14/04/2000
LA PROBLEMÁTICA TECNOLOGICA EN LAS CADENAS AGROINDUSTRIALES
Un trabajo de consultoría realizado por Enrique Baraibar y Carlos
Mermot en el marco de los trabajos preparatorios para el diseño del programa de
desarrollo científico-tecnológico II, presenta importantes conclusiones para la
identificación de problemáticas tecnológicas de las cadenas agroindustriales. El
trabajo se planteaba identificar, jerarquizar y clasificar la problemática tecnológica
que afecta la competitividad de las cadenas agroindustriales en el país, entre otros
objetivos. Los consultores relevaron información mediante decenas de entrevistas a
empresarios para identificar debilidades y fortalezas en cada caso y determinar
potenciales demandas que podrían ser atendidas con proyectos asociativos (proyectos
formulados y ejecutados por empresas asociadaas con centros de investigación).
La importancia de las agroindustrias en las exportaciones
Los indicadores macroeconómicos habitualmente utilizados tratan a la
industria y a la agropecuaria como dos sectores de actividad claramente delimitados. Los
datos muestran que en los últimos quince años, el sector agropecuario ha mostrado una
dinámica de crecimiento que le ha permitido mantener su peso relativo al PBI nacional
(entre un 11 y un 12%), en tanto la industria ha crecido relativamente menos y su peso
relativo en el PBI nacional cayó del 25 al 20% aproximadamente. Las cadenas
agroindustriales representarían aproximadamente un 30% del PBI nacional.
La significación económica de las cadenas agroindustriales para el
país se refuerza se observa su peso relativo en las exportaciones, que en la década del
noventa supera el 60%.
Los consultores lograron entrevistar a 52 empresas de un total de 80
seleccionadas por su representatividad en la cadena triguera, cítricos, madera, sector
avícola, cárnicos, lácteos, oleaginosos, arroz, cebada, lana y textiles, papel y
cartón, cereales y vinos. El resultado de estas entrevistas, procesado por los
consultores, permite concluir que, en términos generales, la problemática tecnológica
ocupa un lugar en la agenda empresarial, como materia de preocupación y acciones a
encarar. Pese a ello, las mayores dificultades empresariales remiten a la pérdida de
competitividad de sus productos en los principales mercados, por lo cual sus
preocupaciones se centran en la necesidad de innovar para la internacionalización y la
búsqueda de nuevos mercados.
Se reconoce que existen aspectos tecnológicos que pueden contribuir a
recuperar la competitividad perdida, pero los empresarios mencionan con insistencia que
los grandes avances en esta materia se han gestado en la últimas des décadas, en
particular en el aprovechamiento de la tecnología disponible en la producción primaria.
Por lo tanto los progresos en este sentido son cada día más costosos. La adecuación
industrial se ha venido procesando y si bien es posible introducir nuevas y constantes
mejoras, muchas veces no se cuenta con los recursos para invertir en ellas.
Los empresarios consideran que una inversión en gestión comercial
tendría mayor impacto relativo. Algunas cadenas identifican posibilidades de trabajo
asociativo a nivel horizontal, entre pares, como en el caso de la miel, vinos, cítricos,
cebada, granos, lácteos y lanas. A su vez, otras cadenas como textiles, madera, harina y
semillas, identifican oportunidades a través de la implementación de iniciativas a nivel
vertical (entre actores de la producción, industrialización y comercialización).
Los sectores agrícolas y lecheros, con tradición cooperativa
importante, observan con gran interés la posibilidad de contar con un instrumento que financie la puesta en marcha de centros de gestión tecnológica.
