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4 de febrero, 2010

En San Javier, Río Negro

Instalan Comisión Asesora Específica del Parque Nacional Esteros de Farrapos
La Comisión velará por el cumplimiento del Plan de Manejo que se encuentra en etapa de elaboración. La titular de la DINAMA, Alicia Torres y el Intendente de Río Negro, Ruben di Giovanni entre otros representantes de ministerios y organizaciones de la sociedad civil, participaron del evento. Se prevé una fuerte participación de las comunidades de San Javier y Nuevo Berlín en la gestión de esta importante área protegida.

En el marco del Día Mundial de los Humedales quedó instalada en la localidad de San Javier (Río Negro) la Comisión Asesora Específica del Parque Nacional Esteros de Farrapos e Islas del Río Uruguay. Participaron, entre otros,  representantes de organizaciones de la sociedad civil locales, de los Ministerios de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y Defensa Nacional, el Intendente Municipal de Río Negro, Ruben Di Giovanni y la titular de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA), Alicia Torres.

La reunión tuvo lugar en el Galpón de Piedra, una construcción de mil metros cuadrados que sirvió como granero comunitario y que fue erigido entre los años 1917 y 1918 por las primeras familias rusas que se afincaron en la zona, en 1913.

La Comisión Asesora tiene, entre otros cometidos, el asesoramiento, promoción, seguimiento y control de las áreas naturales protegidas que son incorporadas al Sistema Nacional de Áreas Naturales Protegidas (SNAP). Además, el cuerpo procura velar por el cumplimiento de los objetivos y el plan de manejo y facilitar la participación de las comunidades locales en la gestión del Área.

El Parque Nacional Esteros de Farrapos e Islas del Río Uruguay tiene una superficie de 5.758 hectáreas y se ubica en el departamento de Río Negro, en el curso inferior del Río Uruguay. Las localidades que por su situación geográfica mantienen un vínculo más estrecho son Nuevo Berlín y San Javier, que se encuentran a la altura de los kilómetros 22 y 65, respectivamente, de la Ruta 24.

En noviembre de 2008 el Poder Ejecutivo decretó la incorporación de Esteros de Farrapos e Islas del Río Uruguay al Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP), bajo la categoría de Parque Nacional.

El documento estableció que la parte terrestre más representativa del Área, la constituyen bañados existentes sobre la costa del Río Uruguay que es necesario proteger. Ello obedece “al valor intrínseco natural del humedal y otros aspectos destacados, como la diversidad y representatividad de los ecosistemas existentes, su grado de naturalidad y baja antropización”.

Conviven allí varios ecosistemas como la pradera, el bosque ribereño, los algarrobales y el matorral ribereño, que dan cabida a una importante diversidad de especies de aves, algunas de ellas amenazadas como el dragón y tres especies de capuchinos.

Las islas constituyen, además, espacios para la reproducción y sitio de invernada de especies migratorias neárticas y neotropicales. En función de estas particularidades, en 2004 el Área fue reconocida como sitio “Ramsar”, en el marco del Convenio para la Protección de los Humedales de Importancia Internacional como hábitats de especies ornitológicas, al igual que los Humedales del Este (Rocha).

Según material de divulgación del SNAP, el Parque Nacional Esteros de Farrapos e Islas del Río Uruguay constituye un sistema de humedales fluviales, islas e islotes que se inundan en forma permanente y/o temporaria como consecuencia de las crecidas de ese curso. En sus márgenes se encuentran   lomas que alcanzan entre dos y tres metros de altura, sobre las cuales se desarrolla una vegetación arbórea con gran variedad de especies que amortiguan el efecto de las crecidas del río.  

Plan de Manejo del Área

Ricardo Colman es el Jefe de Operaciones del Área. “Nuestra tarea es la conservación y la recuperación de los Esteros de Farrapos. Tenemos la vigilancia, control y desarrollo sustentable del Parque Nacional, porque hay ganadería, apicultura, pesca y cacería”, indicó.

