Colombia: Diferencias ideológicas no opacan la historia
común que une al continente latinoamericano
El Vicepresidente de Colombia,
Francisco Santos Calderon, indicó que cree en la
integración comercial. Dijo que los grandes problemas de su
país son el terrorismo y el narcotráfico. Indicó que los
incidentes con otros países se pueden superar sobre la base
del respeto mutuo y la apertura de visiones distintas.
Aseguró que los acuerdos con Estados Unidos no implican
acciones armadas contra otras naciones del continente.
Palabras del Vicepresidente de Colombia,
Francisco Santos Calderón, en ocasión del XXXVIII Cumbre de Presidentes
del MERCOSUR, celebrada el 8 de diciembre de 2009.
VICEPRESIDENTE FRANCISCO SANTOS CALDERÓN:
Sr. Presidente Tabaré Vázquez, muchas gracias por su
hospitalidad, excelentísimos señores jefes de Estado,
vicepresidentes aquí presentes, excelentísima señora
Presidenta Cristina Fernández, Señor Presidente Luis
Ignacio Lula, Señor Presidente Fernando Lugo, señor
Presidente Chávez, excelentísimo Presidente electo de la
República deL Uruguay, "Pepe" Mujica, señores jefes de
delegación, cancilleres.
Yo quisiera empezar recordándole al
Presidente Chávez, una visita que Usted hizo al periódico
El Tiempo, yo era Jefe de Redacción entonces, en el año
1984, 94 lo llevó el hoy Candidato Presidencial en Colombia
Gustavo Petro, al periódico de la oligarquia de la derecha,
las dos páginas que salió un reportaje suyo ese domingo,
recién salido Usted de la cárcel de Venezuela, en la que se
le recibió en Colombia con toda la libertad y el pluralismo
que ha caracterizado siempre a Colombia, a ese país de
historia democrática, a ese país que escucha nuevas ideas,
que las asimila y que sobre todo tiene un debate político
profundo.
La recepción que Usted tuvo en Colombia
en ese entonces, yo creo que no fue una recepción hostil.
Fue, al contrario, una recepción de curiosidad, obviamente
por conocer su pensamiento y que fue ampliamente divulgada.
Quiero referirme a dos de los temas que Usted plantea y que
ya han sido planteados acá. Uno muy importante, que es el
del asilo, que es una Institución histórica desde que
Colombia recibió a Victor Raul Haya de Latorre, durante
largo tiempo asilado en la Embajada Colombia en el Perú, o
Alan García durante muchos años.
Hoy en día al cura Camilo quien ha sido
asilado en Brasil o a la esposa de David Murcia, uno de
esos genios de pirámides que esquilmó a muchos colombianos
y que cuya esposa está asilada aquí en Uruguay.
El asilo es una institución respetable
del continente, nos guste o no nos guste tiene una
tradición, tiene una historia, tiene una necesidad, tiene
una razón de ser que, independientemente que en un momento
dado estemos en contra o a favor, tiene pues una existencia
que debemos preservar.
Quiero igualmente referirme al tema de
Honduras, aclarando que Colombia desde un principio apoyó
el esfuerzo del Presidente Oscar Arias por solucionar este
impasse, este problema y recordar la diferencia entre el
Golpe de Honduras y los Golpes de los 70 y de los 80 con
cientos, miles, decenas de miles de muertos en los países.
Creo que ahí hay una diferencia
importante que no podemos dejar, a pesar de que sigue
siendo un golpe. Y decirles que obviamente el continente no
puede olvidar lo sucedido, como no puede olvidar tampoco
que el Presidente Zelaya empezó con su referéndum, que fue
negado por la Corte Suprema y por el Congreso, y que no
podemos aislar un pueblo, condenar a un pueblo a la soledad
eterna por un problema institucional existente en
determinado momento.
