Presidente en Villa Soriano
Con despliegue de expresivos resultados Vázquez encaró
fuerte defensa del Gobierno
El Presidente y sus ministros
regresaron a Villa Soriano, lugar donde se reuniera el
Consejo de Ministros en noviembre de 2007. Tuvo palabras
para celebrar el ingreso del tango y del candombe al
Patrimonio de la Humanidad. Presentó su Informe a la
Ciudadanía con una exposición de logros obtenidos a partir
del desarrollo de planes estratégicos. Aclaró : "no somos
percheros de nadie para que se nos cuelguen culpas de
otros".
Desde Villa Soriano, el Mandatario
recordó que el pasado 7 de marzo, sobre la Avenida 18 de
Julio había dicho que ese era su último discurso público
durante este período de Gobierno. No obstante, desde
entonces debió señalar "siempre que las circunstancias
políticas no me obligaran a salir nuevamente a la palestra
pública". Vázquez afirmó que las circunstancias políticas
lo han obligado ahora a estar nuevamente en contacto
directo con la gente, cumpliendo con su deber. En ese
sentido, reivindicó el derecho de informar y defender la
gestión del Gobierno, ya que ha sido criticada, a veces con
razón, y muchas veces sin fundamentos y sin argumentos.
En ese marco, el Presidente expresó como
había establecido en Bella Unión que "defenderemos nuestra
gestión de Gobierno explicando lo que hicimos, por qué lo
hicimos, cómo lo hicimos" y "comparando lo hecho con lo que
hicieron quienes nos critican, y reiterando que no es
nuestra intención pasar cuentas del pasado, pero tampoco
somos percheros para que se nos cuelguen culpas, omisiones,
o incapacidades de otros".
Sostuvo que es saludable que los países
tengan proyectos estratégicos que apunten hacia el futuro.
Señaló la importancia de lograr acuerdos amplios,
duraderos, y que para ello hay que avanzar con visión de
futuro, pero "gradualmente" y con pasos seguros.
Vázquez situó los puntos del referido
plan estratégico en cinco grandes áreas.
En primer lugar, señaló " el Uruguay
social, la gente" y aclaró que se ha buscado un manejo
correcto de la economía, al servicio de la gente.
En segundo lugar, "el Uruguay
productivo" y explicó la razón fundamental de producir para
generar riqueza.
En este punto, el Presidente de la
República, hizo un alto para agradecer la excelente tarea
cumplida en el MGAP por el ministro Ernesto Agazzi. Explicó
que el mismo continuará con sus tarea política y que será
sucedido por Andrés Berterreche.
En tercer lugar señaló "el Uruguay
innovador" y prosiguió, en cuarto lugar con "el Uruguay
democrático, poniendo como ejemplo el desarrollo de los
centros MEC a lo largo y a lo ancho del país.
El quinto, "el Uruguay integrado en la
región y en el mundo".
Dijo Vázquez que estos fueron los cinco
pilares propuestos en la campaña electoral. Explicó también
que estos cinco pilares están unidos por un eje fundamental
: "el trabajo", como valor social y ética de vida.
"El trabajo digno, como se merecen los
uruguayos", aseguró el Presidente de la República
provocando una sucesión de aplausos que resonaron en la
Plaza Artigas de Villa Soriano.
Informe a la ciudadanía del Presidente
de la República, Tabaré Vázquez, en Villa Soriano,
correspondiente al 30 de setiembre de 2009
PRESIDENTE VÁZQUEZ: Queridas
uruguayas, queridos uruguayos, amigas y amigos todos, yo no
se sinceramente si encontraré las palabras para agradecer
todas estas muestras de afecto, de respaldo, de respeto,
que ustedes me han brindado cuando llegué aquí a Villa
Soriano, como tantas veces lo hemos hecho antes. Así que,
de corazón, gracias, gracias…
Quiero agradecer la presencia de todos
ustedes y también la presencia de aquellos uruguayos y
uruguayas que están siguiendo este acto por televisión o
por radio en todo el territorio nacional. A todos quienes
dispensan su tiempo, para compartirlo con nosotros, también
muchas gracias.
No puede haber cosa más linda para un
presidente, para un gobernante, que llegar a un pueblo, un
villa, como Villa Soriano, y encontrar un festejo como el
que encontramos en la tarde y en la noche de hoy. La
alegría en las expresiones de la gente, de lo más adultos,
de los menores, de los niños, de las madres, de los
abuelos, de las abuelas, realmente regocija en el corazón
de todos nosotros, y nos dan fuerza para seguir adelante en
una tarea que, créanme, no es fácil, pero es apasionante,
hermosa, sobre todo cuando lo hacemos con el enorme cariño
que pretendemos hacerla hacia todos ustedes, uruguayas y
uruguayos
Hablar de Villa Soriano es hablar del
Timbó, es hablar de la casa de los Marfetán, del Museo y la
Biblioteca, del suelo y de las canteras de Conchillas.
Señor Ministro de Vivienda, de Ordenamiento Territorial y
Medio Ambiente, tenemos que declarar de interés nacional
esta reserva de suelo y el camino de Conchillas que es
típico de aquí, de Villa Soriano, para protegerlo.
La Capilla de Santo Domingo Soriano, la
casa de los Galarza, la Casa de las Máscaras, la visita que
hizo a esta Villa, Don Dámaso Antonio Larrañaga, la estadía
de José Artigas y su familia con Isabel Sánchez, lo que es
el muelle, las islas del Río Negro, la isla del Vizcaíno,
del Naranjo, donde tantas veces hemos estado, con tantos
amigos queridos del alma, pasando gratos momentos. Lo que
tiene como fauna, las aves de esta zona, la flora –qué
maravilla, la flora-. Me acuerdo que en la punta del
Naranjo, que da hacia Mercedes, había membrillos silvestres
y recogíamos membrillos para hacer dulce. Una flor
estupenda. Las playas, la procesión del Viernes Santo, los
murales de la escuela, la fiesta de la Primavera, la marcha
del Grito de Asencio, la leyenda de las aguas curativas del
Río Negro, el paisaje natural, la tranquilidad, la
colección Maesso, el edificio de la Junta Local, tantas
cosas.
Pero por sobre todo, por sobre todo eso,
ustedes: los hombres y mujeres de esta Villa, los hombres y
mujeres de mi tierra.
Los logros que se han obtenido por parte
de todos ustedes, con el trabajo en conjunto, no sólo del
Gobierno Nacional, sino también del Gobierno Departamental.
Y de los vecinos, que han puesto mucho para que Villa
Soriano cambiara como ha cambiado, para bien. La estación
de servicio, el Museo Maesso, el centro MEC Nº 90, los
juegos en la plaza del Timbó, la policlínica, la ambulancia
que llegó hace pocos días. Todas las cosas que nos pedían
cuando hicimos aquí mismo aquel acuerdo, al principio de
nuestro Gobierno, ¿recuerdan?
Y esto lo hemos vivido, lo estamos
viendo prácticamente en todos los pueblos del interior, en
todos los lugares del interior, cuando recorremos. Allá, en
Montevideo, me preguntaban, algunos ciudadanos se
preguntaban, si después de este acto yo volvía a Montevideo
o me quedaba en Villa Soriano. Incluso ahora me decía algún
vecino, que algún otro vecino de la zona, alquiló alguna
lancha para si salgo a pescar sacarme una foto pescando. No
veo que sea ninguna novedad. Y bueno, como no me gustan los
misterios, voy a responder desde aquí, diciendo que mañana,
cuando empiece a amanecer y a clarear el horizonte, y se
empiece a vislumbrar el negro perfil del monte, estaré aquí
con ustedes.
