junta Nacional de Salud cómo órgano
administrador del Seguro Nacional de Salud, que cuenta con
un representante de los usuarios, uno de los trabajadores y
otro de las empresas del sector salud.
Finalmente, Olesker concluyó en que el
SNS es un sistema redistributivo de los ingresos, añadió
que el presupuesto para la salud aumentó de US$ 200
millones a US$ 500 millones y que en este período no se
cerraron mutualistas.
Finalizando la presentación la Ministra
de Salud, María Julia Muñoz, agradeció a todo el personal
médico y no médico y "a todos los que trabajaron para
transformar la salud de los uruguayos", dijo. |