Presidente Chávez y amigos presidentes,
Colombia es un país que cree en la integración, cuando
vemos lo que ha sucedido en los últimos años, el proceso de
integración con México, con el triángulo del norte de
Centro América, la asociación con Mercosur y el proceso de
desgravación, los tratados con Chile, la creación de UNASUR,
todo esta integración comercial en la que Colombia tiene
déficit comerciales con Argentina, con Brasil, con
Paraguay, con Uruguay, con Bolivia. Una balanza equilibrada
con Chile, una balanza positiva con Venezuela, con Ecuador,
con Perú. Un país que está abierto a la integración, a la
razón por la cual estamos aquí y que queremos y pretendemos
profundizar, pero a esa integración, en la que creemos,
sobre todo con el pueblo hermano de Venezuela, con quien
estamos de acuerdo.
Y que es bueno escuchar sus palabras de
que jamás tendremos un conflicto, que sería lo peor que nos
podía pasar, lo peor que nos podía pasar en el Continente y
lo peor que nos podía pasar a nuestros dos pueblos.
Hoy hay una agresión económica y un
bloqueo comercial que ha generado ya 170 mil desempleados
en la frontera en Colombia. No son miembros de la
oligarquía son trabajadores simples, son trabajadores
sencillos; son gente humilde que está perdiendo su empleo
por ese embargo económico al que estamos sometidos;
decisión que a todas luces es ilegal, pues es una acción
unilateral prohibida por la Organización Mundial del
Comercio. Y esperamos pronto poder superar ése impasse
económico que está afectando de manera muy importante no
sólo la economía colombiana, sino muchas pequeñas y
medianas empresas que vendían sus productos a Venezuela,
que generaban empleo y que ahora no pueden hacerlo por
estas restricciones.
No quiero, pues, entrar a discutir aquí
el tema de las bases. Hemos publicitado el acuerdo, hicimos
la Carta que tiene obligaciones internacionales por parte
del Canciller a todos los gobiernos. Colombia no compra
armas bélicas para conflictos externos; Colombia jamás
pensaríamos en tener un conflicto con ningún país de la
región. Nuestro problema está adentro, nuestro problema es
el terrorismo, es el narcotráfico, y seguiremos dando ésa
batalla para poder liberar al continente de ésas dos
plagas, de ésos dos cánceres que tanto daño nos hacen.
De ninguna manera, en ningún sentido, en
ningún modo, Colombia va a buscar ningún conflicto. Por eso
en ésta crisis, Presidente, hemos sido respetuosos,
queremos seguirlo siendo, porque nuestro respeto y nuestro
cariño hacia el pueblo de Venezuela, hacia sus gobernantes,
hacia su institucionalidad, nos obliga a actuar de ésa
manera. Nos obliga a actuar como bomberos en la mitad de un
incendio y no como pirómanos poniéndole gasolina al fuego.
Creo que las responsabilidades que
tenemos frente a nuestros pueblos en estos momentos tan
difíciles nos obligan a tener ésa cabeza fría, que nos
permitan superar esos impasses tal y como lo hemos podido
ir superando con Ecuador.
El fin de semana pasado el
Vicepresidente Lenin Morenos estuvo en Colombia. ¡Qué frase
tan bella la que pronunció sobre lo que nuestros pueblos
son! ¡El pueblo del Ecuador, el pueblo de Colombia, el
pueblo de Venezuela, misma bandera, misma religión, misma
diversidad étnica, misma historia! Y eso es lo que nos
tiene que mover para avanzar. Ésos son los vasos
comunicantes, es el cordón umbilical que une a ésos tres
países que no se puede romper. Y que a pesar de las
diferencias ideológicas que podamos tener, de nuestras
visiones de países distintos frente al desarrollo, esa
herencia común es algo que nos une; es algo que no podrá
ser roto por nadie y es algo que tenemos que preservar a
toda costa.
Y por eso creemos que este incidente lo
podemos superar, estas diferencias las podemos superar.
Pero tiene que ser sobre la base del respeto mutuo, sobre
la base de la apertura de visiones distintas y sobre la
base de la absoluta seguridad, Presidente Chávez y amigos
Presidentes y miembros de delegaciones, que el acuerdo de
los Estados Unidos con Colombia no va ni jamás será
utilizado para realizar ningún tipo de acción contra ningún
país del continente. Muchas Gracias. |