Eso lo dijimos el siete de marzo de este
año, en nuestro discurso realizado en la avenida 18 de
Julio de Montevideo. En esa oportunidad, aclaramos, y creo
que hoy es necesario que lo volvamos a hacer, ya que hay
algún intento de tergiversar lo que expresé en esa
oportunidad, que aquel iba a ser mi último discurso público
durante este período de Gobierno, y agregué: "siempre que
las circunstancias políticas no me obligaran a salir
nuevamente a la palestra pública".
Esto lo dije el siete de marzo. Y las
circunstancias políticas me han obligado, me han exigido, y
para mí es una enorme alegría, estar nuevamente en contacto
directo con ustedes, uruguayas y uruguayos, cumpliendo con
mi deber, cumpliendo con mi obligación. Pero también con
nuestro derecho de informarles y defender, ya que ha sido
criticada, a veces con razón, y muchas veces sin
fundamentos, sin argumentos, nuestra gestión de Gobierno.
Y tal como lo establecimos en Bella
Unión hace unas pocas semanas, defenderemos nuestra gestión
de Gobierno, explicando lo que hicimos, por qué lo hicimos,
cómo lo hicimos, comparando lo hecho con lo que hicieron
quienes nos critican. Y reiterando que no es nuestra
intención pasar cuentas del pasado, pero tampoco somos
percheros para que se nos cuelguen culpas, omisiones, o
incapacidades de otros.
Por eso aquí estamos y así seguimos.
Pero antes de seguir, no siempre los pueblos tienen
oportunidad de festejar y hoy sí que podemos festejar. La
intergubernamental de la UNESCO, declaró patrimonio
inmaterial cultural de la humanidad para el Río de la
Plata, Argentina y Uruguay, al Tango, y yo quiero brindar
este homenaje a los dos pueblos hermanos del Río de la
Plata.
Pero no sólo eso, también fue declarado
patrimonio histórico, patrimonio inmaterial, cultural de la
Humanidad, nuestro Candombe. El saludo a los uruguayos y a
los afrodescendientes por este logro. Acá está el homenaje.
Por eso estamos aquí, por eso estamos
felices, estamos contentos. Festejen uruguayos, festejen.
Y así seguimos, uruguayas y uruguayos,
es lógico y saludable que los países tengan proyectos
estratégicos, es decir proyectos a largo plazo. En otras
palabras, la habilidad, el arte, la definición, para llevar
a la práctica o para ejecutar un programa con el fin de
lograr el efecto deseado. Eso es un plan estratégico. Las
naciones son, sin duda, como ustedes lo saben muy bien,
construcciones históricas y como tales podrán tener mucho
pasado, y no lo negamos, pero siempre han de tener más
futuro que pasado. Son nuestros niños y nuestros jóvenes
los que nos piden que pensemos ese futuro y es nuestra
obligación desarrollar planes estratégicos hacia ese futuro
que está ahí nomás, golpeándonos la puerta del presente.
Una Nación sin futuro y un pueblo sin
esperanza, más temprano que tarde terminan mal. Es obvio
entonces, que esos proyectos estratégicos requieren
acuerdos amplios y duraderos en el tiempo, requieren
bastante tiempo y muchos acuerdos, razón por la cual hay
que avanzar con visión de futuro pero gradualmente. No es
cuestión de salir a lo loco, veinte pasos para adelante,
sin meditarlo, sin pensarlo, sin planificar, para dar
después cuarenta pasos para atrás y quedamos peor que
cuando iniciamos la caminata. Un paso seguro, dos pasos
seguros, tres pasos seguros, gradualmente, y sabiendo que
no se logran siempre visiones unánimes, que en muchos casos
aparecen contradicciones, que si aparecen no hay que
dramatizar sino que, a través del diálogo, de los
argumentos y el análisis serio, hay que superar esas
contradicciones paso a paso, con respeto y con tolerancia,
como nos gusta a los uruguayos.
En democracia nadie tiene que renunciar
a ser lo que es, pero nadie es único dueño de la verdad.
Queridos conciudadanos, la sociedad, esto que nosotros
conformamos, no es una naturaleza muerta, ni un paisaje
estático, es un organismo vivo, en el que todo tiene que
ver con todo y requiere equilibrio para desarrollarse y
prosperar.
Me preguntaba ahora cuando llegué, un
señor periodista, si era importante Villa Soriano. Y claro
qué es importante Villa Soriano, es importante Villa
Soriano, su gente, y tantos otros pueblos, villas, ciudades
del país, todos somos importante en este país, todos
tenemos que trabajar en conjunto para salir adelante y
podemos, podemos hacerlo, ustedes lo están viendo acá en
Villa Soriano.
Por eso, y tratando de remontarnos un
poco en el tiempo y pidiéndoles qué hagan el ejercicio de
memoria, cuando el 20 de julio de 2004, en la campaña
electoral anterior presentamos nuestra estrategia de
desarrollo del país, la que proponíamos, la planteamos
-como ustedes recordarán- en 5 grandes áreas
complementarias entre si.
Primero, el Uruguay Social; decíamos que
para nosotros lo primero era la gente, y que el manejo
correcto de la economía era una herramienta para lograr que
la gente viviera cada vez mejor.
Segundo, el Uruguay Productivo, teníamos
que producir para generar riqueza. Qué íbamos a repartir,
si no había riqueza para repartir no hay que repartir. Hay
que producir para generar riqueza y apostamos fuertemente
al Uruguay Productivo.
En este punto quiero hacer un alto
porque nos ha acompañado a lo largo de este período muchos
compañeros, por cierto en los Ministerios, pero
especialmente quiero hacer mención al compañero Ernesto
Agazzi, Ministro de Ganadería Agricultura y Pesca, que por
las funciones que va a cumplir, políticas partidarias va
-no a alejarse del gobierno porque nadie de los que
estuvieron en el gobierno se han alejado, simplemente están
cumpliendo otras tareas- va a cumplir otras tareas. Y yo
quiero públicamente reconocer y agradecer al compañero
Agazzi la excelente tarea que hizo al frente del Ministerio
de Ganadería, Agricultura y Pesca.
Y lo va a suceder en el cargo un hombre
joven como Berterreche, que ha sido un puntal de este
Ministerio, desde el inicio del mismo. Ese era el Uruguay
Social, el Uruguay Productivo.
Y en tercer lugar, el Uruguay Innovador,
el Uruguay que piensa, que innova, que da lugar a su gente,
a los jóvenes, a los científicos jóvenes; miren cuantos han
vuelto al país de científicos jóvenes que se habían ido a
trabajar en otros lares, porque no tenían dónde investigar
o trabajar acá en el Uruguay y han vuelto. Y ahí están en
el Instituto Pasteur o en el Instituto Clemente Estable o
en la Facultad de Ciencias de la Universidad de la
República, han vuelto y esa es una alegría para el país. El
país qué innova, que desarrolla la inteligencia, el cerebro
de su gente y que crea oportunidades, también para generar
riqueza y que estas sean distribuidas con justicia social
entre todos los ciudadanos.
El Uruguay Democrático, con la más
amplia participación, y quizás acá Ustedes tiene un
ejemplo, el Centro Mec, que es de todos ustedes y lo
manejan ustedes. Y es descentralizar, no sólo
administrativamente, que eso es una desconcentración, sino
también descentralizar políticamente porque los ciudadanos
recuperan también su derecho a gobernar junto con el
gobierno local y junto con el gobierno nacional.
Y el Uruguay Integrado, integrado en la
región y en el mundo. Y de estos cinco pilares, que
habíamos propuesto en la campaña anterior, es precisamente
que vamos a hablar en la noche de hoy.
