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3 de noviembre, 2009

Con identidad propia

Localidades de Uruguay muestran su rostro y su voz a través "Cosas de pueblo"
Rompiendo el mito de Uruguay homogéneo y suavemente ondulado, "Cosas de Pueblo" de OPP y UE produjo desde 2008, un alto impacto en comunidades ubicadas sobre los ejes de las rutas 7 y 8. El proyecto está dirigido a localidades de menos de 1.000 habitantes del interior del país. Han participado 16.000 personas, que hicieron sentir su voz e imagen, con saberes, proyectos y expectativas que revalorizaron la identidad local.

El proyecto de la Unión Europea y la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (UE - OPP), permitió que desde la sierra al río se produjeran diálogos entre habitantes de diversas zonas del territorio nacional.

En ese marco, "La llave del pueblo" es la construcción de un monumento comunitario, el rescate de símbolos y la apertura de un sentido de pertenencia que habilita a la construcción de ciudadanía.

El Encuentro de Pueblos realizado en octubre pasado en Villa Soriano revalorizó la organización, coordinación y rescate de tradiciones, con proyección de futuro.

UE - OPP

"Uruguay Integra" es un programa de cooperación internacional entre la Unión Europea (UE) y la Presidencia de la República a través de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP). El mismo tiene por objetivo fortalecer la descentralización y contribuir a la cohesión social y territorial en nuestro país. El monto total del Programa es de aproximadamente € 21.000.000, de los cuales el 40% y el 60% lo aportan respectivamente el Estado y la UE.

La estrategia de gestión establece la transferencia a los gobiernos departamentales de € 15.500.000 a través de un Fondo Concursable, con el objetivo de financiar acciones de desarrollo local.

A través del Fondo Concursable de "Uruguay Integra" se financiaron hasta el momento 15 proyectos de desarrollo que involucran a 17 Intendencias Municipales.

Entre agosto de 2008 y hasta octubre de 2010, "Cosas de Pueblo" está invirtiendo en diversas acciones € 200.000, los cuales no son reembolsables.

De la sierra al río

En el contexto de "Uruguay Integra", el proyecto "Cosas de pueblo" está dirigido a fortalecer las identidades y culturas locales de pequeñas localidades de nuestro país. Es un instrumento para promover una participación efectiva, que busca rescatar la identidad y la autoestima de la gente que vive en los rincones más distantes del territorio nacional.

El equipo de trabajo interdisciplinario de "Cosas de pueblo" está integrado por un profesor de Educación Física, Juan Pablo Bonetti; el antropólogo, Antonio Di Candia; el comunicador visual, Federico Stol; y la licenciada en Trabajo Social, Andrea Jaurena.

La metodología de trabajo que se ha desarrollado implicó visitar más de 30 localidades del interior del país a partir de agosto de 2008. Luego se trazaron ejes de trabajo sobre rutas 7 y 8, estrategia donde se abordó a localidades de menos de 1.000 habitantes.

Cada una de las actividades jamás es impuesta, sostiene Andrea Jaurena, sino que es consensuada con la comunidad. Esa acción se logra llegando a la comunidad con el aval de los gobiernos departamentales, tras lo cual se realiza un relevamiento de la zona.

Construcción de diálogo

Como forma de entablar diálogos y generar confianza con los actores locales, se concurre a la Junta Local o a la escuela. Se busca al historiador del pueblo o a las personas que tienen objetos representativos de la localidad. Se trata de conocer cuales son los oficios que históricamente se siguen ejerciendo. Se visitan las oficinas de MEVIR o del Ministerio de Ganadería y Agricultura a través del proyecto "Uruguay Rural".

"La llave del pueblo"

En una primera instancia, se realiza una actividad de lanzamiento que legitima la presencia del proyecto en la comunidad. A partir de allí se presentan a los talleristas y las propuestas de trabajo como los juegos para niños denominados "Monumento comunitario". Ese proceso comienza a la semana de la presentación que continúa, luego de un mes de trabajo, con un taller de video denominado "Voz de Pueblo".

Son metodologías de participación que logran la pertenencia y la identificación con objetos tangibles, en este caso, el monumento comunitario. El mismo se construye en un espacio público que es definido por los habitantes del pueblo.

Jaurena indica que "la llave del pueblo" es la construcción del monumento comunitario, evento que lleva un mes de trabajo entre alumnos de la escuela o el liceo, los vecinos y los talleristas.

Monumento Comunitario

En ese sentido, en Valentines, pueblo de 300 habitantes que está ubicado en ejes de ruta 7, sobre los departamentos de Florida y Treinta y Tres, la comunicación para la reunión se hizo por radio y mediante cartelerías. También la escuela, hablando con los vecinos. El lugar fijado para la reunión es un sitio neutral, previo relevamiento entre los habitantes, el cual no debe ofrecer resistencias.

La reunión se realizó en la Junta Local y previa vista del mapa se decidió el lugar donde construir el parque o monumento. Se eligió la entrada del pueblo porque era el sitio de mejor visibilidad.

Una vez acordada esta acción se solicitó permiso a la Intendencia. En Isla Patrulla, el monumento comunitario se construyó en predios de MEVIR y en Zapicán en predios de OSE.

Hasta el momento se construyeron siete monumentos comunitarios. En construcción y para inaugurar en diciembre se encuentran Villa del Carmen, en Durazno y Sarandí Grande, en Florida.