Colman advirtió que la población local desconocía lo que era un Humedal y por qué había que protegerlo, por lo que otra función complementaria fue la de educar a los habitantes para que reconozcan la importancia del Área. En ese sentido, el funcionario observó que muchos pobladores lo consideraban como un espacio ganadero y, al desconocer otras posibles funciones, lo utilizaban como potrero. Asimismo, a  la gran mayoría que aún no conoce Esteros de Farrapos, no les llamaba la atención y lo asociaban a montes, cañadas y bañados. Colman percibió que a partir de la incorporación del área al SNAP los habitantes locales comenzaron a interesarse un poco más en los Humedales.

El Director del Área, Daniel Jaso, afirmó que “estamos abocados a llevar adelante un Plan de Manejo. Este debe prever la inclusión social, de forma que estimule el diálogo e intercambio entre académicos, técnicos y especialistas, que contribuya a la conservación de la Biodiversidad y los actores sociales, que son quienes llevan adelante distintas actividades como la ganadería, pesca, apicultura, caza y tala de monte indígena. Así podremos comenzar a armonizar las actividades e iniciar la conservación con producción sostenible a largo plazo”.

Por su parte, la Directora del SNAP, Alicia Torres, explicó que “el Plan de Manejo del Área va a ser un documento que contendrá las distintas líneas de acción que se van a desarrollar en el lugar. Por ejemplo, todas las actividades relativas a la formación de Recursos Humanos, a Educación Ambiental y Gestión del Área. Es decir, como se va a manejar el ganado y el pastoreo o los sistemas de apicultura. Todas las actividades están ordenadas en ese documento que, de alguna manera, es una guía de acción para quienes deben  tomar decisiones sobre el Área”.

Jaso señaló que el de Esteros de Farrapos es un humedal fluvial, “de los más importantes que tiene el país”, donde se alternan como paisaje, bañados y pantanos con monte indígena a nivel de ribera, y bosque de parque abierto. Allí se desarrollan 130 especies de peces y 220 especies de aves. También existe mucha riqueza, no solo de especies sino también de su diversidad genética.  

Según el funcionario, los objetos focales de conservación que se van a incluir en el Plan de Manejo son tres ecosistemas: el propio Humedal, el bosque de ribera, el bosque de parque abierto y la comunidad de peces. 

Jaso adelantó que el referido documento se encuentra en etapa de elaboración a partir de trabajos realizados por otros técnicos y ONGS, y un diagnóstico básico del Área que tiempo atrás elaboró la Facultad de Ciencias (UDELAR). “Venimos trabajando, retomando esos estudios preliminares, e intentando, con el aporte de académicos y técnicos que están trabajando en distintas especializaciones vinculadas al tema, profundizar y desarrollar en un futuro”, relató.   

Consultado sobre la viabilidad de implementar opciones de turismo sustentable, Jaso dijo que entre las funciones que deben cumplir las áreas protegidas están también las de generar oportunidades para el desarrollo local, desde el punto de vista educativo, económico y humano. El entrevistado opinó que “la valoración de las especies naturales existentes en el área, permiten ir trabajando mucho en fortalecimiento de capacidades a nivel local, de manera de poder formar guías de turismo, de turismo de naturaleza y futuros cursos de guardaparques”.  

Hasta la fecha, además de Esteros de Farrapos, se encuentran integradas al SNAP otras cuatro áreas: Quebrada de los Cuervos (Treinta y Tres), Cabo Polonio (Rocha), Valle del Lunarejo (Rivera) y Chamangá (Flores). En lo que resta de la actual Administración, según Torres, existen posibilidades que sea integrada la Laguna de Rocha en el mismo departamento, y Cerro Verde y Montes del Queguay (Paysandú) “también están muy próximos a ser incorporados”, aseveró.     

   
 
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  Daniel Jaso
 
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