Y estos pilares no solamente son
complementarios entre si, sino también están unidos por un
eje fundamental. Y yo estoy absolutamente seguro que todos
los uruguayos van a coincidir conmigo, cuando digo que el
eje fundamental que une a estos cinco Uruguay que he
planteado, es el trabajo: el trabajo digno de su gente, el
trabajo justo y bien remunerado, el trabajo como valor
social, pero también como ética de vida, el trabajo que
genera confianza, transparencia, seguridad autoestima,
calidad de vida, solidaridad. Y nos propusimos crear
trabajo como respuesta al principal reclamo que por
entonces planteaban los ciudadanos uruguayos, no nos pedían
holgazanear, nos pedían trabajo, querían trabajar.
En Bella Unión cuando negros nubarrones
hacían triste la vida de la gente de aquél lugar, fui a
visitarlo hace ya varios años. En aquél entonces, había por
todos lados ollas populares. La gente más humilde, más
pobre, tenía que recurrir a estas ollas populares para
darle de comer a sus hijos, para comer ellos. Eran
solidarios en la pobreza, uno llevaba un paquetito de
arroz, otro llevaba tres papas; los otros cuatro boniatos,
el otro una zanahoria y armaban una olla: la gente iba a
comer ahí.
Y recuerdo como si fuera hoy, cuando un
hombre, de unos cuarenta años, con un niño de unos meses en
los brazos y varios hijos que lo acompañaban, me encaró,
cuándo estaba recorriendo el pueblo; me dijo: "mire Doctor,
yo no quiero llevar a mis hijos a comer a una olla popular,
yo quiero trabajar para darle de comer a mis hijos en mi
casa, con mi familia"; esa es la dignidad del pueblo
uruguayo; esa es la dignidad de los pobres. El pueblo no
quiere holgazanear, el pueblo quiere trabajar. Y entonces,
nosotros, nos comprometimos a generar puestos de trabajo
para la gente: trabajo digno como se merecen los uruguayos,
trabajo en cantidad y calidad, trabajo como la mejor
política social que íbamos a llevar adelante. Pues bien a
aquello nos habíamos comprometido, veamos que se logró.
Conciudadanos, a punto de partida de las
siguientes dos ecuaciones que voy a plantear, comenzamos a
trabajar desde nuestro Gobierno con un Plan Estratégico
como lo decía al principio, con visión de futuro, para, la
primera ecuación, lograr crecimiento económico, con
justicia social, es decir, crear riqueza en el país y,
simultáneamente, no esperar a que el vaso se derramara,
distribuirla atendiendo principalmente a los sectores más
necesitados de la población. Si no crea riqueza, qué se
reparte, qué se puede repartir. Nada.
Bien el 20 de julio de 2004,
fundamentábamos esta primera ecuación, diciendo,
textualmente, por qué para emprender la senda del
desarrollo sostenible en el tiempo, Uruguay necesita
reorganizar su economía, teníamos una economía destruida,
ustedes lo recuerdan; mejorar su estado, el Estado uruguayo
no se prestaba el desarrollo productivo que nosotros
intentábamos llevar adelante; establecer reglas de juego
claras entre el Estado y el mercado; recalificar el valor
del trabajo, darle el valor que el trabajo que el trabajo
realmente tiene; generar empleo, producir, competir y
vender.
Agregábamos, porqué queremos poner la
economía al servicio del ser humano, al servicio de las
personas. Porque la producción y el trabajo, son señas de
nuestra identidad política, y esta nueva época de grandes
cambios tecnológicos, esa identidad para seguir siendo tal
ha de innovarse, porque hay que saber producir, saberla
vender y saber competir, porque hay que generar empleos
estables, y de calidad, porque la mejor política social es
que la gente tenga derecho a trabajar y ganarse dignamente
la vida. Esto decíamos en el 2004. Y la segunda ecuación,
decíamos así, para lograr todo esto el camino que elegimos
fue el eje invasión, producción, trabajo, igual mejor
calidad de vida. Para producir precisábamos inversiones,
producir para generar riquezas, trabajar y todo esto iba a
tener como consecuencia, como corolario mejorar la calidad
de vida de los uruguayos. Este fue el planteo estratégico
que nos hicimos, sobre la base de estas dos ecuaciones.
En aquella presentación del Uruguay
Productivo con el que soñábamos, establecimos algunas
coordenadas para su construcción, porque no es solo poner
un Plan Estratégico por delante, hay que darle determinadas
coordenadas, contenerlos, ese plan estratégico, con
determinados lineamientos. ¿Cuáles son esos determinados
lineamientos para llevar adelante ese Uruguay de la
producción y el trabajo? Primero, generar un clima de
contexto favorable a la actividad productiva. Es decir,
dejemos en el país que la actividad financiera cumpla la
función que tiene que cumplir. Para nosotros el Uruguay
financiero no es la meta, sino que es el Uruguay
Productivo. Y hacia eso apostamos.
Segundo. Desarrollar políticas macro
económicas estables y vaya si lo habremos logrado. En una
crisis internacional como no ser recuerda otra de
principios del siglo pasado y aquí está Uruguay, orgulloso
de sí mismo. De esta crisis internacional no cayó.
Tercero, llevar adelante una reforma
fiscal. No me voy a detener en esto, ustedes recordarán.
Simplemente un título: que pague más el que tiene más y que
pague menos el que tiene menos. Hoy muchos trabajadores que
pagaban impuestos no pagan. Y muchos jubilados que pagaban
impuestos no pagan. Pagan los que ganan más.
Una reforma del Estado, y para hablar de
ella sería muy largo, pero quiero dar el emblema de esta
reforma del Estado que es la creación del Ministerio de
Desarrollo Social, para llevar adelante precisamente, la
coordinación y la ejecución de las políticas sociales.
En quinto lugar, un fomento a la
inversión. En sexto lugar, políticas de especialización,
calidad y complementariedad. Porque los países no pueden,
por grandes que sean, producir todo y de calidad. El
Uruguay tenía que especializarse en determinados temas,
producir calidad y buscar nichos de mercado acordes para
los productos que podíamos producir. Y fue lo que hicimos.
Y en séptimo lugar, relaciones laborales
equilibradas. Importa el capital, importa el empresario.
Pero importa el trabador y la trabajadora. Las relaciones
laborales deben ser respetuosas, equilibradas, dignas, para
los que trabajan.
Y los resultados están a la vista.
Repasemos uno por uno. Porque a veces la memoria nos falla,
y yo creo que es bueno para que quienes nos critican,
tengan estos números y sepan cuáles son los logros que
nosotros decimos que hemos obtenido. Y si por ahí yo estoy
mintiendo, que lo digan. ¿O no? ¿O miento, uruguayas y
uruguayos?
Veamos cuál era el producto bruto del
país, la producción del país. En el año de 1985, 339 mil
millones de pesos era lo que el país tenía como producto
bruto. Voy a hablar a precios constantes del valor de la
moneda al año 2008, para que no digan "bueno, si pero en el
85 la moneda valía mas o valía menos". No, voy a hablar a
precios constantes. En 1985, 339 millones de pesos
uruguayos, producto bruto interno.
En el año 2005, veinte años después,
había pasado ese producto de 339 mil millones de pesos, a
550 mil millones de pesos. Había crecido y así tomamos el
Gobierno, con 550 mil millones de pesos.
En el año 2008, el año pasado, no
tenemos cuenta de este año todavía, pero vamos mejor que el
año pasado, se llegó a 675 mil millones de pesos. Crecimos
175 mil millones de pesos en producción del país. Y
crecimos. Pero, ¿qué se ha dicho para refutar el hecho de
haber crecido, quienes nos critican? Se ha dicho que el
crecimiento económico del país se debe a las excelentes
condiciones internacionales durante este período de
Gobierno. Había excelentes condiciones internacionales
durante este período de gobierno y por eso, crecimos.