Se construyeron monumentos comunitarios en Villa Soriano, Plácido Rosas, en Cerro Largo, Isla Patrulla y Valentines, en Treinta y Tres; y Zapicán, Lavalleja.

En 2009 se construyó en Minas de Corrales, Rivera; y Villa Ansina, en Tacuarembó.

Símbolos locales

Se propone construir en forma colectiva un monumento comunitario que fomente el sentimiento de pertenencia a la localidad y a través del cual las personas que allí habitan se sientan reflejadas. En Valentines, es un tren; en Isla Patrulla, una Torre vigía; en Plácido Rosas en un barco y un dragón. Este año en Minas de Corrales, se resolvió la construcción de una retroexcavadora por el tema de la búsqueda de oro. En Ansina se realizó un puente que simboliza la unión de dos culturas, con un barco que simula ser una hamaca, lo cual representa las misiones jesuíticas.

Maqueta y construcción

Se construye una maqueta, con los símbolos emblemáticos del pueblo, por parte de los alumnos de UTU, el liceo o de los niños de 5º y 6º años escolares, que se somete a la asamblea del pueblo para conocer que cosas le falta al juego.

En esta etapa participan los adultos aportando objetos significativos para incorporarlos al juego y los artesanos trabajan en madera. También se incorporan los niños con el diseño y la pintura de un mural que ilustra sobre la historia del lugar. En la pintura del juego también participan los niños de la zona.

Inauguración y fiesta

El pueblo organiza una fiesta para inaugurar el juego. Por lo general participan autoridades departamentales y nacionales. El monumento comunitario es utilizado, en algunas localidades, como escenario para obras de teatro, bailes o espectáculos folclóricos. La fiesta la organiza la propia localidad y los pobladores deciden que quieren festejar.

Jaurena sostiene que no se corta una cinta el día de la inauguración, sino que se desata una gran moña por parte de los que participaron en el proceso.

Voz de pueblo

En ese marco, el pueblo tiene la posibilidad de contar sus historias y leyendas a través de la realización de talleres de fotografía o de video. Las actividades son gratuitas y los inscriptos pueden tener desde 12 hasta 70 años. Se produce un corto de 10 minutos que se visualiza en el espacio público donde está ubicado el monumento comunitario, con la concurrencia de los vecinos del pueblo.

En Zapicán el video fue visualizado dos veces y cada uno comentaba sobre su presencia o la de sus animales, sintiéndose parte de esa imagen que pudieron construir juntos y buscando las riquezas que tiene la propia localidad.

La nueva tecnología revaloriza la propia historia del pueblo y la persona de sus habitantes.

Las ansias de…

En Isla Patrulla o en Plácido Rosas, después de romper la barrera del impacto de que nunca habían llegado integrantes de Presidencia de la República, los habitantes de los pueblos demuestran las ansias de participar.

Se rompe la barrera de la distancia y todos quieren mostrar sus historias, leyendas, danzas o música. El proyecto canaliza las ansias de participar, con una metodología de participación ciudadana, asegura Jaurena. Son pasos a los que luego seguirán la elección del alcalde local, la presentación de proyectos comunitarios y la confianza de poder comunicarse a nivel local y departamental.

Orgullo local

En ese sentido, se buscan elementos que los pobladores identifican como propios de la comunidad, los cuales prueban el sentido de pertenencia. En Zapicán, con Fondos de Identidad Local se adquirió una cámara para que los pobladores puedan seguir registrando los eventos más importantes del pueblo. En Plácido Rosas con esos mismos fondos armaron una murga con los instrumentos necesarios, lo cual permitió que los participantes pudieran concurrir a otros pueblos a mostrar su arte. Esos hechos son eslabones que rompen con el hecho de que "acá no pasa nada".

En el marco del Fondo de Identidad Local, se logró que 800 niños de 25 escuelas de localidades de menos de 3.000 habitantes, concurrieran a las colonias de vacaciones de Educación Primaria de Malvín, Raigón y Piriápolis.

Encuentros de pueblos

Los pobladores han tenido la posibilidad de encontrarse entre sí. En ese marco, dialogaron el hijo del buscador de oro de Minas de Corrales, con sus saberes y la cocinera de la escuela de Valentines o de Zapicán. La reunión se efectuó los días 12, 13 y 14 de junio en La Charqueada, Treinta y Tres. Concurrieron 70 adolescentes de Florida, Cerro Largo, Lavalleja y Rocha. Con eso se rompió el mito del Uruguay homogéneo y suavemente ondulado, tanto históricamente como geográficamente, señaló Jaurena.

Los días 3 y 4 de octubre se realizó el primer encuentro nacional de "Cosas de Pueblo" en Villa Soriano, la localidad más antigua de Uruguay. Se encontraron 12 delegaciones. Las mismas efectuaron trabajos previos que rescataron la identidad hacia el pasado y con proyección de cara al futuro.

En la primera noche se realizó un fogón donde sus representantes recitaron y cantaron mostrando la historia de su población de origen. Al día siguiente, para el baile de máscaras cada localidad debía llevar su disfraz. El último día, se efectuó un desfile con la participación de las delegaciones prontas para actuar. Además, se intentó rescatar la identidad con una mirada hacia el futuro, con danzas típicas y bailes actuales, gama cultural que identificó la identidad de los participantes.

   
 
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  Andrea Jaurena