Partiendo de la base que las excelentes condiciones
internacionales eran iguales para todos los países, y no
solo para Uruguay, porque también si eran excelentes para
Argentina, para Perú, para Chile, para Ecuador, para
Bolivia, para Brasil, para Venezuela, para Colombia, porque
las condiciones internacionales no eran sólo buenas para
Uruguay, eran buenas para todos los países de América
Latina. Partiendo de la base que las excelentes condiciones
internacionales eran iguales para todos los países y no
sólo para Uruguay, comparemos entonces nuestro crecimiento
con respecto al crecimiento de los países de la región.
En el año 2005 el conjunto de los países
de América Latina creció al 4.5% -el primer año de nuestro
Gobierno- el Uruguay creció el 6.6%, por encima de lo que
crecieron los países de Latinoamérica. En el año 2006 los
países de América Latina crecieron el 5.3%, el Uruguay
creció el 7%. En el año 2007 América Latina crece el 5.6%,
el Uruguay crece el 7.4%. En el 2008 –el año pasado-
América Latina crece el 4.6% y el Uruguay crece el 10.6%,
estimados a datos de noviembre de 2008.
Se puede decir entonces –y estos números
son claros no es que los inventemos, se pueden recoger y
reconocer en distintas mediciones internacionales- que en
materia productiva los resultados alcanzados por el
Gobierno han sido excepcionales, con un crecimiento
económico de 8% anual en el período, creciendo
sistemáticamente por encima del promedio de América Latina.
Entonces, no eran sólo las condiciones
internacionales excepcionales, hubo otra cosa, hubo algo
más que nos dio ese plus que nos permitió crecer por encima
de los países de América Latina. Y eso fue el trabajo de
todos nosotros, no sólo del Gobierno, de todos los
uruguayos, que teníamos un plan estratégico para llevar
adelante y lo llevamos adelante. Lo pensamos, lo ideamos,
lo preparamos, lo ejecutamos. Pero debo decir además –y
esto es llamativo-, quienes nos critican poco dicen, dicen
sí de las excelentes condiciones internacionales, pero poco
dicen de las enormes dificultades que hubo que enfrentar
desde el Gobierno y como país.
Primero, la imponente carrera alcista
del precio del barril de petróleo, o ya nos olvidamos del
petróleo crudo que valía aproximadamente 43 dólares cuando
llegamos al Gobierno y que llegó a valer casi 150 dólares
el barril, y hoy está en alrededor de 70 dólares. Y el
Uruguay –yo creo que lo va a tener- pero por ahora no tiene
petróleo y el que utilizamos lo tenemos que comprar. Una
cosa es comprar el barril de petróleo a 43 dólares y otra a
150 o a 70, exige un esfuerzo mayor del país para tener la
misma cantidad de petróleo, un esfuerzo económico mayor.
Esta fue una dificultad grande que tuvimos que enfrentar.
A eso le sumamos las dos impresionantes
sequías que nos aquejaron como nunca antes se habían
registrado, dos sequías que ustedes saben muy bien. Estos
dos elementos negativos nos llevaron a un importante
sobrecosto energético, bajaron el caudal de los ríos, de
los lagos, de las represas, no se podía generar la energía
hidroeléctrica, había que hacerla en base de petróleo, el
petróleo subía, teníamos que comprar más petróleo, hubo un
sobrecosto energético. Y a destinar millones de dólares
extra para atender las consecuencias de la sequía y paliar
las dificultades sobrevinientes de este fenómeno climático,
además del sector energético en la producción agropecuaria.
Y ustedes saben lo que pasó con la sequía en la producción
agropecuaria, el Gobierno no se cruzó de brazos, salió a
ayudar a los productores rurales. Agazzi se abanderó y
salió por el país a trabajar con los productores rurales.
Y si a todo esto que estoy planteando,
porque se habla sólo de las excelentes condiciones
internacionales, de estas dificultades que tuvimos no se
dice nada, pero las tuvimos. Si a estas dos dificultades
que tuvimos le agregamos que a partir de mediados de 2008
explota una crisis financiera, económica, comercial,
laboral y social internacional, como nunca, nunca, lo había
conocido el mundo y que, pese a todo esto, el Uruguay no ha
entrado en recesión económica y que además ha mantenido la
caída de desocupación, este año vamos a crecer, cuando
otros países van a estar con un crecimiento negativo. Otros
países entraron en recesión, Uruguay no entró en recesión y
no vamos a entrar en recesión. En otros países del mundo
desarrollado la desocupación creció enormemente, y en el
Uruguay bajó a las cifras que tenemos hoy, de 6,9% de
desocupación.
Es todo un récord. Nos habíamos
comprometido en la campaña electoral que íbamos a bajar la
desocupación durante el período de Gobierno a un dígito
porcentual. Ya lo hemos logrado. Seis punto nueve, todo un
récord.
Entonces, si vemos todo este conjunto de
elementos que estamos analizando, veremos que el planteo
que decidimos llevar adelante desde el Gobierno es el
adecuado y que las críticas que se nos hacen en este tema,
no tienen sustento real. No lo tienen, no nos pueden
criticar este elemento que acabo de plantear.
Amigas y amigos, uruguayas y uruguayos,
la noche del tango y del candombe, qué lindo. Se ha dicho
también que dilapidamos el dinero de los uruguayos. Yo no
sé si invertir en obras sociales es dilapidar el dinero. Yo
creo que no. Yo creo que es darle una buena utilización.
Pero, con argumentos, con elementos, con números,
analicemos entonces este punto. A ver si realmente
dilapidamos, tiramos el dinero de los uruguayos.
Primero, ¿qué ha pasado con los activos
de reserva internacional de nuestro país? ¿Qué ha pasado?
Si dilapidamos el dinero, no podemos tener reservas. Si yo,
en mi casa, ingresa una cantidad "x" de dinero y la tiro,
no puedo tener reservas, no puedo tener ahorros. Para tener
ahorros, tengo que manejar bien los dineros y el pesito que
queda, guardarlo. Bueno, veamos qué pasó con los activos de
reserva internacionales.
Mantuvimos altos niveles de liquidez
internacional. Los activos de reserva más que se duplicaron
en nuestro período de Gobierno, pasando de 2.500 millones
de dólares a fines de 2004, a 6.300 millones de dólares a
fines de 2008 y en la última medición de setiembre de 2009,
tenemos 7.700 millones de dólares de reservas.Arrancamos
con 2.500 millones de dólares de reservas. Hoy tenemos
7.700 millones. Esto constituye, sin duda, un reaseguro
esencial para poder enfrentar en mejores condiciones la
actual crisis internacional. Porque no fue por obra de
magia que la enfrentamos y la superamos. Hubo medidas que
se tomaron que llevaron a estos resultados.
En segundo lugar, ¿qué ha pasado con
nuestra deuda pública neta en este período de Gobierno?
Teníamos una deuda pública neta y ¿qué ha pasado con esa
deuda? Si dilapidamos el dinero, me imagino que la deuda
debe ser un desastre. Pero bien, la relación deuda pública
neta y el producto bruto interno se redujo a menos de la
mitad. Pasando, esa relación, de un 69% a fines de 2004 a
un 31% en el tercer trimestre de 2008, último dato
disponible. Aumentaron las reservas, bajó la proporción de
la deuda pública neta uruguaya. No aumentó la deuda
pública, uruguayas y uruguayos. Terminamos en este tema, la
deuda, con los acuerdos con el Fondo Monetario
Internacional. Le pagamos y no tenemos ninguna obligación
con el Fondo Monetario Internacional, dejamos de depender
del Fondo Monetario Internacional y se redujeron
sustancialmente las obligaciones con los otros organismos
multinacionales de crédito, sustituyendo deuda
condicionada, que es la que presta los organismos
financieros internacionales, les presta pero le ponen esta
condición, esta condición y esta condición hay que
cumplirla, y aprieta. Y entonces viene lo que venía
siempre, el ajuste fiscal: más impuestos, menos salarios,
porque había que cumplir con esa obligación. Esa es una
deuda condicionada. La cambiamos, la sustituimos por una
deuda soberana, de largo plazo, reduciendo el costo del
endeudamiento. El país ganó confianza, emitimos bonos, los
vendimos a nivel internacional muy bien –el último hace muy
poco- con lo que obteníamos de estos bonos cancelábamos
nuestra deuda con el Fondo Monetario Internacional. Y hoy
no tenemos deuda con el Fondo Monetario Internacional, es
la nuestra, la soberana, las condiciones de esta deuda, que
son a largo plazo, las fijó el Estado uruguayo, no los
organismos financieros internacionales.
En tercer lugar, se reperfiló la
estructura de vencimientos, teníamos cuando llegamos al
Gobierno unos vencimientos para pagar deuda y servicios de
deuda monstruosos, terribles, en el 2006, en el 2007,
impagables, no se podían pagar, cualquiera hubiera sido el
Gobierno. Reperfilamos la estructura de vencimientos
superando el ahogo financiero que heredamos -miren
uruguayas y uruguayos- en los primeros veinte meses de
nuestra gestión debimos enfrentar necesidades de
financiamiento que equivalían al 23% del Producto Bruto
Interno, casi la cuarta parte del Producto Bruto Interno la
teníamos que destinar en esos primeros veinte meses de
Gobierno para atender la deuda.
Con esas acciones que llevamos adelante
superamos esta instancia y el próximo Gobierno, que viene a
partir del 1º de Marzo de 2010, recibirá una situación en
este punto sustancialmente mejorada. Hoy las necesidades de
financiamiento para los años 2009 y 2010 se ubican en tan
sólo el 6% del Producto Bruto Interno. Cuando nosotros
llegamos, las obligaciones eran el 23% del Producto Bruto
Interno, el próximo Gobierno sólo tendrá que destinar un 6%
en el año 2010 para atender la deuda.
Cuarto lugar, como resultado de la
prudencia, porque actuamos con mucha prudencia, paso a
paso, como dijimos al principio, y responsabilidad además
fiscal, el resultado de las cuentas públicas mejoró
notoriamente. El déficit promedio de nuestra gestión fue
entre 2005 y 2008 fue de 0,8%, mientras que el de 1985 a
1989 fue de 5%. Desde 1990 a 1994 fue de 1,2%. De 1995 a
1999 fue de 1,8% y el del período 2000 a 2004 se ubicó en
el 3,4%. Hoy es más alto, claro, hoy tenemos dos puntos y
fracción, pero tuvimos un sobrecosto energético, entre
otras cosas, y atender la situación de la sequía que nos
obligó a gastar más de lo que teníamos planificado, pero
teníamos que atender la situación de la gente y de la
población. Teníamos que generar energía para seguir
produciendo y teníamos que atender la situación de sequía.
Si no hubiera existido este fenómeno de sobrecosto
energético y de gasto que tuvimos que hacer extra,
seguramente que hoy estaríamos diciendo que estaríamos en
0.5, 0.4 de déficit fiscal, buscando un equilibrio fiscal.
Tan mal no lo hicimos uruguayas y uruguayos, tan mal no lo
hicimos.
Estos resultados financieros y fiscales
sentaron las bases para las transformaciones profundas que
se introdujeron y se están ejecutando en materia social y
productiva. Vimos ya en Bella Unión aspectos vinculados al
resultado de diferentes acciones políticas en el terreno de
lo social, hoy lo vimos aquí también en Villa Soriano.
Veamos ahora que ha sucedido durante este período de
Gobierno en producción, en inversión y en trabajo.
En producción, dijimos que íbamos a
hacer un Uruguay Productivo, veamos si lo hicimos o no,
veamos los números. ¿Qué sucedió con respecto a las
exportaciones totales? Porque esta es una forma de medir la
producción, lo que exportamos, si no producimos no podemos
exportar.
En el año 2004, el año antes de llegar
al gobierno, exportamos por un monto de 4.257 millones de
dólares corrientes. Y en el 2008 exportamos por un monto de
9334 millones de dólares corrientes, más del doble que en
el año 2004. Hay producción en el país o no hay, se genera
riqueza en el país o no se genera, se está intentando
distribuir con justicia social o no la riqueza que se
genera.
Examinemos algunos de lo rubros
exportadores porque a veces uno siente que la gente se
queja y a veces uno se pregunta por qué. Bueno examinemos
algunos rubros de exportación, por ejemplo el agrícola, en
el año 2004 exportó por 216 millones de dólares, en el año
2008 por 599 millones de dólares, tres veces más. La
extracción de madera en el año 2004 exportó por 88 millones
de dólares, en el año 2008, 344 millones de dólares, cuatro
veces más. Los frigoríficos en el 2004 exportaron por 737
millones de dólares, en el 2008, 1501 millones de dólares,
el doble de carnes se exportó. Los lácteos, 175 millones de
exportación en el 2004, 432 millones en el año 2008, dos
veces y media más. Los textiles, 199 millones de dólares en
el 2004, 325 millones en el 2008. Las exportaciones
entonces representan un importante crecimiento en este
periodo de gobierno, tanto la de bienes como la de
servicios, por ejemplo el turismo. En el año 2004
ingresaron 470 millones de dólares por turismo yo recuerdo,
uruguayas y uruguayos, recuerdo que en octubre y en
noviembre del año pasado algunos salieron a decir con esta
crisis internacional se cae el turismo, se cae el Uruguay,
no va a venir nadie, que desastre, lo que va a pasar en la
temporada turística ¿o no lo decían? Yo no traje acá algún
diario para mostrar, pero lo tenemos guardado, lo puedo
mostrar, "se cae el turismo en el Uruguay". En el año 2004
ingresaron 470 millones de dólares por turista, a fines de
agosto del 2008 ingresaron 800 millones de dólares por
turismo y a fines de 2008 ingresaron más de 1000 millones
de dólares por turismo, ingresaron dos veces y media más
que en el 2004 y había una fenomenal crisis internacional.
No se cayó el Uruguay, no se cayó. Se equivocó la paloma,
se equivocaron.
Al mismo tiempo se avanzó en materia de
diversificación geográfica de los mercados de destinos,
salimos a recorrer el mundo. Se acuerdan como a principios
del siglo pasado, la primera mitad del siglo pasado, el
viejo y querido turco del barrio salía con su valijita a
vender casa por casa, vendía la corbata, decía págueme como
pueda, le vendía la camisa, un viso, que ahora las mujeres
no usan viso, pero en aquella época se usaban los visos o
no se usaban. Dejaba lencería a las mujeres, medias; y le
decía el viejo y querido turco a la familia, págueme como
pueda, ahora no me de nada, y al mes venia y le cobraba un
pesito, dos pesitos, porque sabia que la gente cumplía, los
uruguayos somos cumplidores somos serios, somos
responsables, nos gusta el trabajo digno, no somos
holgazanes.
Bueno, así hicimos nosotros, salimos de
la comarca y nos fuimos por el mundo, a buscar mercados a
diversificar mercados a colocar nuestros productos, la
carne, la lana, la leche, los productos, lo que podíamos,
la inteligencia claro que si, la inteligencia de nuestra
gente. Yo que se, si podíamos le vendíamos arena o pasto,
yo que se, teníamos que venderle al mundo para crecer.
Bien, diversificamos los mercados, no morimos acá solo en
la región, nos abrimos al mundo. En el año 2004
exportábamos carne de diferente tipo a 77 mercados en el
mundo. En el año 2008, más de 120 mercados en el mundo y
para el presente año, tenemos firmes expectativas de
ingresar con carne bovina a
Corea del Sur y con carne ovina a Estados Unidos. Falta un
trámite para ingresar a Estados Unidos. Y ahora, en Estados
Unidos, precisamente, me reuní con el presidente de
Sudáfrica y comenzamos a trabajar para ver si podemos
entrar con carne ovina. Diversificamos los mercados,
buscamos más oportunidades.
Pero las cosas no suceden porque sí,
requieren de trabajo, perseverancia, confianza. Hay que
ganar confianza, una imagen de país serio, que honra sus
deudas, que cumple con sus obligaciones, que tiene reglas
de juego claras y estables, con un poder judicial
respetable internacionalmente y con un proyecto
estratégico, al que hacía referencia al inicio de mi
alocución.
Y un programa de gobierno que apuesta al
crecimiento económico, a la distribución justa de la
riqueza que se genera, a la inteligencia de su gente, a la
educación, a la investigación científica y a la innovación,
logra, porque todo ello coadyuva, poner en marcha el motor
impulsor del crecimiento, que es la inversión.
Nosotros queremos que vengan inversores
a este país, pero que vengan a invertir en el sector
productivo, que es el que genera puestos de trabajo decente
para la gente. Que vengan los inversores, cualquiera que
sea el próximo gobierno, qué vengan. Porque si llega
inversión y llega producción es trabajo para nuestra gente.
Entonces queremos destacar la fuerte
recuperación de la inversión, tanto pública como privada,
que creció un 16% promedio anual del 2004 al 2008, lo cual
constituyó un factor fundamental para incrementar la tasa
de crecimiento económico de largo plazo, la creación de
empleo, así como la mejora de la competitividad en la
economía.
La inversión pública y, vaya si el
Ministerio de Transporte y Obras Públicas ha invertido,
también los otros ministerios, por cierto. La inversión
pública pasó de representar el 2,4% del PBI en 2005, al
3,3% en el 2008. En puertos, vaya si se habrá hecho obras
en los puertos. Miren, si ustedes van allá, el Puerto de
Montevideo funciona las 24 horas del día: colas de
camiones, en la rambla, esperando para entrar, y otras
colas de camiones saliendo con carga del Puerto de
Montevideo. Se ha recuperado un montón de espacio ganándole
al mar, rellenando con tierra para duplicar el espacio de
trabajo del Puerto de Montevideo. Y lo mismo con Nueva
Palmira, con Fray Bentos, con Paysandú. Se precisa
infraestructura para producir y desarrollarnos, se precisa
energía, obras viales, sin los cuales no habría inversión
privada. Porque si no tenemos una buena infraestructura, el
inversor no viene a invertir. Porque cómo saca su
producción.
La inversión extranjera, no la pública,
voy a hablar de la extranjera, directa, alcanzó cifras
récord para la historia del Uruguay. Veamos su evolución.
Al invertir en un país, el que viene de afuera tiene que
tener confianza en el país, que no va a perder la plata y
que además va a ganar dinero, porque para eso invierte.
Ahora, nosotros ponemos un peso en el banco, lo ponemos
para que nos de algún interés. No queremos perder un peso y
queremos ganar los intereses. El que viene, inversor
capitalista, de afuera, invierte si está seguro que no va a
perder su dinero y además, tiene que ganar dinero.
Bien, hay que tener confianza en el
país. En la década del ’90, venían inversiones por un orden
de 135 millones de dólares anuales promedio. Del 2001 al
2004 subió de 135 millones a 295 millones de dólares
anuales promedio. En nuestro período de gobierno, trepó esa
inversión a más de 1000 millones de dólares anuales
promedio. Y si incluimos a Botnia, supera los 1.200
millones anuales. Hay confianza en el país. Por algo no
venían antes. Yo no voy a hablar de eso.
Supera los mil doscientos millones
anuales, hay confianza en el país. Por algo no venían
antes, yo no voy a hablar de eso. Porque esto constituye
una clara señal de la confianza de los inversores, en
nuestro país. Tuvieron suerte, les tocó gobernar en un
contexto internacional económicamente favorable, dicen
algunos. Es verdad, hasta mediados del 2008 hubo un
contexto internacional económicamente favorable, tuvimos
suerte, pero a la suerte hay que ayudarla. No fuimos los
únicos y los primeros, tocados por esa suerte. Pero
aprovechamos el periodo de bonanza, para reducir las
vulnerabilidades que presentaba el país al comenzar nuestra
gestión, que eran muchas vulnerabilidades. No perdimos el
tiempo, ni las oportunidades, y ello también nos permitió
amortiguar los efectos negativos de la crisis
internacional. Uruguayas y uruguayos, estudiemos ahora, es
interesante, yo antes no sabía mucho de estas cosas, pero
después de cuatro años y medio de gobierno, tuve que
aprender economía. Siempre dije que no sabía nada de
economía. Estudiemos ahora como evolucionó la situación del
trabajo y e los trabajadores activos y pasivos, porque los
jubilados y los pensionistas, son trabajadores pasivos,
¿verdad? De los trabajadores activos y pasivos del Uruguay,
así como el desarrollo del Banco de Previsión Social, y
veamos como se desempeño por ejemplo la tasa de desempleo.
De 1985 a 1990, la tasa de desempleo,
osciló entre el 10.1% al 8,5%, siendo el valor más bajo en
ese periodo del 8%. Del 85 al 90. En el periodo en que los
Consejos de Salarios, memoria uruguayos, no fueron
convocados, de 1991 a 2004, los Consejos de Salarios, no
fueron convocados, en ese periodo la tasa de desempleo
fluctuó entre el 8.3% y el 17%, momento este de mayor
impacto de la crisis del año 2002. Desde la reinstalación
de los Consejos de Salarios, en el 2005, cuando empezó
nuestro Gobierno reinstalamos los Consejos de Salarios, el
desempleo ha descendido del 12,2% al actual 6,9% de julio
del 2009. Y esto, como lo decíamos antes, pese a la crisis
internacional, que ha ocasionado tasas de desempleo muy
altas en muchos países aún del mundo desarrollado; 6,9%,
uruguayos y uruguayas. ¿Como evoluciono el salario real?
Otro elemento que hay que medir. El salario real se mide,
en el Uruguay desde el año de 1968, se empezó a medir el
salario real. Daremos datos proporcionados por el Instituto
Nacional de Estadística, que es un instituto serio. Ahora y
antes. Nosotros nunca lo cuestionamos. Es un instituto
serio, reconocido internacionalmente. Los datos que voy a
dar son de ese Instituto de Estadística. En los últimos 40
años, de 1968 a 2008, el salario real de los trabajadores
cayó casi un 41%. Es dramático ¿verdad? Pero es la verdad.
El período de mayor retroceso del salario real,
considerando la post-dictadura, fue el quinquenio marzo de
2000 a marzo de 2005, que implicó en ese período de cinco
años, el período anterior, una pérdida de casi 20%, seguido
del quinquenio Marzo de 1990 a Marzo de 1995 en el que el
crecimiento no alcanzó al 3%, en ese período de Gobierno.
Se estima que la recuperación del
salario real en el presente quinquenio, el del actual
Gobierno, será superior al 25%, es decir, los trabajadores
van a recuperar todo lo que perdieron en el período
anterior, más la inflación. Y en el caso de los
trabajadores que estaban más sumergidos, superará el 30 al
35% de recuperación del salario real.
Estos resultados no sólo demuestran que
el Gobierno cuando se compromete a algo cumple, sino que
también la reinstalación de los Consejos de Salario ha sido
factor fundamental para llegar a estos logros. Dentro de
los objetivos primarios de la reinstalación de los Consejos
de Salarios, se encontraban el fortalecimiento y la
promoción de la negociación colectiva como derecho humano
fundamental. En lo que va del presente año, se crearon más
de 650 sindicatos y se alcanzaron más de 700 convenios
colectivos. Los resultados arrojan acuerdos que nunca
descendieron del 92% en estos Consejos de Salarios entre
empresarios y trabajadores. Entre unanimidad y votación por
mayoría. De las unanimidades, constituyeron en promedio,
más del 82% de los acuerdos y que solamente en un promedio
del 7% de los casos, el Estado tuvo que intervenir
fuertemente en la negociación y laudar, atención, para
ambas partes. Porque por ahí se dice "inclinaron la balanza
para el lado de los trabajadores". No, la equilibramos.
Antes estaba desbalanceada para el otro lado. Ahora se
equilibró. Intentamos actuar con seriedad y con justicia.
En aproximadamente 20 convenios de esos que votaron, donde
no se alcanzó la unanimidad, votamos en el 50% con los
trabajadores y en el otro 50%, con los empleados. No fuimos
injustos, buscamos trabajar con justicia. Nos podemos
equivocar, todos nos equivocamos, pero a veces dicen cosas
que no son ciertas, por eso estamos acá con ustedes, para
aclarar estas cosas. Tenemos la obligación de hacerlo, pero
además tenemos el derecho de hacerlo. Un efecto muy
importante ha sido la recomposición de las categorías
laborales, así como la reglamentación de la licencia
sindical y todo ello nos conduce a afirmar que en la
actualidad, hoy, los trabajadores privados y públicos
alcanzados por convenios llegan al 100%, el 100% de
nuestros trabajadores tienen convenios colectivos. En este
período de Gobierno –voy a hablar de ocupación- se crearon
más de 200 mil puestos de trabajo, era lo que nos pedía la
gente y ahí está, 200 mil puestos de trabajo. El volumen de
personas ocupadas se encuentra en cifras récord, casi un
millón y medio de trabajadores. En la campaña electoral de
2004 la gente lo que más nos pedía era trabajo, he aquí
entonces la respuesta que dimos. Los uruguayos quieren
trabajar, no son holgazanes, quieren trabajar. Pero además
se aprobaron en este período de Gobierno y hoy contamos con
ellas, las siguientes leyes laborales y de seguridad
social. Estas leyes pautan también las características del
Gobierno. Voy a dar sólo los títulos para no extenderme
mucho: Ley de Promoción y Protección de la actividad
sindical, defensa de los fueros sindicales, el derecho a la
sindicalización de los trabajadores.
Segundo, Leyes de Tercerización o
externalización de las empresas, con responsabilidad
subsidiaria o solidaria, ya las empresas grandes no se
pueden lavar las manos diciendo que tercerizamos y que se
arreglen con esto que tercerizamos. No, ellos también
tienen responsabilidad por tercerizar.
Tercrero, Ley de Prescripción de
Créditos Laborales, que estaba estipulada en dos años
aumentaron a cinco años.
Cuarto, nueva Ley –esto no lo teníamos-,
Ley de Convenio Colectivo. No lo teníamos.
Quinto, Ley de Limitación de la Jornada
de Trabajadores Rurales, que no lo tenían, se les paga
horas extra, descansos intermedios, ocho horas de trabajo,
sí señor.
Seis, Ley sobre licencias especiales por
estudio, por nacimientos, por defunciones.
Siete, Ley de Negociación Colectiva en
el sector público, por primera vez. No lo tenía el sector
público, hoy tiene esa Ley.
Ocho, Ley de Cesantía y Retiro de los
Trabajadores de la Industria y de la Construcción.
Nueve, Ley de Acoso Sexual, Protección
de Derechos Humanos Fundamentales. Tampoco esto estaba.
Diez, nueva Ley de Seguro de Desempleo.
Once, artículos de la Ley de Concubinato
que todos ustedes conocen.
Doce, Ley que crea el Estatuto del
Artista y Oficios Conexos.
Trece, Ley de Flexibilización de acceso
a los beneficios jubilatorios. Para causal jubilatoria se
necesitaban 35 años de trabajo, ahora, con 30 años de
trabajo, la gente se puede jubilar.
Catorce, Ley de Reforma de la Caja
Bancaria que estaba fundida, se recuperó.
Quince, Ley de Reforma de la Caja
Policial, también para recuperarla.
Dieciséis, creación del Instituto
Nacional de Empleo y Formación Profesional
Y diecisiete, Ley sobre Igualdad de
Derechos y Oportunidades entre Hombres y Mujeres.
Agreguemos a todo ello la puesta en
marcha del Diálogo Social,
empresarios-trabajadores-Gobierno, que encuentra en las
distintas instancias planteadas un formidable campo para
expresarse y obtener resultados, permitiendo el desarrollo,
el crecimiento de los actores sociales, constituyendo una
nueva y revitalizada expresión de una democracia fuerte y
con crecimiento, la cual prioriza los derechos humanos
fundamentales.
Y en cuanto a los trabajadores pasivos,
a los jubilados, a los pensionistas. ¿Cuáles han sido los
logros que han obtenido? Los mejores momentos, los de mayor
poder adquisitivo de las pasividades en general, fue en
julio de 1999 y ahora en enero de 2009, que van a tener una
recuperación bien importante, las jubilaciones y pensiones,
del orden de un 15% aproximadamente.
Actualmente se llega a los niveles de
1999, después que se habían caído las jubilaciones y
pensiones, a través de la Reforma Constitucional aprobada
en 1989 y porque, además, del aumento por el Índice Medio
de Salarios, establecidos en la antedicha reforma, este
Gobierno decidió aplicar aumentos mayores. Es decir, puntos
adicionales a ese aumento que le corresponde por la
Constitución, del Índice Medio de Salarios, para la
recuperación de las jubilaciones y pensiones. Y el Índice
Medio de Salarios, en lo que va del año, ha crecido un
10,55%. Y en lo que va del último año, un 16,89%. Así que
las jubilaciones se van a ajustar con un muy buen
porcentaje en enero del año 2009.
En este Gobierno, hasta enero de 2009,
400 mil personas recuperaron un 19% real, quise decir el
ajuste de 2010 -gracias por la anotación-. A enero de 2010,
el ajuste va a ser en enero de 2010.
En este Gobierno, hasta enero de 2009,
400.000 personas recuperaron 19% real en sus pasividades y
otras 150.000 personas de menores recursos recuperaron 30%
real de sus pasividades y como dije, ya está previsto a
enero de 2010 una nueva recuperación general que aumentará
estos valores reales en, aproximadamente, 15%. En los
gobiernos anteriores, quienes nos critican, una
recuperación similar a la que se recuperó en este Gobierno
en estos cuatro años, requirió doce años, entre abril de
1987 y julio de 1999. Doce años. Acá la recuperamos igual,
en cuatro años.
Y voy a dar algunos ejemplos de leyes y
algunas normas reparatorias de pasividades.
A- 150 mil personas beneficiadas con
ajustes diferenciales. Más de 90 mil son mujeres.
B- Aumento gradual mayor y aumento de
pasividades mínimas.
C- Canasta de fin de año de 300 pesos,
el año pasado. Anuncio que este año les vamos a dar otra
canasta de fin de año a las jubilaciones de cierto valor.
D- Préstamo no reintegrable de 500
pesos.
E-105.000 personas beneficiadas al
dejársele de descontar el 1% en pasividades de Industria y
Comercio.
F- 50.000 personas por la nueva prima
por edad gradual, se aumenta de 70.000 a 100.000
beneficiarios.
G- 9000 personas beneficiadas en aumento
de topes jubilatorios de acto nueve.
H- 3.000 personas beneficiadas con
reliquidación de pasividades de trabajadores de Salto
Grande, de Palmar, cesado de frigoríficos, de Coca-Cola de
Paysandú, se los contempló después de muchos años a estos
trabajadores, a estos jubilados. I- 3.000 personas
beneficiadas, a través de la Ley de Asistencia a la Vejez
para mayores de 65 años en indigencia.
J- 3.000 personas beneficiadas por la
Ley de Reparación a Perseguidos, Presos y Exiliados por la
Dictadura.
K- Miles de personas beneficiadas por
las nuevas medidas de liquidación de pasividades aplicando
los mejores 20 años o los últimos.
Claro que hay jubilados que se quejan,
que son los que más ganan, porque con el Impuesto a la
Renta de las Personas Físicas tuvieron que pagar lo que no
pagaban antes, que pagaban los que ganaban menos. No, no es
así.
Estos son algunos de los derechos
recuperados por los pasivos en este período de Gobierno y
por esto y otros elementos más que sería muy extenso de
detallar, Uruguay tiene en 2008, según diversos estudios,
el primer lugar en Protección en Seguridad Social en
América Latina, lo tiene Uruguay. Uruguayas y uruguayos no
hay que buscar muy lejos de nuestro país sino en nosotros
mismos los mayores y mejores logros en esta materia, lo
decía Artigas, "nada podemos esperar que no sea de nosotros
mismos". Históricamente el BPS recibió dinero e inversiones
del Estado por montos muy elevados, así como asistencia
financiera para poder funcionar y hoy podemos decir con
tranquilidad y por qué no con alegría, que en el año 2008,
es el primero en el que se ha generado un superávit como
resultado, considerando el conjunto de todas las partidas
que el Estado vuelca al BPS, una mejor administración del
Banco de Previsión Social.
Uruguayas y uruguayos, otra crítica que
recibe el Gobierno es la de algunos sectores empresariales
que se quejan, porque según ellos, inclinamos la balanza
hacia el platillo de los trabajadores. En realidad lo que
hemos hecho fue equilibrar esa balanza, que en algunos
casos, no en todos por cierto, estaba inclinada fuertemente
hacia el sector empleador, podríamos hablar de lo que
pasaba en el sector forestal, en el rural, en el servicio
doméstico y en otros. Pero ustedes lo conocen mejor que
nosotros, lo que pasaba en esos sectores. Pero los datos
que hemos dado son categóricos en cuanto a los equilibrios
que el Gobierno ha tenido y ha tratado de buscar. Al
respecto podríamos dar abundantes ejemplos, no me voy a
extender. Ya hace rato los tienen. Pero quisiera referirme
exclusivamente a uno de estos fenómenos, vinculados al
sector de la producción y empresarios, de singular
importancia porque encontramos la solución a un problema
que se arrastraba históricamente y que afectaba a los
productores rurales, estoy hablando del endeudamiento
agropecuario. El mismo se logró abatir de 2005 a la fecha.
Productores menores, que no podían pagar sus deudas,
menores de 5 mil dólares, con un convenio entre el Banco de
la República Oriental del Uruguay y el Ministerio de
Ganadería, Agricultura y Pesca, se les canceló la deuda y
se los apoya para que sigan trabajando en el campo, para
que no se vayan.
A los otros, a los que tenían deudas de
hasta 10 mil, 15 mil dólares y que podían pagar, se les
perdonó el 50% de la deuda y el 100% de los intereses. Y
hoy están pagando y cumpliendo con su obligación.
Actualmente, sólo quedan debiéndole al
Estado, algunos grandes deudores contumaces, de más de 250
mil dólares. Que eso sí, a esos sí, se están ejecutando las
garantías y los servicios, una vez que las Justicia
establece que podemos actuar.
En los ámbitos de participación de los
productores, de las Mesas de Desarrollo Rural, así como en
sus instancias gremiales, el tema del endeudamiento
agropecuario ya no figura en la gente. Y se venía
arrastrando de décadas y décadas. Una prueba del momento
que vive el sector, es que sólo el 1,4% del crédito
agropecuario del BROU está moroso. En el 2005, había una
morosidad en el BROU del 31%. Hoy es apenas el 1,4%.
¿Vieron como se puede, uruguayas y uruguayos?
El sector granjero canceló su
endeudamiento en el 78% de los casos, y en un 15% de los
casos se refinanció. Los productores forestales se canceló
el endeudamiento heredado de gobiernos anteriores por el no
pago de subsidios. Se destinó a cubrir esta obligación por
30 millones de dólares, priorizándose el pago delos
productores más chicos y se eliminó el subsidio a la
forestación. como asistencia del Estado por la sequía, se
llegó a 22.117 productores familiares, invirtiendo en esto
casi 56 millones de dólares, abarcando el 68% de este tipo
de productores, los más pequeños. El Estado les tendió la
mano, como lo hizo siempre, este es un Gobierno de brazos
tendidos, de manos amplias. Porque a los uruguayos les
gusta trabajar, quieren trabajar.
La quesería artesanal y la formalización
de los cuberos, aumentaron en los últimso tres años de
3.300 a 3.400, gracias a medidas tomadas para ayudarlos
económicamente.
Con la aprobación de la Ley de Reforma
Tributaria, el gasoil, se acuerdan cuánto se habló de
gasoil barato para la producción, para el campo? Antes,
cuánto se hablaba, ¿no? Bien, con la aprobación de la Ley
de Reforma Tributaria, el gasoil usado en las actividades
agropecuarias no tiene impuestos. Le sacamos los impuestos.
Se eliminó el IMESI del gasoil y los productores que opten
tributar por IRAE, descuentan íntegramente el IVA del
gasoil. Los que opten por IMEBA tienen una rebaja en su
tasa para compensar el valor del IVA contenido en el gasoil
consumido. Cumplimos con nuestra promesa que íbamos a bajar
el gasoil para la producción. La cumplimos. Nos podríamos
extender por horas, desarrollando los conceptos vertidos y
exponiendo muchos otros, una enorme cantidad de acciones
llevadas adelante por este Gobierno, pero, es tiempo de
terminar esta intervención. En pocos días, desde Zapicán,
responderemos a las críticas, muchas de ellas sin
fundamentos, pueriles y a veces que trasuntan ignorancia,
desconocimiento y porqué no decirlo, mala intención en
quienes la plantean. Hablaremos sobre la Seguridad global.
Pero de esto vamos a hablar en Zapicán. Que incluye también
a la Seguridad Pública. Y de eso también vamos a hablar,
vamos a hablar de todo eso. Pero hablaremos de Seguridad en
salud, en la vivienda, en la educación, en el medio
ambiente, en la inserción internacional. De todas estas
cosas vamos a hablar y esperemos que ustedes una vez más
decidan acompañarnos.
Uruguayas y uruguayos, en materia de
políticas económicas y productivas, antes los uruguayos
sólo remábamos, a menudo contra la corriente o a veces a
favor de corrientes desfavorables al país. Ahora, en
materia de políticas económicas y productivas, como en todo
lo referido al quehacer nacional, los uruguayos estamos
decidiendo hacia dónde ir, menudo cambio. Los cambios son
parte de la aventura humana, pero hay que tratar que los
cambios ayuden a que la gente viva mejor. Hay quienes temen
a los cambios, creen que es más fácil administrar la
inercia que gobernar los cambios. Se equivocaron, evitar
los cambios es tan ridículo como pretender enjaular al
viento. Estamos en el mes de setiembre, es el mes por
antonomasia que recordamos algunas cosas de la épica gesta
artiguista. Artigas firmó el 10 de setiembre de 1815 el
reglamento provisorio para el fomento de la campaña y al
hacer la entrega de tierras a aquellos que la trabajan,
aclara con prevención que "los más infelices sean los más
privilegiados". El 23 de setiembre de 1850, a los 86 años,
en el destierro, muere Artigas, el hombre, no la idea, no
la doctrina, no el prócer máximo de nuestra Patria. Y yo
quiero terminar esta intervención con un homenaje sentido,
el homenaje de las nuevas generaciones a nuestro Prócer, a
don José Artigas.
Hasta siempre y gracias. Hasta siempre. |